[Evento] Rine, la dama negra.

Una lluvia refrescante y liviana se extendía por el pueblo. Finas gotas atravesaban el aire para humedecer la tierra, dejando ese exquisito aroma por doquier. Casi se podría confundir con una llovizna, pero no, eso era lluvia. Rine lo sabía a la perfección, pues ella conocía muy bien la lluvia; aún recordaba como, bajo el abrazo de una precipitación similar a la de entonces, se despedía del que antaño había sido su amado.

Oh, los brujos sí que eran crueles. Era irónico que ella recitase esa frase cada tanto, considerando que en su propia sangre corría la sangre de los enemigos de los elfos. Ella los odiaba por haber terminado con la vida de su esposo, un hombre noble, agraciado por la bondad. Las noches eran más solitarias sin él, en una cama gélida que en algún momento regaló a una joven pareja el abraso de una caldera.

Ahora, viuda, se dedicaba a ayudar en un pequeño edificio que pretendía ser un museo.

Cualquier persona que le traiga un regalo especial, será debidamente compensado con la magia de Rine, la dama negra.





Todos los participantes del Evento [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo] podéis canjear los objetos obtenidos aquí.

Para hacerlo, deberéis explicar cómo llegasteis ahí y ofrecer los objetos obtenidos a Rine.

Al final de vuestro post incluir los siguientes datos:

Código:

[b][color=#00ccff]Objeto(s) a canjear:[/color][/b]

[b][color=#0099ff]Hipervínculo al post de Evento en el que se ha participado:[/color][/b]

Proviene del Evento [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo].

Rine se volteó hacia la puerta cuando escuchó que esta se abrió. A juzgar por el sonido, alguien se acercó al mostrador. La afamada 'dama negra' estaba acostumbrada a esta situación, la de tener incertidumbre con respecto a la persona que se situaba frente a ella. La mirada ya no acompañaba a sus ojos, en cambio, estos parecían imitar a su dueña, pues estaban cubiertos con un velo que daba un brillante color gris al iris, producto de una muy precoz catarata.

- Buenos días, bienvenido al museo de Beltrexus. - Dijo con dulce voz a quien sea que tuviese delante. - Buenos días dama, tengo algunos objetos que no puedo llevar conmigo y venía a ofrecéroslos. - Al responder aquella voz, Rine arqueó una ceja. Había algo en su tono que llamó la atención de la dama negra. Entrecerró los ojos.

Buscó algo en un mueble cercano, tanteando entre los objetos que abarrotaban la polvorienta estantería. Hizo una mueca cuando sostuvo la calavera que estaba buscando, la cual apuntó directamente hacia el rostro de Elen. Por lo bajo, recitó palabras en un idioma incomprensible y fue entonces cuando sus ojos se abrieron de par en par durante pocos y largos segundos. - Oh, pobre de ti. - Dijo llevando una de sus manos a su pecho al tiempo que su rostro mostraba una expresión triste. - Tienes una maldición sobre ti. Visita a Tarivius, vive en una cabaña en el bosque de esta Isla. Él sabrá qué hacer. -

Dicho esto, Rine acercó la caja que Elen había colocado sobre el mostrador para entonces recompensarla por su esfuerzo.



Rine te ha recompensado con:

♫ +6 Puntos de Experiencia.
♫ 300 aeros.
♫ +1 Punto de Atributo a elección. Deberás distribuir este nuevo punto en el [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo].
♫ Una figura de madera con forma de pájaro. Efecto: Frotar la figura te brindará suerte, siendo más capaz de tener éxito en lo que te propongas durante los próximos cuatro turnos. Cuenta con dos usos.
♫ Reloj de bolsillo roto. Efecto: Si lo lanzas a un enemigo con la intención de atacarlo, este sentirá entumecidas las extremidades y todos sus movimientos serán lentos. Dura dos turnos, cuenta con tres usos.
♫ Puedes elegir entre: +5 Puntos de Experiencia y Polvo gélido. Efecto: Extingue fuego al contacto. Uso instantáneo, cuenta con tres usos.
♫ Hálito de vida. Un pequeño frasco que parece vacío, pero en realidad contiene un aire revitalizador. Efecto: Si se despliega sobre alguien moribundo, sanará sus heridas y lo devolverá a un estado de máxima salud. Uso instantáneo, cuenta con un uso.

No olvides registrar los objetos en el [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo] y en tu Lista de Tarea.
Deberás avisar a un Master por medio de Mensaje Privado cuando hagas uso de cualquiera de los objetos otorgados.

De la misma manera, has de contactarme para comunicar cuál es tu elección entre los Puntos de Experiencia y el Polvo Gélido.

"Vaya locura… nunca más voy a una fiesta, sobre todo si es patrocinado por un monton de brujos chalados.” mi mente divagaba mientras caminaba por las calles de beltrexus tomado de la mano de Luka. A pesar de todo, no había estado tan mal la fiesta. Cosas buenas habían salido de ella, así como tambien otras que era mejor olvidar. "¿Qué era esta sensación, deja vú? la historia siempre se repetía, aunque no siempre con los mismos resultados.

Aún conservaba aquellos objetos que esa hada demente nos había regalado por destruir a su sanguinario juguete fuera de control. En todo este tiempo no habían servido de la más absoluta y totalmente completa NADA. Pero hacía tiempo que había escuchado sobre el rumor de que una bruja estaba tan loca como para recolectar objetos raros, y recientemente había confirmado aquél rumor; además, estos objetos se llevaban todos los premios en rareza e inutilidad, así que ¿por qué no?.

Al entrar al museo, la misma nos recibió. Primero tomé yo la palabra. - Bienvenidos al museo de Beltrexus. Espero que disfruten su visita.- sus palabras eran cálidas, pero su rostro se condecía con ellas, como si estuviera llena de dolor por dentro. Apenas entré, noté que varios de los objetos en exhibicion eran similares a los que traía, más ninguno era completamente igual. - Ehm... si... quisiera cambiar estos objetos por algo más util.- titubee. Nada me aseguraba de que sería el caso, pero ya estaban en el fondo de la inutilidad, no tenía nada que perder.

Objeto(s) a canjear:
- Un colgante Copo de Nieve.
- Una estrella dorada.
- Una bola de cristal navideña roja.

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La fiesta había sido interesante. Lo peor de todo fue la llegada de Kuzu usurpando mi nombre y obligándome a dar excusas. Desde ese momento había evitado ir a casa de la familia o incluso toparme con conocidos, lo cual era extremadamente difícil en una isla en donde todos se conocen. ¿Qué podría hacer? Intentar dominar el aire hasta el punto en el que me fusionaba con él y desaparecía? Nada de lo que se me ocurría era plausible y estuve en un estado de trance guiada por Kuu hasta que llegamos a las puertas de aquél extraño museo que jamás había visitado. Se decía que era corrido por la elfa Rine y siempre me había llamado la atención, aunque nunca había dispuesto de la compañía adecuada para internarme en el lugar y admirar sus bellezas.

El lugar estaba un par de grados por debajo de la temperatura de la calle y la voz de la mujer que en seguida reconocí como la dueña del lugar lo convertía en un lugar varios grados más frío. Quizás la tristeza en su alma no dejaba que aquél museo con bellas exposiciones no fuera tan concurrido. Sentí algo de pena, pero me aferré a mi compañero siguiendo la corriente de lo que decía. En el futuro encontraría una forma de ayudar a esa mujer. Si la luz había abandonado sus ojos, yo haría que la felicidad retornara el brillo de la esperanza en su cuerpo. Asentí con la cabeza ante los comentarios de Kuzuryu, pero recordé el impedimento de la dama y tomé la palabra Dos juegos de cada uno de esos objetos Rine

Objeto(s) a canjear:
- Un colgante Copo de Nieve.
- Una estrella dorada.
- Una bola de cristal navideña roja.

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Rine les ha recompensado con:

♫ +3 Puntos de experiencia para cada uno
♫ 100 aeros para cada uno
♫ Mantienen el colgante. Su efecto dura tres turnos y como dijo la dama negra deben ponerse bajo la lengua para activarlos. Tienen 1 uso y deberán registrarlo [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo] su efecto efectivamente, consiste en proteger del más gélido frío.

Hacían largos días desde el baile realizado en el castillo por motivos navideños, la Marvsky se mantenía aún con dolor de cabeza, no tenía seguro aún si se debía a la enorme flor que creció sobre su cabellera, o a tanta bebida con alto contenido alcohólico fluyendo constantemente en su cuerpo. La bruja de cabellos blanquecinos había bebido hasta la última gota de la última botella en el último estante de su propiedad, acabando con sus provisiones alcohólicas; Éste hecho hizo que Leinil se viera forzada a salir de su morada con el objetivo de re-abastecer sus estantes.

Pateaba las calles al caminar, sin prisa alguna, evitando agitarse, pues su cabeza parecía palpitar fuertemente con cada bombeo de sangre que emitía su corazón, lo que le quitaba las ganas de andar velozmente como solía hacerlo la mayor parte del tiempo. Su mente revoloteaba de un lado a otro, como una mariposa posándose de flor en flor; Fue una gota que caía del cielo la que la sacó de su ensimismamiento al chocar con su nariz y fragmentarse hasta convertirse en una suave escarcha húmeda que caía hasta el suelo, tras aquella gota seguían muchas más que descendían con gracia humedeciendo todo lo que estuviese a su alcance.

Leinil decidida a no mojarse apuró el paso hasta el edificio más cercano, que resultó ser un museo repleto de objetos variados, algunos graciosos, otros tétricos, pero cada uno tenía características propias que convertían el espacio en un área fascinante, donde podían detallarse cientos de variedades de todo tipo; La bruja paseó por el lugar admirando piezas fantásticas hasta que llegó a donde se encontraban un par de brujas en lo que parecía un intercambio, una de ellas evidentemente era quién se encargaba del edificio, su actitud lo hacia evidente para cualquiera. Echó un vistazo al proceso y logró identificar algunos objetos similares a los que le había dado una payasa en la base de los Bios por disfrazarse de gordo barbudo y repartir juguetes.

La Marvsky tanteó una bolsa de cuero que llevaba atada a un lado de su cintura y encontró que aún seguían ahí los objetos que buscaba. Esperó pacientemente que la bruja se retirara y se acercó a la mujer que vestía de negro. -Buen día dama- le dijo Leinil a la vez que levantaba un sombrero imaginario sobre su propia cabeza como si se tratase de un caballero. -Traigo conmigo algunos objetos que tal vez le interesen... - agregó al mismo tiempo que los sacaba de su saco para dejarlos a la vista de la bruja de negro.


Objeto(s) a canjear:
Una esfera roja de navidad.
Una esfera verde de navidad.
Una bola de nieve .
Dos estrellas doradas
Una figura tallada en madera con forma de carnero.
Una campana.

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Por algún motivo aquellos eran días ocupados para Rine. Muchas gente se acercaba a ella ofreciéndole objetos de lo más interesantes, y aunque era mucho el trabajo de recibía, al menos le distraía de los pensamientos que nunca le daban descanso, los recuerdos de su amado.

Una cliente se alejó para dar paso a la siguiente, una joven alegre y jovial. A Rine se le escapó una sonrisa; seguramente no conociera la pérdida, o a lo mejor sabía sobrellevarla mejor de lo que ella misma hacía. Cualquiera de las dos opciones eran mejores que llorar sin fin sobre algo que no tenía vuelta atrás. Algo que la dama negra conocía demasiado bien.

- Déjame echarle un vistazo. - acercó a si cada uno de los objetos, prestándole atención al más mínimo detalle. Un aura misteriosa envolvía a la bruja vestida de negro, como si aquellos cachivaches significasen algo más para ella; tal vez un recuerdo lejano... - Sí, algunos de estos quedarían muy bien en el museo. Pero este... - le entregó la figura de madera. - Está muy bien echo, pero yo no le encontraría el uso adecuado. Se dice que la suerte reposa sobre esta clase de tallados, pero yo ya no tengo en qué gastarla. Te será más útil a ti. -

Guardó el resto de objetos bajo la mesa y le propuso el intercambio, esperando que complaciera a la joven maga.

♫ Esfera roja --> 3 p. de experiencia.
♫ Esfera verde --> 1 p. de habilidad pasiva.
♫ Bola de nieve --> Objeto; Barba falsa. (abajo)
♫ Estrella dorada x2 --> 200 aeros.
♫ Figura de madera --> Al frotarla la buena suerte será tu compañera durante los próximos 4 posts. Tiene 3 usos.

Barba falsa: Esta barba te permite crear una ilusión tan fuerte que iguala la realidad. Al usarla todos y cada uno de los presentes te verán como a un hombre, pero cada uno de sus 3 usos tiene sus características.
· Uso primero: La barba es larga y al usarla la ilusión creará en ti la imagen de un hombre anciano. Su duración es de 3 posts.
· Segundo uso: La barba ya no es tan larga como solía ser, puede que por algún efecto secundario de su magia. Esta vez la ilusión hará de ti un hombre de mediana edad. El efecto durará 2 posts.
· Tercer uso: La barba ha encogido y parece que este será el último de sus usos. La ilusión que caerá sobre ti será la de un hombre joven y su duración será de 1 solo post.