Re: Llamada de auxilio [Interpretativo][Libre][CERRADO]

**Destino** Miér Mar 16 2016, 06:30

A pesar de su aplastante victoria, la bruja no parecía una victoriosa ganadora, al parecer el poder la agotaba en extremo, cosa que al menos era un alivio para el elfo, aunque en ese momento no pensaba en ella como enemiga, sino como una persona compleja, tal vez impulsiva pero no por ello malvada -Parece más inconsciente que muerta- Dijo el elfo ya un poco más calmado ante aquella fatal posibilidad, sin embargo, y a pesar de ser una de su misma raza, no haría el más mínimo esfuerzo en intentar sanarla, bien debería poder hacerlo ella misma y si no era capaz entonces no merecía poseer la magia que le había sido dada.

La peliblanca intentó excusarse tras las palabras del elfo y a fin de cuentas, podía tener razón ¿Qué podría haber hecho? -Unos nacen para matar, otros nacen para morir, en algún momento los papeles se invierten y los ciclos se cierran- Auguró el elfo mientras se acercaba a la bruja, manteniendo siempre una distancia prudente para no desatar la furia del corcel mientras el oso aún gemía aunque de manera más silenciosa ante el cuerpo de la peliroja.

¿Cuál es tu misión?- Preguntó el elfo intrigado, ciertamente aquella mujer le resultaba un completo misterio ¿Qué podría estar haciendo ella en ese lugar? ¿Qué buscaba? Preguntas que el elfo había abandonado hacía largo rato y que ahora volvían a su mente, aunque él tampoco había sido del todo transparente con sus motivos para estar ahí, y a pesar de ser conocidos, la desconfianza era algo fácil de generar en tales situaciones.

El esperanzador deseo de la bruja había resultado interesante también para el elfo que permaneció en silencio durante unos instantes -Los elfos perdieron más, es lógico que haya más resentimientos, aunque Destino no estuvo presente en las guerras, ha conocido algunos datos, unos bastante desagradables y tristes- Un breve silencio dio paso a un comentario de mal augurio -Haría falta un mal peor que Terpoli, algo más devastador y poderoso, para lograr que brujos y elfos acaben por unirse, pero a la vez, harían falta líderes que sepan coordinar tropas de ambas razas haciendo a un lado las diferencias- De alguna forma, para el elfo todo terminaba en una batalla, así que a fin de cuentas, tampoco resultaba tan diferente a la peliblanca, ambos eran sumamente bélicos, combativos, tan diferentes y a la vez, con esas extrañas similitudes que podrían ser las razones para la unión de ambas razas.

El día apenas empezaba, pero Destino tenía una ruta marcada y un camino por recorrer, sin embargo podía aún tomarse un descanso, aunque no estuviera totalmente de acuerdo con la impulsiva decisión de la peliblanca, no podía dejarla sola en su evidente estado de debilidad, así que al menos de momento se quedaría junto a ella un poco más -Necesitas descansar- Musitó intentando parecer más serio para con ello disimular su preocupación ante el estado de la mujer -¿A dónde irás ahora?- Preguntó el elfo esperando obtener algo más de información acerca de la misteriosa bruja, tal vez podrían compartir un tramo del camino, o si venía de la dirección opuesta le podría dar algo de información de lo que hubiese visto de camino.

Elen Calhoun Jue Mar 17 2016, 07:54

- Menos mal, entonces despertará en cosa de una hora, puede que menos. - musitó la joven tras escuchar las palabras del elfo, que aseguraba que la guardiana no parecía estar muerta sino inconsciente. Aquello le quitaba un peso de encima, pero también marcaba un tiempo límite para abandonar la zona y evitar más problemas, pues cuando Aradia volviese en sí probablemente no estuviese de buen humor. Elen escuchó atentamente al sanador, parpadeando de vez en cuando para humedecer sus ojos, que poco a poco comenzaban a recuperar su color natural. Con ello las borrosas siluetas empezaron a hacerse más claras, ya podía atisbar lo que tenía más cerca de sí, pero aún tardaría un poco en estar recuperada del todo.

Destino preguntó por la misión que había mencionado, pero la bruja era reacia a revelar los males que conocía, pensando que con ello ayudaba a que la gente no entrase en pánico, así que guardó silencio de momento y dejó que el elfo siguiese hablando, ésta vez sobre los resentimientos que existían entre sus razas. Tenía razón, los suyos habían perdido más en aquella guerra, no solo vidas sino también sus hogares en las islas, viéndose obligados a buscar un nuevo lugar en que asentarse, los bosques de Sandorai. Por eso la de cabellos cenicientos entendía que pudiesen mostrarse desconfiados con los hechiceros, pero al igual que Destino, ella tampoco había tomado parte en aquella batalla, ni tampoco sus padres, que desde pequeña le habían inculcado que nadie ganaba cuando había un derramamiento de sangre tan terrible como el que se produjo en la guerra.

Sí, puede que los magos se quedasen con las islas, pero ¿a qué precio? Miles de vidas habían acabado antes de tiempo por un motivo que para ella, resultaba insuficiente. Siguió escuchando, mientras el sanador aseguraba que haría falta un mal devastador para unir a las razas contra un enemigo común, algo peor que lo de Terpoli, en que integrantes de todas ellas participaron para liberar la modesta villa. El problema es que eso ya existía, pero la mayoría de la gente no tenía idea de ello, y no sabrían nada hasta que fuese demasiado tarde. Él mismo había sufrido ya una posesión, y lo que estaba por venir iba a ser mucho peor que eso, tanto como para que la joven se apurase a desarrollar sus habilidades mágicas, a pesar del coste que le suponían.

- Ya hay un mal peor que los nigromantes suelto por estas tierras… - comentó, pues si alguien iba a creer sus palabras ese sería Destino, que ya había visto de primera mano a un demonio en la mansión Redstone. - Pero el azar ha querido que muy pocos hayamos tenido la desgracia de toparnos con él. - prosiguió, al tiempo que finalmente, recuperaba la vista por completo. Tras parpadear un par de veces, dirigió la vista hacia el oso y su guardiana, que yacía tendida junto a un árbol pero aún respiraba, pronto tendría que irse de allí para no volver a entrar en combate con ella. - Hace menos de un mes fui a la ciudad de los dragones, y con ayuda de otra bruja tuve que sacar a un demonio del cuerpo de un niño, pero cada vez serán más, y no vendrán solos. - dijo lentamente, mientras en su mente se alternaban las imágenes de la criatura sombría que a punto había estado de matarla en la llanura y las de los jinetes, que cada vez estaban más cerca de conseguir cruzar a aquel plano, momento en que sembrarían el terror y llevarían la muerte allá donde fuesen.

- Mi misión es detenerlos, tanto a ellos como a quienes los envían, es por ello que estoy en estos bosques. Me dirijo al pantano para cazar a una bestia y obtener de sus escamas un potenciador, que con suerte me servirá para elaborar algún tipo de pócima de protección contra esos seres oscuros. - reveló, para luego quedar en silencio durante unos instantes. - Bien, ya conoces mi motivo, ¿cuál es el tuyo? ¿Por qué persigues a alguien hasta un lugar tan complicado? - se permitió preguntar, al tiempo que acariciaba el cuello de su montura.

Aisling Jue Mar 17 2016, 20:41

Escuche el saludo que mi compañera me había dado y acepte la pequeña pasta que me había ofrecido, le di un mordisco y el sabor dulce recorrió mi boca, era muy extraño probar este tipo de alimentos cuando cargas con pocos aeros, por lo que lo devore lentamente.

Mire a mi compañera y quise darle las gracias por la pasta. Pero no pude hacerlo, la sangre que había perdido termino logrando hacer que volviera a quedarme profundamente dormida, no se cuánto tiempo paso pero el gigantesco estruendo de un rayo me despertó completamente y me levante de golpe, todavía sentada en donde había sido mi cama de siesta, busque a mi compañera con la vista pero me di cuenta de que ella no estaba a mi lado, pensando que había salido me levante completamente.

Mire afuera de la cueva, parecía que la tormenta había causado más destrozos de los que había previsto y el bosque parecía muy agitado, los pájaros guardaban silencio y los animalitos no estaban curioseando como suelen hacerlo.

Mire bien a mi alrededor y mi compañera se estaba recuperando junto a un joven alto con el cabello parecido a la noche más clara, levante la guardia pero al verla a ella tan calmada junto a aquel muchacho baje la guardia y me dedique a escuchar.
No sabía que había pasado pero todo parecía tan silencioso y tenso, sabía que los animales estaban aterrorizados por lo que decidí calmarlos un poco.

agarre mi bolsa y saque mi flauta, la coloque en posición y suavemente comencé a entonar una [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo] suave que poco a poco fue bajando la tensión de los animales los cuales volvieron a salir de sus escondites, con recelo las aves y los ratones salieron primero seguidos de otros animalitos igual de pequeños.

En unos momentos el bosque recupero su agradable calma de siempre y los animalitos siguieron rápidamente con sus actividades diarias, seguí con las ultimas notas y un pájaro se posó en mi hombro piando notas al aire para terminar juntos la cancion, le di una suave sonrisa y fije mi vista en mis compañeros preguntándoles - ¿podrían decirme que paso aquí? Por favor – mientras sacaba algunas migas de la pasta para darle al pajarito.

**Destino** Vie Mar 18 2016, 03:49

La respuesta de la bruja parecía indicar que no había sido su intención asesinar a la elfa, lo cual la redimía un poco ante los ojos del elfo que a fin de cuentas, también era un asesino sin derecho a juzgarla, sin embargo, no era su ataque contra la enemiga lo que había alarmado al elfo, y bien se lo haría saber -Tal vez despierte, tal vez no, pero sea como sea, lo mejor es no quedarse a averiguarlo- Comentó el elfo mientras daba un vistazo alrededor en busca del mejor camino posible para continuar su camino.

Extrañamente y a pesar de las negativas que en principio habían surgido entre ambos, y el recelo que guardaban a revelar sus motivos para estar en ese lugar, la peliblanca finalmente aceptó contar algo de su misteriosa misión, lo cual parecía ser algo más siniestro de lo que el elfo hubiera imaginado, pues entonces, aquella experiencia en la mansión de Lunargenta no había sido un caso aislado para la bruja, tal vez recorría toda Aerandir en busca de eventos como ese; aún recordaba con cierto temor aquella exasperante sensación de ser solamente un pasajero en su propio cuerpo, sin poder controlar sus acciones, sí ella lidiaba constantemente contra ese tipo de situaciones entonces bien que se merecía su respeto.

Unos instantes de silencio se formaros después que la bruja terminara su explicación -Llevas una carga muy grande sobre tus solitarios hombros- Dijo con algo de pena en su tono, aunque luego lo ocultaría al exponer sus motivos, al menos hasta donde pudiera revelar, era apenas un novato y no sabía de qué maneras el gremio podría castigar el hecho de revelar información confidencial, aunque si algo estaba claro ya es que la bruja no estaba del lado de su enemigo -Destino persigue a un hombre...- Dijo el elfo aún sin querer revelar más de la cuenta -Y una vez que lo alcance la misión es...- La frase del elfo fue cortada afortunadamente en el momento justo por la aparición de una pequeña niña que había salido aparentemente de la nada, pues el elfo había estado demasiado distraído como para notar su salida de la cueva, aunque lo que sí había notado sin falta era la suave tonada con la cual los animales se acercaban a ella, causando que incluso el oso que se había mantenido gimiendo por su dueña, comenzara a calmarse mientras miraba fijamente en dirección a la niña -¿Y tú quién eres?- Dijo Destino un poco alarmado mientras sacaba su espada y se ponía en guardia, sabía que no era una niña normal, pues una niña normal no estaría sola en el bosque con semejante tranquilidad, además parecía tener cierto control sobre los animales, por lo que tal vez podría ser otra elfa, amiga de la demente con la que habían luchado hacía apenas unos instantes, una última mirada de interrogación hacia la bruja le ayudaría al elfo a decidir si atacar a la pequeña o no, ahora solo la rápida respuesta de la bruja podría ser el muro de contención o el desencadenante de un ataque.

Elen Calhoun Vie Mar 18 2016, 13:44

Destino no parecía tan preocupado por el estado de su congénere como hubiese imaginado la bruja, ni siquiera trató de acercarse a ella para confirmar que siguiese con vida, sino todo lo contrario, ya buscaba con la mirada el mejor camino para alejarse del lugar. Era comprensible, a fin de cuentas también había sido atacado por una de las bestias de la guardiana, pero por alguna razón la de ojos verdes imaginó que los elfos entre sí tendrían una relación más estrecha, dada su naturaleza. De todos modos estaba en lo cierto, lo mejor para ambos sería no seguir allí cuando Aradia despertase, o la pelea podría volver a comenzar de cero, desgastándolos aún más.

La joven no podría volver a utilizar sus poderes con tanta intensidad sin un descanso, así que se limitó a asentir con la cabeza y desviar la vista hacia Sombra, que se mostraba muy tranquilo a pesar de todo lo que acababa de suceder. El animal estaba más que acostumbrado a ver en acción a su dueña, y por tanto sabía que debía mantenerse en todo momento lejos de aquella cosa brillante que ella manipulaba, pero no tenía miedo del elemento. Gracias a la magia del elfo, la benjamina de los Calhoun ya podía volver a subirse a la silla de montar y ponerse en marcha rumbo al pantano, pero prefirió aguardar unos instantes, aprovechando que Destino empezaba a hablar sobre el encargo que lo había traído hasta allí.

Perseguía a un hombre, y aunque no llegó a terminar la siguiente frase, era fácil imaginar cuál sería el final de aquel sujeto, nadie se desplazaba hasta tan lejos para atrapar a otra persona, sobre todo teniendo en cuenta que había una alta probabilidad de que lo encontrase antes una bestia y lo convirtiese en su aperitivo. Los lastimeros gemidos del oso que yacía junto a la guardiana cesaron al escuchar una suave melodía, mientras el resto de moradores del bosque empezaban a salir de sus escondrijos, confiados.

Aquello era obra de la pequeña, que no dudó en acercarse a ambos y preguntar por lo que había pasado, pero Destino no la conocía, y de inmediato echó mano a su espada, al tiempo que se ponía en guardia. - ¡No, espera! - exclamó la bruja, interponiéndose entre ambos para proteger a la dragona. - Estoy en deuda con ella. - comentó segundos después, esperando que el caballero se calmase y bajase el arma, pues la niña ya había demostrado con creces que no era una amenaza. - El oso de la cueva me atacó por sorpresa y me costó mucho dejarlo inconsciente, pero el dolor era tal que apenas podía mover la pierna. Ella llegó justo antes de que despertase de nuevo… y me salvó la vida. - explicó, mientras se apartaba un poco para dirigir la vista hacia la dragona.

- Hemos tenido un percance con una elfa pero ya no es un peligro, al menos de momento. - añadió, para que la pequeña supiese lo que había pasado, aunque no disponían de mucho tiempo antes de que Aradia recuperase la consciencia.

Aisling Vie Mar 18 2016, 21:28

Aquel muchacho había sacado su espada en guardia apenas me diviso y por unos instantes creí que me rebanaría pero mi compañera lo detuvo a tiempo, suspire aliviada y escuche que había pasado, parecía que había habido una pelea con una elfa y estaba ahora inconsciente en el suelo al lado de sus compañeros animales, quería preguntar los detalles pero primero tenía que presentarme ante el muchacho y mi compañera por lo que con vos suave e infantil les dije mi nombre – mi nombre es Aisling y ¿el de ustedes? – les pregunte mientras veía el suelo y comenzaba a recolectar hojas caídas hasta hacer un montón de ellas.

Escuche lo que me dijeron mis compañeros y les pregunte – ¿por qué los ataco aquella elfa creía que eran seres pacíficos? - seguí recolectando hojas, mientras los escuchaba a ambos eran realmente interesantes en especial el de cabello negro había algo en el que olía tan bien en el que probablemente era algún ser mágico pero no le di más importancia.

Cuando recolecte suficientes hojas las lleve todas a la cueva y me coloque al lado del oso, según la tradición tenía que aprovechar todo lo que su muerte pudiera ofrecerme o su muerte seria en vano, por lo que saque una daga y comencé a quitarle la piel, llevaba muerto una noche por lo que apestaba pero eso no me detuvo en mi tarea.

Mientras abría el estómago y sacaba las vísceras les pregunte a mis compañeros, - ¿alguno de ustedes podría cavar un agujero por favor? – espere su respuesta y continúe destazándolo si no sacaba pronto sus vísceras y las enterraba su cadáver comenzaría a crear enfermedades para los demás animales del bosque.

**Destino** Dom Mar 20 2016, 04:55

La jovencita parecía tan sorprendida que ni siquiera habría tenido tiempo a reaccionar, la espada del elfo comenzaba a apuntar hacia ella cuando la bruja se interpuso explicando que era una pequeña aliada -¿El oso?- Preguntó el pelinegro recordando las palabras de la elfa quien había acusado a la peliblanca de asesina, ahora todo comenzaba a tener sentido; con una mirada de desconfianza Destino guardó su espada manteniendo distancia de la pequeña al menos hasta poder confiar en ella -Aisling...- Repitió el elfo tras escuchar el nombre de la pequeña extrañado de ver como ésta se dedicaba a recoger hojas del piso.

La pregunta de Aisling no pasó desapercibida para el elfo -Cualquiera se pone violento si vas a su casa y matas a su mascota- Finalmente la extraña niña lentamente fue dejando de parecerle una amenaza al elfo hasta comenzar a parecerle solo extraña, recogía hojas sin parar, por alguna razón, sin dar ninguna explicación de ello hasta que finalmente tomó cuantas pudo y se las llevó hasta la cueva donde se encontraba el animal muerto para luego hacer algo más extraño y perturbador, la enana comenzó a despellejar al oso, ante lo cual Destino no pudo evitar llevar una mano a la nariz ante el terrible mal olor que desprendía -No hay mucho tiempo- Dijo el elfo mientras dirigía la vista hacia la peliblanca para luego comenzar a tomar camino.

Sin embargo, antes de marcharse detuvo sus pasos por unos instantes -No es seguro permanecer acá, si Aradia sigue viva no tardará en despertar- Siempre en movimiento, algo que el elfo había aprendido al estar en territorio de otras razas, pues nunca se sabía cuándo podía ocurrir algún problema inesperado, la oferta de la niña para enterrar al oso había sido incluso bastante loable, sin embargo el pelinegro tenía una misión más importante y viajaba contra reloj, no podía darse el lujo de detenerse más tiempo o su presa se volvería a escapar -Ten cuidado- Dijo el elfo a la bruja aunque sin voltear a verla, para luego decidirse por fin a continuar el viaje en solitario, pues tal vez la peliblanca, al estar en deuda, se quedaría a cuidar a la pequeña y extraña niña.

Elen Calhoun Lun Mar 21 2016, 17:11

Una vez aclarada la identidad de la pequeña, y el por qué de su presencia en los alrededores, Destino pareció tranquilizarse un poco, lo suficiente para guardar el arma y eliminar la tensión que se había adueñado del momento. - Yo soy Elen. - comentó la bruja, en respuesta a la pregunta de la dragona, cuyo nombre era Aisling. El elfo se encargó de explicar brevemente el motivo por el que Aradia los había atacado, para luego recordar a ambas que no tenían mucho tiempo antes de que la guardiana volviese en sí.

La de ojos verdes no quería seguir allí cuando eso ocurriese, pero estaba en deuda con la niña, así que la acompañó al interior de la cueva y se quedó observando lo que hacía, hasta que la alada pidió que cavasen un agujero para enterrar las vísceras del animal, antes de que pudiesen empezar a transmitir enfermedades al resto de moradores del bosque. El hedor que emanaba del cadáver hacía que la tarea resultase incómoda, pero la hechicera pronto se vería en algo parecido, así que se puso manos a la obra, tan rápido como podía.

Su objetivo en el pantano no era otro que dar caza a una lamia, con suerte a un par de ellas, para luego despellejarles las colas de serpiente y llevárselas consigo de regreso a Beltrexus, lugar en que podría extraer con tranquilidad los diferentes productos alquímicos que sus escamas producían. No era algo agradable pero sí necesario, y teniendo en cuenta que aquellas criaturas se divertían engañando a los incautos viajeros para luego comérselos, casi podía decir que estaba haciendo una buena obra, algo parecido a una limpieza de caminos.

Destino estaba más ansioso por seguir su camino, quizá para no dar más ventaja a individuo que perseguía, así que no tardó en ponerse en marcha, tras decir a la bruja que tuviese cuidado. - Buena suerte… y gracias. - comentó la joven en respuesta, antes de verlo abandonar la caverna. Tras esto terminó el agujero que Aisling necesitaba para los órganos del oso, pero sabiendo que debía darse prisa, tomó ella misma los restos y los fue enterrando conforme la pequeña los sacaba del animal. - No quiero estar aquí cuando la elfa despierte, no podría hacerle frente de nuevo. - musitó, al tiempo que cubría con tierra parte del agujero.

Una vez terminada la tarea, la maga miró sus guantes y una mueca de asco se reflejó en su rostro, tenía que lavarse la sangre antes de partir, cosa que hizo de inmediato. Por suerte siempre llevaba agua de sobra, más por la posibilidad de tener que elaborar alguna poción que por el simple consumo, así que no fue problema, pero la tensión seguía en su cuerpo, y nada más acercarse a la entrada de la cueva echó un vistazo al lugar en que yacía Aradia, solo para comprobar que aún siguiese allí.

- He de irme Aisling, y tú también deberías alejarte de aquí cuanto antes, esa mujer no atiende a razones, solo busca venganza. - advirtió a la pequeña, mientras se acercaba a ella por última vez. - Me dirijo al pantano, sé que puedes volar y eso es mucho más rápido pero si esa es la dirección que sigues podrías venir con nosotros, al menos durante un par de días, luego he de hacer una cosa… y preferiría hacerlo sola. - añadió al poco, lista para abandonar la caverna y ponerse en marcha.

Off: Con esta ronda doy por terminado el tema, Aisling tu post será el último ya que estoy con problemas técnicos y no tengo internet en casa. En cuanto postees queda cerrado el hilo. Gracias a ambos por participar!

Aisling Mar Mar 22 2016, 19:23

Ellen me ayudo con los órganos restantes del oso y pude terminar de cubrirlo con las hojas más rápido de lo que creí que tardaría, junte mis manos y comencé a cantar una oración a los dragones sagrados agradeciéndoles la cacería y piedad por su alma.

Cuando termine me quite el sudor de la frente y me di cuenta que termine cubierta de sangre pero la verdad no me importaba tanto yo solo tenía que encontrar un lago volando para poder quitarme el olor del cuerpo y la ropa, mire a mis compañeros ellos se estaban despidiendo por lo que supe que era hora de continuar con nuestros respectivos viajes, Ellen se acercó y me dijo sus intenciones.

Ella Planeaba ir al pantano, nunca había estado en uno pero por lo que había leído sabía que eran terrenos complicados, mire nuestras heridas yo solo tenía una mordida de gravedad pero ella parecía mas magullada que yo, por lo que decidí ayudarla, le dije – dame unos minutos por favor – regrese rápidamente al interior de la cueva y me trasforme, me daba demasiada vergüenza que me vieran desnuda en mi forma humana para que me vieran pero una vez trasformada extendí mis alas y salí de la cueva.

Fue rápido, no iba a dejar que me rechazaran este vuelo por lo que con mi hocico agarre a Ellen de la ropa y la subí en mi lomo para llegar más rápidamente a su destino, claro sin olvidarme del caballo el cual sujete con mis patas delanteras y este solo me devolvió un relinchido de sorpresa al despegarnos del suelo, ya en el cielo me los lleve a donde sea que Ellen me digiera, ella me había ayudado y yo también quería hacerlo.

tema cerrado

**Othel** Vie Abr 15 2016, 17:13

+ 3 p. de profesión para Elen que paso a sumar a su perfil.

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