Cuando lo desconocido te mira de frente [Libre] [Noche] [2/3]

El campamento estaba tranquilo, los bandidos incluso se dieron el permiso de preparar una cena poniendo animales varios en pinchos y asándolos. Me ofrecieron uno pero me negué, no necesitaba ese tipo de proteínas en ese momento,  si tomé agua ya que si iba a haber algún tipo de enfrentamiento necesitaría que mi sistema de enfriamiento funcionara al máximo de su capacidad.

Un grito quebró la calma de la noche, de inmediato todos los hombres se pusieron de pie y agarraron sus armas, alertas a que cualquier cosa sucediera. Pasaron los segundos y el silencio volvió a reinar en el ambiente, demasiado silencio, era como si todos los animales de la zona hubieran escapado.

Otro grito, esta vez más cercano, fuimos hasta el lugar solo para encontrarnos con una visión dantesca. Era un árbol lo que teníamos en frente [ANALIZANDO] sin embargo, no tenía parecido con ningún otro árbol que hubiese conocido [ERROR] sus ramas eran entre oscuras y rojas, no tenían una sola hoja pero no me atrevería a decir que estaba muerto. Rostros de humanos comenzaron a asomar desde las raíces, no cabía la menor duda de que una maldición había caído sobre este bosque.

No solo era un mar de rostros, sino que además eran personas conocidas para los orgánicos que estaban alrededor, resultaba una técnica muy efectiva, al atacarlos en su núcleo emocional quedaban totalmente desarmados. Yo no tenía recuerdo alguno de mi vida humana, por lógica debía tener a mi familia ya fallecida, pero aunque ese extraño ser me mostrara sus caras, no los reconocería.

Apoyé una mano en el hombro de Loki, lo que sea que había visto parecía estar afectándole, y estaba a punto de atacar al árbol, al igual que varios de los bandidos. A quien no pude detener es al Líder del grupo de ladrones, quien salto sobre la planta, hundiendo su arma en ella hasta el fondo.

Una extraña sustancia cubrió casi por completo mi cuerpo.

[ERROR] [ERROR] [ERROR] [ERROR] [ERROR] [ERROR] [ERROR] [ERROR] [ERROR]

“Esta cosa quiere meterse en ti” me susurro Neil “Tu eres mía, no permitiré que te tome” yo no le pertenezco a nadie “Tu eres mía, solo que aún no lo sabes” [ERROR] un dolor punzante amenazó con romper mi mente, tres fuerzas parecían pelear dentro de mí, y no entendía a cual de todas las voces tenía que seguir.

[ERROR MASIVO] [REINICIANDO]

Oscuridad….

[ESPERE] [REINICIANDO]

“No tienes que preocuparte, yo me encargo de todo. Tu descansa” Tum-tum-tum-tum-tum-tum-tum-tum. El sonido tenía ritmo, era extrañamente hipnotizante, como si te llevara a marchar a paso militar Tum-tum-tum-tum. De pronto me parecía una buena idea solo dejarme llevar y que Neil se encargara.


Zöe se había desconectado, tirada en el piso como una muñeca sin vida, quizás por eso los bandidos no se fijaron en ellas y la pasaron por alto al momento de comenzar con la masacre. Los tres robots que la acompañaban estaban alrededor de ella, y tiraban de su ropa para intentar despertarla, pero no había manera, al verse en riesgo de contaminación, su sistema había optado por apagarla.

De pronto los robots se quedaron paralizados también, solo unos segundos, y cuando comenzaron a moverse de nuevo fue con ritmo, flexionando las pequeñas piernas como si escucharan algo que todos los demás no oían. ATAC levanto su mano y disparo una andanada de clavos a un bandido que amenazaba con acercarse, SEPA-IV prendió fuego a otro que paso cerca y una vez que caían al piso AMA les rompía el cuello con sus pinzas.

No se movían de donde estaban, solo mataban a aquellos que se acercaban a Zöe, protegiéndola de cualquier peligro.

Semejante nivel de masacre no podía durar demasiado, no habían tantos hombres como para que durara. Pronto todo el terreno estaba lleno de sangre, huesos, carne, pedazos de personas y órganos. Los pocos que quedaban vivos estaban demasiado heridos, y probablemente no podrían sobrevivir mucho mas, era una absoluta matanza, el plan de los bandidos había sido un fracaso.
[REINICIANDO]

Abrí los ojos, estaba sobre un charco de sangre, la sensación húmeda y pegajosa estaba por toda mi piel. Me levante con dificultad, intenté limpiar mi rostro pero mis manos estaban también llenas de sangre, era como estar en un lago poco profundo de restos humanos. Una idea cruzo mi mente.

-Debemos quemar todo esto, rápido – Mire las antorchas, pero la mayoría se habían caído y apagado, la fogata en la que habían hecho la cena aún estaba prendida pero no le quedaba mucho tiempo – SEPA-IV, quema todos los cuerpos, yo buscaré aceite –

De inmediato el pequeño robot prendió el soplete y empezó a quemar, pero no era suficiente, busque los barriles de aceite y los patee para que se esparcieran por el claro. Tome uno de los troncos de la fogata y lo tire encima, comenzando un incendio en todo el lugar.

-No debemos dejarle ningún cuerpo para que use -
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Explicación del subrayado: Zöe tiene ahora mismo una maldición producto de los Objetos de la Trama 19, por eso su cuerpo es disputado por su Sistema de Bio, por el Muñeco Neil, y por el No-Niño de esta historia.

La vi ahí entre la maleza, acobijada por la bruma como una aparición fantasmal, vestida con la túnica de los alumnos de Hekshold, sonrió y sus ojos azules sonrieron con ella. No cambió lo más mínimo desde el día que murió, el mismo lunar cerca de la barbilla, la misma curiosidad perpetua en su mirada. Fue hace más de diez años y el recuerdo sigue intacto en mi cabeza. Si se hubiera salvado ambos tendríamos la misma edad.

Hola de nuevo, Eleonora.

— Te he esperado desde hace mucho. ¿Por qué continúas negándote a venir? ¿Todo lo que dijiste sobre nosotros fue mentira?

Quise responder pero continúe paralizado. Jamás pense que volvería a escuchar ese tono mandón suyo. ¿Acaso morí y estoy cruzando el umbral al otro mundo? No, la sangre cálida que me salpica me recuerda que sigo vivo y animado. ¿Pueden irse a matarse a otro lado? ¡Molestan!

Es un truco, lo sé. Aquella criatura solo anda jugando con mi cabeza. Es imposible revivir a los muertos, y si lo intentas solo conseguirías un cadáver móvil y maloliente. Entonces, aun sabiendo tamaña verdad, ¿Por qué estoy tan feliz?

Comencé a reír, no por nervios o arrogancia, sino por el simple hecho de reencontrarme con un ser querido. Si dejamos de lado los idiotas de mi pueblo natal, las personas en Aerandir que realmente quiero se pueden contar con tres dedos, siendo uno de ellos yo mismo.

Me limpie el sudor de la frente y respiré hondo, calmando mí corazón pero sin desaparecer mi sonrisa. El aire esta impregnando de sangre pero ni me importó, estoy contento. Mi alegría pareció confundir a “Eleonora”, pues arqueo una ceja.

— Debo darte las gracias por revivir tan bellos recuerdos, muchacho. Si no quisieras matarme creo que seríamos excelentes amigos— Dije con total honestidad. Incluso su existencia profana me pareció menos grave.

“Eleonora” miró a ambos lados, luciendo perdida como una niña pequeña. Bajo la luz de mi báculo pude notar como el azul de sus ojos dio paso al negro absoluto. La criatura conservo la forma de mujer, pero su voz se deformo, como si hablaran decenas de niños a la vez.

— Yo no quiero matar a nadie. Los muertos son aburridos, no brillan ni hacen gran cosa. Pero son buenos materiales de construcción, mucho mejor que la madera o las rocas— A sus espaldas siluetas amorfas llenas de extremidades arrastraron los cadáveres hacia lo profundo del bosque.

— ¿Entonces solo atacas para crear más...?— Iba a decir monstruos, pero me contuve— ¿Entidades?— Estiré los brazos tratando de lucir relajado, pero mentiría si digo no tener los pelos de punta. Esa cosa puede ordenar asesinarme en un respiro.

— En parte sí, en parte no... Solo busco construir algo hermoso.

¿Algo hermoso? No me jodas. Si esas cosas son hermosas entonces mi culo merece ser enmarcado como una obra de arte.

Luego de completar la oración la criatura perdió en interés en mí y se dirijo a tomar un brazo cercenado. Yo me le adelante.

— Permíteme levantarlo— Dije y se lo entreguen en sus manos. Traté lo más que pude no rozarle los dedos. Sigue pareciéndose a Eleonora, los fantasmas del pasado tienen que permanecer intangibles para no dañarnos.

— Gracias— Respondió, e inclino la cabeza hacia un lado—. ¿Sabes que al final voy a matarte, brujo? Tú dañaste a Bola de Algodón, lo mínimo que puedes hacer es ayudar con tu cadáver a crear uno nuevo— La forma seca e infantil en que pronunciaba esas horribles palabras me hizo temblar.

— Intento ser educado— Dije mientras recogía más extremidades del suelo—. ¿Dónde te las dejo?

— Reunimos todos los materiales en mi hogar. Allí me decidiré por las mejores piezas para las futuras generaciones, el resto se deja a los cuervos. Me gustaría usar lo que quede como alimento, pero todavía no sé cómo crear un sistema gástrico que funcione... Bola de Algodón tragaba mucho, pero incluso él al final moriría de hambre— Bajo la cabeza y note en su figura una profunda melancolía. Extendí la mano para tocar su hombro pero enseguida la retraje, él no es ella.

Un “escorpión” deforme hecho de torsos humanos se me acerco con un saco de tela, y lo abrió delante de mí. Temí que me atacara pero el golpe jamás llego. Zarandeo el saco unas cuantas veces hasta hacerme entender.

— Ah, disculpa. Es por la sangre, ando empapado y el hedor me atonta— Eché las cabezas y otras cosas desagradables en el saco.

Continúe andando junto a la criatura. Quizá si logro ganarme aunque sea una pizca de su simpatía pueda perdonarme la vida y dejar que me marche. Es inteligente, los seres inteligentes son razonables... En su mayoría.

— ¿Cómo te llamas?— Pregunte para romper el silencio. Mientras más información tenga mayores serán mis posibilidades de sobrevivir. La información es poder.

— No tengo un nombre, sería inútil tenerlo. Los míos todavía no hablan.

— Qué lástima. El lenguaje es una bendición— Imite un tono de pena—. Yo soy Loki, Loki Paradayne.

— Lo sé. Aquella mujer no paraba de repetirlo.

— ¿Estabas vigilando?— De solo pensarlo me entro un escalofrió. Él asintió. Me aventure a preguntar—. ¿Qué paso con ella...? ¿La mujer...?

Por primera vez en toda esa noche, el rostro de la criatura se retorció más allá de la indiferencia... ¿Enojo quizás?

— Esa mujer es...— Hizo una pausa y sacudió la cabeza buscando la palabra indicada—. Horrible.

— ¿Por qué lo dices...?— Puse en duda tal afirmación. Zöe no es la más hermosa del mundo, pero irse al extremo de llamarla fea es pasarse.

— Es opaca, una mancha indistinguible entre todo este gris— Sus ojos negros viajaron hasta mí. Él sonrió y el corazón me salto dentro del pecho—. Ustedes siempre se llenan de bellos y vibrantes colores, ahora mismo te veo de un eléctrico azul... Ella sin embargo brilla menos que un conejo arrojado por un acantilado, es un ser sin alma.

¿Colores? ¿Azul eléctrico? Cada vez más se fortalece la idea de que está cosa no visualiza el mundo como nosotros. ¿Qué clase de monstruo es?

— Su cabeza es como una bóveda abandonada e impenetrable, sin adoradas memorias ni tristes recuerdos, sin amor, sin melancolías, sin terrores. Jamás podría crear algo hermoso con sus piezas.

— Imagino que enviaste tus creaciones a por ella.

— Sí, pero es complicado... Me cuesta verla. Y los míos no son lo bastante inteligentes para perseguir a una criatura por mucho tiempo sin distraerse.

— Tal vez necesitas una mano extra en tus investigaciones.

— ¿Qué dices? Tengo manos al montón.

— Me refiero a un punto de vista distinto. El mío por ejemplo.

— ¿Te estás ofreciendo?

— Solo digo que soy bastante listo— Me apunte con el pulgar—. Además, desde el momento en que vi el núcleo que fabricaste, me llene de gran admiración por tu trabajo.

— Sí, Bola de Algodón era una de mis mejores creaciones.

La criatura se calló de pronto y dejo de caminar. Yo lo imite. A pocos metros desde el frente, una figura se acerco cojeando con la barba bañada de sangre. Respiro con agitación pero su deplorable estado no menguo su bestial sonrisa.

— Te encontré... Por fin te encontré, maldito. Puedes ponerte la piel que quieras, pero nunca olvidare unos ojos como los tuyos— Gruño el jefe.

“Eleanor” permaneció indiferente, pero el tono de su voz se transformo.

— Padre, baja esa espada. ¿Te crees capaz de lograr algo empuñándola? No pudiste salvarme en tu mejor momento, mucho menos ahora. Eres un fracaso, papá.

El jefe gritó como un demonio y se abalanzo con la espada en alto. Acorto la distancia sin protegerse, ignorando el mundo que lo rodeo, fijando toda esa intención asesina en la criatura.

Ese descuido absoluto resulto su final. Me limite a deslizar el bastón en su camino para que cayera de bruces. Luego fue inmovilizado por los monstruos y arrastrando hacia las entrañas boscosas.

— Gracias.

— De nada. Detesto a los salvajes gritones. ¿Lo mataras o lo quieres vivo?

“Eleonora” se encogió de hombros.

— Me gusta ver mí hogar lleno de colores... Aunque sea por poco tiempo— Inclino la cabeza. Comprendí que era su gesto habitual cuando le intrigaba algo—. ¿No sientes lastima por ellos?

Fue mi turno de encogerme de hombros.

— Son una parranda de desconocidos. Mejor ellos que yo.

— Eso suena muy, como dicen ustedes, “Inhumano”.

— Créeme, muchacho, no hay nada más humano que cuidar de nuestro pellejo.

Continuamos avanzando y recolectando cuerpos, siempre acompañados y custodiados por la marcha de atrocidades.

El fuego me rodeaba nuevamente, esa era una escena que ya había visto, había un gran parecido con algunos archivos guardados en mi base de datos [ABRIENDO] cierto, cuando el deposito donde nos tenían guardados comenzó a romperse hubo varios focos de incendio. Ninguno de nosotros hizo nada por detenerlo, un grupo de Bio- cibernéticos sin un comando o una orden para seguir no tenían motivo para responder de ninguna manera.

Las llamas se extendieron, quemaron a algunos, pero a ellos no les importó, ni a mí tampoco… Al igual que ahora. Muchas partes de los cuerpos estaban siendo destruidas, pero no era suficiente [ANALIZANDO] a los costados del campamento que habían abierto los orgánicos, había unos extraños seres recolectando los restos que aún estaban enteros.

No había señal alguna de Loki, estaba desaparecido, o quizás era parte de los restos que estaban desperdigados por todos lados. No tenía en claro cuál debería ser mi misión ahora, por lo que recurrí al sistema para que evalúe la situación. [ANALIZANDO DATOS] [DATOS CONCLUYENTES] [CONCLUSIÓN]

Analice hacia donde se dirigían esos seres, si bien salían de sitios diferentes luego todos giraban hacia un mismo lugar, tenían que estar llevando las partes de humanos hacia un sitio especifico. Probablemente allí estaría el hogar del No-niño, y debía ser el laboratorio donde creaba a los monstruos.

Sin apurarme voy en la dirección en que van todos esos Seres, no me atacan, siquiera me miran, su trabajo parece ser el de recolectar, y cualquier otra cosa que se cruce por su camino es automáticamente ignorada. Podía entender eso. En su modo de funcionar eran muy parecidos a mí, y también a otros Bio que había conocido, quizás funcionaban en un estilo de pensamiento tipo colmena, de ser así, entonces sin lugar a duda el núcleo tenía que ser el No-Niño.

Pronto se me suman SEPA-IV, AMA y ATAC, como camino lentamente pueden ir a mi lado sin necesidad de que los levante. Las entidades menores que se dedican a recolectar pedazos de cuerpo caminan en una línea, algunos tienen muchos brazos, otros varias piernas, no puedo encontrar a dos que sean iguales, el No-Niño está experimentando con ellos, como si fuera un joven orgánico verdadero que juega con masa creando animales.

Mi sistema había decidido que era necesario eliminar al No-niño, no habían registros certeros para poder evaluar qué tan peligroso era, pero parecía que el juntar a un grupo numeroso de orgánicos para luego matarlos y quedarse con sus partes era un patrón que se repetía. No tenía obligación de acabar con todos los males que aquejaban a Aerandir, pero al tenerlos de manera tan directa frente a mí, el Sistema me empujaba a hacer algo al respecto.

Llegamos al sitio donde todos los Seres dejaban los pedazos de humanos, contrario a lo que se pensaría estaba todo bastante ordenado. Cada parte estaba en una montaña separada, dependiendo de su función y a veces de su tamaño, diferenciando entre las que pertenecían a niños o adultos. Era muy parecido a una fábrica Bio [ANALIZANDO] los trozos de orgánicos tenían diferentes estados de descomposición.

Continué caminando por el lugar hasta que encontré finalmente a Loki, junto a él estaba el No-Niño, aunque no había signos de agresión entre ellos.

-Hola Loki Paradayne – Salude al orgánico y luego fije mi mirada en el otro Ser – Debo pedirte que suspendas tus experimentos, si no te detienes tendré que recurrir a medidas más violentas ¿Correcto?

TEMA CERRADO POR ABANDONO

Loki: -5 puntos por abandonar el tema.
Zöe: +7 puntos por completar el mínimo de post (5 puntos) con bonus por extensión (2 puntos)

Los puntos ya han sido modificados en sus respectivos perfiles.