[Trabajo] Llamado de auxilio
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[Trabajo] Llamado de auxilio
No cabía en mi tanta felicidad por la recompensa obtenida en el trabajo anterior, aunque pudo haber sido mejor la paga, sin embargo aprendí mucho y el dinero me alcanzó para comprar la armadura ligera que llevaba puesta y aprender mi primera runa, qué estaba dibujada en una hoja en el interior de mi bolsillo.
La sonrisa en mi rostro me delataba, así como las ganas de completar cuanto antes mi siguiente trabajo"¿Como estará Klaus?" Venían pensamientos vagos a mi cabeza, ambos habíamos salido heridos pero indiscutiblemente el se llevó el premio gordo en cuanto a daños, después de todo se lo merecía Uno no puede andar por ahí matando gente a diestra y siniestra ¡No que va! Reí sarcásticamente mientras pateaba una piedra con cada paso que daba, jugando y platicando con ella.
Las personas volteaban a verme, algunas pensaban que estaba loco mientras que otras admiraban la armadura que llevaba, era estilizada, si que tenía buen gusto, aparentaba ser mas cara de lo que realmente me había costado.
Dejando atrás el bosque solo se contemplaban dunas por doquier, lo que me indicaba que iba por el camino correcto.
Después de un rato tenía frente a mi la entrada a la ciudad de cristal, poseía un muro alto en su entrada así como edificaciones que se divisaban a lo lejos de distintas formas, unas más grandes y mejor elaboradas qué otras. Decidí entrar y conocer un poco más sobre el sitio, después de todo para eso estaba quería conocer mundo y qué mejor manera que visitando los pueblos aledaños a los trabajos que conseguía.
Los guardias permitían la entrada a personas de toda clase, no hubo ningún tipo de drama para permitirme el acceso. Una vez en el interior de la ciudad caminé hasta un tablón extenso donde habían "trabajos" e información sobre la urbe.
Me sentí tentado a tomar uno de las labores que ofrecían pero no, extendí mi mano y cogí un papel que exponía:
Roilkat es una ciudad que se encuentra en la zona sudoeste de Verisar, rodeada por dunas, de donde obtienen el cristal. Su principal sustento económico se basa en el vidrio, el cristal y las joyas.
Y fue cuando entendí que seguramente los curros allí eran bien pagados, intuí en una qué o los trabajos eran de carga y desmonta en los sitios donde producían los cristales o eran de escoltas, pues las personas que producían las alhajas seguramente nadaban en dinero y nunca faltaba un vivo que quería hacerse con la fortuna de los demás.
En aquella guía de la ciudad había una especie de boceto que señalaba los puntos de interés de aquella metrópoli.
Me fijé inmediatamente en el museo de antigüedades, me sentí tentado por tomar uno de los trabajos al azar pero mi experiencia me decía que no, tenía que moverme mejor así que opté por dejar eso para luego y me encaminé hacia el museo.
La entrada era libre, no había que pagar nada, sin embargo te hacían pasar por una especie de escáner de objetos de metal, ignoraba totalmente qué era eso y llevaba como siempre la capa, crucé el aparato y este hizo un gran estruendo.
¡Caballero deténgase! Gritó un guardia al otro extremo de la sala, el lugar no estaba tan custodiado pues todos conocían las reglas del mismo.
No puede ingresar con objetos de metal Señaló una caja con una etiqueta donde había que dejar las pertenencias que no cumplían con el protocolo.
Saqué el arco debajo de mi capa y este llamó la atención de todos pues era hecho de un material no solo de hierro sino con aleaciones diferentes del mismo para hacerlo un tanto flexible y por lo tanto plegarse, además dejé el carcaj con las 25 flechas.
Ya puede entrar Dijo mas calmado el centinela retirándose hasta el otro lado de la habitación, confiaba en que cuidarían mis cosas e inmediatamente entré y una de las piezas llamó mi atención, era una breve explicación de la elaboración de un diamante, mostrando desde el inicio una piedra en bruto como el génesis de un proceso de construcción para llegar a un nivel épico.
Saintus L Spell
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Re: [Trabajo] Llamado de auxilio
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El sol intercambio su lugar por la espléndida luna, la noche tomo el lugar en la pista del baile, la oscuridad era la que estaba reinando en las penínsulas de Verisar, para ser más claro en la ciudad de Roilkat, después de haber terminado mi misión en las haciendas de Don Hector, pues seguro había algún trabajo por estos lares dónde emanaba la riqueza y el dinero gracias a la producción de cristales, joyas y demás objetos caros que funcionaban como la economía principal de esta ciudad.
Aun no estaba totalmente rehabilitado de aquella paliza que recibí en manos de los súbditos del brujo Sazek, pero no puedo quejarme mi última noche en esa hacienda fue esplendida estar entre las sabanas con una mujer que rebosaba por su belleza por todo su ser además del dinero que gane y gaste al mismo tiempo para modificar mi equipamiento, ahora estaba en la espera de obtener un nuevo trabajo con el cual ganara más dinero que la última vez.
Me prestaron un viejo caballo que estaba a últimos días de estirar su pata para que me transportara hasta su último aliento un gesto de agradecimiento de Don Hector, por lo mismo tarde algunos días en terminar de llegar a Roilkat por el paso que iba la yegua, pero finalmente había llegado a las puertas del reino.
Era libre el tránsito entre las razas existentes, pero aun así los guardias no andaban con juegos pues como ante nombrado aquí se movía mucho dinero así que todo era una red conectada con la familia de los Roiland quienes eran los gobernante de esta formable ciudad de comercio.
Sentí como el frió recorría todo mi cuerpo, era raro sentir una sensación así proviniéndose de mí, era como si alguien estuviera a mi asecho, observando cada movimiento, cada respiración que daba para solo esperar el momento justo y atraparme, pero seguro solo era cosas mía por la oscuridad lo cual solo agite mi cabeza a los lados y me despeje de toda esos pensamientos invasivos sin dejar en cuenta de las criaturas que podrían aparecer en la oscuridad.
Me desmonte del caballo, dejando este amarrado en los barrotes de una ventana de alguna de las tantas casas que tenía la ciudad, apenas se podía ver gracias a las antorchas que estaban distribuidas de forma estratégicas para alumbrar todo el poblado cuando cae la noche, incluso habían guardias que paseaban las calles encima de sus corceles, pero sin molestar o detener a las personas que estuvieran caminando en la oscura noche.
Camine varias calles arriba intentando detallar cada parte de la ciudad, las edificaciones tan perfectas con detalles de cristales en cada ladrillo que contenían los grandes castillos que rodeaban la ciudad, seguro pertenencia a los dueños de negocios de alto potencial.
La oscuridad trae lo peor ciertamente. – Deduje en voz alta mientras seguía mi caminata cuesta arriba de la montaña. En eso tienes razón. – Respondió alguien detrás de mí, no dude en echar un reojo a mis espaldas sin detener mi caminata. Sí, como tú que andas detrás de las personas, es algo de mala vibra. – Alzando un poco mi ceja y tensando mi cuerpo ante la persona que estaba a mis espaldas. No es para ponerse así, es divertido asustar a los viejos. – Dijo la voz para ponerse a la luz del fuego y dar a conocer que era un niño que ahora estaba a mi lado. Un crío andando de noche sin miedo a la oscuridad, seguro eres parte de ella. – Sonreí sarcásticamente para dejar relajar mi cuerpo.
El niño seguía caminando a mí alrededor pero ya no emitía alguna palabra, ciertamente seguro era un alma que no había encontrado el camino hacia el Valhalla y rondaba por la tierra hasta cumplir su deseo que ciertamente no sabría cuál era y tampoco era de mi interés. Seguí caminando ya que no me molestaba la presencia del mismo, dándome cuenta que atravesaba a las personas sin que ellos se dieran cuenta, deduciendo que solo se le podía ver si el mismo lo permitía.
Termine por llegar hasta un local, donde sacudí mis zapatos uno con el otro deshaciéndome de la tierra y poder ingresar al local que estaba en perfecta limpieza, las losas del mismo eran de un material resistente del cristal, completa de espejos que no dejaban lugar para esconder algo sin que alguien lo viera, mas al fondo había un tablero donde estaban ofertas del trabajo que no se habían realizado.
- Llamado de Auxilio:
- Ansur escribió:Llamada de auxilio
Soy un hombre adinerado que no ha hecho daño a nadie y que ha amasado una gran fortuna limpiamente… o tal vez no tanto, pero recientemente he recibido una seria amenaza de muerte contra mis socios y contra mí, todos ellos han sido asesinados justo en los días que fueron anunciadas sus muertes y esta noche, finalmente es mi turno.
Requiero con urgencia algunos guardaespaldas que puedan evitar tan fatídico destino a una persona tan noble y generosa como he sido yo, si me ayudas a sobrevivir serás bien recompensado.
Los crímenes suelen ocurrir bajo el velo de la noche, por lo que será más fácil estar preparados y alerta, juro que no estoy ocultando información alguna, jamás he hecho mal a nadie…Lord August “El Cruel”
Mantuve mi mirada saltando entre varias ofertas hasta que una llamo mi atención para tomarla del tablero y le estire hacia un lado para que el niño la leyera, Parece divertido, por eso te acompañare. – Asintió su cabeza a lo cual también estaba de acuerdo con él, salimos del aquel establecimiento para dirigirnos hasta donde estaba situada la casa del magneto.
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- Niño fantasma:
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Sajin W
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Re: [Trabajo] Llamado de auxilio
Si había alguna profesión que estudiara las piedras o el suelo no era lo mio, sin embargo el proceso por el cual pasaba un diamante siendo este su resultado final era formidable, no terminaba de superarlo, me daba vueltas una y otra vez y es qué ¿A quien no? Un diamante era un objeto muy costoso ¿Pero parte de una simple roca? Un proceso que por más que tratara de pensar en él me parecía magnífico.
"¿Entonces un herrero podría forjar algo único a través del hierro no? ¿Un curtidor sería capaz de hacer maravillas con el cuero?"- Hice una pausa mientras observaba todos y cada uno de los elementos allí ubicados.
Podría aplicar la runa de sombras en varias de estas piezas y causar pánico- Reí de la manera más estúpida, tanto que terminé ahogandome con mi saliva, sin percatarme de que había un niño cerca, y que se asustó al verme hablar solo de esa manera.
Decidí alejarme del pequeñin y desplazarme hasta el final de la sala, donde yacía un una cúpula de vidrio una joya enorme, medía alrededor de 2metros de alto por unos cincuenta centímetros de ancho, era majestuosa, brillaba con el reflejo que emitían los rayos del sol cuando entraban por el ajimez, era en resumen majestuoso.
En mi mente comenzaba a rondar el proceso por el cual una simple roca pasaba a ser un diamante luego de un arduo proceso.
Y así era yo una roca que si trazaba un horizonte podría llegar a brillar bastante y a obtener un valor inigualable.
Tanto pensar me hizo recordar que los trabajos estaban a punto de ser quitados de la lista, pues cada trabajo tenía un tiempo para ser resuelto y tras ver que nadie se interesaba en alguno en específico estos simplemente eran suprimidos. Tras una mediana caminata llegué al tablero y para mí sorpresa no había nada, pero estaba seguro de que preguntando podría ir hasta el refugio de la persona que estaba acechada, después de todo hasta en las urbes de más alto estirpe también habían fisgones además ¿Quién no estaría enterado de la muerte de todos esos sujetos? Preguntar era la clave, después de todo preguntando se llega a Sandorai
Aquella metrópoli estaba dividida por sectores, al parecer el trabajo de minería estaba regido por alguna clase de "ministerio u organización" que tenía bajo control, existían "productores" independientes que trabajaban de manera "encubierta" pues no querían ser parte de un tercerizado cuando ellos eran quienes ponían sus tierras para ser explotadas, las personas para trabajar y además pagaban no solo los impuestos sino el sueldo de quienes allí laboraban.
Todo eso lo había leido en uno de los pergaminos que tomé de la zona olvidada, se supone que allí no entraba nadie pero como siempre, andaba buscando problemas.
Se decía que existía una familia principal que seguramente era quienes querían tener todo bajo su poder. Inmediatamente lo relacioné con las tribalidades, el patriarcado y las familias dentro de la raza. Pude entender un poco mejor gracias a aquello.
La noche ya amenazaba, según la carta que leí anteriormente era el día de la acción y no solo eso, no tenía idea de qué tenía que hacer ni a dónde dirigirme. Habían zonas en las qué la oscuridad acechaba más que en otras y era allí donde desaparecía de la vista de cualquiera, sentía que me miraban, mi cuerpo era invadido por los escalofríos hasta que sentí una presencia, observé al mismo niño que me veía anteriormente hablar sobre las runas, el que se escondió creyendo que no lo veía.
¡Sal! ¡Qué ya te vi! -Grité haciendo señas para que se acercara.
El niño observó la runa que estaba dibujada en mi armadura y sonrío, la señalaba y emitía sonidos que no se percibían, tal parece que el diminuto humano no tenía lengua, pero cargaba una mochila, de donde sacó un peto, que comenzó a señalar desviando su dedo hasta la runa en mi armadura para luego hacer lo mismo con la suya, tal parece que aquél niño quería que le enseñara la runa, tenía pinta de estar hambriento, olía un poco mal y estaba fangoso.
Te voy a entregar un papel que significará más que lo que tiene plasmado Me agaché para estar a su altura otorgándole el pergamino donde la runa estaba dibujada.- Te estoy entregando un futuro, una profesión- Agregué sonriendo y alborotando su cabello, pero aquel niño no me dejaría irme con las manos vacías, también me entregó un documento y se fue corriendo entre las dunas, aquello era más bien una hoja, un duplicado del trabajo que anteriormente ví en el tablero de misiones.
Parece ser que aquél niño tenía mas rato viéndome del que pensaba y algo que ignoraba era que los tableros vislumbraban los trabajos principales guardando copias de estos, detrás de la hoja estaba la dirección del sitio al qué tenía que ir a prestar mis servicios como escolta.
Saintus L Spell
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Re: [Trabajo] Llamado de auxilio
Cuéntame de donde provienes. – Pregunto el niño poniendo una cara de duda ante mí, Muy lejos de aquí, la verdad es la primera vez que piso acá, y tú porque te encuentras todavía en la tierra. –Dije mientras seguía caminando cuesta arriba para poder llegar hasta la mansión, No lo sé, estaba durmiendo y luego desperté entre cenizas, alguien había quemado mi hogar conmigo adentro aparte de mis padres. ]– Con voz baja respondió el muchacho, viendo en su rostro tristeza al no haber partido con sus padres al Valhalla. Tranquilo, pronto te reunirás con ellos. – Respondí con firmeza, intentando sonreír ante al niño para hacerle sentir mejor.
Las calles eran angostas, incluso empinadas haciendo forzoso subir corriendo, la poco luz también jugaba en contra haciendo que no pudieras percatarte si había alguien en una esquina o siguiéndote, cada paso que daba hacia la luz era como cinco a mi espalda que se oscurecía todo en segundos, eso no me preocupaba, había estado en lugares muchos peores para solo sentir pánico por la oscuridad. El niño desaparecía y aparecía constantemente a mi alrededor simulando un juego conmigo, incluso atravesaba mi cuerpo en varias ocasiones intentando asustarme, claro, es un niño no era esperarse menos de él.
Se terminó el ultimo escalón de la calle dejándonos enfrente de una mansión con un estilo tétrico incluso viejo pero claro construido con los mejores materiales que se podría encontrar en Aerandir, además de la manos de obra de un grupo famosos de Elfos que era conocidos como carpinteros y demás profesiones.
La entrada estaba custodiada por dos guardias con sus respectivas lanzas e escudo, encima de ellos se encontraba un balcón que daba vista hacia toda el paisaje Roilkat, contaba en medio de la edificaciones una torre de vigilancia donde se situaban al menos dos arqueros apuntándome preparados para soltar la flecha si intentaba hacer algo. Más atrás había otra entrada a la casa que seguro llevaba alguna bodega que utilizaban como almacén estaba solo estaba protegida por un guardia, aunque adentro dejaban suelto cuatro lobos por si alguien despistaba a los arqueros.
Aquella asombrosa edificación era un castillo pequeño bien custodiado, me preguntaba dentro de mí para que necesitaban a un guardaespaldas, teniendo a tanto hombres a sus disposiciones, eso debe decir que la amenaza supera a estos hombres y necesitaban de alguien más especial para defender la vida al magneto.
Entrare primero, nos vemos adentro Viejo. – Exclamo con risa el niño para traspasar las paredes de la casa, estire mi brazo intentando detenerlo pero cierto era un fantasma nadie lo veía, los soldados apuntaron sus lanzas hacia mí en forma de guardia.
Identifíquese o retírese de la zona. – Exclamo unos de los guardias apuntado su lanza firme hacia mi cuerpo, Soy Klaus un guerrero dragón, vengo por el trabajo. – Exclame con orgullo poniendo mi mano en mi pecho para reafirmar lo que decía. Debes esperar hasta que den la orden para tu ingreso. – Dijo el otro guardia, mirándome disgustado por la apariencia que llevaba. Al mismo le pique el ojo con un tono burlón, para después rascarme los huevos enfrente de él y se disgustara más.
Pero una presencia aparecía encima del balcón diciendo en un tono calmado y sereno: Si vienes a defender mi vida, debo asegurarme que eres capaz de eso, ¿No? – Expuso el magneto haciendo presente ante mí, retándome a que le demostrara mis habilidades.
Tensé mi cuerpo a lo cual me desplace como una serpiente entre los dos guardias, tomando un poco más atrás de las puntas de ambas armas, para darle un jalón hacia adelante y hacia atrás, causando que estos perdieran el equilibrio y descendieran hacia el suelo, ante que esto tocaran el suelo gire en mi propio eje haciendo que giraran en el aire para después simplemente soltar las armas y quedaran estrellados entre los pilares que sostenían aquel balcón.
Eso es suficiente, majestad. – Dije mientras un bostezo se escapó accidentalmente, mientras los guardias se recomponían de aquellos golpes que les agarro por sorpresa, el anciano aplaudió viendo mi demostración sin darse cuenta que al lado de él se encontraba el niño también aplaudiendo, pero sin dejarme entrar todavía a la vivienda.
Esperaremos a ver si alguien mas viene por el trabajo, para sentirme mas seguro. - Aclaro con autoridad, para que sus arqueros apuntaran fijamente a mi cabeza para que no me moviera de mi lugar, al ver que pude dejar des habilitado a sus dos guardias
Las calles eran angostas, incluso empinadas haciendo forzoso subir corriendo, la poco luz también jugaba en contra haciendo que no pudieras percatarte si había alguien en una esquina o siguiéndote, cada paso que daba hacia la luz era como cinco a mi espalda que se oscurecía todo en segundos, eso no me preocupaba, había estado en lugares muchos peores para solo sentir pánico por la oscuridad. El niño desaparecía y aparecía constantemente a mi alrededor simulando un juego conmigo, incluso atravesaba mi cuerpo en varias ocasiones intentando asustarme, claro, es un niño no era esperarse menos de él.
Se terminó el ultimo escalón de la calle dejándonos enfrente de una mansión con un estilo tétrico incluso viejo pero claro construido con los mejores materiales que se podría encontrar en Aerandir, además de la manos de obra de un grupo famosos de Elfos que era conocidos como carpinteros y demás profesiones.
La entrada estaba custodiada por dos guardias con sus respectivas lanzas e escudo, encima de ellos se encontraba un balcón que daba vista hacia toda el paisaje Roilkat, contaba en medio de la edificaciones una torre de vigilancia donde se situaban al menos dos arqueros apuntándome preparados para soltar la flecha si intentaba hacer algo. Más atrás había otra entrada a la casa que seguro llevaba alguna bodega que utilizaban como almacén estaba solo estaba protegida por un guardia, aunque adentro dejaban suelto cuatro lobos por si alguien despistaba a los arqueros.
- Edificacion:
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Aquella asombrosa edificación era un castillo pequeño bien custodiado, me preguntaba dentro de mí para que necesitaban a un guardaespaldas, teniendo a tanto hombres a sus disposiciones, eso debe decir que la amenaza supera a estos hombres y necesitaban de alguien más especial para defender la vida al magneto.
Entrare primero, nos vemos adentro Viejo. – Exclamo con risa el niño para traspasar las paredes de la casa, estire mi brazo intentando detenerlo pero cierto era un fantasma nadie lo veía, los soldados apuntaron sus lanzas hacia mí en forma de guardia.
Identifíquese o retírese de la zona. – Exclamo unos de los guardias apuntado su lanza firme hacia mi cuerpo, Soy Klaus un guerrero dragón, vengo por el trabajo. – Exclame con orgullo poniendo mi mano en mi pecho para reafirmar lo que decía. Debes esperar hasta que den la orden para tu ingreso. – Dijo el otro guardia, mirándome disgustado por la apariencia que llevaba. Al mismo le pique el ojo con un tono burlón, para después rascarme los huevos enfrente de él y se disgustara más.
Pero una presencia aparecía encima del balcón diciendo en un tono calmado y sereno: Si vienes a defender mi vida, debo asegurarme que eres capaz de eso, ¿No? – Expuso el magneto haciendo presente ante mí, retándome a que le demostrara mis habilidades.
Tensé mi cuerpo a lo cual me desplace como una serpiente entre los dos guardias, tomando un poco más atrás de las puntas de ambas armas, para darle un jalón hacia adelante y hacia atrás, causando que estos perdieran el equilibrio y descendieran hacia el suelo, ante que esto tocaran el suelo gire en mi propio eje haciendo que giraran en el aire para después simplemente soltar las armas y quedaran estrellados entre los pilares que sostenían aquel balcón.
Eso es suficiente, majestad. – Dije mientras un bostezo se escapó accidentalmente, mientras los guardias se recomponían de aquellos golpes que les agarro por sorpresa, el anciano aplaudió viendo mi demostración sin darse cuenta que al lado de él se encontraba el niño también aplaudiendo, pero sin dejarme entrar todavía a la vivienda.
Esperaremos a ver si alguien mas viene por el trabajo, para sentirme mas seguro. - Aclaro con autoridad, para que sus arqueros apuntaran fijamente a mi cabeza para que no me moviera de mi lugar, al ver que pude dejar des habilitado a sus dos guardias
Sajin W
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Re: [Trabajo] Llamado de auxilio
Tenía que darme prisa o el sujeto que había escrito la carta sería asesinado, mientras avanzaba con apuro analizaba todo lo que había leído acerca del mecanismo de producción en aquellas tierras, según entendía se trataba de un régimen o una especie de conducta contraproducente para los dueños de aquellos terrenos.
A lo lejos se divisaba una figura de lo que parecía ser un pequeño castillo antiguo, mientras prosperaba en el afán de llegar con prisa noté que las personas de aquél lugar tenían conocimiento de lo que estaba por ocurrir, mientras más me adelantaba con más frecuencias veía a las cabezas de los hogares cerrar las ventanas y apagar las lámparas que alumbraban sus viviendas.
Una vez frente a los guardias principales me anuncié como el nuevo escolta, a lo que no se opusieron, evité entrar muy deprisa para darme cuenta que Klaus estaba dentro, no sabía de qué manera se las apañaba para terminar siempre encontrandome, habían dos sujetos reducidos en el suelo, desde el balcón se asomaba un sujeto de caballera ausente, según deduje el autor de la carta, pues desde lo alto miraba a los demás como si no fuesen sus iguales.
El edificio estaba construido con materiales como nunca antes había visto en las zonas que visité en todo Aerandir, sin duda tenían acceso a minerales preciosos y tal vez mis sospechas eran ciertas.
Una vez dentro la brisa sopló fuertemente cerrando las puertas, cosa que no inmutó ni a los arqueros ni mucho menos a Magneto, por lo que aproveché aquella completa oscuridad producto de las antorchas apagadas por la brisa para trepar entre los muros y quedar justo detrás del sujeto de avanzada edad.
Deprisa los guardias de la entrada corrieron a encender las antorchas y desde ese momento podían verme detrás del empleador, esparciendo mi aliento sobre su cabeza para frotar con mi capa, lustrando aquel coco para hacerle brillar con intensidad, resultado a aquello gritó y dió un paso a un costado alejandose de mí.
Los elfos me apuntaron pero sabían que no tenían que disparar.
- Ambos seremos sus escoltas - La runa en mi armadura funcionaba bien, en aquél lugar oscuro no pudieron verme, estaba frente al dueño del lugar, mi amigo estaba cerca y pronto comenzaría la acción.
No pude evitar observar que Magneto llevaba un anillo con una piedra bastante grande, se trataba de un diamante perfectamente cortado, mis sospechas eran ciertas, aquella piedra no estaba cortada como de costumbre sino que tenía un diseño especial.
- ¿Tiene usted una mina clandestina? - Fuí preciso y lo dejé al descubierto inmediatamente, no era curiosidad que entre todas las edificaciones esta era la mas costosa, además le daban un aspecto "antiguo" para hacer creer que era una más entre tantas pero no era así, ese lugar era especial.
- Vaya vaya, eres un jovencito bien perspicaz - Comentó entre dientes el soberano.
Su rostro denotaba disgusto, había sido descubierto el motivo principal por el cual estaban detrás de su cabeza, esta vez le dejé bien claro a Klaus que no era como un elfo entrenando y sin rumbo que disparaba flechas al aire, sino que mas bien sabía en qué dirección apuntar.
- Capaz algunos creerían que se trata de una deuda, otros pensarán que es una pelea por territorios - Espeté con voz firme, llevando ambas manos hacia mi espalda para cruzarlas en aquél lugar.
- La familia principal quiere hacerse con todo el poder, para ellos el dinero no es problema, asi que una deuda ¿Con qué sentido? Si son dueños de las mayores minas de todo Roilkat Hice una pausa, sentandome en el trono del maganate, mis palabras iban una tras otra directo hacia su ego - Pero.. -Continue con la metralla de oraciones -¡No son dueños de todo!-
Magneto sabía a lo que me refería y que estaba descubierto.
Lo que ninguno de nosotros sabíamos era que debajo de nosotros habían minas donde explotaban el oficio de la tan desea ocupación.
A lo lejos se divisaba una figura de lo que parecía ser un pequeño castillo antiguo, mientras prosperaba en el afán de llegar con prisa noté que las personas de aquél lugar tenían conocimiento de lo que estaba por ocurrir, mientras más me adelantaba con más frecuencias veía a las cabezas de los hogares cerrar las ventanas y apagar las lámparas que alumbraban sus viviendas.
Una vez frente a los guardias principales me anuncié como el nuevo escolta, a lo que no se opusieron, evité entrar muy deprisa para darme cuenta que Klaus estaba dentro, no sabía de qué manera se las apañaba para terminar siempre encontrandome, habían dos sujetos reducidos en el suelo, desde el balcón se asomaba un sujeto de caballera ausente, según deduje el autor de la carta, pues desde lo alto miraba a los demás como si no fuesen sus iguales.
El edificio estaba construido con materiales como nunca antes había visto en las zonas que visité en todo Aerandir, sin duda tenían acceso a minerales preciosos y tal vez mis sospechas eran ciertas.
Una vez dentro la brisa sopló fuertemente cerrando las puertas, cosa que no inmutó ni a los arqueros ni mucho menos a Magneto, por lo que aproveché aquella completa oscuridad producto de las antorchas apagadas por la brisa para trepar entre los muros y quedar justo detrás del sujeto de avanzada edad.
Deprisa los guardias de la entrada corrieron a encender las antorchas y desde ese momento podían verme detrás del empleador, esparciendo mi aliento sobre su cabeza para frotar con mi capa, lustrando aquel coco para hacerle brillar con intensidad, resultado a aquello gritó y dió un paso a un costado alejandose de mí.
Los elfos me apuntaron pero sabían que no tenían que disparar.
- Ambos seremos sus escoltas - La runa en mi armadura funcionaba bien, en aquél lugar oscuro no pudieron verme, estaba frente al dueño del lugar, mi amigo estaba cerca y pronto comenzaría la acción.
No pude evitar observar que Magneto llevaba un anillo con una piedra bastante grande, se trataba de un diamante perfectamente cortado, mis sospechas eran ciertas, aquella piedra no estaba cortada como de costumbre sino que tenía un diseño especial.
- ¿Tiene usted una mina clandestina? - Fuí preciso y lo dejé al descubierto inmediatamente, no era curiosidad que entre todas las edificaciones esta era la mas costosa, además le daban un aspecto "antiguo" para hacer creer que era una más entre tantas pero no era así, ese lugar era especial.
- Vaya vaya, eres un jovencito bien perspicaz - Comentó entre dientes el soberano.
Su rostro denotaba disgusto, había sido descubierto el motivo principal por el cual estaban detrás de su cabeza, esta vez le dejé bien claro a Klaus que no era como un elfo entrenando y sin rumbo que disparaba flechas al aire, sino que mas bien sabía en qué dirección apuntar.
- Capaz algunos creerían que se trata de una deuda, otros pensarán que es una pelea por territorios - Espeté con voz firme, llevando ambas manos hacia mi espalda para cruzarlas en aquél lugar.
- La familia principal quiere hacerse con todo el poder, para ellos el dinero no es problema, asi que una deuda ¿Con qué sentido? Si son dueños de las mayores minas de todo Roilkat Hice una pausa, sentandome en el trono del maganate, mis palabras iban una tras otra directo hacia su ego - Pero.. -Continue con la metralla de oraciones -¡No son dueños de todo!-
Magneto sabía a lo que me refería y que estaba descubierto.
Lo que ninguno de nosotros sabíamos era que debajo de nosotros habían minas donde explotaban el oficio de la tan desea ocupación.
Off: Primera complicación resuelta , directamente en la carta el magnate da a suponer que no ha hecho nada malo que su fortuna es de buena procedencia pero se dedica a explotar minas que están en su propiedad sin autorización de la ciudad [(venga tío que no está bien visto) así como tampoco que quieran tener al pueblo sobre una dictadura y no dejar a la gente emprender].
Saintus L Spell
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Re: [Trabajo] Llamado de auxilio
La noche estaba iniciando incluso se veía que nunca tendría fin, para mi sorpresa estábamos dentro de la edificación algo elegante, algunas cuatro habitaciones para los invitados, dos salas repletas de espejos, mesas, muebles, en la segunda planta era donde nos encontrábamos que era el despacho de Magneto, dando paso también a la plataforma que daba vista a toda la ciudad, constituía de dos puertas de cristales, la puerta principal estaba reforzada con metal se veía que tenía precaución cuando salía de su hogar, no confiaba en los guardias ni mucho menos en los sirvientes que les servían.
Ambos seremos sus escoltas. – Una voz afeminada se hacía aparición entre las sombras, mis oídos reconocían esa voz solo habían alguien tan afeminado y solo podría ser Saintus, que después se dejó ver, Oh bienvenido mi pare jita, has tardado en llegar. – Me reí y con mucho aprecio salude a Saintus, era agradable tenerlo nuevamente como compañero, aunque este desde que llego no dejo de soltar preguntas como si fueran flechas directas al empleador.
Vaya, vaya eres perspicaz jovencito. – Comento entre diente el soberano, entonces afirmaba que todo su dinero no venía de un ingreso limpio, provenían también de algo que todavía no sabíamos o no teníamos claro en su totalidad, la idea de Saintus era una posibilidad pero no podríamos confirmar esta, tampoco teníamos prueba de lo mismo e tampoco era de nuestra importancia nuestro deber era proteger a Magneto no hacerles preguntas.
Estamos acá para que no muera Saintus, no somos la guardia ni nada. – Refuté con enojo ante Saintus, dejando ver claramente mi desacuerdo ante tantas preguntas que le hacía al empleador. Mientras nos pague muy bien, no tendré problema en protegerlo. – Deje claro mis intenciones con esas palabras. Tome asiento en uno de los delicados sofás que estaban dentro de la habitación acompañado del niño que también se sentó al lado de mí, revelo su presencia ante Saintus dejándose ver claramente sin preocupación alguna.
Creo que servirás de mucho acá. – Voltea a mi derecha para decírselo al niño, aunque claro para ellos no había nadie a mi derecha y solo estaba hablando solo como si me faltara algún tornillo, aunque Magneto no le dio importancia, solo le importaba sobrevivir esta noche y no ser otro muerto como sus socios.
Si alguien quiere matarlo, es porque alguien se enojó, pregúntense quien podría ser su enemigo. – Dije mientras le veía directamente a los ojos al empleador, acomodándome en el sofá para descansar un poco de todo el viaje que tuve que hacer para lograr llegar.
Realmente no se quien estaría interesado en asesinar a los propietarios de las empresas que le dan de comer a toda la ciudad. – Respondió sin titubeo, dándome entender que este sujeto también era un anarquista al referirse así de las personas de clase baja, por razón alguien quiere cortarles el cuello a todos estos sujetos.
Asentí con mi cabeza y guarde silencio ante la respuesta del empleador, mientras que los guardias seguían vigilando las afueras y alrededores del castillo sin nada nuevo que reportar, todavía no sucedía nada.
OFFROL
[1] Encontrar información de donde proviene el dinero Ilegal de Magneto, para explicar por que quieren asesinarlos, aunque esto no sera tarea fácil de averiguar, ya que tiene bien escondido cualquier secretos o pista que queramos conseguir.
Ambos seremos sus escoltas. – Una voz afeminada se hacía aparición entre las sombras, mis oídos reconocían esa voz solo habían alguien tan afeminado y solo podría ser Saintus, que después se dejó ver, Oh bienvenido mi pare jita, has tardado en llegar. – Me reí y con mucho aprecio salude a Saintus, era agradable tenerlo nuevamente como compañero, aunque este desde que llego no dejo de soltar preguntas como si fueran flechas directas al empleador.
Vaya, vaya eres perspicaz jovencito. – Comento entre diente el soberano, entonces afirmaba que todo su dinero no venía de un ingreso limpio, provenían también de algo que todavía no sabíamos o no teníamos claro en su totalidad, la idea de Saintus era una posibilidad pero no podríamos confirmar esta, tampoco teníamos prueba de lo mismo e tampoco era de nuestra importancia nuestro deber era proteger a Magneto no hacerles preguntas.
Estamos acá para que no muera Saintus, no somos la guardia ni nada. – Refuté con enojo ante Saintus, dejando ver claramente mi desacuerdo ante tantas preguntas que le hacía al empleador. Mientras nos pague muy bien, no tendré problema en protegerlo. – Deje claro mis intenciones con esas palabras. Tome asiento en uno de los delicados sofás que estaban dentro de la habitación acompañado del niño que también se sentó al lado de mí, revelo su presencia ante Saintus dejándose ver claramente sin preocupación alguna.
Creo que servirás de mucho acá. – Voltea a mi derecha para decírselo al niño, aunque claro para ellos no había nadie a mi derecha y solo estaba hablando solo como si me faltara algún tornillo, aunque Magneto no le dio importancia, solo le importaba sobrevivir esta noche y no ser otro muerto como sus socios.
Si alguien quiere matarlo, es porque alguien se enojó, pregúntense quien podría ser su enemigo. – Dije mientras le veía directamente a los ojos al empleador, acomodándome en el sofá para descansar un poco de todo el viaje que tuve que hacer para lograr llegar.
Realmente no se quien estaría interesado en asesinar a los propietarios de las empresas que le dan de comer a toda la ciudad. – Respondió sin titubeo, dándome entender que este sujeto también era un anarquista al referirse así de las personas de clase baja, por razón alguien quiere cortarles el cuello a todos estos sujetos.
Asentí con mi cabeza y guarde silencio ante la respuesta del empleador, mientras que los guardias seguían vigilando las afueras y alrededores del castillo sin nada nuevo que reportar, todavía no sucedía nada.
OFFROL
[1] Encontrar información de donde proviene el dinero Ilegal de Magneto, para explicar por que quieren asesinarlos, aunque esto no sera tarea fácil de averiguar, ya que tiene bien escondido cualquier secretos o pista que queramos conseguir.
Sajin W
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Re: [Trabajo] Llamado de auxilio
Saludé a mi compañero con la misma amabilidad qué el demostrando que me contentaba reencontrarlo en la vía.
Escuché aquello que me causó ruido y no interrumpí, dejé que se expresara para luego observar como tomaba asiento, justo en ese momento intervine- Tengo que confirmar mis sospechas, que casi estoy seguro son ciertas y si no te importa a mi sí - Refuté entregándole el folleto que contenía aquella información, a todas estas me preguntaba si Klaus sabía leer.
El niño mostró su presencia ante mí, no pude evitar observar a los arqueros ni mucho menos al buen señor, nadie parecía percatarse de su presencia y fue allí cuando entendí. Decidí callar pues tal vez algo se traía entre manos mi compañero.
Escuché lo que el rey dragón comentaba al fantasma y me dirigí hasta la posición del espectro para no hacerlo quedar como un loco, para mi sorpresa ignoraron aquello, su única intención era sobrevivir.
- Se equivoca - Comenté de manera tajante frente a las palabras del magnate.
Uno de los elfos no tardó nada en disparar una de sus flechas, pero conocía el sonido que un arco tensandose hacía, además qué en un salón cerrado todo se escuchaba y sin voltear a verlo avancé llevando ambas manos a mi espalda en un intento por parecer guay.
Sonreí y arreglé mi cabello mostrando a los seres de luz mis puntiagudas orejas, enseguida entendieron y cerrando sus ojos me hicieron notar que no habría problema.
- Han tardado en llegar, pero no demorarán demasiado -
Fue lo único que se me vino a la mente decir dado que las personas de los alrededores habían comenzado a ocultarse minutos antes de nuestra reunión, o bien no estaban acostumbrados a ver caras nuevas o se acercaba la hora en la que anteriormente habían cometido las fechorias en aquellas tierras.
"¡Ya lo sé!! - Di un brinco y me dirigí al señor de cabellera ausente, pero preferí callar, solo tuve una petición.
- Necesito tinta -
Fue lo único que comenté siendo claro en lo que quería para ir junto a Klaus y preguntar - ¿Que hacía ese niño en aquél lugar el otro día? - Estaba haciendo referencia al fantasma solo que no quería levantar sospechas, aquél niño como dijo el dragón podía servir de ayuda en algún momento.
Saintus L Spell
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Re: [Trabajo] Llamado de auxilio
Según dijo Saintus, el dinero debe provenir de alguna mina ilegal fuera de los límites de los contratos de las tierras, pero donde estaría situada esa mina y quien se haya dado cuenta está buscando asesinar a estos corruptos. Deducía mis teorías sin tener nada claro aún por supuesto, de igual manera mi trabajo era mantener con vida este sujeto a pesar de que fuera un criminal o algo por el estilo.
Tengo que confirmas mis sospechas, que estoy casi seguro que es ciertas, si a ti no te importa a mí sí. – Refutó Saintus mientras dejaba en mis manos el folleto donde era descrita el pedido por el mismo magneto. Porque alguien insinuaría por sí mismo, decir que su dinero es legal a voz propia? – Dije un poco confundido al empleador, aunque es una buena estrategia decir que tu dinero solo viene de lo legal sin dejar paso a la duda, pero también era sospechoso dejar que cada persona con el don de leer leyera los folletos que estaban distribuidos por la ciudad.
Así mismo como seguro piensas Klaus, es la estrategia, además mi dinero viene solo de las minas legales de las dunas de Roilkat. – Aclaro moviendo sus manos de un lado a otro para ser apoyo a lo que estaba describiendo, aun así este se sentó en su silla aunque un poco nervioso ya que la noche seguía avanzando su paso pero aún no había ocurrido nada, seguía cómodamente en el sofá de cuero esperando a la hora que aquellos ‘’asesinos’’ actuaran de una vez.
Saintus se había sentado a mi derecha del sofá para aparentar que estaba hablando con él, deduciendo que el fantasma se había hecho visible ante los ojos de mi compañero, vi como el mismo Saintus aún seguía pensando y haciendo preguntas al empleador como hace algunos minutos atrás, ahora este estaba exigiendo tinta para dibujar o escribir algo en un papel.
Uno de los sirvientes se retiró del despacho en búsqueda de la tinta que la encontró en la sala principal abriendo un estante de madera de roble que estaba bien construido, saco una botella de cristal luminosa que en su interior tenía un líquido negro que sería la tinta, subió las escaleras y nuevamente abrió la puerta para dejar encima de unas de la mesa el frasco con tinta que había solicitado Saintus.
Es un fantasma puede escabullirse por toda la casa buscando esa mina que tanto dices que tiene este sujeto, además nos puede decir cuando el asesino pise la casa y estar más preparados. – Susurre al oído de Saintus lo que tenía pensando y de cómo colaboraría este pequeño amigo que me encontré camino a la ciudad.
Un enorme reloj que estaba en el despacho del empleador marco las doce y punto, haciendo un ruido estruendoso cual hizo que el mismo se levantara de sobresalto de su silla al estar desprevenido que sonaría la alarma del reloj.
Estos asesinos seguros se arrepintieron de venir por mi cabeza, sabiendo los problemas que tendrían si intentaban cometer este homicidio. – Exclamo magneto con un tono de orgullo insinuando que los asesinos habían tenido miedo de tocarle sabiendo el lugar de status que se encontraba el empleador.
Chasquee mis dientes en inconformidad ante lo que estaba sugiriendo el empleador, Un cazador siempre espera hasta el último momento para atacar a su presa, ya cuando esta piensa que él no lo está cazando. – Con tono alto y orgullo dije sabiendo que yo también era un guerreo y sabia de las tácticas que podrían tener estas personas sin saber si eran profesionales o solo sabandijas intentando tentar a la suerte, si eso era la ocasión con los guardias seguro bastaría y habríamos perdido el tiempo y seguro nos pagarían solo cincuenta monedas por acudir al llamado.
Tu amigo elfo es muy encantador. – Exclamo el niño con una sonrisa de oreja a oreja, dando brinco en el sofá por lo cual atravesaba el techo y volvía a dar saltos en el cojín, más bien flotaba ya que no podía tocar absolutamente nada siendo un espectro.
Iré a ver que puedo averiguar para ti. – Refiriéndose a mí aunque todavía no me llamaba por mi nombre ya aun habido escuchado anteriormente, aunque él tampoco se había presentado formalmente ante mí, solo sabía cómo había ocurrido su muerte y de que alguna razón termino encontrándome y acompañándome, el mismo empezó a travesar las paredes del castillo viendo lo que hacían los guardias, sirvientes e inspeccionando cada rincón de la casa, aunque se había topado con algo interesante al ver como uno de los guardias entraban por una especie de entrada secreta de ladrillos que sobresalían y daban paso hacia un túnel, el mismo traspaso la pared después que se cerró para seguir al guardia.
Este tomo una polea para descender hasta algunos metros más abajo del castillo, entrando en una mina subterránea que se encontraba debajo del mismo castillo de Magneto, esta mina estaba bien construida con rieles para transportar furgones llenos de carbones, diamantes y otras piedras preciosas.
La sorpresa que hizo que los ojos se sobresalieran de las cuencas del crío fue como los guardias utilizaban látigos dejándolos caer en la espaldas de esclavos humanos, hombre bestias que eran utilizados para explotar la mina y trabajar clandestinamente, alguien se había dado cuenta de esto y por razón estaban cortándoles el cuello a estos viejos cabrones,
El mismo salió asustado flotando hacia arriba traspasando a toda velocidad los muros, paredes hasta llegar nuevamente enfrente de nosotros, suspirando como si le faltaba el aire, claro no lo tenía estaba muerto, aun así las palabras le salían poco a poco mostrando como si estuviera cansando.
Debajo de nosotros hay una mina, y tiene esclavos a humanos y hombres bestias haciéndolos trabajar para explotar las minas, por eso quieren asesinarlo el seguro es la cabeza de todo esto. – Expreso rápidamente casi que ni se le entendía lo que estaba diciendo.
No inmute mi rostro ni nada por el estilo, aun conseguido la información, solo tenía que defender a este viejo por esta noche, después de eso no era mi problema.
Mire a Saintu para deducir que estaba pasando por su mente, y que decisión tomaría sabiendo esta información abandonaría el trabajo o se quedaría.
Tengo que confirmas mis sospechas, que estoy casi seguro que es ciertas, si a ti no te importa a mí sí. – Refutó Saintus mientras dejaba en mis manos el folleto donde era descrita el pedido por el mismo magneto. Porque alguien insinuaría por sí mismo, decir que su dinero es legal a voz propia? – Dije un poco confundido al empleador, aunque es una buena estrategia decir que tu dinero solo viene de lo legal sin dejar paso a la duda, pero también era sospechoso dejar que cada persona con el don de leer leyera los folletos que estaban distribuidos por la ciudad.
Así mismo como seguro piensas Klaus, es la estrategia, además mi dinero viene solo de las minas legales de las dunas de Roilkat. – Aclaro moviendo sus manos de un lado a otro para ser apoyo a lo que estaba describiendo, aun así este se sentó en su silla aunque un poco nervioso ya que la noche seguía avanzando su paso pero aún no había ocurrido nada, seguía cómodamente en el sofá de cuero esperando a la hora que aquellos ‘’asesinos’’ actuaran de una vez.
Saintus se había sentado a mi derecha del sofá para aparentar que estaba hablando con él, deduciendo que el fantasma se había hecho visible ante los ojos de mi compañero, vi como el mismo Saintus aún seguía pensando y haciendo preguntas al empleador como hace algunos minutos atrás, ahora este estaba exigiendo tinta para dibujar o escribir algo en un papel.
Uno de los sirvientes se retiró del despacho en búsqueda de la tinta que la encontró en la sala principal abriendo un estante de madera de roble que estaba bien construido, saco una botella de cristal luminosa que en su interior tenía un líquido negro que sería la tinta, subió las escaleras y nuevamente abrió la puerta para dejar encima de unas de la mesa el frasco con tinta que había solicitado Saintus.
Es un fantasma puede escabullirse por toda la casa buscando esa mina que tanto dices que tiene este sujeto, además nos puede decir cuando el asesino pise la casa y estar más preparados. – Susurre al oído de Saintus lo que tenía pensando y de cómo colaboraría este pequeño amigo que me encontré camino a la ciudad.
Un enorme reloj que estaba en el despacho del empleador marco las doce y punto, haciendo un ruido estruendoso cual hizo que el mismo se levantara de sobresalto de su silla al estar desprevenido que sonaría la alarma del reloj.
Estos asesinos seguros se arrepintieron de venir por mi cabeza, sabiendo los problemas que tendrían si intentaban cometer este homicidio. – Exclamo magneto con un tono de orgullo insinuando que los asesinos habían tenido miedo de tocarle sabiendo el lugar de status que se encontraba el empleador.
Chasquee mis dientes en inconformidad ante lo que estaba sugiriendo el empleador, Un cazador siempre espera hasta el último momento para atacar a su presa, ya cuando esta piensa que él no lo está cazando. – Con tono alto y orgullo dije sabiendo que yo también era un guerreo y sabia de las tácticas que podrían tener estas personas sin saber si eran profesionales o solo sabandijas intentando tentar a la suerte, si eso era la ocasión con los guardias seguro bastaría y habríamos perdido el tiempo y seguro nos pagarían solo cincuenta monedas por acudir al llamado.
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Tu amigo elfo es muy encantador. – Exclamo el niño con una sonrisa de oreja a oreja, dando brinco en el sofá por lo cual atravesaba el techo y volvía a dar saltos en el cojín, más bien flotaba ya que no podía tocar absolutamente nada siendo un espectro.
Iré a ver que puedo averiguar para ti. – Refiriéndose a mí aunque todavía no me llamaba por mi nombre ya aun habido escuchado anteriormente, aunque él tampoco se había presentado formalmente ante mí, solo sabía cómo había ocurrido su muerte y de que alguna razón termino encontrándome y acompañándome, el mismo empezó a travesar las paredes del castillo viendo lo que hacían los guardias, sirvientes e inspeccionando cada rincón de la casa, aunque se había topado con algo interesante al ver como uno de los guardias entraban por una especie de entrada secreta de ladrillos que sobresalían y daban paso hacia un túnel, el mismo traspaso la pared después que se cerró para seguir al guardia.
Este tomo una polea para descender hasta algunos metros más abajo del castillo, entrando en una mina subterránea que se encontraba debajo del mismo castillo de Magneto, esta mina estaba bien construida con rieles para transportar furgones llenos de carbones, diamantes y otras piedras preciosas.
La sorpresa que hizo que los ojos se sobresalieran de las cuencas del crío fue como los guardias utilizaban látigos dejándolos caer en la espaldas de esclavos humanos, hombre bestias que eran utilizados para explotar la mina y trabajar clandestinamente, alguien se había dado cuenta de esto y por razón estaban cortándoles el cuello a estos viejos cabrones,
- Minas y Tuneles:
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El mismo salió asustado flotando hacia arriba traspasando a toda velocidad los muros, paredes hasta llegar nuevamente enfrente de nosotros, suspirando como si le faltaba el aire, claro no lo tenía estaba muerto, aun así las palabras le salían poco a poco mostrando como si estuviera cansando.
Debajo de nosotros hay una mina, y tiene esclavos a humanos y hombres bestias haciéndolos trabajar para explotar las minas, por eso quieren asesinarlo el seguro es la cabeza de todo esto. – Expreso rápidamente casi que ni se le entendía lo que estaba diciendo.
No inmute mi rostro ni nada por el estilo, aun conseguido la información, solo tenía que defender a este viejo por esta noche, después de eso no era mi problema.
Mire a Saintu para deducir que estaba pasando por su mente, y que decisión tomaría sabiendo esta información abandonaría el trabajo o se quedaría.
Sajin W
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Re: [Trabajo] Llamado de auxilio
Escuché con detenimiento lo que Klaus tenía que decir acerca del fantasma, a lo que afirmé con la cabeza como gesto de aprobación, su ayuda nos serviría de mucho sin levantar sospechas y aunque el don lo negara y Klaus quisiera ignorarlo sabía que lo que sucedía en aquél lugar no era tanto político sino jerárquico, la familia principal necesitaba que las ramas no obtuvieran fuerza evitando ascender en aquella escala.
La tinta llegó de mano de uno de los guardias, y más rápido que inmediatamente me acerqué a levantar el frasco de cristal y ver su contenido a través de este, para observar al magnate y reír de manera pícara - Vaya que es ostentoso usted - El cristal en el que se vertió la tinta no era un simple vidrio, era de un color jade tal parece que habían fundido varios elementos para lograr formar aquel contenedor.
Me desconcentré al escuchar lo que la aparición decía, pero preferí ignorarlo, después de todo un fantasma vería encantador a cualquier organismo con vida.
Enfocándome en lo que me importaba solicité al elfo que se quitara su armadura ligera, a lo que este no dudó en ningún momento y la dejó sobre la mesa, era de cuero con algunas telas finas y como todo el aquél lugar con decoración única, incrustaciones de las tan preciadas rocas, cualquiera intentaría robar al elfo solo por las piedras preciosas.
- Estáis a punto de observar algo qué podría salvarle la vida a su lord - Comenté en tono serio, haciendo show y robándome toda su atención, tomé el pincel y comencé a trazar en aquella armadura la runa que con tanta pasión había plasmado en mi mente, la misma runa que llevaba en el brazo de la armadura y que me permitía ocultarme entre las sombras.
Al terminar de plasmar el arte en aquel armazón escuché lo que el fantasmita tenía que decir, en ese momento quedé frio, no por confirmar mis sospechas sino por escuchar aquello con respecto a los esclavos. Justo en ese momento se presentaban frente a mi dos opciones, desistir del trabajo y por consecuente a los planes que tenía en mente o apoyar a un pseudo-dictador y obvio, me iría por la segunda opción.
Levanté la armadura, sonreí, me acerqué hasta el puesto del jefe y se la entregué.
- Si quiere vivir, pongasela -Dije como si le daba una orden, lo que no le gustó para nada e intervino.
No me pondré esa cochinada - Dijo Magneto con desdén, hasta que escuchó un golpe afuera, lo que le llevó a colocarsela inmediatamente, sin embargo el golpe no era más que un jarrón que caía en la guardia de los subordinados mientras lo rotaban para beber de él.
Sí que estaba asustado aquél sujeto ¿Y quién no? con una conciencia tan sucia.
- Mientras te mantengas en la oscuridad estarás a salvo, la runa que dibujé hace que la armadura te haga invisible ante cualquiera en la oscuridad.
Hice énfasis al decir la palabra runa, quería que Klaus escuchara y se sintiera orgulloso de las habilidades que comenzaba a adquirir, no ha pasado muchos días desde la ultima vez que nos vimos pero había ocupado cada minuto con inteligencia.
- Aquello no nos incumbe, hagamos nuestro trabajo, pero aprende a confiar más en mí - Agregué finalmente, esperando que no solo el dictador entendiera los efectos de la runa, sino también los elfos que le protegían.
________________________________
¡Aquí fue! - Comentó una chica de cabello blanco hasta la cintura de tez oscura y ojos verdes al encontrarse en la entrada del castillo, los guardias como siempre de morbosos no evitaron acercarse para comenzar a adularla, mientras que esta con un par de guiños y besos al aire logró encantar aquél lugar haciéndolos caer en un profundo sueño.
La tinta llegó de mano de uno de los guardias, y más rápido que inmediatamente me acerqué a levantar el frasco de cristal y ver su contenido a través de este, para observar al magnate y reír de manera pícara - Vaya que es ostentoso usted - El cristal en el que se vertió la tinta no era un simple vidrio, era de un color jade tal parece que habían fundido varios elementos para lograr formar aquel contenedor.
Me desconcentré al escuchar lo que la aparición decía, pero preferí ignorarlo, después de todo un fantasma vería encantador a cualquier organismo con vida.
Enfocándome en lo que me importaba solicité al elfo que se quitara su armadura ligera, a lo que este no dudó en ningún momento y la dejó sobre la mesa, era de cuero con algunas telas finas y como todo el aquél lugar con decoración única, incrustaciones de las tan preciadas rocas, cualquiera intentaría robar al elfo solo por las piedras preciosas.
- Estáis a punto de observar algo qué podría salvarle la vida a su lord - Comenté en tono serio, haciendo show y robándome toda su atención, tomé el pincel y comencé a trazar en aquella armadura la runa que con tanta pasión había plasmado en mi mente, la misma runa que llevaba en el brazo de la armadura y que me permitía ocultarme entre las sombras.
Al terminar de plasmar el arte en aquel armazón escuché lo que el fantasmita tenía que decir, en ese momento quedé frio, no por confirmar mis sospechas sino por escuchar aquello con respecto a los esclavos. Justo en ese momento se presentaban frente a mi dos opciones, desistir del trabajo y por consecuente a los planes que tenía en mente o apoyar a un pseudo-dictador y obvio, me iría por la segunda opción.
Levanté la armadura, sonreí, me acerqué hasta el puesto del jefe y se la entregué.
- Si quiere vivir, pongasela -Dije como si le daba una orden, lo que no le gustó para nada e intervino.
No me pondré esa cochinada - Dijo Magneto con desdén, hasta que escuchó un golpe afuera, lo que le llevó a colocarsela inmediatamente, sin embargo el golpe no era más que un jarrón que caía en la guardia de los subordinados mientras lo rotaban para beber de él.
Sí que estaba asustado aquél sujeto ¿Y quién no? con una conciencia tan sucia.
- Mientras te mantengas en la oscuridad estarás a salvo, la runa que dibujé hace que la armadura te haga invisible ante cualquiera en la oscuridad.
Hice énfasis al decir la palabra runa, quería que Klaus escuchara y se sintiera orgulloso de las habilidades que comenzaba a adquirir, no ha pasado muchos días desde la ultima vez que nos vimos pero había ocupado cada minuto con inteligencia.
- Aquello no nos incumbe, hagamos nuestro trabajo, pero aprende a confiar más en mí - Agregué finalmente, esperando que no solo el dictador entendiera los efectos de la runa, sino también los elfos que le protegían.
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¡Aquí fue! - Comentó una chica de cabello blanco hasta la cintura de tez oscura y ojos verdes al encontrarse en la entrada del castillo, los guardias como siempre de morbosos no evitaron acercarse para comenzar a adularla, mientras que esta con un par de guiños y besos al aire logró encantar aquél lugar haciéndolos caer en un profundo sueño.
Off: Hago uso de la única runa que conozco para aplicar "Runa de Sombras" en la armadura que ahora tiene el señor calvo.
Saintus L Spell
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Re: [Trabajo] Llamado de auxilio
Observe que Saintus tampoco se inmuto ante lo revelado por el fantasma, por lo cual al haber dejado el sirviente la tinta que había solicitado con tanta urgencia hacia algunos minutos atrás, se levantó finalmente del sillón, para ir directo a la mesa y destapar el frasco sin ante presumir el envase donde estaba vertido el líquido haciendo referencia que este provenía de una mano de obra con el mejor cristal que se podría encontrar en Aerandir, sin tanto atraso tomo un pincel desde su traje y vertió el mismo en la tinta.
Dame tu armadura. – Exigió Saintus a unos de los elfos que estaban custodiando al Lord, cual se despojó de la misma armadura sin ningún inconveniente, dejándola encima de la mesa para que procediera Saintus hacer lo que habría aprendido, lo mismo dejo caer el pincel encima de una de la placa de armadura dibujando una runa, además de que llamo mucho mi atención observando que habría aprendido sobre las enseñas arcanas que habían dejado los antiguos dragones en la tierra.
Después de terminar la runa, tomo la armadura y se la dejo en la mesa de madera enfrente del Lord Magneto, exigiendo el mismo que se la pusiera para poder ayudarnos a que su vida no estuviera en riesgo más de lo que seguro estaría, No me pondré esta cochinada. – Negó con su cabeza y en tono alto, aunque este cambio de parecer cuando se escuchó un ruido atrás de él, haciendo que se la colocara con afán, para después darse cuenta que un sirviente había dejado resbalar por accidento uno de los jarrones que estaban empotrado en un columna de madera pintada de blanco.
Mientras se mantenga en la oscuridad nadie lo podrá ver, gracias a la runa que dibuje en esta armadura. – Explico Saintus al empleador por si cualquier tipo de emergencia que ocurriera podría ponerse a salvo gracias a la armadura que había encantado mi compañero.
Esplendido, se ve que no has desperdiciado el tiempo. – Sonriendo exclame a mi compañero viendo que este había utilizado el tiempo libre para aprender sobre las runas arcanas de mis ancestros, ciertamente estaba mejorando más y más cada día sin que me diera cuenta, el muchacho inexperto de hace semanas, comenzaba a tomar más precauciones en los trabajos y sobre sus empleadores.
El niño fantasma se encontraba algo molesto ya que ambos no habíamos hecho nada para poder liberar aquellas personas que estaban siendo explotadas en las minas, pero eso no era nuestro trabajo, sino de proteger al anarquista y que sobreviviera esta noche, seguro con cuidarle el culo después podríamos pedirle amablemente que liberara esas personas sino nosotros vendríamos por él, claro le diría todo esto después de tener el dinero en mis manos.
Bueno, la noche sigue avanzando, estad pendiente, en cualquier momento pueden hacer su primer movimiento. – Exclame a los guardias incluso a mi compañero, para poderme levantar del sofá y tronar mis manos, había recompuesto mi postura y listo para cualquier acción que saliera. ¿Acaso no harás nada para ayudar a esa gente? – Pregunto el crió, a lo cual solo moví mi cabeza de lado a lado negando que haré algo respecto a esto, ya que no era mi asunto y tampoco me estaban pagando para resolver ese conflicto. El mismo se hundió en el suelo enojado seguramente para volver al comienzo de las minas.
¡Aquí fue! - Dije a las afueras del majestuoso castillo, inmediatamente los guardias se acercaron hasta mí para adularme, a lo cual sin que se diera cuenta exprimí una pequeña pepita entre mis dedos que libero una sustancia, haciendo que estos cayeran al pavimento inconsciente. Pueden entrar, eso sí, el ultimo corte se lo daré yo. – Dije con autoridad para ver como dos sombras más se escabullían dentro de la edificaciones sin llamar la atención de los arqueros que estaban en la torre de control, no veían mi figura al estar debajo del tejado que daba conexión al despacho de Magneto.
Como si mi cuerpo fuera el viento, empecé a escalar las paredes, gracias al encantamiento de mis botas no se escuchaban mis pasos al menos por treinta minutos lo cual fue suficiente para llegar a la torre de control y de un solo haz con mi arma cortar por la espalda a los dos arqueros, dejando que cayeran en el tejado, el mismo golpe provoco la alertas de los demás guardias al ver los cuerpos de dos de sus compañeros muertos en el tejado.
Deslice mi arco con una flecha puesta, para disparar dentro del despacho, la misma paso entre las orejas del Elfo que estaba al lado de Magneto cual sería Saintus, clavándose en la pared haciéndole un leve corte a la oreja de Saintus.
Salte desde la altura de la torre de control, para sostenerme hasta tocar el tejado con mi daga de metal, al estar finalmente en el techo empecé a correr para meterme entre las ventanas del castillo terminando en la primera sala de la casa.
¡Juguemos a cazar al ratón¡ - Grité para provocar que algunos de los guardaespaldas que habíamos visualizado bajara hasta mi posición, volviendo a enfundar el arco y tomar mi espada en guardia entre la oscuridad.
Dame tu armadura. – Exigió Saintus a unos de los elfos que estaban custodiando al Lord, cual se despojó de la misma armadura sin ningún inconveniente, dejándola encima de la mesa para que procediera Saintus hacer lo que habría aprendido, lo mismo dejo caer el pincel encima de una de la placa de armadura dibujando una runa, además de que llamo mucho mi atención observando que habría aprendido sobre las enseñas arcanas que habían dejado los antiguos dragones en la tierra.
Después de terminar la runa, tomo la armadura y se la dejo en la mesa de madera enfrente del Lord Magneto, exigiendo el mismo que se la pusiera para poder ayudarnos a que su vida no estuviera en riesgo más de lo que seguro estaría, No me pondré esta cochinada. – Negó con su cabeza y en tono alto, aunque este cambio de parecer cuando se escuchó un ruido atrás de él, haciendo que se la colocara con afán, para después darse cuenta que un sirviente había dejado resbalar por accidento uno de los jarrones que estaban empotrado en un columna de madera pintada de blanco.
Mientras se mantenga en la oscuridad nadie lo podrá ver, gracias a la runa que dibuje en esta armadura. – Explico Saintus al empleador por si cualquier tipo de emergencia que ocurriera podría ponerse a salvo gracias a la armadura que había encantado mi compañero.
Esplendido, se ve que no has desperdiciado el tiempo. – Sonriendo exclame a mi compañero viendo que este había utilizado el tiempo libre para aprender sobre las runas arcanas de mis ancestros, ciertamente estaba mejorando más y más cada día sin que me diera cuenta, el muchacho inexperto de hace semanas, comenzaba a tomar más precauciones en los trabajos y sobre sus empleadores.
El niño fantasma se encontraba algo molesto ya que ambos no habíamos hecho nada para poder liberar aquellas personas que estaban siendo explotadas en las minas, pero eso no era nuestro trabajo, sino de proteger al anarquista y que sobreviviera esta noche, seguro con cuidarle el culo después podríamos pedirle amablemente que liberara esas personas sino nosotros vendríamos por él, claro le diría todo esto después de tener el dinero en mis manos.
Bueno, la noche sigue avanzando, estad pendiente, en cualquier momento pueden hacer su primer movimiento. – Exclame a los guardias incluso a mi compañero, para poderme levantar del sofá y tronar mis manos, había recompuesto mi postura y listo para cualquier acción que saliera. ¿Acaso no harás nada para ayudar a esa gente? – Pregunto el crió, a lo cual solo moví mi cabeza de lado a lado negando que haré algo respecto a esto, ya que no era mi asunto y tampoco me estaban pagando para resolver ese conflicto. El mismo se hundió en el suelo enojado seguramente para volver al comienzo de las minas.
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¡Aquí fue! - Dije a las afueras del majestuoso castillo, inmediatamente los guardias se acercaron hasta mí para adularme, a lo cual sin que se diera cuenta exprimí una pequeña pepita entre mis dedos que libero una sustancia, haciendo que estos cayeran al pavimento inconsciente. Pueden entrar, eso sí, el ultimo corte se lo daré yo. – Dije con autoridad para ver como dos sombras más se escabullían dentro de la edificaciones sin llamar la atención de los arqueros que estaban en la torre de control, no veían mi figura al estar debajo del tejado que daba conexión al despacho de Magneto.
Como si mi cuerpo fuera el viento, empecé a escalar las paredes, gracias al encantamiento de mis botas no se escuchaban mis pasos al menos por treinta minutos lo cual fue suficiente para llegar a la torre de control y de un solo haz con mi arma cortar por la espalda a los dos arqueros, dejando que cayeran en el tejado, el mismo golpe provoco la alertas de los demás guardias al ver los cuerpos de dos de sus compañeros muertos en el tejado.
Deslice mi arco con una flecha puesta, para disparar dentro del despacho, la misma paso entre las orejas del Elfo que estaba al lado de Magneto cual sería Saintus, clavándose en la pared haciéndole un leve corte a la oreja de Saintus.
Salte desde la altura de la torre de control, para sostenerme hasta tocar el tejado con mi daga de metal, al estar finalmente en el techo empecé a correr para meterme entre las ventanas del castillo terminando en la primera sala de la casa.
¡Juguemos a cazar al ratón¡ - Grité para provocar que algunos de los guardaespaldas que habíamos visualizado bajara hasta mi posición, volviendo a enfundar el arco y tomar mi espada en guardia entre la oscuridad.
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[1] Los asesinos se escabullen dentro de la mansión, solo se reconoce una y otro dos estas perdidos. Saintus enfrentara a Sux o ira a buscar a los otros asesinos pudiendo encontrarse con dos a la vez.(Si decides enfrentar a Sux eres libre de interpretar la pelea y resultado)
[1] Los asesinos se escabullen dentro de la mansión, solo se reconoce una y otro dos estas perdidos. Saintus enfrentara a Sux o ira a buscar a los otros asesinos pudiendo encontrarse con dos a la vez.(Si decides enfrentar a Sux eres libre de interpretar la pelea y resultado)
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Re: [Trabajo] Llamado de auxilio
Sonreí al escuchar lo que tenía que decir Klaus acerca de mi mejoría, las runas que estaba usando habían sido creadas hace eones por las imponentes criaturas que de seguro habían enseñado a Klaus también a tomar aquella forma que en ocasiones se presentaba.
Un golpe seco llamó mi atención, los arqueros habían caido y en ese momento se entendió que algo pasaba, corrí hasta magneto para empujarlo hasta una esquina, ordené a los guardias que aún estaban dentro que apagaran las antorchas, en ese momento la runa se activó y el dueño de aquella extensión de tierra se hizo invisible ante los ojos de todos.
Una vez activada aquella runa sentí una leve brisa que ondeaba en mi cabello cortando un poco de este, no necesité voltear para darme cuenta que se trataba de un atentado y que era una flecha a toda velocidad.
Cuando quise correr hasta la venta, que de hecho lo hice salté, pero ya no estaba allí la persona que había atacado con el arco, sin embargo al observar hacia el tejado en los pisos de abajo justo una figura larga de cabello blanco estaba sosteniendose sobre su daga, opté por hacer lo mismo, salta, sin embargo en el proceso de descenso utilicé mi arco para raspar la pared y ralentizar la caida.
Una vez abajo una sombra me indicaba como entraba a varias habitaciones y salí formando un zigzag, hasta que alcancé a ver como no saló más, decidí correr solo que por fuera sin tantas maromas, estado a unos cinco metros esta gritó alertando a los guardias.
¡No se acerquen! - Alcé la voz a escoltas que quedaban en pie después del encantamiento - Las reglas del juego han cambiado. Esto será, el cazador cazado. Impuse con una voz seria, como nunca antes me habían escuchado.
"Espero que Klaus se encargue de mantener al calvo con vida pero sobre todo entre las sombras"
Al entrar en la primera habitación, que como todas las demás irradiaba lujos por donde vieses decidí tomar una de las 4 antorchas que allí se encontraban y lanzarla por la ventana haciendola caer por fuera e inmediatamente apagandola, solo quedaban tres y justo cuando corrí a la segunda la elfa lanzó una daga que iba directo a mi yugular, no hizo falta sino tumbarme a un lado pero no fue del todo eficaz, la daga cortó mi pomulo derecho, cuestión que ignoré por completo y corrí hacia la segunda antorcha para deshacerme de ella, la golpee contra el suelo apagando la luz que esta emanaba.
Eran dos de las cuatro, nos encontrabamos a media luz. Como por arte de magia aquella daga se movió sola, volando y terminando en la mano de la chica de cabellos blancos, fue allí donde entendí que no era casualidad que estuviese allí ni tampoco era cualquier contrinante, seguramente era ella quién tenía la tarea de asesinar al maldito dictador.
¿Por qué haces esto? ¿Por qué me atacas? Los elfos no deberíamos pelear entre nosotros.
La sala era tan amplia, que por la falta de las dos antorchas mas de la mitad de esta se encontraba totalmente a oscuras, pero mi objetivo era conseguir ausencia de luz por completo.
Se me vino una idea a la cabeza y tomé un par de rubíes que conseguí como adorno en lo que parecía ser un mostrador, los guardé en uno de mis bolsillos y tras intentar corres hasta una de las esquinas ya no era una sino dos dagas que iba en mi dirección, para evitar que estas me dieran de lleno antepuse mi brazo clavandose en parte de mi armadura, traté de tomar una pero cuando quise empuñar aquella daga esta me repelió tumbandome hacia atrás, para mi sorpresa las dagas volvieron una vez más a las manos de su ama, no dejaria escapar la oportunidad para estando tumbado tensar mi arco en dirección a la antorcha que se encontraba en la esquina junto a la ventana pero en un ángulo en que esta pasara muy cerca y se clavara en la pared, la brisa que produciría la fuerza de la flecha por la velocidad aplicada sería suficiente para apagar la tercera antorcha.
____________________________________________________
El que me seguía era un maldito elfo, aunque quizás no tenía suficiente fuerza para hacerme frente lo estaba intentado, quería dejarme a oscuras pero lo que el no sabía era que contaba con todo un arsenal para cualquier cosa que se me viniera encima, dejando solamente una de las antorchas encendidas volteé a verla y de un simple salto por las botas que llevaba puesta llegue a tenerla a mis espaldas.
Tenía un pequeño frasco no mayor a 8 cm en la ranura de mi armadura y la lancé en dirección al elfo pero esta se abriría antes explotando en en el aire y haciendo combustión instantánea, el fuego se hacía presente en el medio de la sala, lo que me permitiría tener un rango de visión un poco mayor, no estaría totalmente a oscuras pero tenía que moverme rápido aquel efecto no duraría mucho.
Lancé la antorcha no muy alto y llevé ambas manos a mis espaldas, en mi cinturón tenía 6 dagas, con movimientos rápidos y ligeros de manera perpendicular hacia el elfo lancé todas y cada una de las dagas en su dirección, una tras otra, en lo que la antorcha descendió había culminado con aquello y la tomé de nuevo.
¡Maldito elfo JAJAJAJAJA! ¿Crees que soy una de los tuyos? ~ En ese momento quité uno de los implantes de cuero colmado que daba una forma diferente a mis orejas y lo coloqué de nuevo.
Odiaba a los elfos solo por ser una raza bendecida, mientras que yo había nacido sin ningún don tenía que vivir buscando herramientas como la magia a través de pocimas o los encantamientos en armas.
Un golpe seco llamó mi atención, los arqueros habían caido y en ese momento se entendió que algo pasaba, corrí hasta magneto para empujarlo hasta una esquina, ordené a los guardias que aún estaban dentro que apagaran las antorchas, en ese momento la runa se activó y el dueño de aquella extensión de tierra se hizo invisible ante los ojos de todos.
Una vez activada aquella runa sentí una leve brisa que ondeaba en mi cabello cortando un poco de este, no necesité voltear para darme cuenta que se trataba de un atentado y que era una flecha a toda velocidad.
Cuando quise correr hasta la venta, que de hecho lo hice salté, pero ya no estaba allí la persona que había atacado con el arco, sin embargo al observar hacia el tejado en los pisos de abajo justo una figura larga de cabello blanco estaba sosteniendose sobre su daga, opté por hacer lo mismo, salta, sin embargo en el proceso de descenso utilicé mi arco para raspar la pared y ralentizar la caida.
Una vez abajo una sombra me indicaba como entraba a varias habitaciones y salí formando un zigzag, hasta que alcancé a ver como no saló más, decidí correr solo que por fuera sin tantas maromas, estado a unos cinco metros esta gritó alertando a los guardias.
¡No se acerquen! - Alcé la voz a escoltas que quedaban en pie después del encantamiento - Las reglas del juego han cambiado. Esto será, el cazador cazado. Impuse con una voz seria, como nunca antes me habían escuchado.
"Espero que Klaus se encargue de mantener al calvo con vida pero sobre todo entre las sombras"
Al entrar en la primera habitación, que como todas las demás irradiaba lujos por donde vieses decidí tomar una de las 4 antorchas que allí se encontraban y lanzarla por la ventana haciendola caer por fuera e inmediatamente apagandola, solo quedaban tres y justo cuando corrí a la segunda la elfa lanzó una daga que iba directo a mi yugular, no hizo falta sino tumbarme a un lado pero no fue del todo eficaz, la daga cortó mi pomulo derecho, cuestión que ignoré por completo y corrí hacia la segunda antorcha para deshacerme de ella, la golpee contra el suelo apagando la luz que esta emanaba.
Eran dos de las cuatro, nos encontrabamos a media luz. Como por arte de magia aquella daga se movió sola, volando y terminando en la mano de la chica de cabellos blancos, fue allí donde entendí que no era casualidad que estuviese allí ni tampoco era cualquier contrinante, seguramente era ella quién tenía la tarea de asesinar al maldito dictador.
¿Por qué haces esto? ¿Por qué me atacas? Los elfos no deberíamos pelear entre nosotros.
La sala era tan amplia, que por la falta de las dos antorchas mas de la mitad de esta se encontraba totalmente a oscuras, pero mi objetivo era conseguir ausencia de luz por completo.
Se me vino una idea a la cabeza y tomé un par de rubíes que conseguí como adorno en lo que parecía ser un mostrador, los guardé en uno de mis bolsillos y tras intentar corres hasta una de las esquinas ya no era una sino dos dagas que iba en mi dirección, para evitar que estas me dieran de lleno antepuse mi brazo clavandose en parte de mi armadura, traté de tomar una pero cuando quise empuñar aquella daga esta me repelió tumbandome hacia atrás, para mi sorpresa las dagas volvieron una vez más a las manos de su ama, no dejaria escapar la oportunidad para estando tumbado tensar mi arco en dirección a la antorcha que se encontraba en la esquina junto a la ventana pero en un ángulo en que esta pasara muy cerca y se clavara en la pared, la brisa que produciría la fuerza de la flecha por la velocidad aplicada sería suficiente para apagar la tercera antorcha.
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El que me seguía era un maldito elfo, aunque quizás no tenía suficiente fuerza para hacerme frente lo estaba intentado, quería dejarme a oscuras pero lo que el no sabía era que contaba con todo un arsenal para cualquier cosa que se me viniera encima, dejando solamente una de las antorchas encendidas volteé a verla y de un simple salto por las botas que llevaba puesta llegue a tenerla a mis espaldas.
Tenía un pequeño frasco no mayor a 8 cm en la ranura de mi armadura y la lancé en dirección al elfo pero esta se abriría antes explotando en en el aire y haciendo combustión instantánea, el fuego se hacía presente en el medio de la sala, lo que me permitiría tener un rango de visión un poco mayor, no estaría totalmente a oscuras pero tenía que moverme rápido aquel efecto no duraría mucho.
Lancé la antorcha no muy alto y llevé ambas manos a mis espaldas, en mi cinturón tenía 6 dagas, con movimientos rápidos y ligeros de manera perpendicular hacia el elfo lancé todas y cada una de las dagas en su dirección, una tras otra, en lo que la antorcha descendió había culminado con aquello y la tomé de nuevo.
¡Maldito elfo JAJAJAJAJA! ¿Crees que soy una de los tuyos? ~ En ese momento quité uno de los implantes de cuero colmado que daba una forma diferente a mis orejas y lo coloqué de nuevo.
Odiaba a los elfos solo por ser una raza bendecida, mientras que yo había nacido sin ningún don tenía que vivir buscando herramientas como la magia a través de pocimas o los encantamientos en armas.
Última edición por Saintus L Spell el Jue Mayo 28 2020, 21:36, editado 1 vez
Saintus L Spell
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Re: [Trabajo] Llamado de auxilio
Ya había comenzando la acción en aquel lugar, el anuncio fue como cayeron desplomados los dos cuerpos de los arqueros que se situaban en la torre de control hasta el tejado, habrían recibido un corte a sus espaldas aunque eso no fue la causa de la muerte sino la caída que partió cada hueso de sus cuerpos, pude ver como una mujer se deslizaba sosteniéndose con su daga hasta caer encima de los cuerpos de los guardias, para disparar una flecha precisa entre el cabello y orejas de Saintus realizándose un leve corte, y la misma quedo clavada en el despacho donde estábamos.
Saintus no tardo mucho para empujar al empleador a una de las esquina del despacho haciendo que el encantamiento se activara y desapareciera de la vista de todos los presentes, incluso ordeno apagar el fuego de las antorchas para quedar en completa oscuridad, después sin atraso decidió ir por la mujer que había disparado la flecha para salir por la ventana del despacho, dejándome a la custodia a Magneto, ambos guardias permanecían firmes con sus lanzas ante cualquier otro invasor.
Saintus se encontraba en la sala principal teniendo seguramente un combate con una de los asesinos que habían entrando al castillo, además estaba con dos guardias, pero al ver la precisión que tuvo esa mujer a disparar y como entraron sin ser detectaron ya sabía que esto iba hacer más difícil de lo que se veía. Mantengan sus armas firme y su pulso fino, pueden atacar en cualquier momento. – Antes de terminar esas palabras la mujer había hecho detonar la flecha que dejo clavada a través de un encantamiento lo cual causo una pequeña explosión que fue suficiente para mandar a volar a los dos guardias, incluso me hizo estrellarme contra unas de las paredes pero sin causarme mucho más que eso, gracias que el empleador sostenía una armadura y tampoco resulto herido por la sorpresa explosión.
Hija de puta, que mas trucos tienes. – Murmure mientras me levantaba lentamente del suelo después de haber aterrizado en unas de las paredes de la habitación, para limpiar mis ropajes del polvo que había dejado el fuego, observe a mis alrededores viendo que todavía no había nadie acompañándonos hasta el momento.
El niño fantasma estaba volando alrededores de las minas viendo cómo eran castigados los hombres bestias por no hacer el trabajo que se le estaba exigiendo, explotaban diariamente más de veinte kilos de piedras preciosas, se veía como algunos estaban lastimado de la mano o pie, desnutridos incluso enfermos por el polvo que respiraban diariamente debajo de la tierra.
Pude escuchar como algo subía las escaleras como si se tratara de una fiera, en un momento a otro atravesó la puerta rompiendo la misma en mil pedazos, era un hombre bestia con fisionomía de tigre, termino levantándose sacando sus garras, claro podría verme gracias a la visión que poseían los felinos, pero aun así no podía ver a nuestro empleador.
Sé que ese desgraciado esta acá, lo puedo oler, pero no lo puedo ver. – Expreso el tigre dando entender que era más listo de lo que podíamos aparentar, el empleador mantuvo silencio en todo momento permaneciendo en la esquina aun a salvo a no saber su ubicación.
Ese sujeto es un anarquista esclavizador, compra esclavos para que trabajen en sus minas. – Dijo soltando un rugido dejando ver sus afilados colmillos que rebosan entre sus cachetes, Puede ser el mismísimo diablo, pero me pago por protegerlo y eso haré amigo. – Dije mientras dejaba caer mis trapos para ponerme en posición de combate ante el tigre.
El mismo salto encima de mi dejando caer un fulminante golpe que hizo propulsar me hasta la pared nuevamente, apenas tocaba la pared con mi espalda tenia encima al tigre como si fuera un relámpago para dejar descender sus garras encima de mi rostro, evite anteponiendo mis brazos en forma de x deslizando sus brazos hacia arriba pateando su pecho para alejarlo de mí.
La determinación del tigre era tanto que caía debajo de sus golpes, enterrándome en el suelo potenciado por su fuerza, hubo una pausa entre la lluvia de golpes por lo cual me deslice por su cintura tomando debajo de su cuello con mi brazo para estrangularlo, me amarre como serpiente con mis piernas en su torso para aplicar más tensión en su cuello.
Se levanto apenas para dejarnos caer por el balcón hasta el suelo que simplemente era un metro de altura, logrando que la caída causara que lo soltara para poder utilizar ambas manos y aterrizar perfectamente en el suelo, el mismo se puso en cuatro patas y salto hacia mí soltando un rugido de furia. Aquel salto no fue terminado por el animal. Cuando una espada ibera cerceno su garganta al tiempo que su grito interrumpido advirtió a sus compañeros del desastre infinito que habían desencadenado esta noche.
La espada nueva había funcionado a la perfección, dejando un limpio corte, dejando deslizar la sangre por la hoja hasta que llegara a mi mano y después mi codo, simulando que alguien me había herido pero era la del hombre bestia, al ver su cadáver en el suelo, tense mis rodillas para dar un salto hasta el balcón y retomar la postura.
Uno menos Saintus – Grite a mi compañero para advertirle que solo faltaba dos más, la mujer y el ultimo que no se dejaba ver.
Saintus no tardo mucho para empujar al empleador a una de las esquina del despacho haciendo que el encantamiento se activara y desapareciera de la vista de todos los presentes, incluso ordeno apagar el fuego de las antorchas para quedar en completa oscuridad, después sin atraso decidió ir por la mujer que había disparado la flecha para salir por la ventana del despacho, dejándome a la custodia a Magneto, ambos guardias permanecían firmes con sus lanzas ante cualquier otro invasor.
Saintus se encontraba en la sala principal teniendo seguramente un combate con una de los asesinos que habían entrando al castillo, además estaba con dos guardias, pero al ver la precisión que tuvo esa mujer a disparar y como entraron sin ser detectaron ya sabía que esto iba hacer más difícil de lo que se veía. Mantengan sus armas firme y su pulso fino, pueden atacar en cualquier momento. – Antes de terminar esas palabras la mujer había hecho detonar la flecha que dejo clavada a través de un encantamiento lo cual causo una pequeña explosión que fue suficiente para mandar a volar a los dos guardias, incluso me hizo estrellarme contra unas de las paredes pero sin causarme mucho más que eso, gracias que el empleador sostenía una armadura y tampoco resulto herido por la sorpresa explosión.
Hija de puta, que mas trucos tienes. – Murmure mientras me levantaba lentamente del suelo después de haber aterrizado en unas de las paredes de la habitación, para limpiar mis ropajes del polvo que había dejado el fuego, observe a mis alrededores viendo que todavía no había nadie acompañándonos hasta el momento.
El niño fantasma estaba volando alrededores de las minas viendo cómo eran castigados los hombres bestias por no hacer el trabajo que se le estaba exigiendo, explotaban diariamente más de veinte kilos de piedras preciosas, se veía como algunos estaban lastimado de la mano o pie, desnutridos incluso enfermos por el polvo que respiraban diariamente debajo de la tierra.
Pude escuchar como algo subía las escaleras como si se tratara de una fiera, en un momento a otro atravesó la puerta rompiendo la misma en mil pedazos, era un hombre bestia con fisionomía de tigre, termino levantándose sacando sus garras, claro podría verme gracias a la visión que poseían los felinos, pero aun así no podía ver a nuestro empleador.
Sé que ese desgraciado esta acá, lo puedo oler, pero no lo puedo ver. – Expreso el tigre dando entender que era más listo de lo que podíamos aparentar, el empleador mantuvo silencio en todo momento permaneciendo en la esquina aun a salvo a no saber su ubicación.
Ese sujeto es un anarquista esclavizador, compra esclavos para que trabajen en sus minas. – Dijo soltando un rugido dejando ver sus afilados colmillos que rebosan entre sus cachetes, Puede ser el mismísimo diablo, pero me pago por protegerlo y eso haré amigo. – Dije mientras dejaba caer mis trapos para ponerme en posición de combate ante el tigre.
El mismo salto encima de mi dejando caer un fulminante golpe que hizo propulsar me hasta la pared nuevamente, apenas tocaba la pared con mi espalda tenia encima al tigre como si fuera un relámpago para dejar descender sus garras encima de mi rostro, evite anteponiendo mis brazos en forma de x deslizando sus brazos hacia arriba pateando su pecho para alejarlo de mí.
La determinación del tigre era tanto que caía debajo de sus golpes, enterrándome en el suelo potenciado por su fuerza, hubo una pausa entre la lluvia de golpes por lo cual me deslice por su cintura tomando debajo de su cuello con mi brazo para estrangularlo, me amarre como serpiente con mis piernas en su torso para aplicar más tensión en su cuello.
Se levanto apenas para dejarnos caer por el balcón hasta el suelo que simplemente era un metro de altura, logrando que la caída causara que lo soltara para poder utilizar ambas manos y aterrizar perfectamente en el suelo, el mismo se puso en cuatro patas y salto hacia mí soltando un rugido de furia. Aquel salto no fue terminado por el animal. Cuando una espada ibera cerceno su garganta al tiempo que su grito interrumpido advirtió a sus compañeros del desastre infinito que habían desencadenado esta noche.
La espada nueva había funcionado a la perfección, dejando un limpio corte, dejando deslizar la sangre por la hoja hasta que llegara a mi mano y después mi codo, simulando que alguien me había herido pero era la del hombre bestia, al ver su cadáver en el suelo, tense mis rodillas para dar un salto hasta el balcón y retomar la postura.
Uno menos Saintus – Grite a mi compañero para advertirle que solo faltaba dos más, la mujer y el ultimo que no se dejaba ver.
Sajin W
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Re: [Trabajo] Llamado de auxilio
Mi tarea se tornó mas difícil en el momento en que la mujer de apariencia élfica tomó la ultima antorcha, pero eso comparado con las seis dagas que venían en mi contra no era nada, apoyandome de ambas manos me repuse en mi posición e incliné mi cuerpo hacia atrás, aquella acción permitió que en lo que doblé mi cuerpo las primeras dos dagas continuaran moviendose en el aire impactando en la pared, ahora mis manos apoyaban el suelo dese atrás como una parada de manos pero se trataba de una vuelta completa en la que las otras dos dagas pasaron rozando mis piernas, al caer de pie una daga pasó entre mis piernas mientras que la otra penetró en la armadura justo en el pecho.
Aprendí la lección y no intenté tocar aquella daga pero estaba listo para la segunda vuelta, sabía que la siguiente acción de la mujer de cabello blanquesino sería atraer sus armas.
Ladeando mi cuerpo salté de manera vertical para caer de pie, las dagas volaron todas por los espacio vacios, tres entre mis piernas y dos entre mis brazos, mientras que la ultima seguía impactada en la armadura, sentía la sensación que te advertía acerca de los cortes, parecía ser la punta de esta que logró penetrar un poco mi piel.
La daga que seguía en mi armadura no reaccionaba al encantamiento de las armas, dato curioso que me haría dejarla allí.
Al observar que lo que tenía en su oreja era un implamente entendí que efectivamente la mujer no era un elfo y debido a ello tenía una actitud tan poco sútil, los elfos solemos movernos con gracia y delicadeza por excelencia.
Si no me tomaba esto en serio moriría en manos de un humano, tal parece que si no muevo la daga esta será inútil, me sumergí entre las sombras de aquella habitación, una de las esquinas donde la luz no llegaba producto de el incendio producto de aquella botella y decidí lanzar una de las joyas que anteriormente tomé haciendo que la chica de cabello blanco se distrajese en esa dirección e inmediatamente apunté en su dirección pero un grito nos alertó, Klaus había acabado con otro de los asesinos y en resultado a su grito la humana volteó evitando de esta manera la flecha pero otra venía en su dirección impactando directamente en su abdomen.
Las llamas seguían ardiendo y la mujer de cabello blanco cayó arrodillada perdiendo gran cantidad de sangre, lancé el cristal cerca de las llamas lo que amplificó la luz en aquel sitio y mostré mi ubicación, decidí acercarme y estando frente a ella la patee en el rostro para que cayera boca arriba, mientras que pisaba la flecha con fuerza atravesandola, sin embargo no me di cuenta sino hasta que el impacto me empujó un poco hacia adelante, aquellas dagas estaban todas clavadas en mi armadura, la calidad de las dagas era un tanto superior por lo que todas atravesaron mi piel unos dos centímetros cada una.
Noté que la sangre que fluía a charcos no era roja, era morada. Decidí arrancar aquella flecha y llevarla conmigo hasta la habitación superior.
Saintus L Spell
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Re: [Trabajo] Llamado de auxilio
Mantuve mi posición firme al haber vuelto al despacho, camine hacia adentro para saber que aun el empleador seguía con vida pero oculto gracias a la runa mágica que estaba escrita en la armadura. Bueno uno menos, faltan solamente dos más. – Dije explicándole la situación al empleador. Acábalos a todos, no dejes ninguno con vida. – Dijo titubeando entre los dientes por todo el miedo que recorría incluso hasta en el sudor que se deslizaba por su frente, se quedó sentando abrazando sus rodillas ocultándose en la esquina de la habitación oscura.
Deje deslumbrar mi nueva arma tomándola por su mango, ojeaba esta de un lado a otro lado para poder observar la magnífica estructura que había realizado aquel herrero, Fue triste acabar con la vida de ese hombre bestia, tenía potencial, además peleaba por una causa justa. – Una sensación maluca recorrió todo mi cuerpo sabiendo que me encontraba en el lado de los malos, incluso algo que si yo viera seguro liberaría a todas esas personas y le cortaría el cuello sin duda a Magneto, pero esa no era mi situación, así que por esta vez tendría que dejar eso alado para recibir mi paga.
Camine hasta el agujero que había dejado el animal donde estaba anteriormente la puerta, para poder empezar a bajar las escaleras, a los más pronto me topé con Saintus que venía subiendo, tome este por su cuello y cambie su rumbo para que siguiera bajando hasta el salón principal de la casa donde pude visualizar el cuerpo de la mujer desangrándose en una de las alfombras por causa de una flecha que atravesó su abdomen, pero igual Saintus tenía clavadas diferentes dagas en su armadura que le habían causado daño también.
Tome una por una arrancándolas todas desde su espalda sin que este se diera cuenta hasta que sentía como se despegaban de su carne cada vez que jalaba esta hacia afuera, para después arrojarlas al suelo, dejándolas caer al lado de su difunto portador. Las armas son sagradas Saintus. – Exclame ante mi compañero, para seguir caminando entre la casa buscando al otro asesino que faltaba.
El niño fantasma seguía recorriendo los túneles de la minas, mientras que algunos guardias al escuchar las diferentes detonaciones arriba en la casa, abandonaron sus puesto para ir ayudar a sus compañeros en el combate, pero aun así quedaban algunos para mantener la calma y denegar cualquier intento de escape o botín.
El niño observo como una de las sombras empezaba a moverse velozmente entre los túneles aplicando pergaminos alrededor de las paredes en puntos estratégicos, sin que nadie pudiera detectar ni siquiera su presencia, este lo siguió por todo su recorrido para no perderle de vista.
Debemos conseguir esa pared para poder bajar hasta la mina y ver si el otro asesino se encuentra abajo. – Sugerí a mi compañero aunque podría haber la posibilidad que también estuviera aquí arriba y perdiéramos el tiempo revisando esa mina que seguro sería muy extensa de revisar por completo.
Nos encontrábamos todavía en la sala por decidir cuál sería nuestro siguiente movimiento, pero algo nos detuvo una sensación recorrió todos nuestros cuerpos, incluso me hizo sentir escalofríos por algunos segundos para después desaparecer sin más.
Deje deslumbrar mi nueva arma tomándola por su mango, ojeaba esta de un lado a otro lado para poder observar la magnífica estructura que había realizado aquel herrero, Fue triste acabar con la vida de ese hombre bestia, tenía potencial, además peleaba por una causa justa. – Una sensación maluca recorrió todo mi cuerpo sabiendo que me encontraba en el lado de los malos, incluso algo que si yo viera seguro liberaría a todas esas personas y le cortaría el cuello sin duda a Magneto, pero esa no era mi situación, así que por esta vez tendría que dejar eso alado para recibir mi paga.
Camine hasta el agujero que había dejado el animal donde estaba anteriormente la puerta, para poder empezar a bajar las escaleras, a los más pronto me topé con Saintus que venía subiendo, tome este por su cuello y cambie su rumbo para que siguiera bajando hasta el salón principal de la casa donde pude visualizar el cuerpo de la mujer desangrándose en una de las alfombras por causa de una flecha que atravesó su abdomen, pero igual Saintus tenía clavadas diferentes dagas en su armadura que le habían causado daño también.
Tome una por una arrancándolas todas desde su espalda sin que este se diera cuenta hasta que sentía como se despegaban de su carne cada vez que jalaba esta hacia afuera, para después arrojarlas al suelo, dejándolas caer al lado de su difunto portador. Las armas son sagradas Saintus. – Exclame ante mi compañero, para seguir caminando entre la casa buscando al otro asesino que faltaba.
El niño fantasma seguía recorriendo los túneles de la minas, mientras que algunos guardias al escuchar las diferentes detonaciones arriba en la casa, abandonaron sus puesto para ir ayudar a sus compañeros en el combate, pero aun así quedaban algunos para mantener la calma y denegar cualquier intento de escape o botín.
El niño observo como una de las sombras empezaba a moverse velozmente entre los túneles aplicando pergaminos alrededor de las paredes en puntos estratégicos, sin que nadie pudiera detectar ni siquiera su presencia, este lo siguió por todo su recorrido para no perderle de vista.
Debemos conseguir esa pared para poder bajar hasta la mina y ver si el otro asesino se encuentra abajo. – Sugerí a mi compañero aunque podría haber la posibilidad que también estuviera aquí arriba y perdiéramos el tiempo revisando esa mina que seguro sería muy extensa de revisar por completo.
Nos encontrábamos todavía en la sala por decidir cuál sería nuestro siguiente movimiento, pero algo nos detuvo una sensación recorrió todos nuestros cuerpos, incluso me hizo sentir escalofríos por algunos segundos para después desaparecer sin más.
Sajin W
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Re: [Trabajo] Llamado de auxilio
Mientras subía a la habtación principal del siguiente piso escuché pasos pero noté rápidamente que era Klaus, quien al toparse conmigo me tomó por el cuello para descender al punto de inicio.
De pronto, estando ambos frente al cuerpo sentí como se desprendían las dagas de mi carne, mi compañero las había sacado sin activar el poder mágico de estas, quizás porque el portador había fallecido.
Una extraña sensación recorrió mi cuerpo, no era nada bueno, había una presencia en aquél lugar estábamos siendo acechados, recordé que en la lucha que habíamos librado no estaba en aquél lugar el mueble de madera, que además no iba con la decoración exquisita del tipo sin cabello, tenía que aprovechar las armas que tenía el cuerpo sin vida de la mujer en voz alta y comenté con voz firme
¡Iniciaré un ritual élfico en honor a esta mujer! - Hurgué entre sus cosas y tomé un frasco igual al que anteriormente había lanzado para la combustión instantánea y ocultandolo en la palma de mi mano cerré ambos ojos anunciando que continuaría a rezar, pero justo en ese momento hice un ademán a mi derecha lanzando la poción impactando contra la estructura de madre, la que prendida en llamas cambió de forma mostrando ante nosotros su verdadero ser, era un hombre-bestia con forma de cámaleon y que había logrado camuflarse en aquél lugar, enseguida se escuchó un estruendo en las afueras de la habitación, seguido de un sonido igual.
El primer sonido provenía de un cuerpo ya sin vida de un guardia, mientras que el segundo era el magnate que caía encima del primer cuerpo ya sin vida en busca de ayuda, le atemorizaba estar en la oscuridad, solo y sin protección.
Corrí en su dirección para ayudarlo, la conciencia parecía que no le dejaba en paz, debajo de nosotros, a unos cuantos 20 metros por debajo se escucharon las detonaciones y el movimiento del suelo, al parecer había ocurrido una explosión. En aquél momento Magneto se dejó caer al suelo, su mirada se perdió y se recostó sobre una de las paredes.
No entendía nada, buscaba a mi alrededor algunas ruinas, escombros o derrumbes pero no encontraba nada, por ahora tocaba esperar ver que podía suceder, teníamos dos escenarios frente a nosotros, por un lado la pelea que estaba por desatarse entre el camaleón y Klaus y por otro las personas que se encontraban entre los encombros, situación de la que no estabamos al tanto.
Saintus L Spell
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Re: [Trabajo] Llamado de auxilio
La sensación que había recorrido mi cuerpo era una señal de alerta de los sentidos que uno desarrolla al estar involucrándose en tantos problemas continuamente, mientras que Saintus le había dolido un poco como les saque las dagas de su espalda se recompuso inmediatamente pero aun así seguía votando gotas de sangre que se deslizaban por toda su armadura hasta tocar las lozas de cerámica manchándolas de sangre.
¡Hare un ritual elfico en honor a esta mujer¡ - Grito Saintus para agacharse y rebuscar entre las cosas de la mujer, pues no era momento ni lugar para perder el tiempo haciéndole ritual a un enemigo que murió en mano de nosotros, teníamos algo más importante que debía de tomar toda nuestra atención, pero fue de último golpe cuando este lanzo un frasco hasta la estructura de madera que al estallar se protegió revelando su identidad ante nosotros, era un hombre bestia camaleón que dio un salto hacia atrás esquivando la explosión que apenas llego a rozarle los brazos.
Sin que se acabaran las sorpresas cayo otro guardia muerto desde las escaleras acompañado de una explosión, después Magneto aterrizo encima del cadáver todo asustado y pidiendo ayuda, entre los escombros que empezaban a caer en diferentes lugares de la casa, estaba haciéndose presencia otra persona también, en sí habían más personas de los que podíamos haber imaginado.
El sujeto salía desde los escombros, era un sujeto alto con un cabello rubio y luminoso, no era falta decir que su aura emitía un poder intimidarte diferente a todos los peleadores anterior e incluso mucho más peligroso que el camaleón, se posó enfrente de nosotros para deslizar su espada desde la funda que estaba posada en su espalda, viéndolos fijamente con una mirada asesina que no se le quitaba ni por un segundo.
Se moverán y dejaran que este sujeto pague por sus delitos o lo acompañaran en su sentencia. – Dejo muy claro el sujeto desenvainando finalmente su espada, Vse llévate de aquí al Elfo, déjame a solas con este guerrero. – Exclamo dándole las ordenes a su compañero o seguido no estaba muy claro tampoco.
El mismo hombre deslizo en segundos su lengua que se estiró envolviendo el cuello de Saintus para después dar un salto por la ventana y retraerlo consigo mismo para dejarlos fuera y cayeran en el tejado, lo hizo revolcarlo entre las tajas del techo para soltarlo y retraer nuevamente su lengua a su boca.
Se empezaron a escuchar explosiones debajo de la casa, eran los pergaminos que seguramente este sujeto había pegado, creando hoyos para que los esclavos pudieran ser liberados de la mina clandestina, y los guardias al ser superados en número no pudieron detenerlos solamente dejarlos escapar.
Ahora que ellos son libres, solo falta que termine con tu vida Magneto. – Exclamo mientras lamio el sable de su espada y la dejaba caer nuevamente a un costado viendo al empleador.
Bueno tendrás que matarme a mí también. – Dije poniendo mi arma delante de él, dejándole en claro que no sería fácil venir por la cabeza de Magneto sin ante matarme.
OFFROL
[1] Saintus debe asesinar al hombre bestia y acudir ayudar a Klaus en la batalla ya que el enemigo lo supera por mucho.
¡Hare un ritual elfico en honor a esta mujer¡ - Grito Saintus para agacharse y rebuscar entre las cosas de la mujer, pues no era momento ni lugar para perder el tiempo haciéndole ritual a un enemigo que murió en mano de nosotros, teníamos algo más importante que debía de tomar toda nuestra atención, pero fue de último golpe cuando este lanzo un frasco hasta la estructura de madera que al estallar se protegió revelando su identidad ante nosotros, era un hombre bestia camaleón que dio un salto hacia atrás esquivando la explosión que apenas llego a rozarle los brazos.
Sin que se acabaran las sorpresas cayo otro guardia muerto desde las escaleras acompañado de una explosión, después Magneto aterrizo encima del cadáver todo asustado y pidiendo ayuda, entre los escombros que empezaban a caer en diferentes lugares de la casa, estaba haciéndose presencia otra persona también, en sí habían más personas de los que podíamos haber imaginado.
El sujeto salía desde los escombros, era un sujeto alto con un cabello rubio y luminoso, no era falta decir que su aura emitía un poder intimidarte diferente a todos los peleadores anterior e incluso mucho más peligroso que el camaleón, se posó enfrente de nosotros para deslizar su espada desde la funda que estaba posada en su espalda, viéndolos fijamente con una mirada asesina que no se le quitaba ni por un segundo.
Se moverán y dejaran que este sujeto pague por sus delitos o lo acompañaran en su sentencia. – Dejo muy claro el sujeto desenvainando finalmente su espada, Vse llévate de aquí al Elfo, déjame a solas con este guerrero. – Exclamo dándole las ordenes a su compañero o seguido no estaba muy claro tampoco.
El mismo hombre deslizo en segundos su lengua que se estiró envolviendo el cuello de Saintus para después dar un salto por la ventana y retraerlo consigo mismo para dejarlos fuera y cayeran en el tejado, lo hizo revolcarlo entre las tajas del techo para soltarlo y retraer nuevamente su lengua a su boca.
Se empezaron a escuchar explosiones debajo de la casa, eran los pergaminos que seguramente este sujeto había pegado, creando hoyos para que los esclavos pudieran ser liberados de la mina clandestina, y los guardias al ser superados en número no pudieron detenerlos solamente dejarlos escapar.
Ahora que ellos son libres, solo falta que termine con tu vida Magneto. – Exclamo mientras lamio el sable de su espada y la dejaba caer nuevamente a un costado viendo al empleador.
Bueno tendrás que matarme a mí también. – Dije poniendo mi arma delante de él, dejándole en claro que no sería fácil venir por la cabeza de Magneto sin ante matarme.
OFFROL
[1] Saintus debe asesinar al hombre bestia y acudir ayudar a Klaus en la batalla ya que el enemigo lo supera por mucho.
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Sajin W
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Re: [Trabajo] Llamado de auxilio
¡Huele a carne quemada! - Grité al hombre bestia frente a mi en manera de burla al reponerme de la caida de la torre.
Tenía que hacer algo y luchar entre los tejados no era la mejor idea, la sangre seguía goteando desde mi espalda, no pasaría lo mismo que en el trabajo anterior donde por poco y perdía la vida.
Estaba desarmado frente a una lucha cuerpo a cuerpo, si bien la agilidad me permitía esquivar algunos golpes, mi fuerza no sería suficiente para acabar con aquél enemigo de aspecto extraño, uno de los guardias chifló en mi dirección lanzando una espada de calidad pobre, la hoja estaba desgastada esta era de color negra y bastante vieja. Con lo quisquillosos que eran ¿se defendían con esto?
Antes de darme cuenta la lengua que antes me había tomado por sorpresa venía en mi dirección, pero de un golpe logré repeler la adherencia, sin embargo se llevó consigo la espada desarmandome una vez más. El camaleón necesitaba tenerme a su merced y yo tenía que pensar algo rápido sabía que la altura no sería tan fulminante a menos que..
El hombre-bestia era ágil a pesar de tener piernas y brazos no tan largos, además tenía la habilidad de moverse sin ser visto, recibía cada cierto tiempo una serie de golpes que no podía descifrar, tanto así que comencé a sangrar desde el labio inferior por la propina de golpes que me dejaba el enano.
Solo podía hacer algo y era usar sus habilidades en su contra, resistí cada golpe logrando bloquear algunos, hasta que dió una patada seca en mi espalda, inmediatamente tronaron mis huesos y caí al suelo de boca, fue justo ahí cuando con su lengua rodeó nuevamente mi cuello, la tomé con fuerza y rodé como pude hasta el filo del tejado donde me dejé caer trayendo al sujeto conmigo.
Estando en aquél descenso tomé su lengua con ambas manos y lo impulsé hacia mi para apoyarme en su cuerpo y saltar, evitando asi impactar contra el suelo y aprovechando la caída para dejarlo inconsciente.
Necesitaba tomar aire estaba exhausto, desde donde se encontraba Klaus seguramente estaba en apuros y requeriría mi ayuda, sin aliento ni como poder ayudar le pedí a los guardias que quedaban en pie de lucha que fueran a prestar apoyo a mi compañero.
A lo lejos venía el fantasmita, a sus espaldas se venían decenas de hombres huyendo del recinto, algunos flacos, otros apenas podían caminar y muchos cubiertos de polvo, parecía ser que la explosión tenía algo que ver pero no tenía ánimos ni fuerzas para hablar con nadie.
¡Light! Exclamé con fuerza para que mis heridas comenzaran a brillar y la recuperación iniciara.
Última edición por Saintus L Spell el Lun Jun 01 2020, 23:12, editado 2 veces
Saintus L Spell
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Re: [Trabajo] Llamado de auxilio
Observe como mi compañero estaba peleando contra el camaleón, la pelea se ve y extenso incluso parecería que el camaleón iba a derrotar a Saintus, la diferencia de poder se podía denotar a los lejos, pero aún así no todo estaba descrito. En un pequeña jugada Saintus tomo la lengua del hombre bestia y se lanzó por el tejado utilizando el cuerpo del mismo para reducir el impacto de la caída y dejar inconsciente al camaleón.
Saintus habría vencido por poco al enemigos, aunque quedó exhausto sin poder moverse más hasta tomar algunos minutos de descanso, dándole órdenes a los guardias de que subieran para poderme apoyar.
Delante de mi tenía a un sujeto que emanaba un aura incluso peor que la mia, este sujeto iba a matar sin dudar, estaba decidido a destruir a nuestro empleador por los crímenes que había realizado, el empleador se puso detrás de mi mientras todo su cuerpo estaba temblando del pánico de ser asesinado.
Protegerme no deje que me asesine. - Con voz temblorosa y dejando brotar lágrimas como si fuera un chorro, Tranquilo nadie te cortes la garganta aunque tenga buenas razones. - Sonreí al empleador para ver nuevamente al Líder y empuñar mi arma nuevamente en contra de el.
En segundo se desencadenó la batalla mientras los aceros chocaban dejando deslumbrar que el deslumbrar que el combate había iniciado, se ven como unos movimientos ágiles y asombrosos del líder estaban haciendo mayor potencia impacto sobre mi, su movimiento eran como si estuviera viendo una ilusión rápido y preciso, logrando cortar varias veces mi cuerpo en diferentes ángulos, se veía como la sangre de dejaba derramar en cada parte de mi cuerpo.
Magnífico, has aguantado dos minutos contra mi. - Dijo mientras su espada chocaba con mi arma dejándonos enfrente, Yo soy un Rey y no puedo dejar que me ganes fácilmente. - Al decir la palabra rey mi cuerpo fue recubierto por las escamas de dragones brindándome una armadura contra los cortes del enemigos haciendo que su arma se deslizara por mi cuerpo sin causarme daño, a lo que utilizo para cuando fallar sus ataques acertarle los mío con mi arma, descendí un corte ascendente utilizando la hoja de los lados causandole un corte profundo en el pecho, este dió varios pasos hacia atrás poniendo la mano en su pecho para presionar la herida.
Desde su arma salió disparado un haz de luz que arremetió contra mi cuerpo logrando traspasar las escamas hacer seguro magia de alto nivel, me sostuve de una pierna para no caer al suelo, lanze mi arma hasta su pecho aunque esté eso la repelo con su arma dejando que pasará de largo, lo cual aproveche activar el hechizos para que devolviera hacia mi mano sin que se lo esperara, clavándose desde su espalda hasta salir por la herida que tenis en el pecho causandole la muerte inmediata.
Finalmente el arma llegó a mi mano para volverla empuñar en su funda y dejarme caer en el suelo herido mientras que el empleador también cayó desmayado por la tensión que sobrepasó todo su cuerpos, hasta que los guardias lograron quitar los escombros para poder acceder hasta la sala y resguarde a Magneto y despertarlo.
Seguro que casi te cagas encima. - Dije mientras estaba tirado en el suelo, y el todavía vivo y coleando aunque había perdido su mina clandestina.
Saintus habría vencido por poco al enemigos, aunque quedó exhausto sin poder moverse más hasta tomar algunos minutos de descanso, dándole órdenes a los guardias de que subieran para poderme apoyar.
(..)
Delante de mi tenía a un sujeto que emanaba un aura incluso peor que la mia, este sujeto iba a matar sin dudar, estaba decidido a destruir a nuestro empleador por los crímenes que había realizado, el empleador se puso detrás de mi mientras todo su cuerpo estaba temblando del pánico de ser asesinado.
Protegerme no deje que me asesine. - Con voz temblorosa y dejando brotar lágrimas como si fuera un chorro, Tranquilo nadie te cortes la garganta aunque tenga buenas razones. - Sonreí al empleador para ver nuevamente al Líder y empuñar mi arma nuevamente en contra de el.
En segundo se desencadenó la batalla mientras los aceros chocaban dejando deslumbrar que el deslumbrar que el combate había iniciado, se ven como unos movimientos ágiles y asombrosos del líder estaban haciendo mayor potencia impacto sobre mi, su movimiento eran como si estuviera viendo una ilusión rápido y preciso, logrando cortar varias veces mi cuerpo en diferentes ángulos, se veía como la sangre de dejaba derramar en cada parte de mi cuerpo.
Magnífico, has aguantado dos minutos contra mi. - Dijo mientras su espada chocaba con mi arma dejándonos enfrente, Yo soy un Rey y no puedo dejar que me ganes fácilmente. - Al decir la palabra rey mi cuerpo fue recubierto por las escamas de dragones brindándome una armadura contra los cortes del enemigos haciendo que su arma se deslizara por mi cuerpo sin causarme daño, a lo que utilizo para cuando fallar sus ataques acertarle los mío con mi arma, descendí un corte ascendente utilizando la hoja de los lados causandole un corte profundo en el pecho, este dió varios pasos hacia atrás poniendo la mano en su pecho para presionar la herida.
Desde su arma salió disparado un haz de luz que arremetió contra mi cuerpo logrando traspasar las escamas hacer seguro magia de alto nivel, me sostuve de una pierna para no caer al suelo, lanze mi arma hasta su pecho aunque esté eso la repelo con su arma dejando que pasará de largo, lo cual aproveche activar el hechizos para que devolviera hacia mi mano sin que se lo esperara, clavándose desde su espalda hasta salir por la herida que tenis en el pecho causandole la muerte inmediata.
Finalmente el arma llegó a mi mano para volverla empuñar en su funda y dejarme caer en el suelo herido mientras que el empleador también cayó desmayado por la tensión que sobrepasó todo su cuerpos, hasta que los guardias lograron quitar los escombros para poder acceder hasta la sala y resguarde a Magneto y despertarlo.
Seguro que casi te cagas encima. - Dije mientras estaba tirado en el suelo, y el todavía vivo y coleando aunque había perdido su mina clandestina.
Sajin W
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Re: [Trabajo] Llamado de auxilio
Decidí ignorar por completo la huida de los azotados esclavos mientras reponía mis fuerzas, habiendo elevado las plegarias a los dioses élficos estas comenzaron a cerrarse no del todo, siendo las más pequeñas las que desaparecían sin dejar rastro.
Levantándome teniendo un poco más de fuerza decidí subir hasta el salón principal donde esperaba encontrar todavía a Magneto con vida, cada escalón me proporcionaba una incada en la espalda justo donde no terminaban de cerrar las heridas, por lo que avanzaba con mucho cuidado apoyándome de las paredes en cada paso que daba.
Tenía que empezar a buscar trabajos más fáciles, cada vez que intentaba ganarme unas cuantas monedas me encontraba al borde de perder la vida y claro que por dinero no lo valía aunque las armas no se compran solas y las runas no llegaban a mi como una inspiración.
Una vez llegué al piso superior respiré profundamente demostrando el cansancio que cargaba conmigo, me tumbé sobre el suelo para recostarme de la pared, para mi sorpresa había un hombre rubio de muy buen ver con el pecho abierto como una flor, indignado volteé para no mirar la escena y emití involuntariamente una arcada que se escuchó en todo el lugar.
El sitio estaba repleto de sangre y Klaus se encontraba con la piel escamosa en su forma humana, lo más probable era que había luchado, contuve la respiración para evitar el dolor y me acerqué a él.
Estando a su costado extendí mi mano en señal de despedida para abrazarlo y chocar los hombros, no tenía nada más que hablar la paga era segura y probablemente llegaría en unos días.
¿Podría enviar con la recompensa una piedra preciosa que no tenga valor alguno? Solo como recuerdo. - Grité saliendo de aquel lugar de la misma manera, adolorido y cansado.
Saintus L Spell
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Re: [Trabajo] Llamado de auxilio
Por fin había terminado la noche dando paso a los rayos del sol que se escabullían entre las pequeñas ranuras de los escombros dejando caer la claridad en mi cuerpo dejando observar como las escamas se iban desapareciendo poco a poco mientras pasaba cada segundo del tiempo, los cortes aún se mantenía abierto dejando derramar pequeñas gotas de sangre, pero era de esperarse aún estaba vivo pero aun así debía seguir mejorando en mis habilidades con la espada me enfrente a un oponente que estaba bien preparado para cortar mi cabeza pero la suerte fue echada y los dioses prefirieron sonreír a mi favor ante toda esta travesía
Los esclavos se habían terminado de escapar por los agujero que dejo las detonaciones derrumbando el suelo debajo de ellos abriéndoles paso para salir a la superficie y correr lejos de ese lugar donde fueron esclavizado seguros algunos años de su vida, esta detonaciones llamaron la atención de todos los ciudadanos por lo cual los guardias tuvieron que hacer un perímetro y fingir que solo habían atacado a Lord Magneto en un intento de asesinato.
Para no dejar escapar la verdad sobre la mina clandestina que el Lord poseía debajo de su propio hogar, Saintus finalmente llego hasta el despacho para observar que Magneto seguía con vida y seguro recibiríamos la paga que merecíamos por salvarle el pellejo este día, lo cual se despidió exigiendo que le enviaran el pago en un frasco no tan lujoso y partió hacia otro lugar pegando grito a los lejos.
Pues si mi compañero seguía siendo todavía un crío así que no podía hacer mucho más que esperar que los años le hicieran madurar en algunos aspectos, apoye mis manos en el suelo para poderme levantar haciéndose notar como si el tiempo pasara muy lentamente hasta que me levantara, tome mi arma que estaba en el suelo y la volví a enfundar.
Camine hasta Magneto y me volví a sentar en uno sofá que no estaba destruido todavía, dejando escapar algunos suspiros y dejando caer mi mirada como clavos hacia su rostro, Bueno espero que la paga sea buena y ostentosa ya que estas vivo y por todo lo que tuvimos que pasar. – Exprese dejando derrochar mi autoridad ante el Lord, sin importar lo que pensara, había puesto en riesgo mi vida y además no deje que mataran a un dictador teniendo todas las razones justa de hacerlo.
Lord solo asintió aun tembloroso por todo lo que había pasado pero aun así tenia fuerza para gritarles a sus súbditos y enviarlos a resolver todo este problema de su casa y de la mina que se encontraba bajos los pies de nosotros, seguro le saldría más caro de lo que imaginaba.
El niño fantasma salió de alguna pared para dejarse caer enfrente de mí; No detuviste a los prisioneros, ¿Por qué? – Expreso el crío con duda. Pues ese no era mi trabajo, sino mantener al Lord con vida. – Dije en voz alta dejando caer mi cabeza hacia atrás y llevándome mi mirada hacia el techo destruido del edificio.
El mismo con la luz se empezaba a desintegrar como que había alcanzado algún objetivo y por fin estaba avanzando hacia la luz que tanto deseaba, Gracias Rey Dragón nos veremos en el más allá. – Dijo ante de desaparecer por completo, solo pude sonreír ante sus palabras y entrecerrar mis ojos para poder dormir una larga siesta y esperar recibir el dinero por el trabajo cumplido que habíamos realizado.
Los esclavos se habían terminado de escapar por los agujero que dejo las detonaciones derrumbando el suelo debajo de ellos abriéndoles paso para salir a la superficie y correr lejos de ese lugar donde fueron esclavizado seguros algunos años de su vida, esta detonaciones llamaron la atención de todos los ciudadanos por lo cual los guardias tuvieron que hacer un perímetro y fingir que solo habían atacado a Lord Magneto en un intento de asesinato.
Para no dejar escapar la verdad sobre la mina clandestina que el Lord poseía debajo de su propio hogar, Saintus finalmente llego hasta el despacho para observar que Magneto seguía con vida y seguro recibiríamos la paga que merecíamos por salvarle el pellejo este día, lo cual se despidió exigiendo que le enviaran el pago en un frasco no tan lujoso y partió hacia otro lugar pegando grito a los lejos.
Pues si mi compañero seguía siendo todavía un crío así que no podía hacer mucho más que esperar que los años le hicieran madurar en algunos aspectos, apoye mis manos en el suelo para poderme levantar haciéndose notar como si el tiempo pasara muy lentamente hasta que me levantara, tome mi arma que estaba en el suelo y la volví a enfundar.
Camine hasta Magneto y me volví a sentar en uno sofá que no estaba destruido todavía, dejando escapar algunos suspiros y dejando caer mi mirada como clavos hacia su rostro, Bueno espero que la paga sea buena y ostentosa ya que estas vivo y por todo lo que tuvimos que pasar. – Exprese dejando derrochar mi autoridad ante el Lord, sin importar lo que pensara, había puesto en riesgo mi vida y además no deje que mataran a un dictador teniendo todas las razones justa de hacerlo.
Lord solo asintió aun tembloroso por todo lo que había pasado pero aun así tenia fuerza para gritarles a sus súbditos y enviarlos a resolver todo este problema de su casa y de la mina que se encontraba bajos los pies de nosotros, seguro le saldría más caro de lo que imaginaba.
El niño fantasma salió de alguna pared para dejarse caer enfrente de mí; No detuviste a los prisioneros, ¿Por qué? – Expreso el crío con duda. Pues ese no era mi trabajo, sino mantener al Lord con vida. – Dije en voz alta dejando caer mi cabeza hacia atrás y llevándome mi mirada hacia el techo destruido del edificio.
El mismo con la luz se empezaba a desintegrar como que había alcanzado algún objetivo y por fin estaba avanzando hacia la luz que tanto deseaba, Gracias Rey Dragón nos veremos en el más allá. – Dijo ante de desaparecer por completo, solo pude sonreír ante sus palabras y entrecerrar mis ojos para poder dormir una larga siesta y esperar recibir el dinero por el trabajo cumplido que habíamos realizado.
Sajin W
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