Nuevos conocidos [Libre] [Interpretativo] [Cerrado]

Wind escuchó con atención la explicación de Kouta, intentando no perderse ningún detalle, como si aquello fuera extremadamente importante para ella –Si eran seres queridos, siempre podrás volver con ellos cuando quieras. Seguro que aún te esperan- Dijo la joven intentando reconfortar al cazador que parecía realmente triste –Pareces realmente formado… yo no monto guardias ni nada. Algún día acabaré metida en algún lío gordo por ser tan descuidada- Comentó la elfa a modo de broma para intentar animar a Kouta, aunque era bastante real pues no tenía mucho cuidado cuando dormía, por eso se alejaba de los caminos intentando evitar peligros.

Desde que pudo ver la casa a lo lejos, la joven no perdió la sonrisa en ningún momento, estaba pletórica de haber encontrado una posada en aquel lugar pero cuando se encontraban ya bastante cerca de la posada, sus pensamientos se desviaron completamente de la felicidad que sentía para dar paso a la duda pues una casa como esa en mitad de aquel sitio parecía desentonar. Aun así, prefirió no hablar a su compañero de sus temores ya que él también parecía realmente contento con aquello.

La elfa observó al joven expectante para ver si la posada tenía gente o no y por suerte, parecía que así era. –Gracias- Dijo la joven mientras se acomodaba la capa con la cual ya estaba más que familiarizada, se colocó la capucha y se la cerró tanto como pudo manteniéndola así con los brazos por dentro para evitar que se le viera más de lo necesario. Después siguió a Kouta hasta el interior de la taberna.

Wind levantó el cuello para ver el lugar, tan solo habían 3 hombres, un hombre detrás de la barra bastante bajito y más joven de lo que se esperaba pues rondaría los 40 años además tenía la espalda ancha cosa que contrastaba con los taberneros que la elfa había conocido en Vulwulfar que casi todos eran bajitos y gordos. En frente de una chimenea encendida había un anciano que parecía hipnotizado y sentado en una silla junto a una mesa, un hombre que parecía estar leyendo algo.

-Buenos días- Saludó la joven con un tono serio, intentando aparentar ser más fuerte de lo que era. Cuando escuchó aquella norma, la joven miró a su compañero con desconfianza “¿Sin armas?” Pero al ver a Kouta seguro decidió hacerlo ya que, tampoco es que pudiera hacer nada, así que se quitó la capucha con cuidado utilizando solo una mano y dando la espalda a los hombres que allí estaban dejó el carcaj y el arco un tanto preocupada. Al escuchar aquel comentario Wind se sonrojó y mantuvo la mirada firme en el suelo hasta que se acercaron a la barra.

No tenía muy claro que responder, así que optó por lo más sencillo que se le ocurrió –Un viaje- Contentó encogiéndose de hombros como quitándole toda importancia. –Es usted muy amable- Dijo la elfa con una pequeña sonrisa y después aceptó tomar un vaso de vino dulce, el cual no pensaba si quiera terminarse.

Después de reflexionar unos segundos, comentó curiosa al tabernero –Es raro ver tabernas de humanos por esta zona, los licántropos no suelen estar muy de acuerdo con estas cosas- No lo dijo en un tono que buscar pelea, simplemente a modo de pregunta indirecta para saber más sobre aquel lugar.
-Supongo que tienes razón elfa, pero hasta el momento he tenido suerte y nadie me ha puesto pegas- Dijo el tabernero con convicción dando el tema por zanjado.
Ante aquello, no pudo preguntarle nada más pues sabía que seguir insistiendo sería de mala educación y no quería causar problemas. -¿Quieres comer algo?- Preguntó después a su compañero recordando que apenas habían comido una manzana en todo el día.

Mientras esperaba la respuesta, no pudo evitar preocuparse por sus escasas ropas debajo de la capa y como haría para tomarse el vino que le acababan de poner delante, así que sin poder evitarlo echó un rápido vistazo a su amigo y se ruborizó ligeramente mientras sacaba el brazo izquierdo con la esperanza de que de aquella manera se le viera lo menos posible. cogió el vaso y el dio un sorbo intentando olvidar que era más que probable que aquellos hombres se hubieran dado cuento de su falta de ropa.

- Comer algo estaría bien, la verdad- le respondí a la elfa con una sonrisa dándole un ligero sorbo a mi bebida, segundos mas tarde note una rápida mirada hacia mi y la vi un tanto coloreada- ¿que pasa...?- la respuesta llegó a mi casi instantáneamente, se me había vuelto a olvidar de nuevo, bajo mi capa ella apenas tenia nada.Me fijé unos segundos mas en los que wind pareció aceptar lo que estaba pasando y decidió darle un sorbo a la bebida,actué tan rápido como pude y cuando saco la mano de la capa hablé al tabernero obligandole a centrar su atención en mi- ¿disculpa podría decirme de que es esa botella?- señalé una que estaba en la estantería justo en la repisa de arriba, sin pensarlo el hombre se giró alcanzando aquella botella y para cuando la bajo wind ya había terminado de darle aquel sorbo a la suya- gracias a dios- me alegré de lo rápido que había reaccionado

-¿Esta?- habló el hombre situándola delante mio y comenzando una explicación a la que no le di importancia porque era una simple excusa, miré a wind y le sonreí intentandole dar a entender que no debía preocuparse por nada que yo la ayudaría
-Perdona, podrias servirnos algo de comer, la especialidad de la casa, si puede ser, al menos para mi- de nuevo miré a wind mientras aquel tipo tomaba nota un tanto mosqueado por haberle ignorado la explicación
-¿Y usted señorita?- habló el tipo y esperé algún tipo de respuesta por parte del hombre del sombrero pero para mi sorpresa no hizo ruido alguno

Una vez tomó nota de lo que queríamos ambos, le dije a wind que me siguiera a la parte de afuera del local.Cuando salimos me comencé a quitar el chaleco que tenia encima desabrochando los botones- eso estuvo cerca eh- bromeé con mi amiga por si estaba algo nerviosa o preocupada- tranquila tengo una idea, te dejare el chaleco, ahí dentro no hace demasiado frió- esbocé una sonrisa- al final esto se va a volver una tradición, me acabaré quedando yo sin ropas antes que tu- de nuevo otra broma para aliviar la tensión aunque esta vez estaba algo coloreado, cuando me quite el chaleco se lo entregué- cuando termines entra, no creo que te apetezca mucho que mire otra vez- no lo dije en tono de broma pero tampoco serio, lo único diferente era el color rojizo cada vez mas fuerte- te esperare en la mesa- acabé diciendo antes de meter mas la pata

Entré al local y me senté unas cuantas mesas alejadas del hombre que seguía con su libro,mientras esperaba nuestra comida no podía evitar mirarle y de vez en cuando aquel hombre me devolvía la mirada como si ambos nos estuviéramos analizando-nada de capuchas pero si sombreros eh- pensé, al parecer aquel hombre conocía al tabernero por lo que supuse que no seria ningún mal tipo o al menos que no iba a cometes ninguna estupidez en aquel lugar, lo cual me relajo un poco

-¿Que ha pasado con su chaleco?- preguntó un tanto curioso el tabernero- ¿y su amiga?- ahora parecia bastante mas intrigado
-Esta afuera, cosas de mujeres, ya sabes- hablé rezando porque dejaran el tema de lado y antes de poder continuar el hombre del sombrero siguio mi frase
-Elfas, vampiras o humanas, todas las mujeres son iguales para ciertas cosas,como el sexo- habló explicitamente y no le importaba mucho lo que acababa de decir
-........ Buenos mal que wind ahora estara tapada.... que se cree este tipo...- suspiré y negué con la cabeza, deseando que wind no hubiera escuchado aquella conversación

Wind agradeció sinceramente la ayuda de su amigo pues gracias a aquello parecía que nadie se había dado cuenta de la poca ropa que llevaba. No pudo evitar un suspiro de alivio ya que no estaba demasiado ilusionada con tener que lidiar con los problemas que podría provocar su falta de ropa en una taberna únicamente con hombres. –Gracias- susurró la elfa con una sincera sonrisa cuando terminó de beber.

La joven no puedo evitar reír suavemente cuando vio la expresión de molestia del camarero que no se había dado cuenta de nada. Wind lo pensó unos instantes –Lo mismo que para él- Dijo la joven alegremente sin pensar en que sería el plato que les pondrían pues la verdad era que tenía mucha hambre como para andarse con remilgos y un gruñido de su estómago confirmó aquello haciendo que se sonrojara ligeramente.

La elfa miró ligeramente sorprendida a Kouta cuando le indicó que salieran del establecimiento -¿Qué pasa?- Preguntó curiosa sin entender muy bien. Sin poder evitarlo Wind se ruborizó haciendo que las puntas de sus orejas tomaran un matiz rojizo al ver a su amigo quitarse el chaleco -¿Qué haces?- Preguntó con voz baja mirando ojiplática como se quitaba el chaleco. –S-Si, pero gracias a ti parece que no se han dado cuenta- Comentó mientras desviaba la mirada hacia el suelo. Al escuchar la explicación se relajó bastante sin poder evitar que un suspiro saliera de sus labios “¿En qué narices estaba pensando…?”. Wind se rio ante aquel comentario, -Es cierto, a este paso…-Comentó dejando la frase a medias mientras cogía el chaleco con ambas manos. –V-Vale, ahora entro- Dijo la joven intentando aparentar normalidad.

Cuando su amigo volvió a entrar en la taberna, se relajó completamente y comenzó a colocarse el chaleco “Es grande y esta calentito” Pensó al darse cuenta que le sobraban varios centímetros por todas partes además de lo largo que parecía –Un poco más y podría ser mi vestido- Comentó en voz baja hablando para sí misma sin poder evitar una sonrisa ante aquella idea. Cuando terminó de colárselo, decidió apretar un poco más las telas que parecían estar más sueltas debido a la caminata que habían hecho. Después de adecentarse volvió a entrar en la taberna justo para oír “Sexo” “¿De qué están hablando?” Pensó la elfa ruborizándose, la cual se había quedado en la puerta unos instantes sin saber muy bien si acercarse o dejar que terminaran de hablar.

Decidió que ya habían terminado la conversación y se acercó a la mesa donde estaba su compañero ciertamente curiosa así que, sin hacer muchos esfuerzos por reprimirse preguntó -¿De qué hablabais?- Justo después apareció el tabernero dejando dos platos de comida en la mesa, parecía estoado de verduras y olía especialmente bien. Al verlos, a Wind se le iluminó la mirada y sonrió con alegría –Que hambre- comentó en voz baja como si intentara reafirmar ese sentimiento. –Gracias- Dijo la joven al señor mirándole por un momento para acto seguido, bajar la mirada al plato de nuevo deseando empezar a comer.

La elfa, ahora que se sentía más segura, sacó los brazos de la capa intentado apartarla lo menos posible, pues tampoco estaba mucho más vestida que antes y comenzó a comer con entusiasmo.

Mi mirada estaba un poco perdida en la mesa hasta que wind hablo-e-eh, n-nada- reí ligeramente tembloroso por los nervios- e-esto, no era nada importante- intenté calmar su curiosidad seguramente sin mucho éxito,aquel hombre se acercó con nuestra comida- genial, tenia ganas de ese estofado de carne....- el camarero nos sirvió y puse cara de extrañado- que demonios... hubiera jurado que la especialidad era carne... de lo contrario no lo habría pedido- suspiré resignado pero no me permití el lujo de desperdiciar aquella comida pues mi estomago rugió con fuerza- buen provecho- le hablé a la elfa antes de que ambos disfrutáramos lo que para mi parecía un manjar posiblemente por comer algo decente y con cierta preparación por primera vez en varios días

Los pensamientos de negatividad por alguna razón habían vuelto, quizás por la desilusión de que mi comida no fuera la que esperaba-¿ que opinas wind, pasaremos aquí la noche, o seguiremos nuestro camino cuanto antes?- le pregunté a mi amiga mientras yo paraba de comer para darle un ligero sorbo a la bebida- no parecen mala gente- una rápida mirada al tipo de sombrero y de nuevo la volví a centrar en wind- al menos no todos- el sonreí ligeramente- podríamos preguntar de quien es el carro y si nos lleva, aunque posiblemente sea del tipo del sombrero, pues el otro parece no moverse de la silla y dudo que sea del tabernero- le aclaré lo que pensaba a mi compañera- la decisión es solo tuya, yo te acompañare decidas lo que decidas- asentí con la cabeza y esperé respuesta por parte de ella, quizás aquella decisión le sometería algo de presión pero en mi opinión tomar decisiones tan importante era algo que le vendría bien a la elfa

De nuevo un rápido vistazo al local me hizo darme cuenta de una conversación entre el tipo del sombrero el cual se movía hacia la barra y el viejo que se mantenía en aquella posición en la que parecía controlar el fuego con la mirada

-Viejo te vas a mover algun dia?-hablo caminando hacia la barra- desde que he venido aqui no te has movido ni una vez- confeso el hombre- dame otra de estas cervezas Bogdan- se sento en la barra esperando algun tipo de respuesta por parte del viejo que simplemente lo ignoró
-Como sea, cuanto tiempo mas le va a costar a esta gente?- parecio preguntarselo a si mismo mas que al tipo del sombrero, este nego con la cabeza suspirando- quien sabe, tenemos tiempo de sobra no crees?- ambos soltaron una pequeña risilla
-Eso es cierto amigo, no vamos a ir a ningun lado- esbozo una sonrisa que por alguna razon no me tranquilizaba aunque decidi ignorarla, quizas llevaban demasiado tiempo siendo amigos y hablaban de vete tu a saber que

Wind miró a su compañero más curiosa que antes cuando le dio aquella respuesta tan extraña “¿Qué sería?” Pero prefirió no insistir al recordar lo único que había escuchado de la conversación que habían tenido aquellos hombres. No le apetecía lo más mínimo escuchar algún tipo de comentario sexual por lo que lo dejó de lado intentando responderse a si misma haciendo que se ruborizara ligeramente y acto seguido eliminara todas aquellas ideas de su cabeza con un rápido movimiento de cuello, como si se negara a sí misma. –Buen provecho- Respondió alegre la joven mientras sonreía a su amigo.

Aquella pregunta pillo a la elfa desprevenida, dejó la cuchara un momento en el aire para unos instantes más tarde volver a dejarla en el plato mientras reflexionaba sobre aquello. Aún era temprano como para pasar la noche allí pues aún quedaban algunas horas de luz aprovechables con las que podrían continuar su camino algo más ya que al bosque tampoco podía quedarle mucho más para que se terminara, además, a la joven en realidad le daba igual de quien fuera el carro con tal de que pensara moverse de allí pronto. Tras unos minutos en silencio reflexionando mientras miraba al techo como si aquel tejado tuviera la respuesta, explicó a Kouta lo que creía –Sería mejor si podemos continuar con el camino en el carro, pero si el dueño no tiene intención de desplazarse creo que sería mejor que esperaremos a que él se pusiera en marcha o partir por nuestra cuenta- Concluyó con una sonrisa, completamente orgullosa de su razonamiento y mientras esperaba una respuesta por parte de Kouta, dio un pequeño sorbo a su bebida y continuó comiendo.

La elfa estaba completamente absorta en su comida por lo que no prestó atención al resto de la taberna, hasta que un movimiento inesperado le llamó la atención. Como si hubiera visto un fantasma se quedó mirando al hombre del fuego el cual se acababa de levantar y se dirigía hacia ella y Kouta. Estaba realmente sorprendida pues, desde que habían entrado, aquel hombre apenas parecía que estuviera respirando. Cuando estuvo a un par de metros de los jóvenes, Wind pudo apreciar que era un señor mayor con la mirada perdida como si él mismo ya no estuviera en este mundo, andaba encorvado probablemente acostumbrado a la ayuda de un bastón. -¿Q-que quiere?- preguntó la joven a su amigo apenas susurrando para que aquel señor que se seguía acercando no la escuchara.

El hombre sin titubear se acercó hasta quedarse demasiado cerca de la joven ante la atenta mirada del tabernero que si parecía entender porque se había levantado –La magia de los elfos es poderosa- Dijo el hombre con una voz ronca y baja mientras mantenía una expresión serio. Wind no pudo evitar alterarse por aquella extraña frase que sonó como una advertencia pero se había quedado completamente inmóvil como cuando deslumbran a un animal debido a lo extraño de la situación por lo que simplemente siguió observando al anciano. -¿Q-Qué?- Dijo la joven con un hilo de voz sin comprender muy bien por qué le había dicho eso, pero el señor completamente ajeno a la joven y al temor que la había causado, les dio la espalda y volvió  a sentarse frente al fuego.

Tardó unos segundos en reaccionar tras aquello, de hecho, fue el propio tabernero el que la sacó de sus pensamientos -¿Cuántas veces te he dicho que no hagas eso a mis clientes?- No se le notaba enfadado sino más bien aburrido como si fuera habitual que aquel señor diera advertencias a todo el mundo.
Cuando volvió a reaccionar miró a su amigo aun con asombro en los ojos -¿Magia?- Repitió en voz baja mientras miraba a Kouta como si él tuviera la respuesta a aquella pregunta, pues aunque sabía que los elfos podían utilizar algo similar a la magia, no sabía cómo funcionaba exactamente.

Levanté la vista de mi plato al escuchar a wind y con un rápido vistazo noté que se refería al anciano que ahora caminaba hacia nosotros- quien sabe, pero ten cuidado- de nuevo esa sensación de que algo andaba mal,notaba como poco a poco el optimismo que wind me había pegado se desvanecía a cada segundo que pasaba allí dentro- no tiene ningún sentido, ¿porque?- me pregunté a mi mismo buscando una razón de mi desconfianza- simplemente eres así- llegó en forma de respuesta como si hablara otra parte de mi  y suspiré. Escuché al anciano decir aquella frase y arqueé las cejas dubitativo cuando wind me miró-¿magia?- le susurré a mi amiga justo al mismo tiempo que ella lo hacia, negué con la cabeza- ni idea, no sabia que los elfos usabais magia- le dije honesto pues apenas sabia nada sobre ellos y mucho menos sobre la magia

Dudé unos segundos si preguntarle aquello pero finalmente lo hice - esto.... tu magia... ¿es peligrosa?- le dije con cierto tono serio pues me daba bastante respeto aquello que no entendía- quiero decir... ¿la tienes bajo control?- posiblemente mi tono fuera un poco despectivo pero no podía evitarlo, odiaba o mas bien temía aquello que desconocía y la magia era una de esas cosas- no te lo tomes a mal, simplemente no entiendo la ``magia´´- hice incapie en la palabra y esperé expectante las respuestas de la elfa rezando porque no se lo tomara a mal

Pocos minutos después la puerta se abrió de golpe, chocando contra la pared con un fuerte sonido que alertó a todos los de la taberna, con rapidez centré mi mirada allí para encontrarme con dos tipos fuertes y corpulentos como si fueran guardias reales o algo similar aunque sus ropas indicaban que eran poco mas que campesinos o simples viajeros, tenían atuendos normales de color marrón. El primero que entró era calvo y portaba un hacha a la espalda mientras que el que le seguía era prácticamente igual de grande pero con pelo y un tatuaje en el cuello que apenas lograba distinguir, en su cinto portaba una larga espada que parecía tan peligrosa como afilada, realmente no parecían traer buenas noticias- es mas estoy seguro de que ellos son malas noticias- pensé al observar sus pintas maldiciendo por lo bajo tener las armas en aquel barril que estaba a unos 8 metros de nosotros- si la cosa se pone tensa...- en mi mente la única opción era que el tabernero y el tipo del sombrero se enfrentaras a ellos pues el viejo poco podría hacer - pero si están desarmados...- aquellos pensamientos y cara de preocupación se me fue al escucharlos hablar aunque ninguno de los dos dejo sus armas

-!VAYA DÍA!, como me vuelvas a hacer cargar con el carro te juro que no lo cuentas- ofuscado aquel hombre calvo se sentó en la barra junto al tipo del sombrero
-Venga ya hombre deja de quejarte- habló el tabernero sirviendole algo de beber que no llegué a distinguir, al parecer ambos trabajaban juntos
-QUe te jodan Bogdan, enserio, te mataría- se le notaba enfadado pero parecía algo mas calmado al tener entre sus manos algo de beber- anda sirvele a este tipo algo también- señaló al del tatuaje- se ha portado bien- le chocó la mano en la espalda- al parecer no puede hablar... el pobre cabrón tuvo que traer al viejo el solo, !DURANTE DIAS!- levantó la voz con fuerza y le dio otro trago mas, mientras el otro simplemente asentía con la cabeza con ganas de beber algo

El tipo del sombrero paso la mano por encima del calvo acariciandole la cabeza, algo que se claramente no se tomo a bien- tranquilo tranquilo Bartar, tenemos visita- nos señaló con la mirada y con la mano con la que sostenia el vaso- son todo tuyos campeón- le dio una palmadita y caminó hasta su antigua mesa sentandose y volvio a comenzar a leer
-Conque una elfa eh- no parecía demasiado sorprendido, se giró dando la espalda a la barra manteniendo su vaso en la mano- !y decirme chicos, que os trae por aquí!- hablo alto y fuerte y a pesar de que ya habíamos dicho los motivos, ninguno de los 3 pareció decir nada
-Venimos de viaje, pasábamos por aquí y decidimos entrar- miré a wind como para esperar algún tipo de gesto que me afirmara que lo que acababa de decir estaba bien
-Ya veo ya veo, espera, NO HABREIS VENIDO EN OTRO CARRO ¿VERDAD?- sobresaltado casi se le cayo la bebida del vaso, negué con la cabeza ligeramente intentando parecer lo mas maduro que podía, no quería meterme en mas problemas- no, claro que no... lo hubiéramos sabido- las ultimas 3 palabras fueron mas un susurro que no llegué a escuchar, ajenos a aquello mire a wind y suspiré

-Parece que ya sabemos de quien es el carro, tendras que convencer al viejo, aunque no parece muy dispuesto a moverse- aclaré con una medio sonrisa

Wind miró asombrada a su amigo -¿Mi magia? ¿Peligrosa? ¿De qué me estás hablando? Yo no sé usar magia. Si supiera usarla, no me metería en tantos líos- Contestó completamente convencida de aquella idea pues durante su corta vida, nunca nadie la había enseñado a manejar ese tipo de artes. –Si te sirve, yo tampoco a entiendo muy bien, nunca me he planteado el uso de la magia- añadió intentando tranquilizar a su amigo, que parecía haberse puesto algo tenso con ese tema.

Wind se giró completamente para mirar a la puerta al escuchar aquel estruendo “¿Pero qué...?” Y acto seguido, vio a dos hombres con cara de pocos amigos en la entrada, se quedó observándolos unos segundos hasta que sus voces la sacaron de su ensimismamiento “¿Ellos sí se pueden quedar las armas?” Pensó la elfa enfadada al recordar que su arma estaba en un barril y eso desde luego, no la hacía sentir para nada segura.

Mientras aquellos hombres hablaban, la joven clavó la mirada en su compañero intentando buscar algo que la hiciera sentir más segura, pero Kouta parecía estar más o menos como ella. “Como busquen pelea, no podremos hacer nada…” Aquella idea la preocupaba, pero haciendo un esfuerzo continuó comiendo como si aquello no fuera tan importante como le había parecido en un principio a modo de aparentar la mayor normalidad que pudiera.

“¿Todos suyos? Cretino…” A lo largo de los años, la joven había desarrollado cierto temor hacia los hombres como aquellos en una taberna y con alcohol en la mano pues por norma general, no buscaban nada bueno o más bien todo lo contrario, según como se mirara. Al escuchar aquella frase la elfa dio un respingo –Sí que estáis sorprendidos por ver a una elfa…- comentó la joven en voz baja intentando que no la oyeran, ligeramente molesta por aquel comentario. La siguiente pregunta dejó que la contestara su amigo, el cual dio una respuesta bastante escueta pero le pareció más que suficiente por lo que se limitó a afirmarla con un leve asentimiento de cabeza.

-Ojalá, pero no es el caso, vinimos andando- Explicó Wind con la esperanza de que aquella respuesta les sirviera para no empezar un enfrentamiento pues por algún motivo, no parecía que les hiciera demasiada ilusión que fueran por allí con un carro. Después, miró a su compañero que parecía estar a punto de decir algo. -¿Q-Que yo que?- Exclamó con un tartamudeo al pensar que debía hablar con aquel tenebroso anciano –No sonrías, no es divertido…- Comentó abatida ante la idea de que era su única solución.

Se levantó despacio, desganada y ciertamente resignada a hacer aquello. No quería hacerlo, pero si querían viajar en carro no tenían más opciones así que se acercó despacio al hombre de la chimenea para intentar conversar con él de la manera más normal posible, obviando la advertencia que le había hecho con anterioridad. El resto de los hombres miraban a Wind con curiosidad, como si esperaran algo de aquella situación y la elfa fuera la única que no sabía el qué.

-Buenas tardes- Dijo situándose al lado del anciano mientras miraba al fuego “Sabes tratar con personas difíciles, solo ponlo en práctica. Es fácil, si podías con gente de clases sociales altas, puedes hacerlo con un anciano” Intentaba convencerse a sí misma así que después de respirar hondo preguntó de la manera más amable que pudo al anciano – ¿Hacia dónde se dirigirá cuando reemprenda su viaje?- No le miraba, la elfa mantenía la mirada en el fuego de la misma manera que lo hacía el anciano –El frio es mi destino elfa- Contestó desganado el viejo “Al menos ya sé que vamos en la misma dirección” -¿Cuándo reemprenda su viaje, podía permitirnos acompañarle a mi amigo y a mí?- Preguntó cautelosa, intentando que no sonara como algo demasiado interesado pero de repente, el hombre giró el cuello para clavar la mirad sobre la de la joven -¿Acaso serás de utilidad?- Preguntó escéptico imaginándose que la elfa sería una carga para su viaje y antes de que pudiera contestar, el anciano cogió un cuchillo que estaba encima de una mesa y se rasgó la palma de una mano con un corte profundo.

-¿QUÉ HA HECHO?- Exclamó la joven completamente alarmada mirando las gotas de sangre caer al suelo –Curame- Exigió el hombre con calma y cuando Wind se dirigía a coger unas vendas el hombre le exigió –No, con magia. Pide a los cielos que me sanen- La mirada del hombre seguía pareciendo perdida, pero no parecía que fuera a aceptar cualquier otro tipo de trato. Wind estaba aterrada, no sabía qué hacer, aquello la había pillado por sorpresa miró con pánico en los ojos a Kouta un momento para acto seguido mirar la mano del anciano que no paraba de sangrar. Sin saber muy bien por qué, la joven hizo caso al anciano con la esperanza de que de aquella manera dejara de sangrar “Por favor, por favor, por favor deja de sangrar. Cúrate, por favor. Deidades, curadle” Tenía los ojos completamente abiertos y miraba la herida con la esperanza de que algo ocurriera.

Pasaron unos segundos en los que la sangre no dejó de fluir y la joven repetía aquellas palabras en su mente una y otra vez, como si de aquella manera se fuera a curar milagrosamente. Sin esperarlo, la joven vio como la herida dejaba de sangrar lentamente, sin llegar a sanar del todo, pero lo suficiente como para que no sangrara. Sin poder evitarlo Wind dijo en voz baja -¿Cómo es posible?- Mientras se miraba sus propias manos para acto seguido, volver a mirar a su amigo completamente asombrada -Se… usar magia-

- No sera divertido para ti- esbocé ahora una amplia sonrisa y aun mayor cuando finalmente la elfa se movió en dirección a aquel extraño anciano, mi mirada se centraba en aquella conversación dejando a un lado la pequeña disputa que tenían algunos de los hombres en la barra- ojala tengamos suerte y salgamos pronto- algo no andaba bien conmigo mismo, por alguna razón sentía que aquel lugar no era seguro pero me limité a intentar despejar la mente el que mas problemas podría dar estaba en una mesa con su libro así que decidí no pensar en aquel asunto mas

-!¿Que demonios?!- pensé dejando la cuchara dentro del plato y observando como el viejo obligaba a wind a que esta usara magia, instintivamente llevé mi mirada al tabernero que ahora estaba totalmente centrada en el viejo mientras los dos hombres de la barra hablaban entre ellos de sus cosas- ¿es que no piensa hacer nada?- su cara tenia una expresión un tanto seria- ¿quizas no sea la primera vez que hace eso?, ¿se queria quitar la vida o algo?- la respuesta era evidentemente que no pues de haberse querido quitar la vida no estaría obligando a la elfa a que usara magia.Finalmente wind curó al anciano- ¿no se suponía que no sabia usar magia?- pense con rapidez- ¿me mintió?, ¿por que lo hizo?- reflexioné unos segundos que me parecieron una eternidad- al fin y al cabo sois desconocidos-a aquel pensamiento le siguió un dolor punzante en mi pecho,me incliné ligeramente hacia delante situando los codos sobre la mesa y mis manos sobre la nuca enterrando mi cabeza bajo mis brazos como si intentara evitar aquellos malos pensamientos- no puede ser... ¿sera que me ablandé por su situación?- suspiré negando con la cabeza, no quería pensar que esa fuera una posibilidad aunque no había duda de que al menos un poco me había ablandado al encontrarla sin ropa- no puede ser...- los malos pensamientos de nuevo en mi cabeza, opté por despejar mi mente y la única manera que se me ocurrió fue prestar atención al viejo y a wind

Mientras wind parecía mirarse las manos pensando lo que acababa de hacer el viejo dirigió momentáneamente su mirada hacia el tabernero y presté especial atención en aquello pues me resultaba extraño que le mirara y vi que el tabernero de forma muy simulada negó con la cabeza antes de volver a girarse para hablar con sus amigos

-Al parecer no dominas tu propio poder- carraspeo un poco el viejo dandole un trago a su vaso- no hay lugar en mi carro para inutiles- aclaró serio mientras de nuevo su mirada seguia fija en el fuego
-que demonios ha sido eso....- me pregunté extrañado y presté mayor atencion a la conversacion del tabernero que era de lo mas normal
-Espero que no venga mucha mas gente o nos quedaremos sin lugar para dormir
-Siempre puedes dormir en el establo si eso te preocupa- bromeo el calvo
-Quizás debas ser tu quien lo haga, dado que te llevas tan bien con los carros- esbozó una ligera sonrisa
-Que te jodan, ¿vale?- le dio un largo trago- que se vaya el intelectual, fue el ultimo en llegar- aclaró y ahora centré mi vista en aquel tipo que simplemente alzo un poco mas el libro como cubriéndose la cara, paso una pagina y movió sus labios como si susurrara algo que solo yo pude ver pues el libro le tapaba- ¿le habrá insultado?- suspiré pues después de todo eran tipos normales- mas o menos, deben ser imaginaciones mias... aunque lo del estofado si que me ha molestado- suspiré resignado y terminé de comer lo que me faltaba

Justo antes de levantarse, a modo de respuesta sacó la lengua a su amigo a modo de mostrarle su desconformidad con aquella idea de tener que hablar con el anciano. “También podría hacerlo él” Pensó con cierto enfado bastante falso mientras se acercaba al viejo.

Wind continuaba completamente asombrada mientras se observaba las manos cuando la voz del anciano la sacó de sus  pensamientos. La elfa escuchó resignada aquella conclusión pues aunque le molestaba bastante haberla hecho pasar por aquella situación para nada, tampoco podía obligarle a que les permitiera acompañarle. Así que sin mediar palabra, se dio la vuelta con resignación mirando aun sus manos asombrada intentando analizar que había ocurrido. Desandó el camino hacia su mesa y se sentó en absoluto silencio, como si no hubiera asimilado lo que había sucedido.

La elfa no volvió a coger la cuchara, tan solo miraba el plato embobada “¿Desde cuando puedo hacer yo eso? ¿Puedo usar magia? ¿Yo? Pero si no he tenido ninguna relación con la gente de mi raza en toda mi vida... No lo entiendo” Intentaba racionalizar la situación constantemente sin llegar a ninguna conclusión. La joven no sabía nada de su raza por no hablar de su desconocimiento hacia la magia, eran cosas que nunca se había planteado ni nunca le habían llamado especialmente la atención ya que no lo había necesitado, la alquimia había suplido cualquier tipo de necesidad de magia sanadora.

Al cabo de unos minutos completamente en silencio y de mirar el plato como si fuera algo hipnotizante  levantó la vista, ahora con una mirada mas calmada, para mirar a Kouta intentando discernir en que estaba pensando. –Parece que debo cambiar lo que te dije antes. Al parecer si que puedo usar... Lo que sea que uso- Dijo intentando evitar la palabra “Magia” ya que le parecía que sonaba demasiado majestuoso y ella no se sentía diferente, solo se sentía estúpida por no saber que podía hacer algo tan útil.

Wind intentó analizar de nuevo lo que había hecho, pero centrándose en el cómo. Reflexionó sobre toda su actuación, intentando averiguar que era lo que había hecho que la herida sanara tan deprisa “La plegaria? ¿Las manos? ¿La mirada?” Cualquiera de aquellas cosas le parecía estúpida pues para sanar heridas, había que usar ungüentos y pócimas...¿No? Desde luego, la joven seguía confusa y probablemente no mejorara aquella sensación tan extraña hasta que consiguiera averiguar como funcionaba eso.

Aun quedaban horas de sol, podían avanzar en su recorrido y tal vez encontraran un pueblo donde conseguir ropa por fin, pues aunque ya se estaba acostumbrando a ir así vestida, era cierto que también se sentía incomoda y desprotegida  lo que no era una sensación agradable. -¿Reemprendemos el viaje Kouta?- Preguntó la joven levantándose ya se la silla, como si ya hubiera obtenido la respuesta.
Dejó un par de monedas en la mesa y se dirigió hacia su arco sin apenas mediar palabra. Lo cogió y salió fuera, donde se quitó el chaleco de su compañero y se lo tendió con una sonrisa. –Gracias por habérmelo prestado- Acto seguido, se quitó la capa de la misma manera y se la dio –Ya tienes de nuevo toda tu ropa, ahora solo falto yo- Dijo riéndose a modo de broma. –¿Vamos?- Preguntó sin perder la sonrisa dispuesta a salir de ese bosque pronto.

Asentí con la cabeza a mi compañera ante su pregunta- cuanto antes salgamos de aqui mejor- le susurré a mi compañera aunque fue mas para convencerme a mi mismo en mi cabeza seguía existiendo aquella desconfianza- ademas, así podre comprobar algo- asentí en mi mente y me levanté dejando mi parte de la comida que si mi vista no me había vuelto a engañar eran 3 aeros que deposité en la mesa con esa sensación de sentirme estafado y pronto lo comprobaría mas atentamente si realmente me había llegado a engañar yo mismo

-Son 3 aeros, ¿cierto?- tanteé el terreno y el tabernero asintió -quizás si me he equivocado yo- dudé por unos instantes

Con un rápido vistazo observé como los 3 hombres de la barra seguían conversando de la misma forma que unos segundos antes, salvo que esta vez el tabernero me observaba intentando hacer que no me diera cuenta- ¿que le pasa a ese?, es que mira mal a todos los que dicen de irse o que- bromeé y centré mi mente en el hombre del libro que parecía el mas problemático pues el anciano no hacia nada mientras yo sacaba el arco de aquel barril y colocaba el carcaj en mi espalda y el arco en la mano derecha.De nuevo mi mirada sobre él no paso desapercibida pero esta vez levantó su vista del libro, sonrió ampliamente y se despidió moviendo su sombrero hacia abajo con la mano que no sujetaba el libro, parecía que se despedía de mi con cierta burla, decidí ignorarlo pues no nos habíamos metido en problemas gracias a dios

Finalmente crucé la puerta respirando aire puro de nuevo, lo primero que hice aparte de evidentemente observar a mi alrededor fue dirigirme hacia el lado de la casa donde recordaba haber visto dicho cartel-era por aquí- caminé concentrado, ignorando que wind me había tendido mi propia ropa para devolvérmela, simplemente pasé de largo buscando con la mirada el dichoso cartel- ¿sera que me he vuelto loco?- intenté recordar donde estaba pues a simple vista ya no lo veía- ah, espera, ahí- esbocé una sonrisa al recordar que estaba en lo alto de la pared-que demonios- me paré en seco y la sonrisa se borro de mi rostro al ver que efectivamente en aquel cartel ponía "especial de la casa:estofado de carne, 3 aeros".

Fue en ese momento en el que el tabernero abrió la puerta y miró a wind- eh jovenes, esperar un momento- habló con la misma voz y tono con el que lo había hecho hasta ahora- no podreis llegar a la siguiente ciudad si salis ahora, descansar ahora y os haremos una oferta especial-habló el hombre preocupado intentando convencernos pues parecía la idea mas sensata, aunque yo seguía en mis pensamientos por lo que seria wind quien tomara esa decisión

Los pensamientos en mi cabeza fluían a tal rapidez que era imposible describir todos ellos, aunque se podían resumir en uno solo-es una trampa- despejé mi menté asimilando todo lo que había pasado hasta ese momento, sobre todo las acciones de aquellos tipos para asegurarme de que mi teoría encajaba.Lo primero en lo que pensé era en la razón de porque nosotros no podíamos tener armas, pero los tipos que entraron después si, era cierto que en aquel barril había armas, pero fue entonces cuando me di cuenta- había demasiadas armas para 3 hombres que había inicialmente... y uno de ellos es el viejo y otro el tabernero que no dejaría las armas allí- existían dos posibilidades, o el tipo del sombrero usaba demasiadas espadas o efectivamente y como pensaba aquellas armas estaban puestas como despiste para caer en su trampa sin darnos cuentas

Un segundo pensamiento mas claro paso por mi cabeza, esta vez era la pregunta que wind le había hecho al tabernero- ¿una taberna de humanos en tierra de licantropos?- la respuesta me llegó enseguida, aquel lugar había sido abandonado hace algún tiempo, esa era la razón de que el exterior estuviera tan deteriorado pero el interior no- no tuvieron tiempo de limpiar nada mas que el interior para aparentar- mi teoría poco a poco cobraba mas fuerza o quizás era yo que solo me estaba emparanoiando, no sabia que pensar y como no lo tenia claro, desde luego iba a pensar de la peor forma posible.Pero entonces quedaba una ultima pregunta relacionada con el viejo, tenia bastante claro que los 4 hombres trabajaban juntos, pero el viejo era otra historia, ademas uno de los hombres había venido con el desde el carro y sin ninguna duda nosotros habíamos visto aquellas huellas, era el motivo por el que estábamos allí. Aquel viejo les daba la cuartada perfecta así que mis pensamientos negativos poco a poco se desvanecieron-supongo que me equivoqué- pensé en que de ser mi teoría cierta, ese viejo no estaría allí- basé todo esto en un menú- suspiré- oye wind...- me giré hablando con un tono de preocupación y vi que el tabernero y wind estaban hablando sobre si quedarnos o no, no sabia si habían llegado finalmente a un acuerdo o no

-Disculpe- me metí en mitad de su conversación que era de lo mas normal sin subida de tonos- el estofado de verduras estaba realmente bueno, con razón es la especialidad de la casa- hablé con una ligera sonrisa fingida pues quería comprobar la teoría que todavía circulaba por mi mente
-Así es, yo mismo la preparo cada mañana para los viajeros como vosotros, esta buena ¿verdad?- asintió orgulloso de su propio plato
-Si, estaba bueno- mi tono había cambiado ligeramente a uno mas serio- pero me pregunto porque aquí pone que el especial es estofado de carne- señale al cartel donde lo ponía entre otras cosas como bebidas

-E-esto, es un cartel viejo, todavía no lo hemos cambiado- se puso tenso apenas un segundo y después hablo con normalidad-ya sabes...- mi mirada se centro en la suya- lo importante es lo que se come- sonrió pero no era la primera vez que la gente fingía o mentía delante de mi debido a mis ``interrogatorios´´ por buscar pistas de aquel símbolo así que pude apreciar con claridad que fingía y algo andaba mal y mi rostro así lo representaba

-Quedate detras wind....- le susurré a la elfa moviendola con suavidad con mi mano derecha hasta que estuvo detrás mía y el hombre simplemente sonrió, después sonrió mas ampliamente y finalmente rompió a reír

-JAJAJAJA, !no lo puedo creer chico!-seguía riéndose y su tono de voz había cambiado, parecía mas un loco que otra cosa-!¿todo esto por un simple menú?!- siguió riendo a grandes carcajadas y fijó su mirada en wind con ojos enloquecidos-os voy a matar, !SI!, os torturaré y luego os mataré JAJAJA- los cambios constantes entre gritos y palabras normales tensaron mi cuerpo y las cosas que decía no ayudaban a relajarme,tan rápido como pude llevé una de mis manos al carcaj para sacar una flecha pero el hombre se abalanzo sobre mi pegándome en la tripa y mandándome hacia un lado cayendo al suelo boca abajo con el arco a unos dos metros de mi.El había quedado frente a wind observándola con aquella mirada y ahora sacó un cuchillo de su espalda que al parecer tenia guardado- tu seras la primera- le susurro-! LA PRIMERA EN MORIR! JAJAJA- explotó de nuevo con aquella estruendosa risa

-Cabronazos...- pensé a la vez que me culpaba por haber sido tan descuidado, me había metido de lleno en la boca del lobo y me había dado cuenta demasiado tarde- estúpido- intenté reincorporarme lentamente, por suerte solo me dolía la tripa un poco por el golpe

Wind se quedó perpleja cuando su compañero no cogió sus ropas -¿Vas a ir desnudo como yo para solidarizarte conmigo?- Preguntó en tono de broma cuando éste ignoró por competo sus prendas. -¿Qué era por aquí?- Preguntó la joven curiosa mientras se disponía a seguirle, su amigo estaba actuando realmente extraño “¿Se habrá enfadado por la magia?” Pensó realmente preocupada de que eso pudiera ser así. –Kouta…Yo...- Comenzó a decir la joven para disculparse por cualquier cosa que le pudiera haber molestado pero apenas pudo comenzar su disculpa cuando vio como la expresión del humano cambiaba varias veces “¿Qué está pasando?” Pero tampoco pudo razonarlo mucho pues la voz del tabernero la sacó de sus cavilaciones.

La joven aún tenía las prendas en la mano, esperando que Kouta las cogiera pero cuando escuchó de repente la voz de aquel hombre, como un acto reflejo se colocó la capa sin demasiado cuidado esperando que no hubiera visto nada. Después mientras éste empezaba  hablar wind se puso el chaleco simplemente a modo de chaqueta por debajo de la capa sin llegar a botonárselo.

La elfa se giró obviando el extraño comportamiento de su compañero “Estaría bien pasar la noche aquí” Reflexionó con cierta alegría al pensar en cómodo que sería dormir en una cama pero tenía ciertas dudas pues no quería retrasar mucho más su viaje y estaba casi segura que si apuraban el paso no les costaría demasiado llegar a la próxima ciudad. -¿De qué tipo de oferta me hablas?- Preguntó la joven cambiando el tono pues, aunque no lo hiciera mucho, todos los años de trabajo como mercader ayudaron bastante a que se supiera defender con los taberneros y posaderos. –Barata, más de lo que podréis encontrar por aquí- Contentó el hombre convencido de su respuesta pero Wind sabía que aquello no era tan cierto como parecía –Cualquier cueva es más barata y con lo que hemos comido, ya no necesitaremos cenar- Replicó esperando la respuesta que deseaba escuchar pero en ese momento escuchó la voz de Kouta y como si su cerebro hubiera sido desactivado, se relajó de inmediato olvidándose por completo de su negociación.

Wind se quedó escuchando la conversación entre su amigo y el tabernero sin entender muy bien porque estaban hablando sobre la comida “Ya hemos comido, ¿no deberíamos hablar de la cama?” Pero cuando escuchó la pregunta sobre el estofado de carne, no pudo evitar tensarse e intentar llegar tan rápido como pudo a las ideas que estaba teniendo su compañero y en cuanto escuchó aquella respuesta sabía que algo iba mal. La situación no iba a acabar bien y lentamente Wind sacó una flecha de su carcaj para disimuladamente colocarla en el arco aprovechando que estaba detrás de Kouta mientras a aquel hombre parecía que se le estaba yendo la cabeza por completo “¿Está loco?” La respuesta no tardó en llegarle cuando el tabernero exclamo que acabaría con sus vidas.

Todo pasó muy deprisa, su amigo intentó sacar una flecha cuando de repente estaba tirado en el suelo y el bandido estaba en frente suyo con un chuchillo proclamando que la iba a matar. La joven miró a Kouta que estaba en el suelo mientras ella aún tenía la flecha en el arco, estaba tensa y su cuerpo parecía no querer responder a sus órdenes, estaba asustada y aquella situación no le gustaba ni un pelo. Cuando el posadero parecía haber perdido la cabeza por completo, como un acto automático, la elfa le disparó con la flecha, clavándosela en el hombro derecho debido al absurdo temblor de manos que tenía. El hombre soltó un alarido y miró a Wind con sorpresa e ira, al menos había soltado el cuchillo pero no tardó en recogerlo dispuesto a lanzarse contra la joven ahora desprotegida puesto que no había cogido otra flecha.

Rezó a todas als deidades que conocía, como si acaso ellas pudieran salvarles. Wind no supo cómo reaccionar a parte de suplicando algo de suerte a los cielos, el cuchillo iba directo a su estómago pero de repente sin comprender muy bien ni cómo ni por qué, una especie de mole de barro se puso justo delante de ella haciendo que el hombre se quedara con el cuchillo incrustado en el barro. -¿Qué…?- dijo con apenas un susurro sin entender absolutamente nada de lo que estaba pasando y su siguiente pensamiento fue muy claro y muy simple “Pégale” Lo pensó de un modo automático, como si su cerebro supiera qué debía pensar y de un modo absurdo, el golem le atizó un puñetazo en el estómago al hombre haciéndole caer de espaldas.

Cuando la joven razonó más o menos lo que sucedía, se alarmó y miró a su amigo con una mirada aterrada sin saber muy bien que hacer ahora.

Con cierta agilidad terminé por ponerme de pie observando como aquel hombre que a pesar del duro golpe que acababa de recibir seguía riéndose desde el suelo recuperando su cuchillo y pasándose la lengua chupando la poca sangre que salia de su boca como si eso le gustara todavía mas- esta totalmente ido de la cabeza- pensé en que no era el primero que encontraba así, mi mirada se centró en mi compañera para ver como estaba, mi ultimo recuerdo era haberla dejado sola frente a ese- como wind ha podido ganar...- mis pensamientos se pararon momentáneamente al ver a una figura de arcilla frente a wind- ¿que demonios?- alcé con rapidez mi arco hacia aquella criatura con una flecha cargada y disparé sin pensármelo dos veces, el impacto fue preciso donde supuse que tendría el corazón pues tenia forma semi-humana, no obstante ni si quiera se inmutó

-!Wind aléjate!- grité con fuerza cuando vi que mi flecha no era efectiva-! alejate de esa cosa!- con fuerza de nuevo le ordené a wind que se separara- mierda mierda, si las flechas no funcionan como demonios vamos a pararlo- observé al tabernero que tenia su mirada de loco clavada en el golem- ¿lo estara controlando el?- lo estaba mirando tan concentrado que así me parecía- entonces deberé acabar con él- cuando le apunté la puerta del local se abrió y de allí salieron los otros 3 tipos, el del gorro, el calvo y el que no podía hablar cada uno con sus respectivas armas. Rápidamente ayudaron a su compañero que estaba en el suelo tragué saliva retrocediendo un par de pasos situándome a unos 6 de ellos y a unos 3 de wind y aquella criatura viviente si no había llegado a moverse todavía, si lo había hecho estaría lo mas cerca a ella posible sin bajar la guardia, no paraba de apuntar de un lado a otro, tanto al golem como a mis 4 nuevos enemigos, la cosa pintaba mal y era plenamente consciente

-joder, joder- seguía nervioso sin saber  a quien disparar o ni si quiera que hacer pues solo tenia una flecha y un total de 5 enemigos y al parecer a uno de ellos no le afectaban las flechas- mierda mierda mierda- pensamientos inútiles recorrían mi cabeza- céntrate, piensa,actúa- lo intentaba pero no había ningún plan en el que saliéramos ilesos, pelear no era una opción, nos superaban en armas y tan solo teníamos nuestros arcos.Observé a mi alrededor en busca de alguna ayuda exterior pero me decepcioné al pensar que estábamos solos- si tan siquiera...- negué con la cabeza volviendo a la realidad, nadie iba a aparecer y mucho menos él

-No busques ayuda muchacho nadie vendrá- aclaró el tipo del sombre que portaba una espada todavía envainada
-¿Tienes miedo pequeño?, ¿acaso estas asustado?-rió el tabernero y la respuesta llego rápidamente a mi mente- bien dicho Trancos, morirán solos- siguió riéndose
-Estas tu seguro de que tienen dinero- se le notaba en la voz que tan solo quería el dinero, parecía demasiado avaricioso- a mi no me lo parece, ella esta medio desnuda de no ser por el chico- aquel comentario me alerto- ¿¿¿como es que saben eso???- no tenia sentido y mucho menos que fuera el calvo el que lo supiera

-Un día tras ellos y solo piensas en el dinero JAJAJA- de nuevo aquel contraste- YA PENSAREMOS EN ESO CUANDO LOS MATEMOS- habló con fuerza o mas bien a gritos lanzando la daga hacia mi que conseguí esquivar rodando en el suelo por los pelos, me había pillado por sorpresa pues pensaba en lo que acababan de decir, inconscientemente mire a wind ya que seguramente la elfa también lo hubiera entendido-eran ellos- le hablé al comprender que las huellas de caballos les pertenecían a ellos, todo había sido una trampa desde el principio, y al igual que nosotros contra el jabalí, nos habían acorralado, habíamos sido las presas todo este tiempo en el que pensábamos que eramos los cazadores,la situación había dado un giro por completo

No sabia que hacer todavía barajaba la idea de huir pero era bastante arriesgada aparte de que no sabíamos las cualidades físicas de los otros tipo ni si wind podría correr con aquellas ropas, en el ambiente se mascaba aquella tensión por mi parte y posiblemente por la de wind, lo que respectaba a aquellos 4 tipos, uno seguía riendo como un loco, el mudo y el calvo miraban a wind con las armas desenvainadas pero sin avanzar  y como no, el tipo del sombrero tenia su helada mirada puesta sobre mi, como desafiándome, como diciéndome algo... "te matare a ti primero".Tragué saliva ante aquel pensamiento y retrocedí un paso mas inconscientemente apuntándole a el con el arco, aunque los 4 estaban juntos- ¿en que lió nos he metido?- afirmé en mi mente que todo esto era culpa mía pues de no haber sido tan descuidado, podría haberlo evitado

Wind miró de nuevo a la mole de barro que tenía justo en frente, tenía una forma humanoide y no tenía muy claro que acababa de suceder “¿Lo he hecho yo?” Pensó aturdida cuando una flecha hizo que la joven se sobresaltara dando un pequeño salto hacia a tras -¿Qué…?- Intentó preguntar pero la voz de Kouta hizo que se olvidara de aquella pregunta para centrarse en lo que tenía delante mientras daba un par de pasos hacia atrás siguiendo la orden de su amigo.

“¿Por qué debería alejarme de ello? Me ha salvado” Pensó sin terminar de comprender el miedo del humano. La elfa cuando vio a los 3 hombres que salían de la posada sacó otra flecha de su carcaj poniéndola en el arco como un acto reflejo, el sádico que estaba herido parecía ahora más loco que antes, no paraba de reír y parecía disfrutar con la situación. Wind observó a su compañero que parecía más nervioso que ella mientras intentaba pensar que hacer. La mole de barro no se movía ni los bandidos, ni siquiera ellos dos hacían ningún movimiento, parecía la calma antes de la tormenta, una tormenta que no acabaría en nada bueno.

La voz de uno de los hombres sacó a la joven de sus pensamientos para centrar toda su atención sobre él y a cada palabra que decían Wind se ponía más y más tensa hasta el punto de que sus manos no dejaban de temblar pero no por el miedo, sino por el odio que sentía hasta que el comentario de uno de los hombres hizo que la mente de la joven estallara como si aquello hubiera tocado el límite. “Nos estaban siguiendo. Soy demasiado confiada. Esto no tiene sentido, no pienso morir, no aquí y menos a manos de unos bandidos cualquiera ni pienso dejar que Kouta lo haga tampoco” La elfa tenía los músculos en tensión con la flecha cargada apuntando al suelo, estaba dispuesta a acabar con cualquiera que intentara ponerse en su camino pues ella aún tenía muchas cosas que hacer.

-Lo siento- Se disculpó la joven con sinceridad a su amigo, pero no solo a él sino a los bandidos también al pensar que probablemente tendrían que acabar con sus vidas. Wind nunca antes había disparado a un humano, nunca lo había necesitado y jamás se había planteado hacerlo al menos no de una forma mortal. Ella cazaba animales no personas, le parecía un acto cruel, pero aquellos hombres no eran humanos, eran bestias, además de la peor calaña y la joven no pensaba dejar que su amigo se llevara más heridas de las necesarias, en bastantes líos le había metido ya.

De un momento a otro, la elfa dejó de temblar y disparó rápidamente al hombre que había hablado de dinero. Intentó esquivar la flecha pero quien sabe si por la tensión de la situación o por azares del destino la flecha consiguió darle en el pecho, no en el corazón pero si lo suficientemente cerca como para dejarle fuera de combate. Acto seguido la joven cargó otra flecha y miró fijamente al hombre que aún no había hablado “No va a ser tan fácil” El tabernero y el que aún no había mediado palabra estaban atónitos y sus miradas bailaban entre el hombre abatido en el suelo y la elfa  que estaba pensando en su siguiente movimiento. –Kouta, ¿estás bien?- Preguntó algo preocupada por su compañero mientras seguía con la mirada fija en los hombres que quedaban.

La mole de barro seguía en la misma posición, no se había movido el tabernero tenía la mirada cargada de ira y locura probablemente deseando más que antes matar a la elfa y el hombre que no había hablado tenía una expresión de odio. Wind centró su mirada la figura de barro y pensó en que se moviera, guiándola con sus pensamientos intentando que se moviera y ante la sorpresa de la elfa, lo hizo. Se colocó detrás del barro a modo de escudo. –Kouta, es mío, yo lo controlo- Dijo con sorpresa en la voz refiriéndose al golem mientras analizaba la situación intentando calmar al humano ya que parecía preocupado por aquella mole.

Wind decidió que hacer, y como si hubieran reaccionado al mismo tiempo el bandido se lanzó contra ella con la espada desenvainada y el golem corrió a modo de embestida contra él. En apenas unos segundos aquel hombre tenía una flecha en el abdomen y había caído al suelo mientras que el golem tenía un espadazo en el cuello, lo que hizo que se le cayera la cabeza al suelo desvaneciéndose y volviendo a ser barro normal. Parecía que la joven estaba de suerte, a este paso, podrían salir de esto ilesos pero sin comprender muy bien por qué, el tabernero no había hecho aún ningún movimiento. Estaba quieto, siéndose a carcajadas mientras observaba toda la escena con locura en los ojos, una mirada que hizo que a la joven se le estremeciera el corazón y que sus manos volvieran a temblar.  La elfa miró a su compañero para ver como estaba, pues durante las peleas, no había prestado demasiada atención a su entorno.

La cosa se ponía cada vez mas tensa así que mi primer pensamiento fue agacharme a recoger el arco pero justo cuando lo sentí en mi mano derecha una patada impacto sobre mi brazo obligándome a soltar mi arma y retroceder-cabrón- murmuré viendo como ahora el del sombrero se acercaba un poco mas a mi situándose a unos 2 metros.Miré la zona del golpe con rapidez y me aseguré de que no tuviera nada salvo el golpe, miré de nuevo a mi adversario y apreté el puño con fuerza-genial...- maldije por tener que pelear pero me preparé para hacerlo echando un rápido vistazo a wind que mantenía su arco apuntando a los otros- acabare con este rápido y ayudare a wind- asentí con mi cabeza

Mi adversario se tomó aquel movimiento como una incitación de empezar el combate y corrió hacia mi todavía con el arma desenfundada golpeándome en el estomago, conseguí esquivarlo con un rápido movimiento de mi cuerpo hacia la derecha, situé con agilidad mis manos sobre sus hombros aprovechando mi ventajosa posición y le golpeé varias veces en el estomago hasta que él movió su brazo derecho, con el que me había intentado golpear, describiendo un semicírculo cuyo objetivo era mi cuello, sin darme cuenta y por la falta de experiencia en combates cuerpo a cuerpo recibí el golpe por completo y caí al suelo dando varias vueltas.Aquel golpe me había dejado sin oxigeno unos momentos y también sentía una ligera sensación de mareo, me reincorporé situándome a 4 patas aspirando profundamente para coger aire, momento que aquel tipo aprovecho para darme una patada en las costillas, justo en el lado de mi antigua herida, solté un grito a la vez que uno de los tipos que estaban con wind

-Parece que eres tan blando como pareces- sonrió triunfante aunque mi mirada estaba puesta en mi herida, me llevé la mano instantáneamente  al sentir un gran dolor- sera cabrón, también es casualidad- estaba enfurecido con aquel tipo, o mejor dicho con todos ellos.Me tambaleé unos segundos pero finalmente me puse en pie sin responder a su comentario, simplemente lo ignoré por suerte el no me golpeó mientras me levantaba, algo que por supuesto era de agradecer
-No me jodas ahora- susurré- una vieja herida no me va a parar- susurré de nuevo sin que nadie mas me escuchara para darme fuerzas para seguir o mejor dicho para ignorar el ligero dolor que sentía en el costado derecho
-¿Que murmuras chaval?- preguntó y sin esperar tiempo para la respuesta de nuevo corrió hacia mi con el brazo derecho cargado para golpearme.Sin mucho pensar corrí en su dirección placandolo

Aquella acción le pilló por sorpresa y cuando choqué mi cuerpo con el suyo solo pudo continuar su golpe sobre mi costado izquierdo, aguanté el fuerte golpe soltando un quejido pero conseguí con mi cuerpo tirarlo al suelo y situarme encima suyo, con fuerza y agilidad le golpeé sin ningún tipo de estrategia su cara.No tenia mayor experiencia que las peleas en locales y demás así que mi estilo de lucha no estaba para nada depurado, simplemente golpeaba e intentaba aguantar tanto como mi cuerpo me lo permitiera.El sombrero cayó al suelo rodando a un metro y se posó en el suelo,él por su parte puso los brazos sobre su cara intentando protegerse, parecía tener mas experiencia en aquel tipo de combate pues 3 segundos después sentí un movimiento con sus piernas que apoyado por su cuerpo consiguió dar la vuelta a la situación y esta vez era yo quien estaba debajo, ni si quiera supe como había conseguido hacer eso ni me lo pregunté, estaba centrado en intentar bloquear los ahora precisos golpes de mi rival que al verme que me había quejado del costado derecho intercambiaba golpes a la cabeza con golpes a mi herida, precisos y contundentes, incapaz de pararlos todos simplemente soltaba aullidos de dolor cada vez que me daba

-Sacarelo de encima o estas acabado- me obligué a hacer un sobreesfuerzo y con ayuda de mis piernas y mis brazos cogí impulso y le empujé hacia atrás, los dos primeros intentos fallaron pero finalmente al tercero funcionó, con rapidez me separé varios metros de él para recuperar aire y controlar los ahora fuertes dolores de mi costado, quitar la mano de aquella herida era impensable- maldito hijo de puta- ni si quiera fue un susurro y fue en ese entonces cuando escuche a wind hablarme sobre que el golem era suyo pero no hubo ninguna respuesta por mi parte ni si quiera un rápido pensamiento, debía estar centrado en aquel combate en el que el tipo ahora sin sombrero parecía estar vacilandome pues no sacaba su arma aunque en el fondo lo agradecí pues tendría 0 posibilidades de ganarle estando desarmado

Segundos de análisis entre ambos después otro grito ahogado por detrás mía me advertía que wind había acabado con 2 tipos ya mientras que yo ni siquiera había conseguido herir a uno,de fondo se podía escuchar la fuerte risa del tabernero, caí de rodillas sin poder evitarlo por el dolor de la herida, al parecer aquella herida no solo me afectaba al costado de mi cuerpo sino que el dolor me hacia perder la fuerza en aquella pierna de vez en cuando-mierda, ten cuidado wind- odiaba ser un lastre pero desde luego lo estaba siendo

-Apartate trancos, yo me encargare de ahora en adelante, ya estoy listo- hablo el tabernero con una mirada bastante llena de demencia, cuando mi adversario se retiró recuperando su sombrero yo ``cojeé`` hasta la altura de wind todavia con la mano en el costado
-Lo siento wind, solo necesito descansar un segundo- la miré a los ojos e hice un esfuerzo por ponerme en una posición normal, aguantándome el dolor, un sin fin de pensamientos se me pasaban por la cabeza, todos ellos enfocados de la misma manera, no darme por vencido- no me dejare derrotar con tanta facilidad me niego a aceptar acabar así y menos por una vieja herida- pensé con fuerza- vamos wind, son ellos o nosotros- le asentí con firmeza a wind, no deseaba quitar la vida a nadie pero quería que wind y yo mismo entendiéramos que era o ellos o nosotros aunque por lo que veía ella parecía comprenderlo bastante bien.El tipo del sombrero se situó detrás de su amigo como si el combate no fuera con él
-!Morir!- alzó las manos hacia nosotros y de ellas salio fuego en forma de cono directo hacia nosotros
-No... un mago no!APARTA!- apenas pude reaccionar y empujé a wind hacia la derecha y aproveché para impulsarme a la izquierda consiguiendo esquivar por los pelos el fuego que acababa de lanzar aunque algo de fuego se quedó en mi camiseta y lo apague con rapidez rodando, esperaba que wind hubiera tenido la misma suerte así que cuando el fuego se disipó la busqué con la mirada sin poder evitar una expresión de dolor en mi cara por tirarme al suelo tan bruscamente

Wind seguía mirando con terror al tabernero que parecía estar completamente loco, además que dos de sus compañeros estuvieran fuera de combate no le preocupaba lo más mínimo y aquello no hacía más que acrecentar el miedo de la elfa pero como si fuera una ráfaga de aire fresco, escuchó la voz de su amigo haciéndola volver en sí y dejar de mirar a los ojos de aquel bandido. La mole de arcilla había desaparecido dejando tras de ella simplemente un pequeño montón de tierra, daba la sensación de que nunca hubiera existido como si solo hubiera sido producto de su imaginación aunque la elfa sabía que se había salvado gracias a aquello.

Escuchó la voz del tabernero y un escalofrío recorrió su espalda “¿Qué ya está listo?” Pensó sin comprender a lo que se refería. Wind observó a su compañero que parecía haber tenido una pelea más dura que la suya, -¿Estás bien?- Preguntó con preocupación a Kouta mientras intentaba averiguar qué había sucedido en su enfrentamiento. De repente la vista de la elfa comenzó a ser borrosa, no era capaz de enfocar bien lo que miraba por lo que sacudió la cabeza un par de veces intentando recuperar la vista normal pero no parecía ser para nada efectivo. De la misma manera, la voz de Kouta le llego distorsionada haciendo así que no pudiera entender lo que le decía “¿Los otros?” Intentó descifrar que le había dicho su compañero pero no pudo, su cabeza se sentía cada vez más embotada era como si sus fuerzas se estuvieran desvaneciendo.

Vio como el tabernero exclamaba algo y extendía las manos hacia ellos -¿Qué…?- Exclamó pero no tuvo tiempo para reaccionar cuando notó el empujón de Kouta y mucho calor en la pierna izquierda. Miró y vio que la capa estaba en llamas – ¡Mierda!- Y como pudo aun en el suelo se la quitó intentando evitar que su piel llegara a quemarse sin demasiado éxito. Después de un par de intentos de quitársela mientras las manos le temblaban en exceso lo consiguió pero la capa estaba prácticamente inutilizable pues las llamas habían consumido buena parte de la parte de abajo. Se apartó arrastrándose con el culo un poco y miró al tabernero con terror pues ante eso, no sabía que podrían hacer y menos con situación en la que se encontraba la joven en ese momento. –Kouta, no me encuentro bien- Dijo como pudo entre tartamudeos con la esperanza de que la entendiera o al menos la escuchara mientras miraba el suelo.

Wind intentó levantarse un par de veces sin mucho éxito pues cada vez que conseguía una postura erguida, caía al suelo de rodillas de nuevo además, la quemadura que tenía en su pierna no ayudaba lo más mínimo a que la joven pudiera incorporarse. Busco a su compañero con la mirada llena de pánico esperando que él estuviera bien. –Gracias- susurró con apenas un hilo de voz sin poder añadir mucho más, estaba completamente agotada, se sentía como si hiciera días que no descansaba y verlo todo borroso y no poder escuchar con claridad solo hacían que la joven se pusiera nerviosa.

Después de tanto ajetreo notó como se le caía la tela del pecho pero en vez de intentar colocársela rápidamente de nuevo la miró caer  lentamente sin ningún tipo de alarma. No prestó atención a la risa tan desquiciante que soltaba el tabernero como si disfrutara absolutamente de aquella situación. La elfa sin poder hacer gran cosa, miró a Kouta con los ojos cargados de pena – Lo siento, estoy… muy… cansada- Dijo con una débil sonrisa mientras notaba como las extremidades le temblaban. Estaba cansada, tenía mucho sueño y no se veía con fuerza como para seguir batallando contra aquellos hombres, la culpabilidad podía con ella pues no quería dejar a su amigo solo con todo aquello pero no era capaz de controlar bien sus extremidades debido a los temblores, de un momento a otro, mientras miraba a su compañero todo se volvió negro, las fuerzas le fallaban y notó como su cabeza golpeaba contra el suelo, después nada más.

Recuperé el aire y fue entonces cuando wind me alertó de que no se encontraba bien- ¿eh, wind?- le pregunté porque no acababa de asimilar del todo o mejor dicho de entender lo que me acababa de decir.Mi vista se centró en ella y sus intentos por ponerse erguida, todos ellos en vano- ¿que demonios?- balbuceé observando aquella escena y al verla en aquellas condiciones mi mente se centro mas en ella que en mi propio cuerpo por lo que el dolor prácticamente desapareció

-¿Que le esta pasando?- un rápido vistazo por el cuerpo de la elfa me dejó a la vista su quemadura en la pierna- mierda- susurré y observé de nuevo a aquel tipo, no debía perder la concentración si wind estaba tocada lo peor que podía hacer era dejar que aquel tipo atacara de nuevo y mas todavía si nos pillaba de sorpresa,me relajé ligeramente al ver que seguía riéndose como un loco gritando una y otra vez -RODAR,RODAR Y ARDER- como si en ello le fuera la vida-necio-fue un pensamiento rápido para de nuevo observar a wind y a su quemadura que parecía bastante grave.Fue en ese entonces que la elfa susurro algo casi incomprensible para mi con una ligera sonrisa y acto seguido cayó

-¿Wind?-susurré sin comprender todavía la gravedad del asunto-wind levanta- estaba entrando en modo de pánico al ver que no reaccionaba- !LEVANTA WIND!- grite esta vez con fuerza pero no hubo respuesta por parte de mi amiga, sentí un fuerte pinchazo en mi pecho seguido de ira, mucha ira.Giré la cabeza observando a los ojos a aquel cabrón y acto seguido, sin ni siquiera pensar me abalancé sobre el con una flecha en la mano,sorprendido aquel tipo no pudo hacer nada mas que caer al suelo debajo mio y sujetarme las muñecas con sus manos haciendo fuerza para evitar que la flecha que estaba a pocos centímetros de  cara siguiera bajando- cabrón,cabrón,cabrón,muere MUERE!- grité como si fuera el, totalmente ido de la cabeza por lo que acababa de presenciar- !TE VOY A MATAR CABRÓN!- hice mas fuerza pero el otro tipo aunque por un segundo puso una mirada de miedo, rápidamente hizo uso de su magia y rió
-Arderás, !COMO TU AMIGA!- gritó con fuerza y creó fuego en sus manos comenzando a quemar mis muñecas, fue ese estimulo de dolor el que me hizo volver en mi y me separé, posiblemente él me acababa de salvar la vida aunque no fuera consciente

Sentia mis muñecas arder y podía observar como en algunas zonas todavía estaba la marca de aquel cabrón, consciente de que pasar las manos sobre las heridas solo empeoraría las cosas simplemente me resigné a aguantar el dolor y recapacitar mientras aquel tipo se ponía lentamente de pie.Miré a wind de nuevo que seguía en aquella posición- wind... despierta por favor...- retrocedí un par de pasos y quedé justo a su lado, le moví ligeramente con cuidado mientras le susurraba- wind por favor... reacciona...-pero parecía no haber respuesta por su parte


-!MUERE!- gritó aquel tipo alzando su mano derecha y una bola emergió en su mano que rápidamente salio directa hacia mi y la conseguí esquivar tirándome a un lado aunque me rozó la bota.De nuevo aquel dolor de mi vieja herida me dejo sin respiración un segundo, pero no había acabado, el tipo lanzó dos bolas mas, la primera la esquivé rodando en el suelo pero la tercera me impactó justo en el hombro sin poder hacer nada por puro agotamiento, mis piernas me fallaban por la herida y el cansancio, mi mente estaba mas centrada en wind que en el combate y por si fuera poco la habilidad de aquel tipo me había impactado con fuerza, me sentía cansado y dolorido, deseaba descansar pero mi mente me obligaba a continuar pues si me daba por vencido, ambos estaríamos muertos.

Con fuerza y soltando gritos de dolor apagué el fuego sobre mi camiseta antes de que se expandiera mucho- debo hacer algo- pensé pero las ideas se me agotaron- a este paso...- miré a wind que seguia en aquella posición- como sea no dejare que le pase nada malo a ella, no volveré a fallar otra vez- asentí conforme con mi respuesta pues si tenia que hacerlo estaba dispuesto a dar mi vida por mi amiga.El tabernero negó con la cabeza, ya no se comportaba como un loco o al menos parecía que no tanto como antes, acto seguido me apuntó de nuevo con su mano derecha con una expresión seria, tragué saliva, no podría volver a esquivar sus ataques, ambos lo sabíamos, mi cuerpo estaba al limite, necesitaba un descanso, tanto físico como mentalmente- tumbarte en la suave hierba.... cerrar los ojos y descansar plácidamente- como si otra parte de mi me dijera que eso era lo que debía hacer

Pero una sonrisa en su rostro me alertó, no iba a por si no a por wind que estaba a unos 2 metros míos, como si de una ralentizan del tiempo se tratase vi el movimiento de su mano dirección a wind- que..., !seras hijo de puta!, !ni lo sueñes!- pensé cuando comencé mi carrera contrarreloj ignorando por completo el tremendo dolor que sentía a cada paso que daba tanto en piernas como en todo el cuerpo en si, ademas a ese dolor se le sumaba el cansancio acumulado por los golpes y la pelea en general, no obstante en mi cabeza solo había un único pensamiento, el pensamiento por el cual me movía casi involuntariamente- no la mataras si yo puedo evitarlo- el tiempo volvió en si cuando finalmente él lanzó las bolas de fuego y llegué justo delante de wind, abriendo la manos para intentar cubrirla la mayor parte posible aunque sabia que su ataque iba directo a mi espalda. Durante el eterno segundo en el que esperé el inminente ataque, fijé mi mirada en wind viendo su ligero movimiento de cuerpo al respirar, lo cual me hizo esbozar una sonrisa- estas a salvo, pequeña-le susurré como si me escuchara con una sonrisa mas amplia y finalmente recibí el impacto una sola vez, solté un enorme grito con todas las fuerzas que me quedaban al sentirlo, caí de rodillas con los ojos cerrados y después me desplomé al suelo

Wind estaba sumida en un sueño profundo, pues si el desmayo no había suficiente el golpe en la cabeza hizo que la joven terminara de perder la consciencia por completo. Mientras estaba en el suelo, la elfa ignoraba por completo lo que sucedía a su alrededor, ella estaba en otra parte mucho más tranquila y feliz que aquel bosque.

Durante el desmayo ocurrió algo inesperado, mientras los dos jóvenes estaban en el suelo desmayados el tipo del sombrero se situó al lado de su amigo cuando este se preparó para lanzar su último ataque y el tabernero le miró con una amplia sonrisa –Con lo fácil que era… menudo par de inútiles ¿Verdad?- Dijo refiriéndose a sus compañeros abatidos, el hombre del sombrero asintió ligeramente mientras miraba al tabernero -Muere maldito pirómano- Instantes más tarde la cabeza del brujo estaba en el suelo y Trancos enfundó su arma tras limpiar la sangre en su ropa como si hubiera hecho algo que carecía de importancia y se acercó a los jóvenes que seguían en el suelo.

Sin estar muy segura de cuánto tiempo había pasado, la elfa abrió los ojos lentamente completamente desorientada, le dolía la cabeza y el sol aún no se estaba poniendo “Un par de horas como mucho” Fue a la conclusión que llegó. Se incorporó aun en el suelo, quedándose sentada mientras observaba la escena, había sangre esparcida por el suelo los dos hombres que la joven había abatido aún seguían en la misma posición pero parecía que aun respiraban no mucho más lejos se apreciaba la figura del tabernero y la cabeza a su lado. Aquella escena hizo que a Wind le dieran nauseas -¿Qué ha pasado?- Preguntó en voz baja como si ella misma tuviera la respuesta. El hombre del sombrero estaba sentado apoyado en la pared leyendo y Kouta estaba al lado de la joven con una fea herida en la espalda.

Al ver a Kouta de esa manera, la joven se alarmó dando un grito ahogado mientras intentaba averiguar como de grave estaba su amigo pues aparte de esa herida se le veían otras cuantas por el cuerpo. –Oh, madre mía- Exclamó alarmada, pero al acercarse un poco más para ver las heridas mejor, se dio cuenta de que estaban cubiertas por una especie de ungüento transparente “¿Qué es esto?” Pensó mientras lo miraba curiosa aunque se notaba que aquello había hecho cierto efecto pues las quemaduras no estaban infectadas. Al ver aquello Wind intentó hacer lo mismo que había hecho antes con el anciano, poniendo las manos cerca de la herida y mirándola mientras hacia una plegaria a los cielos pero esta vez no pareció surgir el mismo efecto pues aunque tal vez pudiera estar haciendo algo desde luego no era visible. Aun así, Wind repitió la misma operación con todas las heridas que le vio al joven, en algunas hacía más efecto que en otras pero la elfa no pretendía perder la esperanza. Cuando terminó de hacer aquello le acarició el cabello y en un suave tono de broma le dijo – Siento lo de tu capa, prometo que te comparé otra- Y acto seguido hizo un amago de levantarse sin mucho éxito pues un agudo dolor le subía desde la pierna izquierda haciéndola caer de nuevo. Al notar que ella misma tenía ese extraño ungüento, miró al hombre del sombrero que parecía no haberse inmutado para volver a recitar una plegaria, esta vez sobre sí misma y aunque el efecto visible era casi nulo, si era cierto que el escozor se reducía agradablemente.

Después de aquello se levantó con cierta dificultad dándose cuenta de repente de que no llevaba la tela del pecho por lo que se cerró el chaleco por no volver a agacharse a coger la tela y cojeando se acercó a los dos hombres que estaban tendidos en el suelo, a los cuales ella misma había dejado en aquella situación. La joven no tenía ninguna intención de matar a nadie y desde luego si podía iba a evitar a toda costa que hubiera muertos pesando sobre su conciencia lo evitaría. Sabía que tenía hierbas en su pequeña bolsa y algunas vendas que tal vez podrían ayudar a sanar a aquellos que hacía apenas un rato había intentado acabar con su vida.
Lo reflexionó unos segundos pero sabiendo que podía hacer algo, terminó por coger unas cuantas hierbas de su bolsa y unas vendas. Escuchó un resoplido que provenía del hombre del sombrero pero decidió ignorarlo. Al primer hombre le quitó la flecha de un modo bastante malo al hombre y rezó para que aquello no fuera peor que tenerla clavada puso de un modo muy rudimentario las hierbas sobre la herida y le vendó como buenamente pudo rezando para que aquello fuera suficiente. Con el segundo hombre hizo lo mismo mientras se preguntaba por qué nunca había aprendido medicina, con lo útil que sería en estas situaciones. Después de aquello, se acercó de nuevo a su amigo y se dejó caer a su lado.

Wind comenzó a mecerle el pelo con suavidad mientras pensaba en lo que había ocurrido mientras ella estaba desmayada “Supongo que me ha salvado” Pensó sabiendo que aquello era lo más factible pues sino, era más que probable que ambos estuvieran muertos. Ante aquella idea miró de nuevo al hombre que estaba sentado como esperando algo o como si no tuviera ninguna intención de moverse de allí. Con todo el valor del que fue capaz, Wind preguntó -¿Qué ha pasado mientras estaba inconsciente?- Y tal como se esperaba, el hombre simplemente la miró e hizo como si no hubiera escuchado nada ignorándola por completo.

La joven se quedó un rato más así, acariciando el pelo del joven que seguía en el suelo mientras esperaba a que su amigo se despertase mientras de vez en cuando, sin estar muy segura si eso podía funcionar así recitaba de nuevo algunas plegarias a los cielos para que las heridas de Kouta se curaran antes.

Un muy ligero dolor me hizo volver en mi, recuperando la consciencia para sentir como alguien me acariciaba el pelo y una sensación de quemado por toda mi espalda- ¿que?, ¿que ha pasado?- me pregunté a mi mismo abriendo los ojos lentamente como si me acabara de levantar de una agradable siesta, sentía el cuerpo bastante agotado fue entonces cuando recordé lo que acababa de pasar- wind- susurre débilmente pues pretendía ser mas un pensamiento, entonces me fijé en que la elfa estaba a mi lado, sentada acariciando mi pelo y susurrando algo que no comprendia. Una sensación de alivio recorrió mi cuerpo al ver que se encontraba bien-gracias a los dioses-, esbocé una amplia sonrisa mientras me intentaba reincorporar para sentarme con movimientos lentos y con alguna expresión de dolor pues seguía sintiendo aquellos pinchazos en mi espalda y hombro, aunque por suerte la vieja herida parecía no producir ningún dolor extra

-B-buenos días- esbocé una ligera sonrisa para que mi compañera no se preocupara- ¿estas bien?- le pregunté rezando por que así fuera- ¿estas segura?- le insistí pues quería estar totalmente seguro de que wind se encontraba todo lo bien que podría después de una pelea como aquella-¿tanto te gusta mecerme el pelo?- le sonreí como si fuera un niño pequeño.Entonces mi mirada se posó en el tipo del sombrero que había dejado el libro y ahora me miraba fijamente con la mirada de ``tu vas a morir el primero`` aunque era la segunda vez que sentía aquella mirada así que supuse que era una normal, aun así seguía intimidando bastante.Observé como tenia algún tipo de ungüento en el hombro y supuse que en la espalda pues sentía una sensación similar- ¿fue wind?- negué con la cabeza al recordar que se habia desmayado- entonces fue este tipo- le seguía mirando y el me devolvía la mirada y cuando me dispuse a agradecerle cerró el libro y se levantó
-Bien, se esta haciendo tarde, será mejor que me marche, mi trabajo aquí a acabado- ante aquellas palabras miré a wind desconcertado con una cara de duda- ¿trabajo?- le susurre a mi compañera incrédulo
- Es-espera, ¿porque…?- intenté preguntarle
El tipo solo negó con la cabeza- son mis asuntos- habló y de nuevo posó su mirada en mi ignorando por completo a wind, entonces se inclino hacia abajo y habló- eres tal y como me habían dicho kouta- habló como si fuera un susurro para los tres y después se separo de nosotros-la información que me llego sobre ti era desde luego de primera calidad, te conoce muy bien- asintió con la cabeza como si se divirtiera torturándome con aquella incógnita y tras eso se marcho silbando una canción irreconocible

-¿Que acaba de pasar?- de nuevo miré a wind desconcertado, no sabia que acababa de suceder- ¿alguien que me conoce?- hablé sin tener muy claro a quien se refería- ¿será lida?- negué con la cabeza- no ella no me conoce tan bien…- seguí inmerso en mis pensamientos unos minutos hasta que finalmente volví a prestar atención a wind- ¿y bien wind, después de todo esto, seguiremos andando o nos quedaremos a pasar la noche aquí?- le pregunté pues quería conocer su respuesta.Suspiré al ver como estaba mi camiseta- supongo que ahora si tendré que acompañarte hasta la ciudad, he perdido mi camiseta y mi capa- fingí de una manera efectiva dolor en mis palabras intentando hacerle sentir culpable a wind como si todo eso hubiera sido por su culpa,acto seguido esbocé una amplia sonrisa para hacer reír a wind- y yo que pensaba abandonarte en este bosque- le saque la lengua divertido esperando su reacción

Wind se percató de que Kouta se despertaba cuando movió la cabeza ligeramente bajo su mano lo que hizo que la joven lo mirara con alegría -¡Estas despierto!- Exclamó como si intentara que su propio amigo se diera cuenta de aquello. -¿Estas bien?- Se apresuró a preguntar mientras dejaba de acariciarle el cabello. Le miró con preocupación pues las heridas que tenía no eran especialmente feas, pero si serían dolorosas.

Cuando la elfa le escuchó hablar con más normalidad esbozó una enorme sonrisa y reprimió las ganas de abrazarle, pues probablemente acabara rozándole alguna herida y haciéndole daño –Buenos días a ti también- Comentó feliz. Aquella insistencia en su salud hizo la joven exhibiera una mueca de disgusto “¿Qué si yo estoy bien? ¿Pero no se ha visto?” –Puedo asegurarte que estoy mucho mejor que tú, no te preocupes- Dijo la joven con una mirada de preocupación que contrastaba con el tono de voz tranquilizador. El comentario sobre el pelo hizo que Wind se sonrojara –Y-Yo…- Intentó pensar alguna buena excusa para que, haberle estado tocando el pelo no fuera algo demasiado extraño, pero no se le ocurrió nada que le pudiera servir así que se limitó a apartar la mirada mientras seguía ruborizada. –Estaba preocupada, siento haberme desmayado de esa manera durante la pelea- Añadió pocos instantes después mientras volvía mirarle.

Wind se sorprendió cuando escuchó hablar al tipo del sombrero -¿Trabajo?- Susurró la elfa al mismo tiempo que su amigo sin comprender a que se refería. Miró al hombre de nuevo intentando discernir quien era o a que se refería pero no tuvo demasiado éxito además, el hecho de que aquel hombre hablara de esa manera de Kouta hizo que la elfa se quedara incluso más confusa -¿Le conocías?- Preguntó sin ningún tipo de reproche, sino más bien con curiosidad –Si sabías que iba a salvarnos podías haberlo dicho desde el principio- Comentó aun con cierto tono curioso esperando alguna respuesta por parte del humano.

Wind observó como aquel tipo se alejaba tranquilamente como si la pelea nunca hubiera tenido lugar “¿Se va así, sin más?” No comprendía que acaba de suceder “¿Entonces él nos ha salvado?” -¿Quería hacerse con el control de su banda?- dijo en voz baja, como si hablara para si misma.La joven no lo entendía pero de repente vio cómo se llevaba a los dos hombres que ella misma había intentado sanar antes, los cuales apenas podían caminar pero aun así se alejaron los 3 con el hombre del sombrero en medio  sin poner ningún tipo de resistencia.  
Aunque la elfa esperaba respuestas por parte del humano, lo único que consiguió fueron más dudas -¿Lida?- Repitió extrañada -¿Es tu novia?- Preguntó con aun más curiosidad mientras sonreía a su amigo esperando saciar su curiosidad.

La pregunta de su amigo la dejó unos segundos pensativa pues ya se empezaba a hacer tarde y en las condiciones en las que estaban desde luego no podrían llegar muy lejos pero dormir en aquella posaba abandonada no le hacía la más mínima ilusión –Aunque lo odie, creo que deberíamos pasar la noche aquí… No es genial, pero no estamos como para ir a ningún sitio- Explicó Wind a su amigo esperando a ver si él pensaba como ella. Aquel reproche hizo que la joven le sacara la lengua a modo de queja aunque bien era cierto que se sentía más que culpable por haberle destrozado la capa. -¿Es que acaso no pensabas acompañarme desde un principio?- Preguntó la joven con falso enfado y cuando le vio sonreír y le hizo el segundo comentario, la elfa puso una expresión de lastima con la intención de que Kouta se creyera que la joven estaba dolida por aquello –Eso es cruel, tu jabalí fue el que me dejó sin vestido- Acto seguido esbozó una sonrisa y le sacó la lengua de nuevo –Así que es tu responsabilidad procurar que yo consiga uno nuevo- Concluyó completamente convencida de sus palabras mientras miraba a su amigo sonriente.

Todavía un poco mareado asentí con la cabeza ante la pregunta de wind- he estado mejor, pero me recuperaré- le asentí- gracias por preocuparte-le sonreí cuando me miró preocupada para que dejara de estarlo.Algunos minutos mas tarde la elfa se disculpó y negué con la cabeza- no debes disculparte, hiciste lo que pudiste llevando tu cuerpo al limite debo darte las gracias por eso- le acaricié el pelo unos segundos sonriendole- gracias amiga- me reconfortaba que wind  se hubiera esforzado tanto, decía mucho de ella

El hombre habló y ambos nos miramos curiosos a la par que confusos, negué con la cabeza cuando la elfa me preguntó si lo conocía- creo que no lo he visto en mi vida- estuve pensativo unos segundos y no conseguía recordar su cara- estoy bastante convencido de que no- aclaré todavía un tanto confuso .La joven wind parecía tan desconcertada como yo ante los comentarios del humano que se acababa de ir, entonces preguntó sobre Lida y no pude evitar ponerme un tanto nervioso- B-bueno Lida es.. una amiga- dudé unos segundos- mas o menos- no estaba muy de acuerdo con la respuesta que le acababa de dar pero no sabia como describir nuestra relación pues tampoco llegaba a ser tan grande.Me sonrojé al escucharla divagar sobre nuestra relación- N-NO- negué con las manos- Q-QUE DICES?? e-eso no podría ser...- la fuerza de mis palabras iba desvaneciéndose acabando casi en un susurro-esto, solo somos amigos- afirmé sin saber si llegábamos a ser tanto

Suspiré levantándome cuando escuche a wind- no creo que quedarnos en este lugar sea una buena idea, una taberna abandonada en un territorio de hombres lobo.... ¿no suena muy seguro no crees?- le pregunte a la elfa- aunque bien cierto es que con nuestras heridas actuales y sin descansar, podría ser un peligro avanzar y mas por la noche siendo que no tenemos nada con que taparnos- suspiré tomando una decisión- esta bien entremos- me dirigí al edificio y fue en ese momento que recordé lo dañada que estaba mi camiseta y seguir con ella no hacia mas que estorbar, me giré dándole la espalda a wind como si fuera la primera vez que nos viéramos y me quité la camiseta con cuidado de no hacerme daño tirándola al suelo

Llevé una mano a la herida de mi espalda, tanteando el terreno  y solté un ligero gruñido al tocar mi reciente herida-duele, parece que sera difícil pelear con esta herida- suspiré y reafirmé la idea de quedarnos en aquel lugar- descansaremos esta noche, pero sin falta y sin pausa, continuaremos el camino hasta el siguiente pueblo, sin despistes ni salirnos del camino ¿vale?- le aclaré un tanto preocupado por si nos metíamos en problemas, aquella herida no me dejaría pelear o no sin sufrir.Me dirigí hasta sentarme en uno de los taburetes de la barra y me pasé las manos sobre mi cara para intentar despejarme- ya empieza a hacer efecto las horas de sueño- bostecé con fuerza a pesar de no ser tan tarde- oye wind, ya que no tenemos mi capa, seria bueno que siguieras con mi chaleco, no te preocupes por mi, puedo apañarmelas siempre que encendamos la chimenea, o por lo menos un poco de fuego que no delate nuestra posición-le miré a los ojos- que por cierto.... deberías asegurarte de que todos los botones estén bien abrochados- le indiqué a mi compañera posando mi mano sobre su pelo y acariciándolo un poco como ella había hecho anteriormente como si se tratara de la advertencia de un padre a una hija o de un hermano mayor a una hermana pequeña aunque no pude evitar esbozar una sonrisa

-Todavía ahí algunas horas de luz, ¿que te apetece hacer?- le pregunté a la elfa tras pasar por encima de la barra cogiendo una botella y sirviéndonos algo de beber a ambos-ESPERA UN MOMENTO- mire a la elfa sobresaltado- !TENEMOS UN CARRUAJE EN EL ESTABLO!,!¿CIERTO?!-deseé que aquel tipo del sombrero no se lo hubiera llevado y lo hubiera dejado allí, seria un regalo que sin duda aceptaría

El hecho de que su compañero no hubiera visto a aquel hombre nunca, hizo que la joven tuviera más dudas incluso -¿Entonces por qué nos habrá salvado?- Dijo a modo de reflexión en voz baja. Ver como su amigo se ponía nervioso hizo que la joven se riera suavemente mientras éste se explicaba entrecortadamente y a modo de picarle un poco más continuo con las preguntas –Oh, así que si tenéis algo…- Dijo la joven riéndose ahora con más soltura ante el tono de voz y aspavientos de su compañero.

-Desde luego no es lo más oportuno, pero no tenemos muchas más opciones ahora mismo además los licántropos no tendrían por qué decirnos nada si no nos metemos en problemas- Explicó la joven intentando calmar las dudas de Kouta –Bueno... En más problemas quiero decir- añadió unos instantes después ya que desde luego, problemas no les habían faltado.
Cuando el joven parecía convencido de pasar allí la noche, Wind se levantó con una expresión dolorida mal disimulada y recogió el pañuelo que se había caído durante la batalla de su pecho para colocárselo más tarde. Siguió a su amigo hasta el interior del edificio y observó realmente sorprendida como Kouta se quitaba la camisa “¿Por qué se la quita?” Pensó pero se dio cuenta de la mala situación en la que estaba la prenda así que más o menos comprensiva suspiró y se resignó a que aquella ropa estaba tan perdida como lo estaba la capa.

-A este paso acabarás tu más desvestido que yo- Comentó la joven con un tono entre broma y preocupación el cual dejó de lado cuando escuchó el quejido de su amigo -¿Seguro que estas bien?- Preguntó mientras se acercaba a él más preocupada que antes.
Wind rio suavemente ante el comentario de su amigo que parecía estar más o menos bien y con un tono aburrido le dio la razón con un par de “Sí” -¿Entonces no más desvíos seguro? Con lo emocionante que se nos está haciendo el viaje...- Dijo en tono de broma mientras sonreía burlonamente a su compañero.

Cuando el humano hizo aquel comentario sobre las ropas pensó que tal vez sería lo mejor, pero tampoco quería quedarse  con más ropa de su amigo el cual poco a poco iba perdiendo prendas –Tampoco tienes camisa, deberíamos encontrar algún sustituto para ella- Comentó la joven preocupada mientras se acercaba a la barra. La referencia al fuego hizo que la elfa se diera cuenta de que el fuego que antes miraba el anciano estuviera casi extinto, resopló y volvió a mirar a Kouta mientras le escuchaba terminar de hablar. El comentario sobre el chaleco hizo que se ruborizara y mirara si lo tenía bien abotonado para acto seguido mirar con falso enojo a su amigo –Esta bien puesto- Comentó en tono infantil aun con la expresión enfurruñada.

La joven no supo que responder ante aquella pregunta, pues hacía tantos días que no tenía un rato de descanso que no tenía nada claro que le apetecía hacer ya que la respuesta más obvia era dormir así que se pasó unos segundos reflexionando mientras Kouta le servía algo de beber. La voz del humano la sacó de sus cavilaciones repentinamente haciendo que la joven se quedara absolutamente sorprendida mientras le miraba sin comprender que pasaba -¿Un carro?- Repitió pensativa para acto seguido darse cuenta que tenía razón y que debía haber un carro en la taberna así que rápidamente se levantó para acto seguido sentir un pinchazo en su pierna lo que la hizo trastabillar un poco por el dolor y se encaminó hacia el establo deseando que hubiera al menos algún medio de transporte.

Llegaron a donde debería estar el carruaje y allí estaba, completamente intacto tal y como lo habían visto nada más llegar pero nada más verlo, a la joven pasó de la alegría a la resignación pues ella no sabía montar a caballo y desde luego no iba a ponerse a practicar en ese momento además nunca llegó a aprender a manejar un carro ya que era u abuelo el que siempre se encargaba de eso. –Kouta, da igual, no se montar a caballo- Dijo con tono de decepción mientras le miraba..

Cuando volvieron dentro, la joven buscó todas las velas de la sala para tenerlas localizadas pues las ascuas del fuego aun servían para encender aquellas velas cuando empezara a oscurecer de verdad. –Tal vez haya algo de ropa arriba- Dijo la joven más como una reflexión en voz alta pero si encontraban al menos una capa o una camisa de hombre, Kouta podría ir algo más vestido.

Seguí con una sonrisa a la elfa, deseando que el carruaje siguiera allí- ojalá que este- pensé para mis adentros,cuando lo vi la emoción recorrió todo mi cuerpo- genial, al fin algo de suerte- sonreía ampliamente aquello era un gran paso en nuestro viaje- con él nos moveremos mucho mas rápido- fue algo demasiado obvio pero no pude evitar decirlo.Las palabras de la elfa me hicieron volver a la realidad cambiando mi alegría por frustración que no tarde en dejar salir- !JODER!- grité con fuerza golpeando la pared de aquel lugar y respire un par de segundos obligándome a tranquilizar- si tan si quiera ella estuviera aquí- susurre pero me quité de los pensamientos a Lida pues de nada servia lamentarse por que ella no estuviera allí ya que en lo que respectaba a montar a caballo su compañera le había demostrado unas grandes dotes- perdona- volví en mi todavía con cierta cara de resignación- yo tampoco se montar a caballo- se podía notar cierta frustración en mis palabras- si no fuera tan inútil- pensé culpándome el no haber aprendido a manejar ya no un carro, sino un caballo- sera mejor que volvamos- le afirmé a mi compañera y de nuevo volvimos a aquel antro abandonado

Me senté cerca del fuego para calentar la parte superior de mi cuerpo y ademas aprovechar para mirar las heridas que poco a poco seguían dejando de dolerme, aunque estaban lejos de estar curadas-espero que no nos ataquen- suspire pensando sobre aquellas posibilidades, el viaje se estaba complicando de formas demasiado extrañas como para ser ciertas, despejé la mente cuando la elfa hablo

-Tienes razon, ire a mirar- me levanté del sillón y cuando dí el primer paso las fuerzas de mis piernas fallaron nuevamente y caí arrodillado al suelo sintiendo un pinchazo en aquella vieja herida y soltando un leve gruñido- maldita sea- murmuré con mala cara, odiaba cuando a mi herida le daba por hacer de las suyas, se notaba que mi cuerpo se resentía tras aquel combate- estoy bien, no te preocupes- alcé la mano hacia wind sin mirarla para que no me ayudara si como yo pensaba, venia a hacerlo-subiré arriba- soné un poco borde pero sin aquella intención pues en mi cabeza había montones de pensamientos como la extremada mala suerte que teníamos los dos, las cosas que habían pasado y las que podrían pasar al quedarnos aquella noche allí y sobretodo en aquel extraño tipo del sombrero que nos había salvado .Subí las escaleras con normalidad, aquel pinchazo solo había sido momentáneo y ya me había recuperado- ¿quien demonios seria?- me pregunté entrando a una de las habitaciones desordenadas y rebuscando para encontrar algo que ponerme- ¿información sobre mi?- me paré un segundo meditando- que estupidez es esa, quien demonios le ha dado información sobre mi- entonces me llego a la cabeza la solución de aquel misterio- ¿os que mataron a mi madre?- me pregunté extrañado, reflexione un poco y vi que podría tener lógica- ¿espera y  entonces por que me salvo?, acaso él pertenecía a aquella banda- sin ninguna pista lógica en mi mente había aceptado que eran una banda

El haber estado tan cerca y no haberme dado cuenta me enfurecía, sentí como todo a mi alrededor me estaba dando vueltas sintiendo aquella sensación de fatiga, de mareo y sin darme cuenta caí al suelo. Todavía desorientado me pasé las manos por mi vista como si me acabara de despertar intentando ver con claridad- ¿que me esta pasando?, ¿envenenado?- fue lo primero que se me paso por la mente pero lo descarte enseguida, la respuesta era mucho mas simple y natural, había perdido los nervios y la acumulación de sensaciones o quizás el estrés me habíasuperado de tal forma que sin darme cuenta había perdido el control de mi cuerpo momentáneamente-sera mejor que descanse un poco- esa podría ser otra razón, la falta de sueño

Cogí una de las camisetas que podrían servirme y con cuidado y pasos lentos llegue hasta el lateral de la cama, todavía conmocionado y un tanto mareado por tantas cosas decidí permanecer un rato en aquella posición, al menos hasta encontrarme un poco mejor

Wind se percató de la decepción de su compañero que parecía ser como poco, la misma que sentía ella, además aquella exclamación hizo que la joven diera un pequeño bote en sitio por lo inesperado del tono de la voz. –No es para tanto, mañana continuaremos el camino- Dijo la joven intentando calmar a su amigo cuando aquel deseo hizo que la elfa sintiera curiosidad sobre a qué se refería aunque no consideraba que aquel fuera el mejor momento para hacerle más preguntas por lo que decidió guardársela para más adelante cuando Kouta estuviera más tranquilo. –No te disculpes, ninguno de los dos sabemos montar… No podíamos hacer nada- Comentó restándole importancia a aquello ya que a su compañero parecía haberle afectado más que a ella. Ante la afirmación, la joven asintió y le siguió en silencio pensando en que al fin y al cabo no era para tanto, el único problema es que tendrían que caminar más.

Cuando Kouta le dio la razón, la joven lo observó unos segundos y cuando éste se cayó el primer impulso de la elfa era ir a ayudarle, de echó se apresuró a dejar las velas para ayudarle pero aquel gesto con la mano hizo que Wind se quedara en el sitio quieta mientras le seguía mirando algo preocupada. - ¿Seguro que estás bien?- Preguntó la joven sin demasiada confianza pero aquella afirmación tan rotunda dejó a la joven helada unos instantes sin saber muy bien que hacer pues su instinto le decía que debía acompañarle a la parte de arriba pero el humano no parecía por la labor de querer ayuda así que al final se quedó quieta mientras le observaba subir con una cierta mirada de lastima “¿Está enfadado?” Era la mayor preocupación de la elfa pues Kouta parecía haber cambiado de actitud en apenas unos minutos y la opción más viable que se ocurrió es que se había enfadado con ella por algo “Tal vez haya reflexionado lo de la magia que habíamos hablado antes… O quizás sea porque no se montar a caballo o no se manejar un carro…”.

Cuando el joven subió, la elfa pensó en que hacer y la mejor idea que se le ocurrió fue avivar el fuego y encender algunas velas pues no tardaría demasiado en empezar a oscurecer así que, se acercó a la chimenea y empezó a ponerle pequeños troncos y ramas que ya había cortadas a los pies de ésta mientras soplaba suavemente intentando avivar el fuego y que la yesca encendiera. Después de unos segundos empezó a arder y cogió unas pocas velas que fue encendiendo una a una pero cuando apenas iba por la segunda escuchó un golpe seco que provenía del piso de arriba. –Oh no- Exclamó en voz baja alarmada mientras dejaba todas las velas en la mesa más cercana, cogía su arco y cargaba una flecha.

Subió las escaleras más deprisa de lo que debería con la flecha orientada hacia el suelo mientras intentaba escuchar algún otro sonido que pudiera indicar que había problemas. Cuando llegó arriba miró en un par de habitaciones hasta que dio con su amigo el cual estaba sentado en una cama. Ante la falta de peligro visible y por ver a su compañero en aquella situación  después del ruido que había escuchado hizo que la joven se alarmara pensando que podía haberle pasado algo debido a las heridas por lo que dejó el arco caer al suelo de golpe y se acercó a Kouta rápidamente con una mirada cargada de preocupación -¿Estás bien?- Dijo mientras posaba una mano en su frente intentando discernir si tenía fiebre aunque la verdad era que no tenía ni la más remota idea de cómo saber eso. Se acuclilló delante de su compañero y sin pensarlo mucho más comenzó a preguntarle mientras le miraba a la cara intentando averiguar algo – ¿Que ha pasado? ¿Te encuentras mal?- Su voz estaba cargada de preocupación y su rostro mostraba exactamente lo mismo -¿Te duele algo?- Añadió apresuradamente apenas unos segundos después sin darle tiempo a su amigo a explicarse.

La elfa se le quedó mirando mientras esperaba una respuesta a aquellas preguntas que al fin y al cabo eran la misma olvidando su preocupación de que Kouta estuviera enfadado con ella.

Me había quedado empanado así que cuando wind me preguntaba que tal me encontraba me sobresalté ligeramente como si no la hubiera visto entrar porque en cierta forma no lo había hecho, había estado demasiado despistado- si, esto, solo estaba un poco cansado- le aclaré, dudé si abrirme a wind contándole todo lo que por mi cabeza pasaba pero lo negué pues todavía no la conocía demasiado bien, solo hacia un día, casi dos que nos habíamos encontrado-no tengo fiebre, tranquila, supongo que solo necesito descansar- esbocé una ligera sonrisa al ver como intentaba ayudar era un gesto que realmente agradecía

Entonces comenzó el bombardeo de preguntas por parte de wind en la que apenas podía responder todas a la vez, cuando pareció terminar de preguntar suspiré- eh eh tranquila, no te preocupes wind, de verdad, solo es cansancio- le volví a sonreír y le posé la mano sobre el pelo como siempre hacia-ni me encuentro tan mal, ni me duele nada en extremo, no te preocupes- amplié mi sonrisa y le revolví el pelo, hice un pequeño esfuerzo por ponerme de pie y todavía con la mano en su pelo me paré a su lado y la miré- muchas gracias wind, por preocuparte, te lo agradezco de verdad- le hablé tal y como pensaba pues ver tanta preocupación en su rostro me hacían darme cuenta que de verdad estaba preocupada por mi.Caminé hasta el final de la habitación viendo su arco en el suelo arrodillándome y recogiéndolo- es un buen arco- asentí en mi cabeza al analizarlo mientras seguía agachado- parece ser que no es tan importante su arco para ella como el mio para mi- me reincorporé con el arco en la mano y la miré con cierto tono de preocupación- no deberías tratar así el único arma que tienes, supongo que ya lo sabrás pero tu arco es la diferencia entre vivir o morir- alcé la mano para que cuando se acercara lo cogiera, mis palabras no fueron duras ni fueron una advertencia, fueron mas un consejo de un amigo que se había dado cuenta de aquello por experiencia propia

-Por cierto, ¿te gusta?- bromeé señalando la camiseta que me había puesto que aunque algo desgastada y vieja solo tenia ciertos descosidos aquí y aya de poca importancia- para lo que ha costado, no esta mal ¿eh?- bromeé de nuevo y cuando cogió el arco de mis manos, ambos bajamos al piso de abajo y comencé a buscar algo de comida con ayuda de una de las velas de wind que yo mismo encendí para poder ver pues la noche ya había caído sin darme apenas cuenta- parece que esta oscureciendo, a ver si tenemos algo de suerte y aquellos tipos han traído algo- le hablé a mi amiga convencida de que debían de haber dejado comida que no fuera aquel estofado que aunque bueno, refería comer otra cosa.Finalmente al abrir uno de los armarios mis ojos se iluminaron y esbocé una sonrisa al comprobar que en aquel armario había lo suficiente como para hacer un estofado de conejo, o en cuyo caso unos conejos al fuego no estarían tan malos

-Winf- me paré un segundo al pensar como la acababa de llamar- ¿winf? ¿que cojones? wind- me retracté con una ligera sonrisa-encontré algo de comida, podemos preparar o conejo o conejo estofado, tu eliges- me mantuve agachado tras la barra junto al armario por si encontraba algo mas, esperando la respuesta de mi amiga

El miembro 'Kouta Thirit' ha efectuado la acción siguiente: La voluntad de los dioses

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