Remembranza [libre] [Demian] [CERRADO]

Invitado Vie 24 Abr - 22:11

Algo le daba vueltas en la cabeza al joven inventor, la ratonera ya tenía un pequeño almacén sellado, una escalera al nivel superior y varias literas en las almenas gracias a el sin embargo no podía conciliar sueño pese a las nuevas comodidades, seguía pensando en su vieja casa, por alguna razón quería dar una vuelta aunque sea para dejar sus respetos, fue entonces cuando a la mañana siguiente se desligo del latrocinio diario, informo a Ratita que debía hacer cosas personales todo el día solo antes de partir, evito toparse con Demian para no tener que contestar preguntas, esto es algo personal.

Bien, distrito intermedio allí voy.

Se mezclo con la multitud siguiendo el camino de subida, su ritmo era bastante lento y gracias a esto varias personas tropezaron con él, estaba indeciso sobre si visitar su antiguo hogar, es un cumulo de recuerdos bastante vividos que prefiere evitar, es mejor no pensar en lo que perdiste o te truncara la vida, al final un deber moral inventado lo guía por las calles, poco a poco el ambiente se vuelve conocido, las tiendas que visitaba, el lugar donde compraban comida, el taller al que encargaban utensilios, era obvio que nada cambiaría en un año pero todo está prácticamente atrapado en el tiempo, es desconcertante.

La vida sigue…

Y allí estaba frente a frente a su pequeña vivienda, una modesta casa de dos pisos en cuya puerta colgaba cierto edicto real, en pocas palabras decreta sellada la propiedad hasta que el único heredero vivo cumpla la mayoría de edad, si pasa una semana después de su cumpleaños número 16 y no ha sido reclamada la casa será subastada al mejor postor, no parecen especificar que escapo pero a la administración pública no le interesan esos detalles, suspira mientras saca una llave de su bolso utilitario, la coloca en la cerradura y el seguro sede.

Padre e vuelto….

Murmura algo melancólico, es lo que siempre decía al llegar de algún destino, adentro todo parece igual como le dejo, sin tener en cuenta las “toneladas” de polvo claro, sube a su vieja habitación y se deja caer en la cama, un pequeño gusto infantil que le trae gratos recuerdos, se queda alli unos diez minutos hasta que la lógica le hace volver, una vez sentado en el borde detalla todo, antes le parecía mas grande su cuarto.

Solo los recuerdos te hacen volver en el tiempo…

Se lleva las manos al rostro en señal de conmoción, parece increíble que haya tenido que abandonar su antigua vida, ha pasado mucho desde que partió hace un año y si pudiera canjearlo por la aburrida rutina de antes posiblemente lo haría, medita un tiempo para ponerse de pie, recorre la casa con la falsa expectativa de que alguien saldrá a recibirle, detalla el cuarto de su padre pero no pasa de la puerta, dedica una sonrisa y vuelve a la planta baja, tiene un último lugar que visitar, pasa su dedo índice por las paredes como hacia cuando era más joven y se detiene cerca de unas escaleras en descenso, toma algo de tiempo pero decide bajar.

El sótano es iluminado por varios tragaluces laterales y deja ver mucha maquinaria extraña a cualquier ojo ajeno de la ciencia, hay varias pizarras con ecuaciones a medias y muchos utensilios diferentes regados por el lugar, en el centro se erige una silla modificada con un aspecto cómodo, Chimar le toca y siente una tristeza emanar de su interior, derrama varias lagrimas mientras dice para sí mismo.

Porque coño tenías que morirte….

Demian Sáb 25 Abr - 10:24

La cosa iba avanzando sobre ruedas, ya podíamos sentirnos en casa y gozar de cierta comodidad en lo que alguna vez fuera sólo ruinas de un oscuro pasado. En cierta manera nos metíamos en una rutina y todo estaba en orden. Quizás fue por ello que me llamó tanto la atención que Chimar actuara de un modo raro, como escondiéndose de nosotros, aquella mañana. Al principio no le di mayor importancia, cualquiera tiene un mal día y esas cosas, quizás todavía andaba con la digestión mala desde esa vez que nos robamos una cantidad tan grande de pasteles frescos que forzamos nuestros límites hasta quedar con esferas for vientres. Al principio le resté importancia, pero cuando noté que dejaba la torre con paso indeciso decidí que algo andaba mal.

No fue difícil seguirle, cuando eres entrenado para ser asesino ese tipo de cosas se te da casi natural. Guardé mi prudente distancia y procuré camuflarme entre la multitud. Lo único que me complicó la tarea fue el incesante ruido, ah, algún día me acostumbraría, pero jamás dejaría de odiarlo. De todas maneras Chimar me puso la tarea especialmente fácil, parecía caminar como perdido, sin prestar mucha atención a su entorno. Cuando en un momento me imaginé sacando mis dagas y cazándole tuve que detenerme y limpiar mi mente, la fuerza de la costumbre aún cobraba su peso en mí, pero cada día me convencía de que era más… normal.

Llegué finalmente a una casa de 2 pisos que seguramente había visto tiempos mejores. En su puerta colgaba un edicto. Esperé que Chimar entrara y utilicé mi magia para pasar desapercibido, acercándome a leer la nota. Al parecer Chimar era dueño de una casa, pero no podía hacer uso de ella hasta los 16 años. Aquello sonaba muy tonto para mí, pero al fin y al cabo era leyes humanas, los brujos siempre decían que los humanos no se caracterizaban por su sentido común.

Trepé por un costado, entrando por una ventana mal cerrada. Era la habitación de un adulto, aunque claramente el paso del tiempo había cobrado su cuota, dejándola en mal estado y llena de polvo que seguramente había entrado día tras día por la rendija dejada por la ventana. En un momento sentí pasos y tuve que volver a usar mi magia al sentir que Chimar parecía a punto de entrar a la habitación. Los pasos marcados sobre el polvo no me serían de mucha ayuda. Por suerte desistió de entrar y en cambio bajó a un sótano.

Lo seguí con el sigilo de un gato y esperé. El chico pronto empezó a llorar y aquello me resultaba incómodo. ¿Qué se supone que uno debía decir cuando un amigo llora?, ¿que todo estaría bien?, ¿que descansaría en la muerte su padre?, ¿que su espíritu estaría orgulloso?, ¿que llorara cuanto quisiese?, nada de eso me sonaba sincero, no todo estaría bien, ahora estaba solo, la muerte era el fin y punto, su padre era uno con los elementos, pero no le miraría desde ningún lado y ya estaba llorando, no sacaba nada con decírselo ya. Finalmente le puse una mano sobre los hombros, olvidando que me encontraba invisible por mi magia, aunque si se giraba notaría mi presencia fácilmente por la escasa distancia. Quise decir algunas palabras, pero no se me ocurrió nada.

Invitado Sáb 25 Abr - 11:54

Chimar siguió llorando unos instantes hasta sentir que alguien le tocaba el hombro, en condiciones normales se hubiera puesto alerta pero estaba bastante desanimado para hacer algo, solo se giro y dedujo que era Demian, le miro con nobleza mientras brotaban algunas lagrimas, poco después se comenzó a calmar, aquel gesto le había tranquilizado, es bueno que alguien te consuele cuando estas abatido, al final se paso la manga sobre los ojos y con una leve sonrisa expreso.

Gracias…

Sabía que algo así acabaría ocurriendo en su visita pero tal vez lo necesitaba, en teoría ahora podría dormir, se separo de su amigo para detallar el recinto, ya los recuerdos no dolían tanto, aquel lugar era un templo a la invención, creo bastantes cosas en su momento con las herramientas de sus estantes, por un minuto se dejo llevar por los recuerdos, el golpeteo del metal, la maquinaria funcionando, era una sinfonía bastante hermosa de la cual había estado alejado por un año, tal vez cree algo asi en la ratonera, un inventor no puede ir demasiado lejos sin su taller.

Fascinante ¿no?

Expreso emocionado, se acerco a una mesa de diseño lleno de diagramas y les estudio con rapidez, eran viejos planos que el propio Chimar había creado intentando simular lo que su padre desarrollo, los originales fueron robados en la noche en que mueren las mentes, a pesar de que el chico estuvo trabajando en el prototipo físico era algo tan avanzado que no pudo recordar el artefacto en sí, para ese entonces parecía que realizaban cosas imposibles y probablemente ese era el caso, mirar aquel manojo de papeles le hizo revivir ligeramente la frustración que sintió al no lograr conformar una maquina igual a la robada, no pudo evitar dar un golpe seco a la mesa, un extraño ruido tuvo lugar y cierto compartimiento se abrió.

Que…que rayos….

Era un diario, a simple vista parecía repleto y tenía el emblema familiar, un par de engranajes en sello, le tomo y paso sus páginas con velocidad, al parecer no se habían robado todo aquella fatídica noche, recuerda nunca haber visto esa cámara oculta, su padre no era de los que guardaba secretos, reconoció algunos diseños que aludían a la maquina en construcción, el lenguaje era bastante difícil de entender e intercalaba en diferentes idiomas viejos y modernos, eran como acotaciones de varias fuentes por lo que tardaría un tiempo en descifrarlo, había incluso algunas teorías mágicas en su lengua ancestral, esto aumento más el desconcierto ¿estaban trabajando en un mecanismo hibrido? Pudo reconocer una frase a modo de titulo “maquina de potencial infinito”, decide mostrar la parte arcana a su compañero por si le reconoce, parece ser algo acerca de la manipulación del mana.

¿Demian has visto esto antes?

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Demian Sáb 25 Abr - 14:16

Era extraño ver a otra persona llorar, causa una sensación interna desagradable, pero no sabía qué decir para apoyarle, así que me limité a contemplarle en silencio, con la mano en su hombro, mientras él buscaba su propia calma. Chimar dio las gracias eventualmente, tras calmarse, lo que me causó algo de extrañeza, no sabía realmente en qué había ayudado si me había mantenido en silencio, pero al parecer a veces todo lo que se necesita es saber que hay alguien allí para acompañarte.

Su ánimo mejoró rápidamente, como si con esas lágrimas se desprendiera de un peso enorme y finalmente pudiera volver a ser el mismo. Me mostró unas máquinas que empezaron a moverse y hacer ruidos. Yo no entiendo realmente mucho de máquinas, pero supuse que aquello sería difícil de lograr y asentí cuando lo llamó fascinante. No sabía realmente lo que hacían esas cosas, pero supongo que no es algo que los brujos podamos imitar fácilmente con nuestra magia.

-No es algo que se vea todos los días -contesté de acuerdo.

Me mostró entonces unos papeles sacados de un viejo diario, donde se veían unos símbolos y diagramas, preguntándome si conocía de aquello.

-No he visto esto antes -contesté sincero- pero logro entender algunas cosas de lo que dice -apunté el diagrama- las fuerzas de los elementos tienden a agruparse en círculos y espirales, todos los elementos giran, el mana describe círculos y espirales… es como se comporta.

Le di un segundo repaso a los papeles, estudiando lo que representaban. En las Islas Illidenses existían muchos libros de magia y crecí leyéndolos, ellos usaban a menudo representaciones de la manera de ordenar los elementos para obtener beneficios mágicos. Aquellas imágenes se asemejaban sólo a la de los libros más antiguos.

-Cuando necesitamos realizar rituales poderosos es común que dibujemos círculos con símbolos mágicos en el suelo para guiarnos y mantener las fuerzas mágicas en orden, cualquier error puede significar el fracaso… o cosas peores.

Me concentré unos instantes, dejando que mi mana se moviera de acuerdo a lo que representaba el diagrama, aunque había símbolos que no entendía del todo, pero tras algunos intentos me rendí.

-Verás… no tengo el poder suficiente para llevar a cabo lo que aquí aparece, se requiere de magia muy avanzada y manipulación fina de muchos tipos de Mana distinto para esto… son palabras mayores.

Invitado Sáb 25 Abr - 19:06

Demian parecía desconocer aquellas imágenes en concreto pero sin duda son de origen brujo, la aproximación del inventor fue correcta al relacionarlas con magia pero ¿qué hacia dicho elemento arcano en un prototipo científico puntero? Chimar se queda pensativo, tal vez fue esta la razón de que su intento fallara, solo tenía la mitad del trabajo, por lo que puede recordar no se familiarizo con magia hasta que salió de Lunargenta, no tiene ni idea de donde salió esta línea de trabajo y mucho menos porque está en el diario personal de su padre.

Esto solo da más preguntas….

Escucho lo que el joven Brujo tenía que decir, sin duda las artes mágicas tienen sus propio tipo de estudio pero Chimar pudo entender ciertos conceptos básicos, los círculos se llevan bien con el mana al parecer, Demian hablo acerca de varias leyes y anécdotas sobre la hechicería que parecían confirmar verídicamente la fuente de los dibujos, no cabe duda de que se estaba tratando de desarrollar algo que uniera ambas fuerzas, teoría que se confirmaba con las paginas restantes.

Estas notas son bastante arriesgadas….no me pondría….¡¡Hey espera!!

Dijo al ver como su amigo intentaba manifestar lo plasmado en papel, por suerte pareció no funcionar, se alegro bastante del fracaso pues más adelante se especifica que la técnica drena el mana del catalizador hasta dejarlo seco, en teoría se usa un artefacto por lo que cualquier persona la hubiera pasado mal, estas son teorías hibridas muy complejas lo que significa resultados drásticos si se llega a fallar en un intento.

Es mejor no jugar con esto hasta que le eche un ojo con mucho detalle….

Hizo un gesto a su compañero indicando que era tiempo de irse, mientras Demian subía el joven inventor medito algunos instantes en el taller, se prometió volver a reclamar su hogar cuando fuera tiempo, después ambos chicos salieron por la puerta principal cerrándola tras de sí, mientras Chimar aplicaba el seguro noto cierta actividad reciente, había algo sobre el edicto real, una daga ornamentada de color ébano sujetaba un nuevo mensaje, era como si alguien hubiera coloca su mano llena de tinta en la hoja, debajo se podía leer “lo sabemos”.

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Que…que es esto….

Un sentimiento de pánico invadió al pequeño, recuerda ese símbolo, lo portaba en un dije el asesino que trato de matarlo durante la noche que mueren las mentes, solo la mediación oportuna de un Bio le permitió contar la historia, sus ojos se abrieron como platos, no puede ser coincidencia, es una amenaza de muerte ¿pero cómo? ¿Quién? ¿En qué momento? Preguntas que se arremolinan a las cuales es imposible darles respuesta, mira a su compañero con el corazón a punto de salirse y dice.

Creo que….me quieren matar….de nuevo….

Demian Sáb 25 Abr - 20:45

Chimar se mostraba preocupado de mi uso de la magia sobre esos planos, pero al final era mi territorio y me sentía seguro poniendo manos a ello, aunque al final dejé los intentos de lado consciente de que no lograría nada, eso superaba mis cualidades. Me estiré como si me levantara por la mañana mientras él revisaba las cosas, pero pronto dejamos esa casa que tantos recuerdos traía a mi compañero. Cuando nos disponíamos a emprender el camino Chimar notó algo. Donde antes estaba sólo el edicto ahora una nueva hoja estaba sujeta con una daga negra. La hoja contenía una clara amenaza.

-No lo se… -le dije examinando la hoja- está claro que no tienen buenas intenciones… pero no creo que te quieran matar… no todavía al menos… verás, tú sabes que yo me también conozco el… oficio, pues bueno, si yo quisiera matarte no te lo avisaría, simplemente un día amanecerías con una daga en el cuello o en el corazón… no sabrías ni quién soy, ni cómo llegué… acá en cambio es como si dijeran ‘hey, prepárate, está alerta y cuídate para hacernos más difícil el trabajo’ -

Me encogí de hombros. Al menos así era como yo había aprendido el arte del asesinato. Un buen asesino no era un fanfarrón, no se hacía notar hasta que era muy tarde. Miré casualmente hacia los lados, pero procurando no ser demasiado obvio sobre la dirección a la que mis ojos apuntaban. No esperaba encontrar a nadie de cualquier manera, ningún asesino sería tan tonto de asomar sus naricas… aunque si andaba poniendo cartelitos existía la posibilidad de que sí lo fuera.

-O son unos amateur o quieren que hagas algo antes de matarte… algo que necesitan.

Miré la daga. No parecía el modus operandi de mi orden poner carteles y hacerse notar, pero la daga negra era nuestro símbolo. Di la espalda a Chimar y fingí que me rascaba detrás del cuello, revelando mi tatuaje.

-La daga negra es el símbolo de la orden que me crió y enseñó, pero no somos asesinos a sueldo, no somos de esa… calaña… usualmente matamos a quienes sean enemigos de nuestro pueblo o practicantes de magia prohibida, en realidad el objetivo que nuestros superiores nos digan, sin preguntar… no creo que tú seas un objetivo de la orden, no eres ni un enemigo de los brujos ni un practicante de magia negra… no creo que sean ellos… pero la daga negra….

Me quedé pensativo, no tenía sentido que fuera mi gente la que estuviera detrás de ello, pero ese era nuestro símbolo. ¿Qué podía significar?. Indiqué a Chimar que camináramos de vuelta, sin apurarnos, para pensar con tranquilidad los pasos a seguir.

Invitado Dom 26 Abr - 0:15

No sabía muy bien si sentirse mejor con las palabras de Demian pero al menos daba cierto aire de esperanza en una forma bastante peculiar, tiene sentido, nadie va anunciando un asesinato por los cuatro vientos a menos que tenga cierto propósito predefinido, claro que encontrar un motivo además de querer aterrorizar es bastante difícil, por ahora solo pueden soltarse divagaciones sobre otras ideas que ni siquiera están confirmadas, con tan poca información de todo es complicado saber a quién temerle.

Debí quedarme dormido esta mañana…

Un pequeño comentario humorístico para aligerar el ambiente, aunque si pudiera volver en el tiempo tal vez tomaría ese camino ¿Qué puede querer un grupo de asesinos con Chimar? Lo dejaron en paz luego de que fallara su intento inicial, ahora luego de remover polvo misteriosamente aparecen amenazas pegadas en las puertas, si son los mismos que mataron a toda esa gente hace un año sin duda solo hubieran atacado y robado el diario, hay algo mas pero no se distingue.

Llámame paranoico pero aunque deteste admitirlo tal vez haya relación…

Parece demasiada coincidencia que encuentren un libro lleno de garabatos mágicos y ahora una orden de Brujos asesinos muestre su cara, tal vez solo es la paranoia del momento o quizás el tema es más profundo de lo que se ve en la superficie, indiferentemente solo querían asustar o “motivar” de alguna manera pero ¿para qué? El chico saca su pedernal y lo acerca al libro de forma que media calle le vea, tal vez si destruye esa información lo dejen en paz.

Quizás….quizás….

Amaga un par de intentos antes de guardar el encendedor, baja la mirada abatido, no puede hacerlo, su padre murió por esa investigación así que debe descifrarlo en su memoria, cerca de los motivos sentimentales también se encuentra un poco de ambición, si lograra crear esa máquina y hacerla funcionar seria la máxima expresión de inventiva realizada por cualquier humano en su mundo, es demasiado tentador para dejarlo pasar aunque muera en el proceso.

No planeo desistir de este proyecto.

Teniendo en cuenta que tal vez camina en la dirección que sus verdugos han planeado se le ve extrañamente tranquilo, tal vez tener un amigo asesino le da valor o puede que se trate de la bravuconería idealista, sea cual sea la razón permanecerá firme en su decisión, algo le dice en lo más profundo de su ser que las mentes detrás de esto también están interesadas en poner sus manos sobre el prototipo funcional, para ser una maquina que nunca despego está atrayendo mucho la atención, decide jugar cierta carta que tenía reservada.

Demian ¿conoces el distrito noble? Esta en lo más alto de la ciudad y solo se puede entrar con invitación o dinero en el bolsillo….creo que debo hacer una visita discreta a cierto “colega”, hallarnos una ruta no será problema para un chico talentoso como tu ¿no?

Demian Dom 26 Abr - 10:38

Quedé pensativo durante un rato, me costaba creer que fuera mi orden la que estuviera detrás de mi amigo, pero más que por lógica, porque no deseaba que así fuera. Aquello implicaría no sólo tener que escoger bandos, sino que sabía que había brujos capaces de asesinar sin siquiera acercarse a la víctima o con técnicas de invisibilidad mucho más eficaces que la mía. Debía haber otra explicación, alguien se hacía pasar por la orden o simplemente era una coincidencia lo de la daga negra. Chimar interrumpió mi línea de pensamientos con una petición un tanto particular, quería que le ayudara a internarse en una zona propia de la nobleza.

-Supongo que no debe ser tan difícil -contesté.

Bajé mi vista y contemplé nuestras ropas. Si bien Chimar podía pasar por un chico de buen pasar con un baño, yo distaba mucho de parecerlo, ni aunque hubiera un baño de por medio. Mi cabello disperso, mis ropas sencillas y prácticas, raídas por el exceso de uso, hasta mi acento, nada de ello asemejaba a los nobles de los humanos. Sería necesario pasar desapercibido todo el camino y eso no era fácil. Lo más difícil de todo era hacer pasar a Chimar, al menos yo tenía mi magia para hacerme invisible, pero no podía hacer invisibles a otras personas, no con mis conocimientos actuales.

-Pero antes necesitas un baño -le dije con una mueca de burla- no puedo hacerte invisible, puedo ayudarte a cruzar los límites y buscar caminos protegidos, pero es inevitable que caminemos por algunas calles y necesito que luzcas algo más… noble… tú sabes más que yo de esas cosas, me conformo con que la gente no salga gritando que hay un ladrón suelto por las calles o algo así.

Aún encontrando divertida la situación guié a mi compañero hacia una fuente que había visto por el camino. Era grande y recibía agua desde una vertiente a más altura. Daba la impresión de que era limpia por su aspecto y el hecho de que no tuviera un mal olor. No era precisamente un baño de tinajas, la gente se podría hasta burlar y seguro estaba fría, pero si él quería de verdad llegar donde ese “colega” tendría que estar dispuesto al sacrificio.

-No te saques la ropa, así aprovechas de limpiarla… por el camino se te secará -era difícil hablar sin la mueca de diversión- asegúrate de que tus ropas y tu cara queden limpias.

Para mayor precaución, me aseguré de mantener un ojo vigilante en el entorno. Era difícil que alguien intentara matarnos en público, pero no estaba de más estar alerta, con algo de suerte podría ver alguna señal de quién estaba detrás de Chimar.

Invitado Dom 26 Abr - 12:52

Demian tenía una idea para poder pasar por las zonas nobles, si bien el posee la habilidad de volverse invisible Chimar carece de cualquier cosa similar por lo que debe camuflase con el entorno al viejo estilo, en pocas palabras pasar desapercibido, su compañero le guiara a través de las zonas mas accesibles pero aun debe intentar suplantar a un niño noble, cuando el mago expuso su idea para “civilizarlo” con cierta mueca burlona el joven inventor no pudo evitar verle denotando ironía, era gracioso sin duda pero no si te tienes que bañar en un lugar publico.

O rayos….

Avanzaron hasta la fuente que previamente detallo el joven Demian y se quedaron mirándola unos minutos, Chimar estaba indeciso pero al final no tenia opción, mejor hacerlo rápido antes de que forme un espectáculo, salto al agua avanzando hasta la vertiente, allí con rapidez se enjuago todo el cuerpo, restregó su rostro y sumergió la cabeza unas cinco veces, sin duda la ropa había adquirido buena cantidad de suciedad pues la libero en el agua, estaba jodidamente frio por lo que salió cuando no pudo soportarlo más, para ese entonces ya había un circulo de gente alrededor mirando la escena, entre risas ajenas el pequeño inventor se acerco chorreando agua hasta su compañero.

Siempre hay una primera vez….

Sin más que hacer se retiraron del lugar rumbo a los distritos más altos, la ropa no tardo en secarse con el sol de la mañana y antes de llegar a la zona protegida Chimar se tomo varios instantes frente a una ventana para acomodarse el pelo con su típico peinado, las prendas que portaba no estaban tan desgastadas y se les veían cierto estilo, ahora sin la mugre del polvo puede pasar por un chico de buena familia, llegaron hasta una de las entradas y se quedaron cerca de la esquina diagonal.

Bien allí esta, si logramos entrar guíame por el camino principal hasta las villas, la tercera mansión es nuestro objetivo, es la única con las paredes azules, prepárate para ver la vanidad humana en todo su esplendor.

Los guardias parecían disminuir su alerta por momentos pero en general estaban atentos a que ningún “indeseado” traspasara su perímetro, el tráfico era bastante afluente y de vez en cuando ingresaban grandes cantidades de gente, este no es un punto de control como los normales que plagan varios distritos bajos, aquí sus agentes no hacen contacto hasta que identifican la “amenaza”, más que todo porque si perturban a un noble les cuesta el empleo, resulta curioso pero las clases pudientes a pesar de tener todas las comodidades a poca distancia prefieren aventurarse en las demás zonas por ende las entradas siempre tienen ríos de personas, lo cierto es que alli adentro es prácticamente otro mundo.

Entremos.

Demian Dom 26 Abr - 13:21

No pude evitar reírme de lo cómico de la escena, pero sobre todo por la cara que ponía Chimar al hacerlo. Al final terminó emergiendo del agua entre burlas de algunas, completamente empapado. Preferí no seguir riéndome y ponerme serio una vez que salió, de lo contrario acabaría por cabrearse y buscar una venganza.

Nos dirigimos a la zona en cuestión, un distrito especial, en la zona alta de la ciudad, donde los más ricos se mantenían alejados de los “indeseables”. Ya Chimar se había secado, pero ahora venía lo complejo, debíamos traspasar el perímetro. Nos camuflamos detrás de unos matorrales para contemplar mejor la situación y considerar la estrategia. Incluso si alguien nos veía allí por ahora sólo luciríamos como unos chiquillos jugando. Miré a las personas que caminaban. Incluso Chimar no lucía lo suficientemente despilfarrador comparado con ellos, probablemente despertaría sospechas y eso no era bueno. Era momento de darle un último toque.

-Hora de que luzcas como un príncipe -le dije con una nueva mueca burlesca en el rostro. La verdad es que me la estaba pasando muy bien con esta “misión”.

Concentré mi magia ilusoria sobre las ropas de mi compañero, logrando que algunas cosas de su vestimenta cambiaran de aspecto. Un cinturón fino con detalles en aparente oro apareció, los bordes de la camisa se adornaron con delicadas estampas y en sus pies aparecieron unas relucientes hebillas.

-Con eso bastará -dije satisfecho- Ahora caminarás por allí lo más relajado que puedas. Trata de no ir demasiado rápido o podrías perjudicar mi hechizo, simplemente camina relajado y pasa como lo hacen ellos… una vez que pases camina hacia la izquierda y me encontrarás.

Dadas las instrucciones me desplacé hacia la izquierda y, detrás de unos árboles, usé mi mano de invisibilidad para pasar desapercibido. Aún con ese hechizo resultaría peligroso entrar por entre los guardias, a poca distancia era posible apreciar las distorsiones en el aire que delataban que algo invisible andaba por allí, así que tenía que trepar el muro. Al menos esa no era una tarea muy difícil, habiendo entrenado para ser un asesino era una tarea relativamente sencilla. Lo complejo sería no desconcentrarme al hacerlo y perjudicar la ejecución de mis hechizos. No era tarea fácil realizar tanto esfuerzo a la vez.

Comencé la tarea con cuidado, poniendo un pie cada vez en las imperfecciones del muro, impulsándome lentamente hacia arriba. Por suerte el muro no era tan alto, no estaba pensado para repeler un ataque militar, sino sólo para mantener a los indeseables fuera de aquel territorio. No tardé demasiado en llegar arriba y la bajada fue más sencilla. Terminada la tarea me dirigí detrás de unos arbustos y me recosté a descansar. El esfuerzo no había sido menor, tanto en la magia como en lo físico, de modo que necesitaba descansar y transpiraba bastante. Seguramente en esos instantes la ilusión sobre Chimar también cedería.

Invitado Dom 26 Abr - 17:19

Sin duda Demian lo estaba pasando en grande con sus “consejos”, Chimar se lo tomaba con tranquilidad y algunas veces seguía la risa, es difícil no burlarse de la situación aunque seas la víctima, en un instante varios utensilios estéticos aparecieron sobre las ropas del pequeño inventor, nunca ha comprendido muy bien la razón de tantas cosas de mas pero es algo que caracteriza a los nobles, las habilidades de su joven amigo son formidables y siempre sorprenden.

Bien nos vemos del otro lado…ya vendrá mi turno de divertirme…..

Con paso sereno pero sin perder tiempo el pequeño “noble” se aventuro a la entrada, trata de no resaltar pero sus movimientos se vuelven bastante mecánicos cuando está nervioso, eso pasa por falta de práctica en el arte del sigilo y sin duda deberá pulirlo para mejorar como ladrón, un gran número de personas decidió ingresar en el distrito por lo que el chico vio su oportunidad, cuando estaba cerca del arco se escucho una voz de alerta, el pequeño estaba que se desmayaba cuando el guardia avanzo, por suerte para el se refería a un mendigo que trataba de obtener varias monedas cerca de la opulenta multitud, el agente lo alejo a patadas del lugar mientras el inventor seguía su camino.

Ra….rayos….no sé como Demian vive de esto….

Una vez dentro noto como sus aditamentos nobles desaparecieron, salió de la calle y se acerco al punto de reunión, allí estaba el mago bastante agotado, sin duda fue más complicado para el toda la situación, el chico se sentó al lado mientras su amigo se recuperaba, minutos después ya estaban listos para partir, Chimar medito las opciones y decidió tomar un avance más relajado, tomo “prestada” una caja pequeña y se la dio a Demian mientras se propuso explicarse.

Bien Demian es tu turno de actuar, camina cerca de mi pero mantente atrás, serás mi……sirviente…..todo el que tenga uno es noble por derecho así que no se fijaran en mi aspecto y mucho menos en el tuyo…serás un buen sirviente jejeje.

La venganza es dulce como dicen, ambos chicos salieron a la calle y como era de esperarse los dejaron en paz, la gente al ver el dúo observaba de reojo a Chimar y luego seguía su camino, a Demian no le dedicaban ninguna mirada, con el inventor como guía ambos pequeños recorrieron la calle principal, el lugar era embriagante, la gente llevaba tantas joyas que se les hacía difícil caminar, las ropas estaban hechas con las mejores telas y múltiples perfumes daban algo de alergia cuando se aglomeraban los olores, las tiendas mostraban exóticos artículos con precios exorbitantes y animales de raza paseaban bajo la guía de uniformados sirvientes, era como estar en una ciudad distinta.

Nunca me acostumbro a tanto exceso….

Murmuro para sí mismo, ha estado en ese lugar un par de veces y siempre sale saturado de tanta riqueza, varios intelectuales poseen un titulo de nobleza y buena posición económica, la persona que visitaran es un inventor de amplia reputación que logro reunir una acaudalada fortuna con varias técnicas industriales, se le puede considerar un visionario pero su verdadera motivación es el dinero, Giaco el padre de Chimar le conoció bien y aunque se detestaban por sus diferentes ideales mantenían cierto respeto y trabajaron juntos en muchos proyectos.

Pronto llegaron a la zona más ostentosa, villas enormes con grandes terrenos decorativos, no paso mucho tiempo hasta que alcanzaran su objetivo, la mansión de paredes azules era gigantesca y bastante hermosa, al menos lo que se podía apreciar por la reja principal ya que el terreno estaba cerrado con una pared externa y varios árboles decorativos, el sirviente de turno se les acerco y con arrogancia pregunto qué quería el par de pequeños, usando tono neutro Chimar anuncio su nombre antes de que el personaje ingresara.

Dile a Reaver que lo busca Chimar Maquiavelo.

Demian Dom 26 Abr - 20:07

Necesité de algunos minutos para recobrar por completo mi energía. A veces olvidaba que era un niño y mi aguante no era el mejor. El esfuerzo había sido grande, pero había dado resultado y estábamos ya del otro lado. Una vez recuperado fue Chimar el que tomó la iniciativa y me dio unas instrucciones un tanto particulares. Sabía que había un poco de venganza en ese juego de roles, pero no pude pensar en otra manera de hacerlo mejor que esa, así que accedí. Por los próximos minutos sería su sirviente.

-No te acostumbres, eh -le advertí cuando nos poníamos en movimiento.

La verdad es que, a pesar de todo, yo sabía ser un buen sirviente. En el templo era el más pequeño y la disciplina de los brujos era muy estricta, especialmente cuando se trataba de una orden de asesino. Caminé con la cabeza ligeramente gacha y creo que hasta exageré en mi rol, pero más valía exagerar que crear dudas. Cargué con la caja en silencio, apenas mirando por el rabillo de mis ojos como la gente le dedicaba miradas a Chimar. La verdad es que el lugar no era tan malo, algunos brujos solían vestir túnicas llenas de objetos mágicos en Beltrexus, runas y cosas por el estilo, por lo que no me resultaba tan extraño ver esos adornos inútiles, si bien prefería las ropas sencillas del templo, y existía al fin calma en ese lugar, cosa que agradecía. Seguía odiando el ruido de la muchedumbre.

Una vez que llegamos a la mansión azul miré hacia todos lados. Algo me decía que estábamos dando un paso peligroso y debía mantenerme alerta. Chimar se encargaría de su asunto, pero era mi trabajo que siguiéramos con vida. Mi experiencia me decía que ese era un buen lugar para asesinar a alguien, habían pocos ojos y se podía ser muy discreto. Claro que si mi objetivo fuera matar a alguien en ese lugar no iría por la calle, me escondería en las sombras… preferiría la noche.

Usé mi magia sobre mis dagas, haciéndolas convertirse en apariencia en un par de ramilletes de plantas, para camuflarlas y emití un pequeño silbido. Al cabo de unos segundos apareció en escena Chispa. Desde mi llegada a Lunargenta Chispa había estado bastante ocupado encontrando migajas de pan y esas cosas que hacen los gorriones, pero ahora le necesitaba. Me miré ladeando la cabeza, como buen pájaro, y se posó sobre una ventana de la casa. Me bastaba con que estuviera alerta. Aquella ave tenía algo especial para detectar cuando estaba en peligro y me sentía más seguro si estaba cerca. Me avisaría si algo extraño ocurría.

Estuve a punto de decir mi nombre cuando el sirviente preguntó, pero me percaté que me ignoraba por completo y llegué a la conclusión de que no era necesario. Los humanos podían ser muy crueles con su división de clases sociales y ya comenzaba a sentir el peso de aquello. En las Islas Illidenses todo brujo vale por la potencia de su magia.

Esperé a ver lo que ocurría, atento a cualquier señal de peligro.

Invitado Dom 26 Abr - 23:50

Mientras esperaban Demian pareció convocar un pájaro con cierto silbido, Chimar le miro mostrando cara de incredulidad por la acción ¿Qué sigue? ¿Chasquear los dedos y hacer llover? De donde el mago saco esa ave será sin duda un tema de conversación cuando lleguen a la ratonera, para mayor incertidumbre aquel animal montaba guardia, una extraña manera de protegerse las espaldas pero bastante original.

Me pregunto si algún día dejaras de sorprenderme…

En eso el sirviente con cara de pocos amigos volvió a la entrada y les dejo pasar, antes de ingresar Chimar le dijo al mago que tirara la caja, ya con ese asunto solucionado se adentraron en la propiedad, el jardín era bastante agradable y muy bien cuidado, la mansión ahora vista en todo su esplendor parecía unas cuatro veces más grande, al llegar a la puerta de la estructura su guía fue relevado por un criado de casa, les hizo el gesto de que le siguieran y enfatizo que no robaran nada.

Mejor le hacemos caso Demian no quiero problemas con este sujeto.

Murmuro sin que el estirado pudiera oírle, la entrada estaba repleta por replicas a escala de varios prototipos, bastante vistosos e igual de complejos, Chimar estaba extasiado por el panorama e intentaba no salir corriendo a tocar las maquinas para entender su funcionamiento, aquella era una larga recepción y sin exagerar debía haber un total de ocho o diez artefactos, eran artilugios mecánicos creados para mejorar las labores básicas aumentando el rendimiento.

Podrá ser un avaro hijo de…..pero sabe construir….

El mayordomo pareció animarse un poco con el comentario pero volvió a su estado original pasado varios segundos, el par de chicos fueron conducidos hasta un estudio enorme repleto de libros, cerca de la fogata sin encender rodeado de sillas costosas estaba un sujeto llegando a la edad madura con cierto traje blanco lleno de accesorios únicos, parecía leer un libro y cuando los jóvenes se acercaron les miro de reojo, dejo su lectura e inicio dialogo.

[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]

El hijo de Giaco, de todas las personas en el planeta no me imaginaba que tu tocarías mi puerta…

Yo…..necesito tú….consejo….

Eso es aun más extraño, lo que daría porque tu padre escuchara esa frase, en fin el tonto tenia cerebro así que di lo que debas.

Necesito que le eches un vistazo a este libro….

Un momento, este no es lugar.

Se puso de pie algo exaltado al ver el diario, despacho al mayordomo y les guio hasta niveles inferiores, allí se abrió ante ellos un taller de tamaño descomunal, el espacio de trabajo en la casa de Chimar no podía compararse con esta monstruosidad, maquinas, herramientas y muchos planos decoraban cada rincón iluminado por mecanismos complejos, el pequeño inventor se sentía en el cielo y solo fue sacado de sus pensamientos por Reaver.

Bien chico parece que encontraste una tumba….déjame ver eso.

Afuera algo parecía haber alterado al pájaro sin embargo estaban a buena distancia y escuchar su chillido será todo un reto, una sombra ingresaba en la casa sin despertar sospecha, cierta presencia camuflada por algún poder extraño, por ahora se encuentra esperando el momento oportuno sin ingresar aun en el taller especial, saber sus motivos resulta imposible pero se revelaran en los instantes por venir.

Demian Lun 27 Abr - 0:23

Supongo que cuando eres un pájaro el mundo humano debe parecer todo un desafío y una casa fácilmente era una trampa mortal. Fue por ello que cuando me percaté que Chispa había entrado a la casa, ante el reclamo lejano de algún mayordomo, supe que algo no andaba bien.

Pero antes de llegar a ese punto, permitidme contarles que un sirviente de la casa había osado insinuar que era un ladrón. Estuve a punto de reclamarle, pero entonces caí en cuenta que, en efecto, en los últimos días me había vuelto uno. Quién lo diría. No tuve más remedio que mantenerme en silencio y seguir a la comitiva. Cuando eres un brujo, dos sujetos hablando de personas que jamás conociste y máquinas podían resultar especialmente aburridos, en especial si durante dicha conversación no juegas un rol más relevante que el de un perchero. Aproveché la instancia para explorar con la vista el grupo de artefactos dispuestos. No es que yo tuviera interés especial en ello, pero el conocimiento me atraía y me despertaba la curiosidad lo que los humanos eran capaces de hacer.

Pero volvamos al asunto del ave. Chispa no fue capaz de encontrarme, pero al menos había recibido el mensaje gracias al mayordomo que le gritaba para sacarle. Era momento de jugar mis cartas con cuidado.

-Esto ya no es sorpresa para ti -le dije a mi compañero, sacando de mi bolsillo un pequeño artefacto con un ojo de vidrio. Lo apoyé sobre la puerta, puse mi ojo en él y dejé que aquella maravilla mecánica me mostrara lo que ocurría al otro lado. No se veía nada, pero yo estaba seguro que algo o alguien debía andar cerca.

Tomé el par de ramilletes de plantas y estos se volvieron afiladas dagas. El tipo de refinadas ropas y hablar altanero me miró sorprendido, ciertamente sus sirvientes habían fallado al dejar entrar a un desconocido armado a su despacho, pero eso ya no era la prioridad central.

-No voy a hacerte daño -le dije para asegurarme- pero necesito que confíen en mi… cuando abran la puerta, Chimar -miré a mi compañero- deberás darme una orden que simule que estoy en el fondo de la habitación ocupado, dime que cargue unas cajas o algo así… lamento usarte de señuelo, pero estaré justo a tu lado listo para actuar si alguien quiere hacerte daño.

Al instante, me cubrí en mi manto de invisibilidad. El juego comenzaba y yo no estaba dispuesto a perder. Emboscaría con determinación y sigilo a cualquiera que se cruzara frente a mi.

Invitado Lun 27 Abr - 14:44

Cierta conmoción arriba pareció encender las alarmas de Demian, Chimar seguía concentrado estudiando los detalles de Reaver hasta que su compañero saco aquel ojo mecánico, convencido de que la situación se ponía peligrosa puso más interés en lo que sucedía, el visor no mostraba nadie detrás de la puerta pero el mago seguía convencido de alguna misteriosa presencia por lo que tomo ciertas plantas que se transformaron en cuchillas.

Reaver se sorprendió al principio pero luego puso cara de intriga, lo que Demian no sabe es que aquel sujeto ha realizado varios viajes peligrosos en los cuales mejoro sus habilidades marciales, en cierto modo dicho inventor podría eliminar a los dos chicos en un combate directo, se lo reserva y sigue el numerito de noble exaltado pero sin exagerar, por otra parte Chimar ha visto en acción las técnicas de su amigo hechicero y confía plenamente en el.

El joven inventor despabila cuando le colocan como señuelo, medita unos instantes antes de aceptar, se acerca a la puerta y comienza a abrirla, cuando nota que se puede escuchar del otro lado grita unas ordenes fingidas a Demian que hacen entrever que está alejado de la entrada, en esos momentos de tensión pasa algo imprevisto, la criatura del mago entra volando y detrás viene el mayordomo con sartén en mano, el propio Chimar recibe un golpe en la cabeza mientras aquel personaje iracundo intenta despedazar el ave sin mucho éxito que digamos.

¡¡Ven aquí animal del demonio!!

Aaa rayos….

Clúster para tu estupidez por un momento deja a ese animal en paz.

Si…si señor…

Bastaron unas palabras de su patrón para tranquilizar al sirviente pero el asesino utilizo la conmoción para entrar discretamente, cuando se dio cuenta el pequeño inventor tenía una daga en el cuello, aquel chico se quedo paralizado mientras todos fijaban la mirada en la escena, detrás de él se materializo un individuo vestido completamente de negro y con el rostro encapuchado, sus armas eran finas dagas de ébano y mientras con una amenazaba a Chimar tenia la otra lista para arrojar a cualquiera que moviera un musculo.

Toma el libro nos vamos de paseo…

Pero…aaah

Un pequeño corte le hizo sangrar, al parecer no es momento de hablar, Reaver extiende el libro para que Chimar lo tome, una vez con el manuscrito en mano comienzan a salir, el joven inventor esta aterrorizado y se imagina cual será su destino si sale de la mansión, el anfitrión sujeta su bastón con fuerza esperando un fallo en la guardia para hacer su jugada, empiezan a subir las escaleras lentamente y se ve como el asesino unta su daga libre con alguna especie de solución viscosa, en ese momento expresa palabra.

Nadie se mueva…mucho menos el asesino a medias que esta camuflado.

Demian Lun 27 Abr - 20:37

Hubo un pequeño momento de humor y debo confesar que me relajé un instante. El mayordomo perseguía al pobre Chispa con inusual brío, a lo que el ave contestaba con un vuelo elevado y un trinar desesperado. ¿Era posible que no pasara nada y los ruidos de Chispa sólo fueran culpa de aquel sujeto?, tenía sentido pensar de esa manera. El hecho de que el mayordomo terminara finalmente alcanzando con un golpe a Chimar sólo agregaba validez a esta hipótesis. A pesar de todo, decidí seguir adelante con el plan, aunque fuera por mera precaución. No me equivocaba al hacerlo.

Chimar estaba con una daga al cuello y detrás suyo se materializaba un asesino. Durante unos segundos aquello me impactó y quizás esa fue la razón de que no actuara de inmediato. Podría haber intentado atacar al asesino en el acto y podría haber tenido una buena posibilidad de éxito, incluso si él sabía de mi presencia no le sería fácil defenderse de un ataque en el mismo momento en que intentaba detener a su víctima, pero el impacto de confirmar que era alguien de mi misma orden el que estaba contra mi amigo pudo más que mi lógica y determinación. Aquello no tenía sentido, Chimar no había hecho nada contra el pueblo brujo ni era un potencial enemigo, ¿por qué el maestro Emil le querría muerto?.

Mis vellos se erizaron cuando el sujeto dio cuenta de saber de mi presencia y ello me devolvió a la realidad. Debía pensar algo y debía hacerlo pronto o él se llevaría a mi amigo. ¿Veneno?, me percato, ¿por qué usaría veneno si le tenía asegurado?, parecía exagerado… quizás no le querría exactamente muerto. De cualquier manera no había tiempo que perder. Si dejaba que se alejara no tendría manera de alcanzarles. Un recuerdo volvió a mi mente.

Ese día había recibido una buena golpiza en los entrenamientos. Los aprendices, todos de mayor edad que yo, no se habían andado con cuidado, a pesar de que yo tenía apenas 8 años y el menor de ellos me llevaba 5 de ventaja. Una serie de moretones daba cuenta de las múltiples “estocadas” con aquellas dagas romas. Fue entonces que el maestro Emil apareció en escena. Con un gesto severo había mandado al mayor de ellos, que en ese momento descargaba una serie de golpes en mi espalda, a tomar unas horas de meditación en la cámara oscura. Yo acudí junto a él en busca de protección y él, saliéndose de su usual actitud fría, ponía una mano en mi cabeza y me permitía retirarme del entrenamiento por ese día. No sólo eso, sino que luego se había encargado de ponerme unos paños fríos sobre las marcas en su recámara. Ese día había dejado 2 cosas claras, que el maestro tenía cierto favoritismo por mí y que estaría dispuesto a protegerme.

Si tan sólo estuviera allí para protegerme en ese momento. Si de pronto apareciera me hubiera arrojado a sus pies a pedirle ayuda, no podía con ese sujeto yo solo y, con la estricta disciplina del templo, bastaría una palabra suya para que el asesino se inclinara de respeto. Si tan sólo estuviera él allí… si tan sólo…

La idea fue clara en mi mente y me puse de inmediato a ejecutarla. Uno de los trucos más divertidos de la magia ilusoria consistía no en crear imágenes, sino sonidos. Era increíble lo poco que se necesitaba por medio del sonido para causar un gran efecto. Mi figura paterna, por otro lado, siempre había sido el maestro Emil, de hecho yo era el único que le llamaba por su nombre, según recuerdo. Conocía su voz a la perfección.

-Aborta de inmediato -se oyó su voz gracias a mi magia, desde algún lugar a las espaldas del asesino.

Su reacción no se hizo esperar. Pude ver sus ojos abrirse y hasta tuve la impresión de que su piel palidecía en segundos. La voz de Emil era ley y nadie podía ponerla en cuestión. El sujeto parecía impactado, no podía creer lo que oía, por lo que su reacción natural fue girarse con la cabeza inclinada en señal de respeto para ver a su maestro y líder.

Como podréis suponer, aprovechando la escasa distancia me arrojé en ese mismo instante con mis dagas por delante, esperando matarle, herirle o al menos permitir a Chimar escapar de él.

Invitado Lun 27 Abr - 22:26

Demian fue sorprendido a sobremanera por el asesino, en sus ojos se puede ver que ata cabos sueltos mentalmente, al parecer si es la orden de aquel chico la que está detrás de todo esto, Chimar estuvo tentado de gritarle pero no quería otro corte, por ahora debe seguirle el juego al dueño de la daga que tiene en el cuello, continuaron subiendo por lo que se agotaba el tiempo, al final el hechicero volvió a centrarse.

Cierta voz desconocida retumbo en la retaguardia, por un momento se pudo sentir como el siniestro personaje perdía la concentración, sea quien sea el usuario de esa voz tiene gran peso sobre el especialista, cuando el enemigo voltio la cabeza estuvo claro para el que había cometido un error garrafal, se pudo escuchar una especie de insulto mientras volvía a su posición original pero ya la suerte estaba echada.

El joven mago se le había lanzado encima con ambas dagas en posición amenazante, aquel sujeto arrojo a Chimar y bloqueo el golpe con sus propias armas, la manera en que se movía denotaba mucha experiencia por lo que Demian rápidamente fue superado, recibió un par de cortes con el arma limpia antes de ser amenazado con una estocada a la cabeza, parecía el fin del pequeño brujo y ese hubiera sido el desenlace de no ser por la intervención de Reaver.

Jugar el papel de noble indefenso había servido su propósito y mientras ambos guerreros del sigilo se median entre si el experimentado inventor tuvo suficiente tiempo para apuntar con la visión, haciendo uso de un movimiento elegante alzo su bastón y sin dar tiempo para reaccionar activo cierto mecanismo secreto, de la punta salió disparado un arpón que con asombrosa velocidad perforo el pecho del enemigo salvando por los pelos al joven Demian, el objetivo fue impulsado para atrás y quedo pegado en los escalones.

Nadie entra sin una invitación.

Agonizando expreso la frase “esto es más grande que ustedes” a la vez que concentraba mana, al final se pudo escuchar “tomaron su decisión” mientras el cuerpo desencadenaba una inmolación, la técnica desconocida convirtió al individuo en cenizas junto con todas sus cosas en cuestión de segundos, ya no cabe duda acerca de su raza, es o era un brujo, todos parecían sorprendidos por cada acontecimiento ocurrido y cierto silencio incomodo duro varios minutos, al final Chimar expreso cierto malestar.

O…oigan quien cerro….las ventanas.

Nadie reacciono a tiempo y el chico cayo de golpe al suelo, Reaver le estudio descubriendo una pequeña herida en la espalda, estaba impregnada de una solución bastante desagradable que reconoció de inmediato, tomo el libro prestado mientras le indicaba a su mayordomo que cargara al pequeño, no fue muy difícil gracias a su escaso peso, al final el veterano inventor explico lo ocurrido.

Tranquilo chico de las dagas es un sedante, estará dormido un par de horas, Clúster llévalo a la habitación de huéspedes…delicadamente, supongo que querrás estar con él, yo debo echarle un vistazo a este libro, si tienes hambre pide lo que quieras a este bueno para nada, los asesinos trabajan solos no creo que vengan mas.

Siguiendo las órdenes de su patrón el mayordomo llevo en brazos a Chimar hasta la segunda planta, allí le deposito con cuidado en la cama de la primera habitación, el cuarto era bastante ostentoso, sin duda para mantener una buena imagen a las visitas elegantes, el sirviente hizo una reverencia en dirección a Demian para luego hablar, cambio totalmente su protocolo en comparación al primer encuentro.

¿Joven señor desea algo? Los cocineros esperan algún pedido.

Demian Lun 27 Abr - 23:06

El tipo era bueno y sus habilidades de combate eran superiores a las mías. Yo nunca he sido un gran peleador, de cualquier manera, lo mío es el sigilo y el engaño, no el cuerpo a cuerpo, de modo que cuando vi que Chimar lograba zafarse de cambié a una actitud defensiva, esperando el momento oportuno para dar un golpe definitivo, si mi contrincante cometía un error. Aún el más experto podía cometer errores y los planes del asesino no iban como esperaba, por lo que era factible. En el proceso recibí un par de cortes, uno en un antebrazo, otro en el hombro, pero no me rendiría con facilidad.

De pronto mi contrincante era atravesado por alguna especie de arpón. Suspiré aliviado y bajé mis armas, mientras Chispa procedía a servirse gustoso unas frutas pequeñas dispuestas en una bandeja. Al revisarme mis heridas me convencí de que no eran nada grave, pero de todas maneras lamentaba no tener a Ëarwen conmigo, con ella era más sencillo jugar el papel de héroe, ahora tendría que cuidar yo mismo de esas heridas por unos días.

-¿Qué tonterías dices? -pregunté a Chimar, pero éste bautizó el suelo con su nariz.

Al principio me preocupé de que pudiera estar herido, pero al parecer sólo era un sedante. Aquello era tranquilizante al menos. Los acompañé a una habitación y accedí a la invitación a comer del mayordomo. No pedí nada en particular, estaba aún con los sentidos muy tensos para pensar en aquello, pero el sujeto entendió y desapareció. Una vez a solas me tomé la libertad de rasgar un trozo de las sábanas, al fin y al cabo el tipo tenía mucho dinero, y vendarme con ello las heridas. No era un gran trabajo, pero dejarían de sangrar y no me molestarían al moverme.

Me senté a esperar a que Chimar despertara. El sirviente me trajo una mezcla de unos bizcochos, mermelada y frutas peladas. Acepté de buen gusto y comí una buena porción. Si algo era seguro es que no era buena idea desperdiciar una buena oportunidad para comer algo, en especial si era gratuito.

Finalmente el cansancio de los distintos esfuerzos realizados ese día, en especial de la pelea, sumado a lo tranquilo que estaba el ambiente en ese lugar, hicieron que de pronto mis ojos se comenzaran a cerrar hasta que me quedé dormido sobre la silla, aún con un trozo de bizcocho en la mano.

Soñé con el maestro Emil, pero no fue un sueño agradable, se tornó en una confusa pesadilla.

Invitado Mar 28 Abr - 14:23

Demian permaneció cerca de Chimar en todo momento, luego de comer algo el propio mago también ingreso al mundo de los sueños, se le veía inquieto mientras dormía como si tuviera un pensamiento poco placentero, hora y media después de caer inconsciente el pequeño inventor despertó, sonara extraño pero fue la mejor siesta que ha tenido en meses, se estiro un poco mientras recobraba pleno control de su cuerpo.

“Bostezo” que buen sueño…

Miro que se encontraba en una habitación elegante y al fondo estaba su amigo sumergido en un letargo, parecía tener cierto aperitivo sujetado de la mano, por su expresión no lo estaba pasando demasiado bien en la irrealidad, Chimar lo iba a despertar pero Reaver se adelanto luego de entrar por la puerta, con tono soberbio saco a Demian de su sueño mientras exponía varios puntos calculados.

¡¡Arriba mocosos!! Tu toma esto “dijo arrojando cierto frasco al joven mago” te cerrara las heridas en una hora pero dolerá como los mil infiernos, tu “dijo señalando a Chimar” es hora de educarte.

Durante los próximos diez minutos el veterano industrial instruyo al pequeño inventor acerca de lo que contenía el diario, en palabras sencillas era un compendio de tecnologías mescladas que desembocaba en una maquina única, dicho artefacto usaba el mana para generar energía física ilimitada, en su diseño se encontraba mezclado maquinaria de varias líneas teóricas incluyendo la de los Bios, Chimar comenzaba a comprender las motivaciones de los asesinos.

Eso significa que….

Si, quien tenga esta máquina terminada y funcionando podría dar un salto a su civilización por más de 300 años, las cosas que podrían crearse con tanto poder son inimaginables….

Que…que hago con esto…

¿Mi recomendación? Quémalo delante de media ciudad, esto levantara el interés de muchas facciones y no de la forma más agradable, los magos fueron los primeros, vendrán mas.

No…¡¡no puedo deshacerme de algo como esto!!

Entonces te recomiendo que mantengas muy bajo el perfil y medites que harás si alguna vez la creas, a veces es mejor abandonar proyectos muy riesgosos, esto es tuyo.

Dijo devolviendo el libro, al parecer Chimar está atrapado en algo más complicado que un simple proyecto de ingeniería, esta máquina hibrida podría hacer avanzar a la humanidad de manera descomunal lo que significa que muchos intereses querrán sacarla de la ecuación o apoderarse de ella, se toma unos minutos para meditar todo, no puede dejar de pensar en la negativa discreta del propio Reaver para sumarse a todo esto, debe ser sin duda algo muy peligroso para que descarte su avaricia.

Debemos irnos….gracias Reaver….

De veras desearía que tu padre estuviera vivo para que escuchara eso, anda con cuidado chico y usa el cerebro, lo mismo para ti joven asesino.

Ambos peqeuños salieron de la propiedad escoltados por otro criado, una vez en la puerta decidieron irse del distrito, como acotación adicional se puede concluir que aquella zona sería un buen lugar para robar cosas una vez sus estandares hayan subido, claro que por ahora Chimar tiene la mente en otra parte, se detiene antes de dejar atrás las villas y mira discretamente a Demian, luego emite comentario, una vez terminen esta conversación lo prudentes sería volver a la ratonera dada la hora.

Te agradezco tu ayuda, algo me dice que estoy adentrándome en aguas peligrosas ….. prometo que este hito personal no perjudicara en nada a nuestra banda ….. además por ahora no puedo hacer mucho, si tienes alguna duda la escucho.

Demian Mar 28 Abr - 16:33

Desperté teniendo que hacer acopio de fuerza de voluntad para no rebelarme contra aquel sujeto. Nos trataba de una manera despectiva y nos daba órdenes como si fuéramos sus sirvientes. Entendía que Chimar confiaba en él, pero no me agradaba para nada, la verdadera autoridad, me había enseñado el maestro Emil, viene de aquel que no necesita gritar para que el resto le haga caso.

Al pensar en el maestro tuve la sensación de que había estado soñando con él, pero lo brusco de mi despertar había borrado todo vestigio del contenido de mi sueño. Sólo sabía que me quedaba un sentimiento de malestar y parecía venir de antes de ser despertado de esa manera, al parecer lo que sea que soñé no había sido muy agradable.

Casi le arrojo el frasco por la cabeza, pero me contuve, Chimar necesitaba lo que sea que aquel tipo le tuviera que informar. Mientras procedía a instruir a mi compañero con términos que, si bien me eran extraños, comenzaba a darles cierto sentido a punta de repetición, yo me apliqué el contenido de aquel frasco en las heridas. No voy a mentir, me dolió más de lo que esperaba, a pesar de la advertencia, al punto que mis ojos se humedecieron de manera automática, pero me propuse firmemente no darle el placer de verme llorar ni quejarme a aquel desagradable sujeto. Estoico me sequé las lágrimas con discreción y esperé a que terminaran su conversación.

Finalmente salimos de esa propiedad escoltados por el criado, mientras Chispa nos seguía a una distancia prudente. Ni mi ave ni yo confiábamos en esos tipos y ciertamente prefería no tener mucho que ver con ellos en lo sucesivo. Una vez gocé de cierta privacidad con Chimar le expresé mis pensamientos sobre la proposición.

-Creo que deberías hacer lo que dijo -le comenté, pero antes de que pudiera protestar aclaré- ese libro es muy peligroso, pero antes tengo una idea… hay un cierto… amigo… bueno, ya conoces algo sobre eso, tú le llamaste autómata… bueno, mi autómata fue diseñado para ser un diario, es capaz de memorizar cualquier cosa y no olvidarlo jamás, además era el diario de un científico, está especialmente diseñado para ese tipo de información… si dejamos que Arty memorice todo puede luego ser como un libro andante, pero nadie lo sabrá… por otro lado, puedes quemar el libro tal como te dijeron y ni siquiera ese tipo engreído sabrá que aún tienes la información… quizás hasta puedas volver a escribir luego el libro con ayuda de Arty.

Esperé a que meditara sobre mi proposición durante unos instantes, luego de los cuales le pregunté:

-¿Qué dices?, ¿vamos por Arty?… en este momento está descansando en un lugar especial.

Invitado Mar 28 Abr - 22:01

Por un momento agradeció haber salido de la mansión, Demian parece no congeniar con Reaver, en realidad ese pomposo arrogante no le cae bien a nadie pero no es un sujeto que quieres tener de enemigo, el par de chicos ahora debatía sobre su próximo paso a seguir, Chimar escucho atentamente al mago quien parecía tener una idea de lo más original, requería un poco de confianza pero se ha ganado la amistad del inventor con creces.

Suena bien y sé que puedo contar contigo…. ¿donde tienes escondido tu autómata?

Una pregunta curiosa que sin duda nunca ha realizado con anterioridad, se imagina como será aquella maquina, en su vida ha visto varias de ellas y todas poseían un diseño bastante único, por las palabras de Demian esta parece ser cierto diario andante, probablemente creada con un centro de memoria programable y algún mecanismo de recopilación, los artilugios de esa índole son muy minuciosos por lo que crear algo así puede tomar años incluso en los más habilidosos.

Sabes una vez diseñe un autómata arácnido, nunca lo construí pero tenía cierto plano bastante funcional, quizás más adelante retome ese proyecto…. si me queda tiempo con la maquina demencial de mi padre claro….

Es obvio que “Arty” no se encuentra en el distrito noble por lo que el par de chicos se dirigió a la entrada, Chimar pidió a su compañero que repitieran el numerito del sirviente, la caja estaba cerca y pese a la cara del mago prosiguieron de esa forma, es mejor así ya que si descubren su verdadera clase social los guardias podrían darles una paliza como “correctivo”, quedar adolorido no es buena forma de acostarse a dormir.

Pasaron sin problemas el arco vigilado y a una cuadra de distancia dejaron tirada la “carga”, en este punto Demian guiaba la marcha, Chimar llevaba casi todo el día sin comer nada y aquel sedante parece haber despertado su hambre, se sujeta el estomago para evitar que gruña, en la ratonera con el almacén ya mantienen cierto suministro de alimentos pero es posible que no se dirijan a su refugio.

Tengo tanta hambre que me comería un kilo de metal y medio litro de aceite….

Sigue caminando, por ahora tienen un objetivo más importante aunque su paso se vuelve torpe gracias a la falta de alimento, por alguna razón a los niños les da más hambre que a cualquier ser vivo, un sentimiento que ha tenido que experimentar bastante desde su orfandad, de allí el motivo directo de su baja estatura, hasta hace poco era víctima de malnutrición, situación que parece haber afectado también a Demian por lo que se puede ver, resulta curioso lo mucho que se parecen ambos pequeños.

No le des más vuelta Demian…. ¿Dónde está Arty?

Demian Mar 28 Abr - 22:56

Traspasamos la barrera siguiendo el mismo truco de la caja. Noté un momento una mirada de sospecha de uno de los guardias, pero al parecer tenían tanto trabajo que decidió dejar de lado el asunto, al fin y al cabo ya íbamos de salida.

Cuando Chimar comentó sobre comer metal y beber aceite mi primera reacción fue levantar una ceja y mirar con curiosidad. Me costaba trabajo distinguir cuando algo era una broma y cuando alguien iba en serio. Parecía tan fácil para el resto distinguir esas sutilidades, pero para mí era todo un dilema. Al final no dije nada.

-Bien, vamos primero a la Ratonera -le dije- tengo que ir por algo de todas maneras.

Fuimos así de vuelta a nuestra base de operaciones, donde Ratita se tomaba el tiempo para holgazanear. Al parecer el chico había robado un par de cosas esa mañana y luego había decidido volver y matar el tiempo durmiendo ante nuestra ausencia, pero cuando llegamos saludó de manera floja.

-Arriba Ratita, vamos a necesitar de tu ayuda -le dije.

El chico se estiró un par de veces para sacarse la modorra y luego se levantó de su cama, curioso sobre qué planeaba y por qué parecía guardar el asunto en secreto. En realidad no quería que supieran aún de qué se trataba el asunto porque temía que pudieran intimidarse, no sería un mero trámite el lograr que Arty se uniera a nuestra base de operaciones, pero bien valía la pena, no sólo porque ayudaría a Chimar con su máquina y su libro, sino porque ello me daba la excusa para llevar a cabo la acción que había postergado tanto tiempo.

-Come algo y luego nos ponemos en marcha, tenemos mucho por hace.

****************

Off: Cerremos este tema, si quieres de inmediato, si quieres postes antes, el siguiente tema lo abriré muy pronto.

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