❦ El Muérdago Envenenado [Alquimia]
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❦ El Muérdago Envenenado [Alquimia]
- Calle del Taller:
- Interior del Taller:
Se comenta que este oscuro y angosto taller, hace unos cincuenta y cuatro años, se trataba de la guarida de un inteligente pero macabro asesino. Leyenda o realidad, supuestamente atraía a sus víctimas al presente lugar con sus encantos y una vez dentro cometía todo tipo de atrocidades con ellas. Aquello ya es agua pasada pero, desde entonces, ningún alma se ha atrevido a pisarlo, alegando que es un lugar maldito, o que si respiras dentro de él puedes acabar envenenado o poseído.
Sin embargo, Eberus, el actual dueño del pequeño... "local", no dudó en elegir éste como su nuevo taller de alquimia. De alguna manera todo el folclore que se había formado al rededor de él le llamó la atención y pensó que reconvertirlo sería una buena estrategia de negocio.
Actualmente restaurado, El Muérdago Envenenado es un reducido taller especializado en sustancias malignas, localizado entre dos de las casas de una calle algo alejada del núcleo mercantil de Beltrexus. Llama la atención porque su tejado está bastante más bajo que el de dichas casas y su anchura es mucho menor. Es un lugar que aún alberga cierta oscuridad y genera a quien lo visita una cierta sensación claustrofóbica, cosa que no mejora el extraño gusto decorativo del dueño y su costumbre de no ordenar demasiado sus artilugios, esencias y plantas. Al entrar te podrás encontrar siempre algún esqueleto sentado contra una de sus redondeadas paredes de piedra, diferentes tipos de plantas que cuelgan del bajo techo, elementos extraños en el interior de vasijas y tarros de vidrio, y sobre todo un olor a polvo, flores y humedad.
Eberus, normalmente se encuentra siempre de espaldas a la entrada del establecimiento, delante de una encimera de piedra que sale de la propia pared en la que trabaja con brebajes y libros, y por supuesto siempre con su característica túnica oscura y la capucha puesta.
Sin embargo, Eberus, el actual dueño del pequeño... "local", no dudó en elegir éste como su nuevo taller de alquimia. De alguna manera todo el folclore que se había formado al rededor de él le llamó la atención y pensó que reconvertirlo sería una buena estrategia de negocio.
Actualmente restaurado, El Muérdago Envenenado es un reducido taller especializado en sustancias malignas, localizado entre dos de las casas de una calle algo alejada del núcleo mercantil de Beltrexus. Llama la atención porque su tejado está bastante más bajo que el de dichas casas y su anchura es mucho menor. Es un lugar que aún alberga cierta oscuridad y genera a quien lo visita una cierta sensación claustrofóbica, cosa que no mejora el extraño gusto decorativo del dueño y su costumbre de no ordenar demasiado sus artilugios, esencias y plantas. Al entrar te podrás encontrar siempre algún esqueleto sentado contra una de sus redondeadas paredes de piedra, diferentes tipos de plantas que cuelgan del bajo techo, elementos extraños en el interior de vasijas y tarros de vidrio, y sobre todo un olor a polvo, flores y humedad.
Eberus, normalmente se encuentra siempre de espaldas a la entrada del establecimiento, delante de una encimera de piedra que sale de la propia pared en la que trabaja con brebajes y libros, y por supuesto siempre con su característica túnica oscura y la capucha puesta.
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¡OFERTA ESPECIAL!
Llévate un vial consumible de la exclusiva medicina multipropósito completamente gratis por tu compra.
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PRODUCTOS Y PRECIOS
Recetas Exclusivas y Especiales
- Nivel Principiante -
Medicina multipropósito (¡Receta especial!) (45Æ): [Elixir, Consumible] Analgésico, antiséptico, antibiótico y desinfectante todo en uno en base a hierbas. Puede ayudar con varias enfermedades. Se fabrican 3 por el costo de producción.
Gel luminiscente (¡Receta exclusiva!) (45Æ): [Elixir, Limitado, 2 usos] Al extenderlo sobre la superficie de un objeto, este alumbrará sus alrededores como si se tratara de una vela, pero en un tono azulado. El efecto desaparece gradualmente al cabo de una hora.
- Nivel Avanzado -
Protector solar factor total (¡Receta exclusiva!) (110Æ): [Elixir, Limitado, 1 uso] Rociarlo por la piel de un vampiro, sin dejarse ni una poquita, le permitirá caminar bajo el sol conservando el pellejo durante media hora o dos rondas, lo que acabe primero.
Recetas de nivel Principiante
Esencia de Dulces Sueños (45Æ): [Veneno, Limitado, 1 Uso] Líquido transparente con un suave aroma a Anís. 5 minutos luego de beber al menos 100ml, la persona caerá en un profundo sueño. Golpear al afectado lo despertará.
Filo Venenoso (45Æ): [Veneno, Limitado, 1 Uso] Envenena un arma o sus proyectiles para que, cuando causen heridas, inhiban la coagulación. Esto disminuye la efectividad de cualquier intento por sanar la herida a la mitad.
Poción de Salud Diluida (45Æ): [Elixir, Limitado, 1 Uso] Sana las heridas leves en pocos segundos.
Elixir del Sabueso (45Æ): [Elixir, Limitado, 1 Uso] Líquido de fuerte y desagradable aroma que, tras beberse, duplica la sensibilidad del oído y el olfato por media hora.
Perfume de Freya (45Æ): [Elixir, Limitado, 2 Usos] Líquido en base a amorttentia de agradable aroma que, al ser usado, incrementará considerablemente el atractivo del personaje para los demás.
Poción de Estoicismo (45Æ): [Elixir, Limitado, 2 Usos] Otorga inmunidad ante el dolor e ignorar limitaciones derivadas de heridas (mientras sea razonable). Dura 2 rondas.
Poción de Recuperación (40Æ): [Elixir, Consumible] Consumir este objeto inicia un proceso de recuperación que tarda 8 horas, tras los cuales se remueven daños y afecciones de todo tipo. Esto permite sanar daños en que un master solicite un proceso especial de recuperación (ej: consecuencias de roles). Remueve enfermedades, pero no maldiciones.
Kit Alquímico Inferior (45Æ): [Limitado, Requiere ser Alquimista, 2 Usos] Set de viales con fórmulas secretas diversas que permiten llevar a cabo una Técnica de Alquimia a nivel Aprendiz.
Recetas de nivel Avanzado
Jugo de Visión Nocturna (85Æ): [Elixir, Limitado, 2 Usos] Líquido oscuro y de sabor tostado. Te permite ver en la oscuridad durante 15 minutos.
Rocío de Ortiga (85Æ): [Veneno, Limitado, 1 Uso] Líquido verde que, al ser rociado sobre alguien, le causará inmediatamente una fuerte y casi irresistible comezón. Si cae en los ojos o la nariz perjudicará el sentido asociado.
Toque de Sopor (85Æ): [Veneno, Limitado, 1 Uso] Gel amarillento que, al aplicarse en un arma, permite que envenene al herir. El afectado sentirá un intenso calor que le hará comenzar a marearse. Mientras más persista combatiendo, más mareado se sentirá, hasta caer inconsciente. Dura 10 minutos en el arma.
Fuego Embotellado (85Æ): [Elixir, Limitado, 1 Uso] Líquido anaranjado que, al hacer contacto con el aire, se incendia inmediatamente. Puede cubrir un área de hasta 1 metro cuadrado. Las llamas duran aproximadamente 1 minuto (a menos que se expandan en un material inflamable).
Veneno de El Blanco (85Æ): [Veneno, Limitado, 2 Usos] Líquido blanquecino, insípido e inodoro que, al ser bebido, hará que la persona olvide por completo los hechos de la última semana. El efecto dura 1 hora.
Poción de Resistencia Mágica (85Æ): [Elixir, Limitado, 1 Uso] Líquido púrpura que, al beberse, hace que, durante esta ronda, el próximo efecto mágico usado en tu contra reduzca su efectividad a la mitad. No actúa sobre efectos ya recibidos.
Poción de Salud (85Æ): [Elixir, Limitado, 1 Uso] Sana hasta 2 heridas moderadas o leves en pocos segundos.
Kit Alquímico Regular (120Æ): [Limitado, Requiere ser Alquimista, 2 Usos] Set de viales con fórmulas secretas diversas que permiten llevar a cabo una Técnica de Alquimia a nivel Avanzado o inferior.
Última edición por Eberus el Jue 7 Mar - 12:42, editado 12 veces
Eberus
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Re: ❦ El Muérdago Envenenado [Alquimia]
Le habían hablado de un antiguo local especializado en venenos y Valeria no se aguantaba las ganas de ir a echarle un vistazo. No solamente por la necesidad de mantener controladas las habilidades de la competencia, ni por la posibilidad de aprender algún truco nuevo, sino, y quizá esto era lo más interesante, porque el taller lo habían abierto en una antigua mazmorra de tortura.
Aunque Val era muy joven para conocer de primera mano los sucesos supuestamente acaecidos allí haría como medio siglo, había oído historias y, aunque no creería una palabra acerca de maldiciones y sustancias intoxicantes hasta que lo comprobase ella misma con sus propios sentidos, no podía evitar esa curiosidad morbosa enviando cosquilleos por su columna vertebral.
El barrio en el que se encontraba el taller no era nada del otro mundo, una calle suburbana como cualquier otra. un tanto rústica, pero nada amenazante. Aun así, cuando abrió la puerta del local, se tomó un momento para olisquear los aromas que llegaban desde el interior. Por precaución. Hiervas, compuestos, catalizadores... los olores típicos de un taller alquímico, nada por lo que alarmarse.
Hasta que entró y se fijó en lo que estaba mezclando el (supuso) dueño del taller. Valeria atravesó rápidamente la pequeña habitación y tiró del hombre hacia atrás, justo a tiempo de evitar que el frasco le estallara en la cara. Aún así, ambos recibieron algunos cortes menores en los brazos.
—¿Pero es que nadie le ha explicado lo que ocurre cuando mezcla una raíz expansiva con un catalizador de base hiposoluble? —preguntó mientras se incorporaba—. ¿Tiene algún desinfectante por aquí? Si no limpiamos rápido los cortes, el veneno que estaba mezclando podría causarnos problemas. —Ofreció la mano al hombre para ayudarlo a incorporarse mientras echaba un vistazo a los estantes del taller—. No importa, llevo algunos ingredientes encima. Con sus utensilios, podemos confeccionar una pomada en un momento. Fíjese bien. Le hará falta si va a seguir experimentando así.
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OFF: Enseño a Eberus la receta Medicina multipropósito:[Elixir, Consumible] Analgésico, antiséptico, antibiótico y desinfectante todo en uno en base a hierbas. Puede ayudar con varias enfermedades. Se fabrican 3 por el costo de producción.
- Precio de los materiales: 30 Aeros
- Nivel: Principiante
No tengo venenos de tu nivel, así que te enseño esto y te dejo también un pequeño consejo: aunque te especialices en venenos, que está muy bien, aprender las demás recetas del mercado puede venirte bien para subir la profesión (ganas 1pp por cada receta que aprendas). Por otro lado, el kit alquímico te da acceso a las técnicas de alquimia. Muchas están enfocadas a la curación, pero algunas como Descomponer, Trasmutación, Crear antídoto... te pueden venir bien en tus roles.
Besines (y perdón por el metarol, no me denuncies, que me cruje la admin xD)
Aunque Val era muy joven para conocer de primera mano los sucesos supuestamente acaecidos allí haría como medio siglo, había oído historias y, aunque no creería una palabra acerca de maldiciones y sustancias intoxicantes hasta que lo comprobase ella misma con sus propios sentidos, no podía evitar esa curiosidad morbosa enviando cosquilleos por su columna vertebral.
El barrio en el que se encontraba el taller no era nada del otro mundo, una calle suburbana como cualquier otra. un tanto rústica, pero nada amenazante. Aun así, cuando abrió la puerta del local, se tomó un momento para olisquear los aromas que llegaban desde el interior. Por precaución. Hiervas, compuestos, catalizadores... los olores típicos de un taller alquímico, nada por lo que alarmarse.
Hasta que entró y se fijó en lo que estaba mezclando el (supuso) dueño del taller. Valeria atravesó rápidamente la pequeña habitación y tiró del hombre hacia atrás, justo a tiempo de evitar que el frasco le estallara en la cara. Aún así, ambos recibieron algunos cortes menores en los brazos.
—¿Pero es que nadie le ha explicado lo que ocurre cuando mezcla una raíz expansiva con un catalizador de base hiposoluble? —preguntó mientras se incorporaba—. ¿Tiene algún desinfectante por aquí? Si no limpiamos rápido los cortes, el veneno que estaba mezclando podría causarnos problemas. —Ofreció la mano al hombre para ayudarlo a incorporarse mientras echaba un vistazo a los estantes del taller—. No importa, llevo algunos ingredientes encima. Con sus utensilios, podemos confeccionar una pomada en un momento. Fíjese bien. Le hará falta si va a seguir experimentando así.
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OFF: Enseño a Eberus la receta Medicina multipropósito:[Elixir, Consumible] Analgésico, antiséptico, antibiótico y desinfectante todo en uno en base a hierbas. Puede ayudar con varias enfermedades. Se fabrican 3 por el costo de producción.
- Precio de los materiales: 30 Aeros
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No tengo venenos de tu nivel, así que te enseño esto y te dejo también un pequeño consejo: aunque te especialices en venenos, que está muy bien, aprender las demás recetas del mercado puede venirte bien para subir la profesión (ganas 1pp por cada receta que aprendas). Por otro lado, el kit alquímico te da acceso a las técnicas de alquimia. Muchas están enfocadas a la curación, pero algunas como Descomponer, Trasmutación, Crear antídoto... te pueden venir bien en tus roles.
Besines (y perdón por el metarol, no me denuncies, que me cruje la admin xD)
Reike
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Re: ❦ El Muérdago Envenenado [Alquimia]
Eberus se hallaba aquella pacífica mañana probando combinaciones de materiales, a veces basándose en habladurías que había oído por ahí, y a veces aleatorias. De vez en cuando, con razón, podían ocurrir accidentes. Pero para Eberus era una de las mejores maneras de descubrir recetas útiles. Le gustaba experimentar con el caos.
- Pero, ¡pero chiquilla! ¡La madre que me parió! ¡Para qué me desconcentras! Mira la que has liado... - exclamaba el pequeño pero experimentado brujo en el suelo, mientras miraba los pequeños cortes en los brazos de ambos. Nunca aceptaría como propio un error de tal nivel de ridiculez.
- ¿Hiposoluble dices? Anda, anda... si estos son todos iguales. Esos nombrecillos los inventan para vender, nada más. - refunfuñaba. Pero en el fondo, se había dado cuenta de su equivocación alquímica y lo que ocurría era que le avergonzaba profundamente admitirlo.- Muchas gracias, joven. Sí, mira, mira. Toma este cuenco. Puedes poner todo ahí para elaborarla - dijo señalando a la zona del caldero y el alambique.
El brujo, aún con la expresión algo seria, se estaba mostrando más amable de lo normal. Parecía sentarle bien la amabilidad de su primera visita al taller. - Vaya, vaya... O sea que con eso se puede preparar un unguento curativo... ¿Qué clase de ser eres? Vienes a mi taller, me corrig... perdón, me desconcentras y haces que explote mi experimento, y luego pretendes adueñarte de mi taller para crear un unguento que yo no conozco para curarme a mí, al propio dueño del taller... Siento que debería molestarme, pero joven, curiosamente tu visita no me ha ofendido.
Eberus asentía con la cabeza mirando a Valeria con una expresión de ligera sorpresa, como gesto de aprobación a todo el conocimiento que había mostrado sobre la profesión aquella joven. Cuando ella se dispuso a salir del taller, el brujo levantó la mano como gesto de despedida, sonriendo muy levemente.
OFF: Muy agradecido por la Reike salvaje que cayó del cielo para enseñarnos unas buenas recetas <3. Muchas gracias también por los sabios consejos, que los utilizaré sin duda.
- Pero, ¡pero chiquilla! ¡La madre que me parió! ¡Para qué me desconcentras! Mira la que has liado... - exclamaba el pequeño pero experimentado brujo en el suelo, mientras miraba los pequeños cortes en los brazos de ambos. Nunca aceptaría como propio un error de tal nivel de ridiculez.
- ¿Hiposoluble dices? Anda, anda... si estos son todos iguales. Esos nombrecillos los inventan para vender, nada más. - refunfuñaba. Pero en el fondo, se había dado cuenta de su equivocación alquímica y lo que ocurría era que le avergonzaba profundamente admitirlo.- Muchas gracias, joven. Sí, mira, mira. Toma este cuenco. Puedes poner todo ahí para elaborarla - dijo señalando a la zona del caldero y el alambique.
El brujo, aún con la expresión algo seria, se estaba mostrando más amable de lo normal. Parecía sentarle bien la amabilidad de su primera visita al taller. - Vaya, vaya... O sea que con eso se puede preparar un unguento curativo... ¿Qué clase de ser eres? Vienes a mi taller, me corrig... perdón, me desconcentras y haces que explote mi experimento, y luego pretendes adueñarte de mi taller para crear un unguento que yo no conozco para curarme a mí, al propio dueño del taller... Siento que debería molestarme, pero joven, curiosamente tu visita no me ha ofendido.
Eberus asentía con la cabeza mirando a Valeria con una expresión de ligera sorpresa, como gesto de aprobación a todo el conocimiento que había mostrado sobre la profesión aquella joven. Cuando ella se dispuso a salir del taller, el brujo levantó la mano como gesto de despedida, sonriendo muy levemente.
OFF: Muy agradecido por la Reike salvaje que cayó del cielo para enseñarnos unas buenas recetas <3. Muchas gracias también por los sabios consejos, que los utilizaré sin duda.
Eberus
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Re: ❦ El Muérdago Envenenado [Alquimia]
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Profesión Usada: Alquimia
Título: Principiante (Eberus) Maestro (Reike)
Puntos Obtenidos: 1 (Eberus)
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Obtienen también 2 puntos de experiencia por uso del taller.
Reike
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Re: ❦ El Muérdago Envenenado [Alquimia]
Había sido un viaje largo, pero considerando lo poco confiado que era el elfo, prefería siempre acudir con un viejo conocido, y en este caso, uno de sus viejos compañeros del gremio de asesinos, tenía un taller de alquimia en la isla de los brujos, si aún estaba vivo, seguramente podría hacer justo lo que el elfo necesitaba.
La primera dificultad siempre era meterse al pueblo de los brujos, algo que el asesino usaba en beneficio propio, pues de ese modo contaba con todo un sistema de seguridad por el que no tenía que pagar un aero. Una vez pasados los puntos de control de los brujos, recorrer las calles podría resultar un poco más sencillo, aunque Destino se mantenía en guardia.
Finalmente llegó al lugar indicado, o al menos de acuerdo a las indicaciones que una vez le había dado el asesino para llegar a su taller, el pelinegro observó el nombre del local -El muérgano envenenado- Leyó para sí mismo -No es el mejor, ni el peor que Destino haya leído- Se dijo y se dirigió a la puerta para tocar con el código 76 usado en el gremio de asesinos para indicar "Hola hermano de armas, soy uno de los sobrevivientes de la masacre del gremio de asesinos, he vagado solitario ante el temor de caer en una trampa pero siempre atento a que otros sobrevivientes me contacten para restablecer el honor glorioso de la Hermandad de la Media Noche."
Como era también costumbre entre ellos, no verían sus rostros, Destino pasó una pequeña nota bajo la puerta indicando que era uno de los sobrevivientes del gremio, y que necesitaba un Elixir del Sabueso para completar una nueva misión, además de pasar algunas monedas bajo la puerta para dejar pagado el trabajo. Luego de esto, realizó el código 03 en la puerta, dando 3 golpes a la misma para indicar que "se marchaba a algún lugar cercano y que volvería al siguiente día a la hora en que la luna se asomara en el cielo".
Destino caminó por un rato mirando al cielo, pensando que en este punto ya había terminado el post pero necesitaba llegar a las veinte líneas escribiendo cualquier cosa simplemente porque es el mínimo de calidad aceptable autoimpuesto por su usuario, desde luego que el élfo no sabía que tenía un usuario, pero buen, en fin, creo que se entiende la idea. Bueno ya está, ahora sí tenemos las veinte líneas completas.
[1] Pues eso, quiero el coso de sabueso y aprovechar la promoción del otro cosito gratis, gracias =) La primera dificultad siempre era meterse al pueblo de los brujos, algo que el asesino usaba en beneficio propio, pues de ese modo contaba con todo un sistema de seguridad por el que no tenía que pagar un aero. Una vez pasados los puntos de control de los brujos, recorrer las calles podría resultar un poco más sencillo, aunque Destino se mantenía en guardia.
Finalmente llegó al lugar indicado, o al menos de acuerdo a las indicaciones que una vez le había dado el asesino para llegar a su taller, el pelinegro observó el nombre del local -El muérgano envenenado- Leyó para sí mismo -No es el mejor, ni el peor que Destino haya leído- Se dijo y se dirigió a la puerta para tocar con el código 76 usado en el gremio de asesinos para indicar "Hola hermano de armas, soy uno de los sobrevivientes de la masacre del gremio de asesinos, he vagado solitario ante el temor de caer en una trampa pero siempre atento a que otros sobrevivientes me contacten para restablecer el honor glorioso de la Hermandad de la Media Noche."
- Código 76 de los asesinos:
Como era también costumbre entre ellos, no verían sus rostros, Destino pasó una pequeña nota bajo la puerta indicando que era uno de los sobrevivientes del gremio, y que necesitaba un Elixir del Sabueso para completar una nueva misión, además de pasar algunas monedas bajo la puerta para dejar pagado el trabajo. Luego de esto, realizó el código 03 en la puerta, dando 3 golpes a la misma para indicar que "se marchaba a algún lugar cercano y que volvería al siguiente día a la hora en que la luna se asomara en el cielo".
Destino caminó por un rato mirando al cielo, pensando que en este punto ya había terminado el post pero necesitaba llegar a las veinte líneas escribiendo cualquier cosa simplemente porque es el mínimo de calidad aceptable autoimpuesto por su usuario, desde luego que el élfo no sabía que tenía un usuario, pero buen, en fin, creo que se entiende la idea. Bueno ya está, ahora sí tenemos las veinte líneas completas.
Destino
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Re: ❦ El Muérdago Envenenado [Alquimia]
Absorto en sus cavilaciones de alquimista, lo último que se esperaba era que su primer cliente llamase a la puerta con golpes sonoros. Se sobresaltó y derramó un poco de la solución con la que estaba trabajando. - Me cago en sus muelas... ¡Voy! - contestó molesto.
Su enfado fue atenuado en parte por la alegría de recibir un cliente, pues estaba desesperanzado tras varios meses trabajando solo ahí metido. También es verdad que, con todos los viajes que realizaba, posiblemente hubiera perdido muchas oportunidades de negocio por no estar allí presente...
Le extrañó que la persona no abriera la puerta para entrar por sí misma. - Maldita sea... esto no es una guarida de ningún tipo, es un dichoso taller de alquimia. ¿A caso no lo pone bien claro en el cartel de ahí afuera? - se quejaba en su cabeza, pensando que quizá se tratara de algún despistado que llamaba a la puerta suponiendo que su comercio se trataba de un hogar... angosto, oscuro y descuidado, pero un hogar al fin y al cabo.
Cuando fue a abrir la puerta, vio lo que aquel misterioso cliente había deslizado bajo la puerta. Aquello le extrañó, pero admiró su estilo y atrajo su atención. Leyó atento la carta y metió las monedas en uno de los bolsillos de su túnica. - ¿Gremio? ¿Qué gremio? - se preguntó. Lo más lógico era pensar en el gremio de alquimistas, pues de eso trataba el taller. Pero, ¿a qué venía tanta discreción? Parecía que los miembros de ese tal gremio se comunicaban sin revelar su apariencia, pues si aquella persona decía conocer a Eberus, se habría comunicado con él de manera corriente según sus costumbres. Parecían incluso hasta comunicarse mediante un lenguaje de golpes, que por supuesto Eberus no entendía pero del que se había dado cuenta por la misteriosa actuación de aquella misteriosa persona.
Pensando en todo aquello, se puso a preparar un Elixir del Sabueso. Además, para mostrarle simpatía y su admiración por ese estilo discreto, decidió regalarle un vial de la medicina que le había enseñado a elaborar aquella simpática joven. El pedido lo completó con una nota que ató con una cuerda junto a ambos recipientes, en la que se leía: "Aquí tienes tu elixir, y una medicina multipropósito de regalo, que nunca viene mal. Mira, yo no soy miembro de ningún gremio, pero me gusta vuestro estilo. Tu manera de actuar ha despertado mi curiosidad, y me gustaría saber más sobre esa misión de la que hablas. Podríamos conocernos. Ya sabes dónde encontrarme".
Suponía que en algún momento volvería a por su pedido, por lo que lo dejó preparado en el alfeizar de la ventana de su taller, por la parte que daba a la calle, oculto por una ilusión que suprimiría cuando volviera a escuchar de nuevo aquellos característicos golpes a la puerta.
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OFF: Creo 3 viales de medicina multipropósito (los tres correspondientes al coste de creación), quedándome 2 y regalándole uno de ellos a Destino. También, le vendo un Elixir del Sabueso por 45 aeros.
Costes de creación: Medicina multipropósito: 30 / Elixir del Sabueso: 30
Total: +45 / -30 / -30 = -15 aeros para mí
Su enfado fue atenuado en parte por la alegría de recibir un cliente, pues estaba desesperanzado tras varios meses trabajando solo ahí metido. También es verdad que, con todos los viajes que realizaba, posiblemente hubiera perdido muchas oportunidades de negocio por no estar allí presente...
Le extrañó que la persona no abriera la puerta para entrar por sí misma. - Maldita sea... esto no es una guarida de ningún tipo, es un dichoso taller de alquimia. ¿A caso no lo pone bien claro en el cartel de ahí afuera? - se quejaba en su cabeza, pensando que quizá se tratara de algún despistado que llamaba a la puerta suponiendo que su comercio se trataba de un hogar... angosto, oscuro y descuidado, pero un hogar al fin y al cabo.
Cuando fue a abrir la puerta, vio lo que aquel misterioso cliente había deslizado bajo la puerta. Aquello le extrañó, pero admiró su estilo y atrajo su atención. Leyó atento la carta y metió las monedas en uno de los bolsillos de su túnica. - ¿Gremio? ¿Qué gremio? - se preguntó. Lo más lógico era pensar en el gremio de alquimistas, pues de eso trataba el taller. Pero, ¿a qué venía tanta discreción? Parecía que los miembros de ese tal gremio se comunicaban sin revelar su apariencia, pues si aquella persona decía conocer a Eberus, se habría comunicado con él de manera corriente según sus costumbres. Parecían incluso hasta comunicarse mediante un lenguaje de golpes, que por supuesto Eberus no entendía pero del que se había dado cuenta por la misteriosa actuación de aquella misteriosa persona.
Pensando en todo aquello, se puso a preparar un Elixir del Sabueso. Además, para mostrarle simpatía y su admiración por ese estilo discreto, decidió regalarle un vial de la medicina que le había enseñado a elaborar aquella simpática joven. El pedido lo completó con una nota que ató con una cuerda junto a ambos recipientes, en la que se leía: "Aquí tienes tu elixir, y una medicina multipropósito de regalo, que nunca viene mal. Mira, yo no soy miembro de ningún gremio, pero me gusta vuestro estilo. Tu manera de actuar ha despertado mi curiosidad, y me gustaría saber más sobre esa misión de la que hablas. Podríamos conocernos. Ya sabes dónde encontrarme".
Suponía que en algún momento volvería a por su pedido, por lo que lo dejó preparado en el alfeizar de la ventana de su taller, por la parte que daba a la calle, oculto por una ilusión que suprimiría cuando volviera a escuchar de nuevo aquellos característicos golpes a la puerta.
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OFF: Creo 3 viales de medicina multipropósito (los tres correspondientes al coste de creación), quedándome 2 y regalándole uno de ellos a Destino. También, le vendo un Elixir del Sabueso por 45 aeros.
Costes de creación: Medicina multipropósito: 30 / Elixir del Sabueso: 30
Total: +45 / -30 / -30 = -15 aeros para mí
Eberus
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Re: ❦ El Muérdago Envenenado [Alquimia]
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Re: ❦ El Muérdago Envenenado [Alquimia]
Todos los estragos causados por las mariposas llegaban a su fin. Nuevamente, la ciudad de Dundarak estaba en paz, pero la conmoción y tristeza era palpable en el ambiente. La fortuna se había convertido en desgracia y con ello se ponía punto y final a las fiestas.
Por mi parte el viaje había rendido frutos, aprovechándome de la situación con mi nuevo compañero Eberus habíamos logrado sacar provecho de la desgracia ajena. Aún tenía algunos perfumes en mi haber para vender. Las habilidades del alquimista resultaron en suma provechosa, y ante la oportunidad, le solicité al mago si era capaz de fabricarme y venderme algo, con el dinero de los perfumes se lo pagaría sin ningún inconveniente.
Bueno Eberus, conseguimos una buena suma de dinero, veo que tus habilidades de alquimista quizás no sean tan malas – mencioné con una sonrisa, resaltando que su primer objetivo de hacer perfumes falsos había fracasado estrepitosamente, pero incluso así ese fallo fue el que nos permitió salir victoriosos de aquellas fiestas.
El ilusionista había hecho mención de su trabajo en la ciudad de los magos en un humilde taller, pero mi viaje al sur tardaría en llegar, tenía muchas cosas pendientes que hacer todavía en el oeste del continente.
Sé que tu taller está lejos, pero ¿no podrías elaborar una Esencia de Dulce Sueños? Tengo entendido qué se hace con licores y en estas fiestas abunda. – solicité la poción, en parte estaba buscando una forma de lidiar con amenazas sin llegar a los extremos, ya que con mis habilidades de sangre o incluso con los elixires que tenía, los desgraciados terminaban muertos o con traumas incurables, por lo que optar en dormirlos podría ahorrarme inconvenientes en un futuro. - ¿Crees que puedas venderme un frasco? dinero me sobra - acompañé con una carcajada.
Por mi parte el viaje había rendido frutos, aprovechándome de la situación con mi nuevo compañero Eberus habíamos logrado sacar provecho de la desgracia ajena. Aún tenía algunos perfumes en mi haber para vender. Las habilidades del alquimista resultaron en suma provechosa, y ante la oportunidad, le solicité al mago si era capaz de fabricarme y venderme algo, con el dinero de los perfumes se lo pagaría sin ningún inconveniente.
Bueno Eberus, conseguimos una buena suma de dinero, veo que tus habilidades de alquimista quizás no sean tan malas – mencioné con una sonrisa, resaltando que su primer objetivo de hacer perfumes falsos había fracasado estrepitosamente, pero incluso así ese fallo fue el que nos permitió salir victoriosos de aquellas fiestas.
El ilusionista había hecho mención de su trabajo en la ciudad de los magos en un humilde taller, pero mi viaje al sur tardaría en llegar, tenía muchas cosas pendientes que hacer todavía en el oeste del continente.
Sé que tu taller está lejos, pero ¿no podrías elaborar una Esencia de Dulce Sueños? Tengo entendido qué se hace con licores y en estas fiestas abunda. – solicité la poción, en parte estaba buscando una forma de lidiar con amenazas sin llegar a los extremos, ya que con mis habilidades de sangre o incluso con los elixires que tenía, los desgraciados terminaban muertos o con traumas incurables, por lo que optar en dormirlos podría ahorrarme inconvenientes en un futuro. - ¿Crees que puedas venderme un frasco? dinero me sobra - acompañé con una carcajada.
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Pedido:
Esencia de Dulces Sueños: [Veneno, Limitado, 1 Uso] Líquido transparente con un suave aroma a Anís. 5 minutos luego de beber al menos 100ml, la persona caerá en un profundo sueño. Golpear al afectado lo despertará.
Igualmente, si la oferta de la Medicina multipropósito sigue en pie me agradaría recibir una gratis.
Zagreus
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Re: ❦ El Muérdago Envenenado [Alquimia]
Las secuelas de aquel extraño ataque masivo en Dundarak fueron grotescas. Sangre, cuerpos sin alma, y la pacífica pero tétrica atmósfera posterior al caos conformaban un paisaje urbano terrible, que se detallaría con pena en los libros de los historiadores.
Pero a estos dos les importaba bien poco. Incluso se habían lucrado de aquella desgracia para llevarse unos aeros al bolsillo. Zagreus ya estaba pensando en gastárselos, y le comentó a Eberus que si podría elaborarle allí, sin el equipo de su taller, una Esencia de Dulces Sueños.
- ¿Eh? Vamos, que quieres que te elabore algo para dormir a la gente, ¿no? Fácil, compañero. Déjame pensar...
Allí, la flora diferiría mucho de la de las islas del sur, donde acostumbraba a trabajar. Pero seguro que algún alquimista de la zona podría ofrecerles la planta que necesitaba.
La fortuna les sonrió, pues un amable alquimista les ofreció gratuitamente un ramillete de dicha planta... O quizás estaría mejor relatarlo de forma más fiel a la realidad. Un alquimista, a causa de todo el caos, se dejó la puerta abierta de su taller, y estos dos se aprovecharon una vez más.
Con esas plantas, no necesitaba mucho más para elaborar el elixir. Solo tendrían que esperar hasta la mañana siguiente, para que el frío rocío confluyese con el éter para dar lugar al elixir, puro y efectivo.
______
OFF: Esto no ocurre en mi taller, sino en Dundarak, después de estos acontecimientos. Le vendo a Zagreus una Esencia de Dulces sueños, con un descuento de 5 aeros acordado por privado, y de regalo un vial consumible de medicina multipropósito creada aquí.
Cuentas: Zagreus: -40 / Eberus: -30+40 = +10
Pero a estos dos les importaba bien poco. Incluso se habían lucrado de aquella desgracia para llevarse unos aeros al bolsillo. Zagreus ya estaba pensando en gastárselos, y le comentó a Eberus que si podría elaborarle allí, sin el equipo de su taller, una Esencia de Dulces Sueños.
- ¿Eh? Vamos, que quieres que te elabore algo para dormir a la gente, ¿no? Fácil, compañero. Déjame pensar...
Allí, la flora diferiría mucho de la de las islas del sur, donde acostumbraba a trabajar. Pero seguro que algún alquimista de la zona podría ofrecerles la planta que necesitaba.
La fortuna les sonrió, pues un amable alquimista les ofreció gratuitamente un ramillete de dicha planta... O quizás estaría mejor relatarlo de forma más fiel a la realidad. Un alquimista, a causa de todo el caos, se dejó la puerta abierta de su taller, y estos dos se aprovecharon una vez más.
Con esas plantas, no necesitaba mucho más para elaborar el elixir. Solo tendrían que esperar hasta la mañana siguiente, para que el frío rocío confluyese con el éter para dar lugar al elixir, puro y efectivo.
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OFF: Esto no ocurre en mi taller, sino en Dundarak, después de estos acontecimientos. Le vendo a Zagreus una Esencia de Dulces sueños, con un descuento de 5 aeros acordado por privado, y de regalo un vial consumible de medicina multipropósito creada aquí.
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Eberus
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Re: ❦ El Muérdago Envenenado [Alquimia]
La anécdota más espeluznante y descabellada que podía contar desde hacía unos días, le había aportado también algo de lo que podría sacar mucho provecho. Un brujo invocando a un vampiro... Dioses, mirando aquello con perspectiva se dio cuenta de que era algo muy, muy interesante. Sin duda investigaría más sobre cómo invocar seres de los que poder aprovechar su poder.
Pero esto lo dejaría para más adelante. Aparte de este conocimiento, salió de allí con una fórmula alquímica con propiedades extremadamente útiles. Sobre todo para los vampiros. Para asegurarse de que sus cavilaciones eran ciertas y de que aquello que vio bajo la estatua de Thor tenía sentido, decidió hacer una prueba.
Después de la segunda comida del día, cuando el sol calentaba con más rabia, se dirigió a una plaza donde pudiera sentarse y tomar el sol. En una mano, se aplicó un poco de esa sustancia, y en la otra no. Ambas las mantuvo una hora descubiertas bajo la luz del sol, y luego volvió a su taller. Un rato después pudo confirmar sus sospechas, y riéndose de manera ligeramente siniestra se puso a imaginar la fortuna que podría ganar haciendo negocios con los vampiros, pues aquella sustancia protegía de la luz del sol.
El plan era perfecto, al menos en su cabeza. Eberus era conocedor de las tensiones que había en Sacrestic por parte de algunas personas. Si en algún momento los vampiros quisieran volver a recuperar su capital, nadie se esperaría que pudieran atacar bajo la luz del sol, y Eberus podía hacer eso posible y hacerse rico en el proceso.
Pensando en todas estas posibilidades, se puso a descifrar la fórmula en su taller. Fue un proceso largo, en el que mantuvo una sonrisa pícara por todo lo que pasaba por su cabeza, pero finalmente logró replicarlo con exactitud. El primer elixir del que había descifrado la composición desde cero sin ayuda alguna, le podría llenar de gloria. Ahora quedaba por hacer la otra parte del plan.
______
OFF: Me deshago del Protector solar factor total: [Consumible, 2 cargas] (obtenido aquí) para aprender su fórmula y así obtener esta receta:
Protector solar factor total: [Elixir, Limitado, 1 uso] Rociarlo por la piel de un vampiro, sin dejarse ni una poquita, le permitirá caminar bajo el sol conservando el pellejo durante media hora o dos rondas, lo que acabe primero.
Coste de materiales: 90 aeros
Alquimia, nivel Avanzado
Pero esto lo dejaría para más adelante. Aparte de este conocimiento, salió de allí con una fórmula alquímica con propiedades extremadamente útiles. Sobre todo para los vampiros. Para asegurarse de que sus cavilaciones eran ciertas y de que aquello que vio bajo la estatua de Thor tenía sentido, decidió hacer una prueba.
Después de la segunda comida del día, cuando el sol calentaba con más rabia, se dirigió a una plaza donde pudiera sentarse y tomar el sol. En una mano, se aplicó un poco de esa sustancia, y en la otra no. Ambas las mantuvo una hora descubiertas bajo la luz del sol, y luego volvió a su taller. Un rato después pudo confirmar sus sospechas, y riéndose de manera ligeramente siniestra se puso a imaginar la fortuna que podría ganar haciendo negocios con los vampiros, pues aquella sustancia protegía de la luz del sol.
El plan era perfecto, al menos en su cabeza. Eberus era conocedor de las tensiones que había en Sacrestic por parte de algunas personas. Si en algún momento los vampiros quisieran volver a recuperar su capital, nadie se esperaría que pudieran atacar bajo la luz del sol, y Eberus podía hacer eso posible y hacerse rico en el proceso.
Pensando en todas estas posibilidades, se puso a descifrar la fórmula en su taller. Fue un proceso largo, en el que mantuvo una sonrisa pícara por todo lo que pasaba por su cabeza, pero finalmente logró replicarlo con exactitud. El primer elixir del que había descifrado la composición desde cero sin ayuda alguna, le podría llenar de gloria. Ahora quedaba por hacer la otra parte del plan.
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OFF: Me deshago del Protector solar factor total: [Consumible, 2 cargas] (obtenido aquí) para aprender su fórmula y así obtener esta receta:
Protector solar factor total: [Elixir, Limitado, 1 uso] Rociarlo por la piel de un vampiro, sin dejarse ni una poquita, le permitirá caminar bajo el sol conservando el pellejo durante media hora o dos rondas, lo que acabe primero.
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Re: ❦ El Muérdago Envenenado [Alquimia]
-En algún lugar-
- Pues bien... Si tanto crees que puedes ayudarme entonces ve a conseguir algo útil. - Con estás palabras di fin a la discusión que se suscitaba entre mi hermano y yo. Esperaba que con ello entendiera me diera un poco de espacio, aún no me adaptaba el todo a su compañía, pero era algo en lo que debíamos trabajar ahora que él mismo había decidido viajar conmigo.
Al día siguiente se había marchado, sólo dejó una carta en la que decía. "Volveré en unos días y para asegurarme de que me esperaras llevo a Bomull conmigo". - Maldito hijo de... - Respiré profundo, no iba a manchar el nombre de mi madre porque el pillo tenía cerebro.
Bueno al menos eso me daría tiempo para pensar y encontrarme conmigo misma, y tal vez darle una paliza cuando regresara por llevarse a mi bola de pelos...
- Lo que pasó en Beltrexus -
Meleis había desembarcado en la isla, tenía cosas que buscar allí, al mismo tiempo sus pasos lo guiaron a una tienda que llamó su atención, si le llevaba algo últil a Meraxes quizás podría apaciguar un poco su ira. No quería presionarla, pero eran familia y la verdad le hacía mucha ilusión poder viajar con ella después de tantos años.
Entró al negocio, observaba, se acercó al sujeto que estaba de espaldas al mostrador y se aclaró la voz. - Buenas tardes, me dijeron que acá podía conseguir excelente calidad de brebajes. - Dijo en una forma tímida y con una media sonrisa, evitaba ver a los ojos al vendedor a pesar de que el dragón lo superaba considerablemente en altura.
Le entrego un pedazo de papel doblado con su pedido con la esperanza de que aquel hombre pudiera crearlo.
- Pedido:
- Poción de Salud Diluida: [Elixir, Limitado, 1 Uso] Sana las heridas leves en pocos segundos.
Y aprovecho la promo de la medicina multipropósito
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Re: ❦ El Muérdago Envenenado [Alquimia]
Un día más experimentando en su humilde taller, profundamente concentrado en sus recipientes, sus plantas y sus catalizadores. En esa ocasión estaba experimentando con materiales que al entrar en contacto comenzaban a volar por los aires, dejando finas estelas y puntitos luminosos de varios colores, aunque por escasos instantes. Cuando entró su nuevo cliente, justo iba a hacer contactar dichos materiales, y esperándose que tuvieran el efecto mencionado, se sobresaltó al escuchar detrás de él un sonido que no esperaba.
- ¡Dioses! La madre que... Buen día, joven. - rectificó justo a tiempo, pues casi le soltaba un improperio sin venir a cuento. Mientras, el fugaz destello alquímico se dibujaba en el aire tras él. - Cojones, menos mal que me pillas de buen humor. Te lo diré de buenas maneras. Llama a la puerta antes de entrar, si es que vuelves por aquí, ¿vale? Cuando me concentro, cualquier sonido inesperado suena en mi cabeza como un asalto a mis pensamientos. Por los Dioses...
Luego agarró la nota que le ofreció el muchacho. - ¿No sabes leer? - le preguntó bromeando, seguido de una risa bromista de las suyas, de las que suenan como una tetera. - Vale... una curativa para... para quien te la haya encargado. ¿Y sabes qué? Como me pillas de buenas, te voy a dar también un pequeño vial de una medicina a base de hierbas. Puedes hacer lo que quieras con ella. Puedes quedártela tú, o dársela a tu superior para ganarte su favor. Tú decides - le dijo suponiendo que ese joven estaba haciéndole los recados a alguien que le tenía bajo mando.
- ¡Ah! Por cierto, y quien te dijera que mis brebajes son de gran calidad... - pausó dramáticamente. - ... está mintiendo - bromeó volviendo a reirse. - Estoy bromeando, comprueba tú mismo la calidad de mis creaciones cuando llegue el momento de usarlas. Seguro que volverás a por más.
______
OFF: Mera me paga 45 aeros, y yo gasto 30 aeros por la creación de la Poción de Salud Diluida, saliendo con +15 aeros de beneficio. Le doy de regalo por la promoción un vial consumible de Medicina multipropósito, creada aquí.
- ¡Dioses! La madre que... Buen día, joven. - rectificó justo a tiempo, pues casi le soltaba un improperio sin venir a cuento. Mientras, el fugaz destello alquímico se dibujaba en el aire tras él. - Cojones, menos mal que me pillas de buen humor. Te lo diré de buenas maneras. Llama a la puerta antes de entrar, si es que vuelves por aquí, ¿vale? Cuando me concentro, cualquier sonido inesperado suena en mi cabeza como un asalto a mis pensamientos. Por los Dioses...
Luego agarró la nota que le ofreció el muchacho. - ¿No sabes leer? - le preguntó bromeando, seguido de una risa bromista de las suyas, de las que suenan como una tetera. - Vale... una curativa para... para quien te la haya encargado. ¿Y sabes qué? Como me pillas de buenas, te voy a dar también un pequeño vial de una medicina a base de hierbas. Puedes hacer lo que quieras con ella. Puedes quedártela tú, o dársela a tu superior para ganarte su favor. Tú decides - le dijo suponiendo que ese joven estaba haciéndole los recados a alguien que le tenía bajo mando.
- ¡Ah! Por cierto, y quien te dijera que mis brebajes son de gran calidad... - pausó dramáticamente. - ... está mintiendo - bromeó volviendo a reirse. - Estoy bromeando, comprueba tú mismo la calidad de mis creaciones cuando llegue el momento de usarlas. Seguro que volverás a por más.
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OFF: Mera me paga 45 aeros, y yo gasto 30 aeros por la creación de la Poción de Salud Diluida, saliendo con +15 aeros de beneficio. Le doy de regalo por la promoción un vial consumible de Medicina multipropósito, creada aquí.
Eberus
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Re: ❦ El Muérdago Envenenado [Alquimia]
Aprovechaba la noche para deslizarme entre las callejuelas de aquella gran ciudad. Atesoraba los momentos en soledad, una sensación efímera en aquel viaje en compañía de la joven maga.
Eran pocos los conocidos que tenía en aquella ciudad, pero un recuerdo lejano del norte dirigió mis pasos... Aquel viejo ladrón que conocí en el festival de las mariposas me había garantizado que valía la pena pasar por su taller. La curiosidad me inquietaba, sus habilidades eran particulares y mi alquimista de confianza estaba en la capital del oeste, meses de viaje para volver a la tierra de los vampiros.
La gente que paseaba bajo la noche estrellada respondía a mis preguntas por indicaciones con rostros apáticos y extrañados. Indicándome con desconcierto la dirección del local del alquimista alejado del centro de la ciudad. El muérdago envenenado, un nombre peculiar para alguien que vende pociones.
Aquel pequeño establecimiento resaltaba del resto de casas alrededor, parecía que las piedras de sus paredes se hubiesen retorcido haciendo que aquella guarida tuviese una contracción, acentuando lo extravagante de la estructura que sobresalía por desentonar de los edificios vecinos.
La puerta abierta declaraba que seguía abierto, entré fijándome en lo que parecía ser otro cliente que esperaba estático hasta los huesos en un pequeño banco.
Tiempo sin vernos Eberus… -Dije levantando mi voz con mi tono serio característico.
Había poco tiempo para conversar sobre trivialidades y temas personales, mi visita era puntual. Tras un breve intercambio de preguntas cordiales, recalqué aquella frase publicitaria del mago ladrón.
¿Qué es aquello que tanto alarde hacías como alquimista? Tengo unos cuantos aeros de nuestro último encuentro… ¿Crees que tengas algo digno de mi interés?
_______________________________
Off
Estoy interesado en el Protector solar factor total, pago el precio que coloque el vendedor. Cuando hay dinero no hay lloros.
Eran pocos los conocidos que tenía en aquella ciudad, pero un recuerdo lejano del norte dirigió mis pasos... Aquel viejo ladrón que conocí en el festival de las mariposas me había garantizado que valía la pena pasar por su taller. La curiosidad me inquietaba, sus habilidades eran particulares y mi alquimista de confianza estaba en la capital del oeste, meses de viaje para volver a la tierra de los vampiros.
La gente que paseaba bajo la noche estrellada respondía a mis preguntas por indicaciones con rostros apáticos y extrañados. Indicándome con desconcierto la dirección del local del alquimista alejado del centro de la ciudad. El muérdago envenenado, un nombre peculiar para alguien que vende pociones.
Aquel pequeño establecimiento resaltaba del resto de casas alrededor, parecía que las piedras de sus paredes se hubiesen retorcido haciendo que aquella guarida tuviese una contracción, acentuando lo extravagante de la estructura que sobresalía por desentonar de los edificios vecinos.
La puerta abierta declaraba que seguía abierto, entré fijándome en lo que parecía ser otro cliente que esperaba estático hasta los huesos en un pequeño banco.
Tiempo sin vernos Eberus… -Dije levantando mi voz con mi tono serio característico.
Había poco tiempo para conversar sobre trivialidades y temas personales, mi visita era puntual. Tras un breve intercambio de preguntas cordiales, recalqué aquella frase publicitaria del mago ladrón.
¿Qué es aquello que tanto alarde hacías como alquimista? Tengo unos cuantos aeros de nuestro último encuentro… ¿Crees que tengas algo digno de mi interés?
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Zagreus
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Re: ❦ El Muérdago Envenenado [Alquimia]
El pícaro cincuentón se hallaba concentrado en sus brebajes, envuelto en vapores de olor a manzanilla y disfrutando de esa esencia mientras se aseguraba de que el olor de la preparación era el adecuado.
- ¡Mierda! Selena, es urgente. Necesito un poco de Hoja de Rey
- A sus ordenes... - contestó con ironía, levantando su mirada seria del libro que estaba devorando intrigada. Con un movimiento suave y ondulante de su mano, hizo crecer un tallo frondoso de Hoja de Rey de una de las macetas con tierra que tenían por allí.
- Mira, observa. ¿Sabes por qué?
Selena se acercó a mirar de cerca el mortero. - Claro... le falta un poco de ron a esto.
- ¡Déjate de bromas, joder! Eso es que no tienes ni idea - El brujo agarró apresurado tres hojas de la nueva planta y las añadió al recipiente. Absorto en la observación de la pasta final, notable fue el brinco que dio hacia atrás cuando una voz lejanamente conocida le sorprendió.
- ¡Por los jodidos Dioses! Zagreus... ¿Cómo me has encontrado aquí en las islas? - contestó con voz acelerada a su antiguo conocido del norte, con el que había formado un buen dúo en un acontecimiento que terminó en un auténtico desastre.
Luego atendió a su petición mientras terminaba la medicina y le ofreció algo que, con certeza, le interesaría. - Con esto no te hará falta resguardarte del día, compañero - dijo haciéndole un gesto a Selena para que le ofreciera uno de los frascos que tenía por allí. - Mira, y si me lo compras, te doy de regalo un poco de esta medicina que estoy haciendo. ¡Ah! Y, ¿quieres uno de mis perfumes magistrales también? - bromeó haciéndole un gesto cómplice.
_______
OFF: Fabrico tres viales de medicina multipropósito (los correspondientes al coste de creación) y le vendo a Zagreus lo siguiente:
- Protector solar factor total (110 aeros): [Elixir, Limitado, 1 uso] Rociarlo por la piel de un vampiro, sin dejarse ni una poquita, le permitirá caminar bajo el sol conservando el pellejo durante media hora o dos rondas, lo que acabe primero.
- Medicina multipropósito (1 vial) (0 aeros - Regalo promocional): [Elixir, Consumible] Analgésico, antiséptico, antibiótico y desinfectante todo en uno en base a hierbas. Puede ayudar con varias enfermedades. Se fabrican 3 por el costo de producción.
- ¡Mierda! Selena, es urgente. Necesito un poco de Hoja de Rey
- A sus ordenes... - contestó con ironía, levantando su mirada seria del libro que estaba devorando intrigada. Con un movimiento suave y ondulante de su mano, hizo crecer un tallo frondoso de Hoja de Rey de una de las macetas con tierra que tenían por allí.
- Mira, observa. ¿Sabes por qué?
Selena se acercó a mirar de cerca el mortero. - Claro... le falta un poco de ron a esto.
- ¡Déjate de bromas, joder! Eso es que no tienes ni idea - El brujo agarró apresurado tres hojas de la nueva planta y las añadió al recipiente. Absorto en la observación de la pasta final, notable fue el brinco que dio hacia atrás cuando una voz lejanamente conocida le sorprendió.
- ¡Por los jodidos Dioses! Zagreus... ¿Cómo me has encontrado aquí en las islas? - contestó con voz acelerada a su antiguo conocido del norte, con el que había formado un buen dúo en un acontecimiento que terminó en un auténtico desastre.
Luego atendió a su petición mientras terminaba la medicina y le ofreció algo que, con certeza, le interesaría. - Con esto no te hará falta resguardarte del día, compañero - dijo haciéndole un gesto a Selena para que le ofreciera uno de los frascos que tenía por allí. - Mira, y si me lo compras, te doy de regalo un poco de esta medicina que estoy haciendo. ¡Ah! Y, ¿quieres uno de mis perfumes magistrales también? - bromeó haciéndole un gesto cómplice.
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OFF: Fabrico tres viales de medicina multipropósito (los correspondientes al coste de creación) y le vendo a Zagreus lo siguiente:
- Protector solar factor total (110 aeros): [Elixir, Limitado, 1 uso] Rociarlo por la piel de un vampiro, sin dejarse ni una poquita, le permitirá caminar bajo el sol conservando el pellejo durante media hora o dos rondas, lo que acabe primero.
- Medicina multipropósito (1 vial) (0 aeros - Regalo promocional): [Elixir, Consumible] Analgésico, antiséptico, antibiótico y desinfectante todo en uno en base a hierbas. Puede ayudar con varias enfermedades. Se fabrican 3 por el costo de producción.
Cuentas:
+110 (precio del protector)
- 90 (coste de creación del protector)
- 30 (coste de creación de la medicina)
=
-10 aeros para mí.
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- 90 (coste de creación del protector)
- 30 (coste de creación de la medicina)
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Eberus
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Re: ❦ El Muérdago Envenenado [Alquimia]
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Re: ❦ El Muérdago Envenenado [Alquimia]
Avogato ya llevaba muchas mas cosas de las que podía cargar, pero eso no le evitaría que siguiera en aquella masacre de compras compulsivas por el mero hecho de gastar aeros, se adentro por callejones, y recorrió calles y cuando menos lo espero, se encontró de nuevo en una taller, este tenia una apariencia algo.. peculiar., algo en una pared brillaba con un resplandor azul, y de esa forma, como polillas al fuego, Avogato se acerco al resplandor y lo toco, y su pata también resplandeció.
-Woow... no se lo que es pero lo quiero- señalaría Avogato mientras se limpiaba aquel viscoso y luminiscente en sus ropas, al notar que sus ropas se iluminaban ladeo un poco la cabeza. -y dame una medicina que me vaya a ayudar en caso de que esto sea toxico- señalaría el gato haciendo un esfuerzo por no lamerse la pata.
OFF: buenas vengo por el gel luminiscente y la medicina multipropósito, por favor y gracias.
-Woow... no se lo que es pero lo quiero- señalaría Avogato mientras se limpiaba aquel viscoso y luminiscente en sus ropas, al notar que sus ropas se iluminaban ladeo un poco la cabeza. -y dame una medicina que me vaya a ayudar en caso de que esto sea toxico- señalaría el gato haciendo un esfuerzo por no lamerse la pata.
OFF: buenas vengo por el gel luminiscente y la medicina multipropósito, por favor y gracias.
Nero Crimson
Borracho de Aerandir
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Re: ❦ El Muérdago Envenenado [Alquimia]
Escuchó el crujir de la puerta y miró de reojo, sorprendido por la visita. No se alegró demasiado, sin embargo, porque en lugar de una buena moza o un ser digno y normal se trataba de un pequeño hombre felino. Pensó que Beltrexus se estaba corrompiendo con tanta visita extranjera, y no pudo evitar alzar las cejas y sacudir su cabeza al ver cómo el cliente hundía sus dedos en su gel luminiscente de exposición.
- Selena, échalo de aquí - dijo a regañadientes después de que el hombre gato verbalizara su pedido. Ella se puso en pie y le contestó con seriedad.
- No hagas caso al brujo, está frustrado porque se está haciendo mayor y cada vez tiene menos pelo. Toma, aquí tienes - agarró un pequeño recipiente levemente luminoso y un pequeño paquete de telas mullidas con tres viales de medicina y se las ofreció al hombre gato. - Gracias por tu visita, que tengas un buen día.
- ¿Cómo te atreves a decirme eso delante de mis clientes? Maldita elfa inútil... - refunfuñó en voz baja cuando el visitante iba a salir por la puerta.
- Tsch, ¿inútil? Si no fuera por mí el único cliente de hoy se habría ido con sus aeros en el bolsillo. Deberías estar agradecido, viejo cascarrabias...
- Que me estoy quedando calvo dice... ¿Tú te has visto las arrugas?
________
Elaboro lo siguiente y se lo vendo al bueno de Avogato:
Gel luminiscente: coste de creación: 30 / precio de venta: 45
Medicina multipropósito: coste de creación: 30 / precio de venta: 45
45*2= 90 aeros de precio total
(45-30)*2= 30 aeros que me llevo
- Selena, échalo de aquí - dijo a regañadientes después de que el hombre gato verbalizara su pedido. Ella se puso en pie y le contestó con seriedad.
- No hagas caso al brujo, está frustrado porque se está haciendo mayor y cada vez tiene menos pelo. Toma, aquí tienes - agarró un pequeño recipiente levemente luminoso y un pequeño paquete de telas mullidas con tres viales de medicina y se las ofreció al hombre gato. - Gracias por tu visita, que tengas un buen día.
- ¿Cómo te atreves a decirme eso delante de mis clientes? Maldita elfa inútil... - refunfuñó en voz baja cuando el visitante iba a salir por la puerta.
- Tsch, ¿inútil? Si no fuera por mí el único cliente de hoy se habría ido con sus aeros en el bolsillo. Deberías estar agradecido, viejo cascarrabias...
- Que me estoy quedando calvo dice... ¿Tú te has visto las arrugas?
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Elaboro lo siguiente y se lo vendo al bueno de Avogato:
Gel luminiscente: coste de creación: 30 / precio de venta: 45
Medicina multipropósito: coste de creación: 30 / precio de venta: 45
45*2= 90 aeros de precio total
(45-30)*2= 30 aeros que me llevo
Eberus
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