Las consecuencias de la batalla del Árbol Madre

Tras la batalla del Árbol Madre, las consecuencias para Aerandir fueron muchas en muchos ámbitos, pero en la mayoría de casos todas fueron reversibles.

Por un lado, tras la trágica muerte de la líder de la logia, Abbey Frost, algunas zonas del bosque de Sandorai quedaron sepultadas bajo un manto de gélida nieve, nieve cargada de éter que recubre los grandes árboles del bosque de Sandorai como una fina capa de cristal, permitiéndoles florecer de igual manera conforme pasan las estaciones. Estas zonas reciben el nombre de arboledas de cristal y son muy frecuentes en las proximidades del árbol madre.

Por otra parte, el Árbol Madre se vio afectado por la lluvia de meteoritos, afectando a la zona más alta. El clan Neril de Edén tuvo que cambiar sus instalaciones a una zona más baja ya que las emisiones de humo y pequeños rebrotes de aquel incendio hicieron la copa inhabitable. Nada que con trabajo y paciencia pueda arreglar la magia de los elfos que ahora establecen turnos para apagar los rebrotes que aún siguen apareciendo tras meses, y curando aquellas ramas heridas con el darae, o magia de luz. Aún queda mucho trabajo para hacer hasta volver a ver el árbol madre que conocimos antaño.

Algunos de los elfos que habitaban pacíficamente Sandorai tuvieron que exiliarse durante la guerra, esencialmente a tierras humanas, aquellos recibieron el nombre de dunweid, término despectivo utilizado por los humanos de Verisar en su propia lengua élfica para denominar a estos refugiados.

Aquel ataque también tuvo consecuencias en lugares insospechados, en Dundarak, el Consejo retomó el poder de los reinos del Norte tras la muerte del rey Rigobert, dando fin a la usurpación del trono por parte de la familia. Siendo su hermana, la princesa Henrietta, aunque olvidada por su maldición desterrada simbólicamente de los reinos del Norte. Dicen las malas lenguas que ahora se hace llamar Piscis y que recorre Aerandir junto a su mejor amigo Virgo. El rey Rigobert, una figura que trajo guerra y hambre a la capital dracónica, no fue enterrado en su ciudad natal, sus restos fueron cremados y esparcidos por el confín del mundo en la punta más septentrional de los Reinos del Norte.

[A0] Villasauco
[B0] Avanzada de Dundarak
[C0] Campamento de los Leónicos
[A1] Teatro dramático en Villasauco
[B1] Raiz de Atrio
[C1]Oblivion: Vulwulfar alternativo
[A2] Venganza o reconciliación
[B2] Helados, sí. Pero en buena compañía
[C2] El libro negro
[A3] Leñadores en apuros
[B3] Ellarraíz: El poder del aquelarre
[C3] La redención del Gran León
Veo fuego en Anar
La noche en que llegaron
La batalla del Árbol Madre