Nuevos conocidos [Libre] [Interpretativo] [Cerrado]

Todavía seguía en mis pensamientos cuando unos movimientos rápidos de mi compañera seguido de un agudo grito me dejaron un tanto sorprendido, girando mi cabeza en su dirección y haciendo el amago de levantarme quedándome a mitad de aquella acción cuando la vi con las rodillas flexionadas- ¿que...?- no pude acabar ni si quiera mi pensamiento cuando me di cuenta de que se le había caído las vendas- ¿!EN SERIO!?- sobresaltado y con los ojos abiertos de par en par incapaz de comprender como había tenido tal descuido me quede observándola-es...esto d-debe ser una broma- tragué saliva y aparte rápidamente la vista hacia abajo para no incomodarla de mas- como puedo tener tan mala suer.....- apenas acabe el pensamiento cuando me fije que las``ropas`` que ella tenia en la cintura no cubrían la parte interior de sus piernas-no puede ser....-

Impactado y sin saber que  hacer fugazmente levante la vista muchísimo mas rojo que hasta ahora y consciente de que wind se había dado cuenta de aquello me lleve las manos a los oídos pues sabia que no tendría ninguna excusa que dar, incluso si había sido un accidente no me creería e incluso si lo hacia eso no quitaba el hecho de que había sucedido. Manteniendo mis ojos cerrados sentí otro grito de wind  que seguramente alertara a medio bosque de nuestro paradero, llevé mi cuerpo a una posición similar a la suya situando mi cabeza entre mis piernas para que mi angulo de visión fuera sumamente mínimo de forma que ya no la tenia en mi campo de visión y mantuve las manos presionadas contra mis oídos para evitar cualquier reprimenda verbal que me fuera a hacer de tal forma que solo me enteraría si me daba un golpe o me tocaba

Noté como el pulso de mi corazón se aceleraba por momentos, sintiendo los fuertes latidos de mi corazón sobre mi pecho haciendo así que me faltara el oxigeno, por si fuera poco y la necesidad de ahogarse no fuera demasiado castigo mis ojos completamente abiertos vibraban continuamente como si acabara de ver un fantasma y estuviera totalmente asustado o como si estuviera totalmente loco, lo malo de aquella situación era que no podía enfocar bien la vista y lo poco que veía de suelo lo veía borroso-no no no no no- pensé en mi mente con rapidez- !lo siento, lo siento!-grité con fuerza mientras me mantenía en aquella posición asustadiza- yo no quería te lo prometo- cerré los ojos cuando recupere su control y por ellos se derramaron ciertas gotas hasta caer al suelo- !fue un accidente,  lo siento!- seguía gritando unas cuantas veces mas acababa de entrar en shock y ni si quiera me había dado cuenta- PERDÓNAME!- grite por ultima vez de forma fuerte y seguí implorando perdón en voz muy bajita casi como si fueran susurros

Spoiler:

Wind tenía los ojos cerrados, tan apretados como era capaz intentado que de aquella manera, Kouta tampoco pudiera ver nada. “No, no, no…” Pensó cuando escuchó la exclamación de su compañero y se dio cuenta que podía haber visto algo.
Abrió los ojos poco a poco para mirar al cazador que parecía estar tan asombrado y avergonzado como ella por aquella situación, de repente, sin comprender el motivo se dio cuenta de cómo cambió la expresión de Kouta como si acabara de ver un fantasma. Siguió la línea de su mirada y dedujo que era lo que está pasando. Sin poder contenerse dio otro alarido como si acabaran de clavarle una daga y se dejó caer al suelo arrodillada con las piernas lo más cerradas posibles. Se soltó el pelo y se abrazó a si misma intentando taparse el pecho mientras se hacía una pequeña bola en el suelo haciendo que únicamente se pudiera ver su espalda.

La joven no era capaz de razonar con calma, aquello era demasiado ¿Cuánta mala suerte podía acumular en un mismo día? Escuchaba como los latidos de su corazón eran demasiado fuertes y aquel sonido le resultó ensordecedor. Tardó unos segundos en calmarse un poco y volver a levantar la mirada, estaba completamente avergonzada, su cara estaba roja y las puntas de sus orejas prácticamente habían adoptado un color casi amoratado.
La elfa vio a Kouta en el suelo, con una posición muy parecida a la suya y se quedó observándolo unos poco segundos más pensando en el motivo de aquella histeria “No es a él al que han visto…” Pensó desconcertada sin terminar de comprender por qué aquel hombre había reaccionado de esa manera tan excesiva.

Reflexionar sobre aquello hizo que su mente se distrajera mientras volvía a razonar con claridad. La joven al escuchar aquella disculpa tan nerviosa y a voz en grito empezó a preocuparse por el cazador que parecía tener un ataque de pánico y con un hilo de voz intentó tranquilizarle –N-No pasa…- Pero antes de que pudiera terminar aquella frase otra disculpa llegó del mismo modo “¿No me escucha?” Pensó la joven aún arrodillada en el suelo.
La joven realmente alarmada por el estado de su compañero, se incorporó y se recolocó la venda rápidamente mientras escuchaba las continuas disculpas del cazador que parecía un niño pequeño al que amenazan con darle una tunda de palos.

El último grito hizo que se sobresaltara y diera un bote “¿Está bien?” Pensó con temor a que aquella situación le hubiera superado por completo. Se acercó con cuidado e intentó advertirle de alguna manera que estaba a su lado, pero al parecer no era capaz de escucharla así que con toda la suavidad de la que fue capaz posó su mano sobre el hombro de Kouta y esperando que ahora ya pudiera escucharla intentó tranquilizarlo como buenamente puso –Lo siento, no ha sido tu culpa, no te preocupes- Dijo con un tono cariñoso, como una madre que habla a su hijo mientras se esforzaba por sonreír lo mas cálidamente posible.
Al acercarse y fijarse un poco más, vio que el suelo parecía ligeramente húmedo así que volviendo a intentar que el hombre se calmara le ofreció lo único que se le ocurrió en ese momento -¿Quieres que cenemos? Esta vez prometo aceptar tu capa-

Wind esperaba que aquello fuera suficiente para tranquilizar a aquel humano que en ese momento, parecía más un infante que un hombre pues sino, no sabía que más podría hacer.

Absorto en la oscuridad sin ni si quiera saber que estaba pasando no fue hasta que sentí el tacto de alguien que volví en mi recuperando el control de mi cuerpo, sentí humedad en mis ojos- ¿lagrimas?- fue lo primero que pensé- ¿pero porque?- apenas pensaba en aquello y tras parpadear un par de veces reconocí que me encontraba mirando al suelo sin motivo aparente, no comprendía que acababa de pasar-Lo siento, no ha sido tu culpa, no te preocupes- escuché muy débilmente y levanté la cabeza para encontrarme de nuevo con la elfa cuya voz comenzaba a sosegarme, con lentitud mientras ella volvía a dirigirme la palabra fui sacando mi cabeza de entre mis piernas y quitando por completo las manos de mis orejas escuchando sus palabras y sobre todo su tono-¿ reaccione a si por eso...?- pensé unos segundos mientras agitaba ligeramente mi cabeza para despejar mis pensamientos

-Lo siento, creo que perdí el control de la situación- le hablé francamente arrepentido pero no nervioso- siento haberte preocupado, se que no es agradable ver eso, hacia tiempo que no me pasaba, pensé que lo había superado- le aclaré a mi compañera- si, me encantaría comer algo- me levanté recogiendo los guantes que había dejado en el suelo y guardándolos en mi cinto, consciente de que su curiosidad no seria saciada y en parte a modo de disculpa me dispuse a contarle lo que me acababa de pasar, no sin antes deshacerme de mi capa.Me puse enfrente de ella y con un suave movimiento se la pase por encima y le hice un nudo para que no se le cayera- lo bueno es que al ser yo mas grande, tendrás capa de sobra para taparte-me premití el lujo de bromear con una sonrisa amistosa pues ya no me sentía nervioso, algo parecía haber cambiado, quizás aquello me hizo coger confianza con la elfa

-No tengo muy claro el porque- me situé al lado de fuego  ensartando parte de la carne en algunas ramas lo suficientemente gruesas como para no partirse y dándole a mi compañera uno de esos pinchos con carne que poco a poco comenzaban a cocinarse debido al calor de la hoguera- pero ahí circunstancias en las que me pasa eso- se notaba en mi voz una mezcla entre incertidumbre y un muy ligero toque de tristeza- comenzó hace ya bastante tiempo y de normal suelo ser capaz de controlarme- mire a la elfa a los ojos- pero se ve que fue demasiado esta vez- un tanto colorido me llevé la mano a la nuca rascandomela y le saque la lengua tímidamente con una sonrisa para que la muchacha se relajara y se tomara a broma lo que había pasado  pues lo que menos quería era incomodarla

Extrañamente y con todo lo que acababa de pasar sentía que entre nosotros se había forjado cierto vinculo quizás por las circunstancias o mejor dicho la serie de desgracias y accidentes que el destino nos había puesto, fuera como fuese me sentía mas cómodo con ella- ¿realmente se ha preocupado mas por mi que por ella?- pensé- eres interesante wind, muy interesante- le sonreí a la muchacha con dulzura

Wind vio como el humano parecía darse cuenta de que ella estaba allí lo que le hizo suspirar francamente aliviada. Continuó observando a Kouta mientras parecía que volvía a reaccionar –Menos mal- dijo la joven aliviada al ver que parecía estar bien de nuevo. –Menudo susto me has dado- añadió con abatimiento en la voz esperando a que el joven empezara a hablar.

-Está bien, supongo que la situación te ha superado- dijo la joven de modo tranquilizador intentando que Kouta no se disculpara por nada más “Bastantes disculpas ha dicho ya”.
-Supongo que es algo que nos podría pasar a cualquiera- Añadió intentado dar por finalizadas las disculpas y las explicaciones por aquello. No tenía ninguna intención de que el hombre, que estaba en shock hacia unos pocos momentos, recordara la situación pues no tenía ni la más remota idea de si volvería a entrar en pánico.

Cuando Kouta se levantó, Wind apartó la mano de su hombro y dio un pequeño paso para atrás con la intención de darle su espacio para que pudiera respirar con calma. –Yo también tengo hambre- Sonrió y esperó a que el hombre le pusiera la capa. “Es cálida” Pensó la muchacha –Si tienes frio, puedes volver a pedírmela. Soy más resistente de lo que parezco- Comentó la elfa riendose mientras ofrecía una sonrisa a Kouta. Realmente era bastante grande, casi podría envolverse en ella por completo, cosa que, por otra parte tampoco le pareció una idea tan mala, pues según avanzaba la noche, más frio hacía.

La elfa se sentó a poca distancia del humano y observó cómo iba ensartando los pedazos de carne en las ramas, repentinamente su estómago gruñó sonoramente haciendo que se ruborizaba ligeramente. –Parece que yo también tengo hambre- Comentó mientras cogía la rama con el jabalí.

Cuando la elfa escuchó aquella primera frase, sabía que el cazador no tenía tantas ganas de dejar la anterior situación a un lado, por lo que  decidió escuchar aquella explicación intentando resultar lo más tranquila posible. –No te preocupes, en serio- Dijo la joven mientras miraba a Kouta ofreciéndole una sonrisa cálida como ya había hecho anteriormente.
No pudo evitar reir suavemente cuando escuchó aquella confesión acompañada de aquel gesto tan gracioso. –Lo que ha pasado… probablemente hubiera superado a cualquiera- Dijo serena devolviéndole la mirada a Kouta mientras recordaba todo lo que había pasado durante el día. –Yo tuve una reacción parecida cuando encontramos mi vestido- comentó haciéndole ver que todos tenían momentos que les superaban “Al final, nada es para tanto” Añadió para si misma.

Wind dejó de mirar a Kouta para comenzar a comer aquella carne que ya estaba perfectamente hecha. Se quemó con el primer bocado haciendo que pareciera una niña pequeña que demasiada hambre -¡Quema!- Exclamó como si el humano no se hubiera dado cuenta de algo tan obvio pero estaba tan hambrienta, que no pudo evitarlo y a los pocos segundos, dio el siguiente bocado, tendiendo una reacción similar.
Después de aquello observó al cazador que aún la miraba y como si no se hubiera dado cuenta hasta ese momento, preguntó -Cuándo el jabalí te embistió, si no te dio ¿Por qué gritaste?-

Las palabra de la elfa me agradaron y me relajaron pero sobre todo me dieron a entender que gente como ella hacia tiempo que habian desaparecido- ¿como habra sido su infancia?, se preocupa mucho por los demas.... incluso para ser una elfa cuidada por humanos- me sorprendió gratamente su preocupación así que simplemente asentí con una sonrisa dejando de lado el tema

Centré mi mirada ahora en mi trozo de carne que parecía estar ya preparado y cuando fui a morder la advertencia de la elfa me hizo esbozar una ligera sonrisa- enana- pensé con cariño observándola de reojo pues realmente lo parecía, su forma de actuar era muy similar al de una niña, ademas su estatura no ayudaba demasiado pues no aparentaba ser alguien muy mayor pero me agradaba que tuviera esa inocencia propia de los niños contrastaba bastante bien con todo el entorno en el que nos encontrábamos.Esperé unos segundos a que se enfriara y tomé un par de grandes mordiscos del trozo de carne- !delicioso!- hablé- hacia un par de dias que solo comia pan seco y frutas del bosque- asentí feliz mirándola y nuestras miradas se cruzaron hasta que ella habló

La pregunta de la elfa me hizo llevarme la mano a mi cadera derecha inconscientemente- esta herida es casi tan vieja como yo- respondí enigmático y le di otro ligero mordisco al trozo de carne tragándolo- cuando comencé a aprender el arte del cazador.... digamos que mi padre era muy estricto- esbocé una sonrisa- pero no era un mal padre, simplemente sabia que ser cazador era duro y me entrenaba para ello- asentí en mi cabeza y me llevé la mano con la que no sujetaba aquel palo con carne al cinto sacando una ligera cantimplora, le di un largo trago-ahhh, sigue fresca, genial- le ofrecí a mi compañera por si le apetecía un trago aun sabiendo que ella misma tenia otra igual o parecida-esa es básicamente la historia detrás de esta vieja cicatriz-opté por no enseñársela pues estábamos comiendo y la sensación de llevarse comida a la boca junto a una hoguera que proporcionaba todo el calor que necesitaba era extremadamente agradable, todo era ideal si no fuera por los truenos que seguían escuchándose fuera y que me devolvieron a la realidad- Menuda tormenta, supongo que si tendremos que pasar la noche aquí-aclare-juntos....- tome un ligero color rojizo pero casi imperceptible

-¿cuantos años tienes wind?- estaba convencido de que aparentaba menos de los que en realidad tenia, básicamente su estatura no concordaba pero quería asegurarme- pareces tener mas o menos mi edad, pero sinceramente, como ya te dije, no se nada sobre tu cultura- le hablé francamente pues ya no merecía la pena andarse con rodeos. Decidí asediarla con otra pregunta pues parecía dispuesta a hablar e incluso a abrirse como estaba haciendo yo, por fin teníamos una conversación normal después de todo lo que habíamos pasado- ¿dijiste que te criaste con humanos verdad? pero conozco muchos casos de palizas a los ``raritos´´- intente no sonar despectivo pero no sabia como llamar a los que se salían de los estardares normales- incluso entre humanos, mi pregunta es ¿tuviste una buena infancia?¿no se metieron contigo?- pregunte curioso pues su forma de ser me intrigaba enormemente y quería conocer el origen de aquello

Wind no pudo reprimir una mueca cuando el joven dijo que estaba comiendo pan seco. Ella no es que tuviera demasiadas provisiones, pero todo lo que llevaba era básicamente era fruta y agua. – ¿Pan duro? ¿Por qué comes eso? Las frutas son muchos mejores- Le contestó la joven mientras daba otro mordisco a la carne. –Al menos, no se convierten una masa en la boca- añadió a los pocos segundos.

Aquella respuesta tan misteriosa solo consiguió que la elfa prestara más atención al humano, esperando alguna explicación o alguna historia de peleas pero lo que desde luego no se esperaba era aquella explicación.
La joven no pudo evitar mirarle con una expresión algo triste, pues ella recordaba sus cacerías con mucho cariño y como ella misma sonreía cuando acertaba y llevaba las presas a su abuelo que siempre la recompensaba con algo, como un peluche o algún dulce. –Suena duro…- Musitó mientras cambiaba su expresión a una más normal. –Gracias, pero aún tengo agua- Dijo mientras cogía el recipiente y lo agitaba pudiendo escucharse el agua.

Después de aquello continuó comiendo la carne hasta que la voz de Kouta la sacó de su ensimismamiento –Ya contaba con eso…- Comentó la joven resignada ante la respectiva de pasar más noches en aquel bosque. –Ya estoy cansada de este bosque, es muy monótono y demasiado grande- Refunfuñó Wind mientras pensaba en lo que aún quedaba de travesía.
Aunque tampoco es que tuviera ninguna prisa por salir de allí puesto que sin ropa, tenía complicado salir de ese bosque y permanecer ilesa. Ante aquella perspectiva, resopló con resignación.

Aquella pregunta la pilló desprevenida pues en realidad, era una de las primeras cosas que le preguntaban -19- Contentó sonriente mientras miraba a Kouta y aprovechando la situación, le devolvió la pregunta. -¿Y usted mi buen cazador?- Dijo con tono de broma mientras continuaba mirándole sonriente. –Tampoco yo sé mucho de los elfos la verdad, así que no creo poder saciar mucho tu curiosidad- Dijo a modo de disculpa.
Wind se echó a reír ante aquella manera de llamarla “Rarita” Resonó en su mente y no pudo evitar soltar otra carcajada. La joven recordaba la historia de cómo los ancianos la encontraron ya que era una de sus historias favoritas, pero decidió contarle la parte resumida –Si efectivamente, me criaron una pareja de humanos durante toda mi vida- Si bien era cierto que aquello no era un motivo especialmente triste, si lo era cuando recordaba que su viaje era para poder volver a estar con ellos, así que, sin quererlo un deje triste en su voz sonó como siempre que hablaba del tema.
-Oh, nunca tuve problemas, la gente del barrio siempre me tuvo cierta lastima por ser “La elfa abandonada” Así que nunca se metieron conmigo en exceso…- Reflexionó y a los pocos segundos añadió –Bueno, casi nadie. Siempre hay gente que le gusta hacer daño y meterse con una niña era lo más sencillo- Si bien era cierto que eran los menos, sí había algunos niños humanos que no parecían estar demasiado a gusto con la elfa. –Por eso no se mucho de los elfos, ya que estoy en un viaje tan largo, estoy intentando aprender algo sobre ellos, o bueno… sobre mi - Explicó la muchacha mientras seguía comiendo.

Aprovechando que estaban tan habladores Wind decidió que intentaría saciar tanta curiosidad como fuera capaz. No se consideraba una persona que se reprimiera en sus preguntas, pero sabía que había ciertas cosas que no podía preguntar, por lo que intentando no parecer muy brusca, decidió comenzar con una pregunta que no tuviera mucha dificultad de responder o al menos, no la hiciera quedar como una cotilla. -¿De dónde vienes por cierto?- Preguntó la elfa tanteando el terreno para saber hasta dónde podía preguntar.

Terminé el primero de mis pinchos de carne y aproveché para levantarme y coger otro y de nuevo ponerlo sobre el fuego- bueno, la fruta es cara, mas que el pan y no siempre se puede encontrar en los bosques, sobretodo en aquellos que no conozco como este- le respondí observando como la carne iba haciéndose lentamente, con la boca hecha agua pues quería mas de aquella deliciosa carne y no podía esperar, se notaba en mi mirada que quería devorarla una vez estuviera lista

-Puede parecer duro, pero siempre me trato bien, duro pero justo- le respondí mirándole a los ojos con una amplia sonrisa pues aquellas palabras eran las que definían a la perfección a mi padre- aunque al principio me solía quejar mucho, ahora me alegro de que me enseñara todo aquello, fue gracias a el que me he convertido en quien soy ahora entre otras personas- pensé seguidamente manteniendo la sonrisa y volví a fijar mi mirada en la carne recién hecha y le di un gran mordisco tras unos segundos de soplidos para rebajar la temperatura de aquel trozo, fue entonces cuando pensé en la descripción de la joven sobre el lugar en el que nos encontrábamos- estoy contigo wind, pero por suerte somos cazadores y no es fácil que nos perdamos....- pensé unos segundos- aunque he de reconocer que al salirme de mi camino, me sera difícil continuar en la misma dirección je...je..je- reí sarcásticamente por mi situación actual - confio en que entre ambos consigamos salir de aquí- me di cuenta de que hable por ella-si seguimos nuestro camino juntos, claro esta- intenté tanto como pude que no se sintiera incomoda por haber tomado una decisión por ella pero no tenia pensado dejarla ir en esas condiciones

-Una infancia tranquila, que raro- pensé para mis adentros- aunque supongo que eso explica en parte su forma de ser aunque sigo intrigado como es posible que alguien piense en la seguridad de los demás antes que en la suya, es una cualidad bastante agradable a la par que interesante, pero no siempre es buena- pensé en ambas cara de la misma moneda pues todo tenia su lado bueno y su lado malo- tengo 22 mi señora- bromeé haciendo una ligera reverencia como si fuera un caballero y ella una princesa cosa que distaba bastante de la realidad

Me recompuse de nuevo en la posición anterior y le di unos mordiscos mas a aquel trozo de carne intercalando ligeros sorbos de agua mientras sentía el agradable calorcillo en mis manos y mi torso que contrastaba con el ligero viento frió, seguramente por la tormenta, que de vez en cuando y con suavidad llegaba a mi espalda.La pregunta de la muchacha sobre mis orígenes me pillo en mitad de uno de mis mordiscos así que respondí cuando acabe de tragarme la comida- cerca de lunargenta, la ciudad de los humanos- le respondí- mejor dicho en los alrededores, allí fue donde me crié y hasta hace algún tiempo allí vivía- asentí con la cabeza conforme con mi respuesta


Esta vez fui yo quien decidió preguntarle a ella, sentía demasiada curiosidad por su historia- cuéntame wind, como eran los familiares con los que vivías en...- me pare unos segundos y fue entonces cuando me di cuenta que no sabia de donde venia la elfa- ¿y de donde vienes?- reí suavemente esperando que no se lo tomara a mal. Decidí esperar un poco mas para hacerle la pregunta que mas me intrigaba, o de las que mas- esos familiares que buscas en la ciudad de los dragones... ¿son tus verdaderos padres?- hice hincapié en verdaderos para que se notara que me refería a sus padres de sangre, los elfos

Wind escuchó con tranquilidad como el joven defendía la actitud de su padre, que aunque ella no entendiera hizo un esfuerzo por entender al joven. La sincera sonrisa del cazador hizo que pensara que sería mejor no insistir más en aquello pues, al fin y al cabo era su padre y ella no era quién para juzgarlo. –Tal vez si hubieran sido más dura conmigo, ahora sería más cauta- Dijo en tono de broma mientras sonreía abiertamente a Kouta.

Wind, como si no hubiera dicho nada raro contentó con calma –Yo se hacia dónde queda el camino, así que no creo que tengamos muchos problemas – “O eso espero” Añadió para sus adentros.
Aquella aclaración la pilló por sorpresa -¿Acaso crees que puedo salir del bosque yo sola de esta guisa?- Dijo mirando al humano aparentando una falsa seriedad mientras enarcaba una ceja. Aquella actuación apenas duró unos segundos y sin poderlo evitar se echó a reír –La compañía siempre es bien recibida en los viajes, no tengo intenciones de viajar sola si puedo viajar con alguien- Comentó, ahora más en serio mirando al joven con una sonrisa.

La elfa, continuó comiendo aquella carne hasta que se dio cuenta que ya no tenía más pedazos en la rama por lo que rápidamente se levantó y volvió a llenar el palo con el jabalí. Seguía hambrienta, ya que hacía varios días que no comía nada realmente saciante y por lo que pudo observar, el humano también estaba hambriento. Se volvió a sentar donde estaba antes y colocó la carne al lado del fuego para que se hiciera.

-Entonces no iba tan desencaminada- dijo en voz baja como si se lo dijera a sí misma, pues no solía tener demasiada buena suerte con las edades de la gente, aunque al menos, los humanos si parecían tener la edad que aparentaban. Cogió la rama con la carne ya hecha y le dio un mordisco después de esperar unos pocos segundos para que se templara. “Hacía muchísimo que no comía carne” Pensó mientras degustaba aquella comida, que en ese momento le parecía el mayor de los manjares.

-Es una ciudad enorme- Comentó como algo automático. La recordaba de cuando acompañaba a los ancianos en sus viajes, pues Lunargenta quedaba bastante cerca y era uno de los pocos viajen que podían hacer juntos. “Demasiado grande para mí” Dijo para sus adentros pensando en que en Vulwulfar, si conocía gran parte de la ciudad.
-Los bosques de aquella zona suelen estar muy poblados de animales, es un lugar genial de caza- dijo mirando al cazador con cierta envidia pues aunque también había bastantes animales cerca de Vulwulfar, no eran tan abundantes como en la zona de Lunargenta o al menos, esa impresión le daba a ella.

Wind rió ligeramente cuando Kouta empezó aquella frase –Son buenas personas, siempre pensaban en lo mejor para mí. Como no tenían hijos, me recogieron cuando apenas era una recién nacida en las afueras de Vulwulfar. Y de allí vengo- Terminó de contar, pues aunque la historia podía alargarse mucho más, prefirió no explicarle todo y hacerle mejor aquel resumen.
Le dio otro bocado al pedazo de carne mientras miraba el fuego abstraída. Fue la voz de Kouta la que la sacó de su ensimismamiento haciendo que la joven se quedara ligeramente paralizada ante aquella pregunta. Era la primera vez que le preguntaban sobre aquello y no estaba muy segura de como contestarlo así que sin mirar aún al cazador reflexionó sobre aquello y aunque igual era innecesario prefirió explicar parte de lo que se le paraba por la cabeza cuando escuchaba “Verdaderos padres”.

Desvió la mirada al humano al cual miraba fijamente como si aun cavilara sobre la respuesta que iba a darle hasta que por fin empezó a hablar. –Para mí, mis verdaderos padres son los ancianos. Jamás he considerado que pudiera haber otras personas que me quisieran más que ellos, es decir… ellos me criaron y me dieron todo lo que necesitaba e incluso lo que no necesitaba, pero si por lo que sientes curiosidad es por si estoy siguiendo la pista de los elfos que me abandonaron al nacer no, ellos no me interesan.- Intentó que aquella explicación no sonara demasiado dura o borde pues no era su intención, simplemente quería explicar al humano como ella veía su propia situación así que al terminar aquella larga explicación se apresuró a añadir –L-Lo siento, si ha sonado borde, prometo que no era mi intención… Pero es la primera vez que me preguntan sobre esto- Dijo con cierta vergüenza en el rostro mientras no paraba de mover la mirada hacia Kouta y hacia el suelo.

Después de aquello la joven se quedó unos segundos esperando la reacción del humano, esperando que no se lo hubiera tomado a mal.
La joven seguía sintiendo curiosidad por el cazador y por aquel extraño símbolo que le había enseñado antes. -¿Vivías con tus padres en Lunargenta?- Dijo la joven tanteando el terreno, pues su siguiente pregunta tal vez iba a ser demasiado directa.
-¿Por qué sigues la pista de unos asesinos?- Preguntó la elfa curiosa y temerosa de haberse pasado minetras miraba al rostro de Kouta.

-No, perdóname a mi, son temas que no me incumben, te agradezco la explicación- asentí con la cabeza para dejar el tema pues al parecer no le había sentado bien que le preguntara por ellos, cosa que entendía perfectamente- es una buena filosofía, yo pienso lo mismo verdad pequeño...-. añadí mentalmente- y tranquila, te considero una amiga, no tienes porque disculparte- le sonreí feliz pues me comenzaba a sentir cercano a ella, acto seguido le di otro gran mordisco

La siguiente pregunta de la elfa podría haber tensado mi cuerpo ligeramente pero no pude responderle con una amplia sonrisa y un tono de burla- asi es, como te había dicho antes, vivía con mis padres en las afueras, ¿es que acaso no me escuchas cuando hablo?- bromeé y no pude evitar reírme, de nuevo otra pregunta salio de sus labios en los que ahora centraba toda mi atención. Suspiré y me llevé la mano libre a mi frente agarrando con suavidad algunos pelos y rascándome la frente tensándolos y destensandolos en un ritmo constante- te cae bien, ¿verdad?, cuéntaselo, la confianza es importante- me dije a mi mismo- lo se- susurré casi inaudible y entonces centré mi mirada de nuevo en ella con una expresión un tanto mas seria de lo normal que no pude evitar- mis padres fueron asesinados, mejor dicho mi madre....- paré unos segundos y cogí aire pues me costaba contarle eso a alguien, poca gente sabia toda la historia completa- 2 personas, básicamente- asentí en mi mente con cierta nostalgia- no se como fue... ni quienes fueron... en realidad no se nada.... la única pista que tengo es el símbolo que te enseñe, pero parece que nadie sabe nada- suspiré resignado dejando de rascarme la frente pero con la mirada fija en ella todavía- inicié la marcha para encontrarles, sea una persona o un grupo acabare con todos da igual como- mi tono fue seco pero se notaba decisión en mi voz- fue en ese momento en el que decidí proteger a los que no pueden por si mismo y ayudar a los débiles, como tu- vacilé por un segundo para quitar cualquier tono de seriedad, no me gustaba hablar de aquello pero tampoco lo odiaba pues podía desahogarme, lo que si que odiaba era que la gente se compadeciera de cosas que no comprendía y por eso decidí bromear para que no fuera una conversación tan seria

- Tu forma de ser me intriga wind- finalmente le dije lo que pensaba- no me malinterpretes, es solo que tu ``inocencia`` es una cualidad que pienso le vendría bien a la gente en este mundo, creo yo- fue en ese momento en el que me di cuenta de que la protegería a ella y a sus ideales pues aunque parecía ciertamente fuerte, no podía evitar tener la sensación de que era mas frágil de lo que aparentaba- te protegeré wind, ya lo he decidido, a ti y a tus ideales, eres la esperanza de este mundo, tu personalidad traerá un rayo de luz a tanta oscuridad..... tu seras la razón por la que gente como yo que solo busca venganza cambiara... tu forma de ser es algo que todos necesitamos y yo la protegeré- pensé aquello analizando mis propios pensamientos y asintiendo con la cabeza- no hay mas que decir, la protegeré, así al menos mi vida no sera un desperdicio total- tomé una de las decisiones mas difíciles de mi vida pues sabia que aquella decisión era importante.Absorto en mis pensamientos me quede callado durante unos minutos hasta que me di cuenta y decidí hablar

-Me quedé pensando- sonreí dándole otro rápido mordisco- y cuando llegues a la ciudad de los dragones y encuentres a tus familiares, que dios quiera que sea así, ¿que harás¿, ¿tienes alguna plan?- le pregunté por pura curiosidad con un ligero bostezo pues aunque no tenia demasiado sueño se notaba el paso de las horas y el esfuerzo físico realizado durante todo el día

Wind se sintió realmente mal al pensar que había sonado demasiado borde, no le gustaba ser borde con los demás pero cuando el joven dijo aquellas palabras y vio en su rostro la sonrisa no pudo evitar devolvérsela con al menos, la misa intensidad mientras se le iluminaba la mirada. La elfa consideraba a los amigos como pequeños tesoros, así que el hecho de que conseguir uno nuevo era como mínimo, digno de felicidad.
Se quedó embelesada pro aquellas palabras durante unos segundos repitiendo en su cabeza la palabra “amigo” pues la última persona a que podía llamarla así era su cuidador Turion y de aquello hacía ya muchos años. Cuando se dio cuenta de lo rara que debía parecer desvió la mirada del humano rápidamente para volver a mirar la carne y darle un bocado antes de efectuar sus preguntas.

La joven no pudo sino sobresaltarse ante aquella respuesta haciéndola ruborizar –Y-Yo… Lo siento- dijo haciendo unos aspavientos muy pronunciados con las manos –No me acordaba- Añadió acto seguido a modo de aclarar que si le escuchaba. La risa de Kouta consiguió que el rubor aumentara ligeramente pero notó como su semblante cambiaba según veía al cazador decidirse a responder o no su pregunta.
Wind escuchó un leve murmullo salir de los labios del joven, pero no estuvo segura de que había dicho por lo que simplemente lo ignoró y se quedó observando a Kouta esperando a que comenzara a hablar ya fuera para contestar o para negarse a hacerlo. La elfa tenía mucha curiosidad por aquello, pero por norma general sabía que las historias de asesinos, no solían tener un final feliz por lo que rezó todo lo pudo para que la historia de su compañero no fuera especialmente dura.

Cuando las palabras empezaron a salir de la boca del joven, Wind abrió mucho los ojos, como si aquello fuera lo último que se esperaba pero no el interrumpió, de hecho, apenas respiró para escuchar mejor toda la historia aunque se podía imaginar más o menos el resto.
-Eso es horrible- Musitó apenas sin darse cuenta en voz baja. Solo pensar en lo duro que tuvo que ser esa situación hizo que a la joven se le encogiera el corazón mientras continuaba mirando al humano como si de aquella manera pudiera saber más de lo que él le diría. La expresión de su nuevo amigo, desde luego denotaba que no debía haber sido algo fácil y aquella última declaración de acabar con ellos hizo que la joven diera un bote en el sitio. –Ha debido ser muy duro- Dijo en voz baja, con una voz triste sin saber muy bien que podría decir para animar al cazador pues la elfa era mucho más de actos que de palabras, pero reprimió el impulso de abrazarlo por temor a que fuera demasiado extraño o que pudiera incomodar al cazador.

“¿Cómo yo?” Repitió la joven mentalmente bastante sorprendida -¿Estás diciendo que soy débil?- Comentó Wind en tono de burla intentado que la situación perdiera intensidad. Pero aquella confesión hizo que definitivamente la elfa se quedara estupefacta -¿Qué te intrigo?- Dijo mientras intentaba controlar la risa que empezaba a escapársele de la boca –No tengo nada de especial- Afirmó mientras hacía que la risa se desvaneciera tan rápido como había aparecido.
Escuchó el resto de su confesión mientras la joven continuaba atónita sin entender que se supone que tenía de especial. La elfa nunca había sido demasiado buena a la hora de verse a sí misma, así que cuando los demás revelaban aspectos de su propia personalidad, ella simplemente se quedaba incrédulamente mirando a esas personas, pero el tono de voz o tal vez la manera de decirlo hizo que la joven se creyera aquello que el cazador le estaba diciendo.

Wind se quedó observándole en silencio unos segundos intentando adivinar en que estaba pensando sin mucho éxito. Ahora ya no estaba hambrienta y el calor de la hoguera mezclado con el calor de la capa hacía que la joven estuviera realmente cómoda. Hacía un buen rato que la muchacha no escuchaba los truenos no sabía si porque habían cesado o porque se había acostumbrado a ellos pero en cualquier caso, el ambiente invitaba al sueño y sin poder reprimirse dio un enorme bostezo.
Los segundos pasaron convirtiéndose en minutos hasta que Kouta habló sacado a la joven de su ensimismamiento. –Ojalá les encontrara allí, pero no lo encuentro demasiado factible, si estuvieran allí ya hubieran contactado conmigo- Comentó la joven con resignación mientras pensaba en su plan –No tengo ningún plan, sólo intentaré buscar información preguntando a mercaderes como he hecho hasta ahora- Dijo con una sonrisa inocente, como si aquello fuera lo mejor que pudiera hacer. "Al fin y al cabo, nunca sabes cómo van a acabar los planes ¿No?"

-¿Y tú? ¿Qué planeas hacer una vez llegues al norte?- Dijo la joven devolviéndole la pregunta. A Wind empezaban a cerrársele los ojos, se le notaba demasiado en el rostro, pero no quería dormir, al menos no aún, quería saber más de su compañero tanto como él estuviera dispuesto a contarle pero parecía que su cuerpo parecía no estar de acuerdo con ella, haciendo que la joven no pudiera reprimir otro bostezo que intentó esconder con su mano, sin demasiado éxito.

Mantuve la vista sobre ella como lo había hecho hasta ahora y los bostezos de la joven hicieron que sin poder evitarlo yo también bostezara a lo que respondí con una suave risa- parece que ambos tenemos sueño- le afirmé que no era la única que tenia sueño- después de todo ha sido un día completito- asentí terminando de comer y bostezando de nuevo. El tener la tripa llena no ayudaba para nada a que evitara bostezar, la idea de echarse una pequeña siesta y así descansar junto al fuego era demasiado tentativa como para ignorarla

Con la mirada un tanto perdida en las llamas escuché la pregunta de mi compañera- esa es una buena pregunta- le respondí- si no encuentro lo que estoy buscando, al igual que tu, seguiré reuniendo información, tarde o temprano me toparé con alguien que conozca o identifique el simbolo- le dije pero distaba un tanto de lo que pensaba- no te abandonaré-pensé- he tomado una decisión y te seguiré vayas donde vayas- quise decirle lo que pensaba pero algo en mi interior me lo impidió.No tenia muy clara la razón de porque no le contaba aquello, quizás fuera porque al fin y al cabo la había conocido ese mismo día o quizás fuera porque el hecho de decirle que la iba a seguirla fuera a donde fuera podía sonar peor que mis verdaderas intenciones, seguramente fuera una combinación de todo eso y mucho mas

Me rasqué el pelo con mi mano derecha despejando mi mente- bueno, vayamos por partes, lo primero sera ir al pueblo mas cercano y comprarte algo de ropa- no pude evitar poner cierto tono protector- pero eso sera mañana, por hoy...- bostecé de nuevo con fuerza sin poder reprimirme- sera mejor descansar- las ultimas palabras eran con un tono mas soñoliento. Me levanté de donde estaba y estiré un poco para que no se me quedaran entumecidos los huesos y músculos de mi cuerpo, le di un trago a mi bebida, me acerqué con tranquilidad a la elfa que seguía cerca del fuego y me acuclillé en frente suya para que nuestras cabezas quedaran a la misma altura mas o menos

-Haré una excepción y te dejare dormir con mi capa por hoy- bromeé aunque realmente no solía darle mis pertenencias a nadie pero la situación así lo requería- mañana sera un duro día de vuelta, sera mejor que repongamos fuerzas- situé mi mano sobre su pelo sin demasiada delicadeza y se lo revolví sin cuidado-enana- y ante los inminente quejidos de wind no pude evitar esbozar una sonrisa incluso antes de que dijera nada- protegeré esa sonrisa wind- recordé una de las muchas veces que la elfa había sonreido ampliamente - me alegro haberte conocido, incluso con esas circunstancias- no pude evitar ponerme un poco rojo y separarme ligeramente de ella al recordarla prácticamente sin ropa, casi se me habia olvidado que debajo de mi capa estaba medio desnuda- s-sera mejor que descansemos- tartamudeé un segundo contrastando con el tono normal o incluso protector que había tenido hasta el momento

Me separé de ella sin mas andando hasta el otro lado de la hoguera por si se sentía incomoda al tenerme cerca y no podía dormir, me recosté en el suelo apoyando mi espalda en una de las paredes de la cueva como si estuviera sentado o mejor dicho como si me estuviera tumbando en la hierba de una colina- una colina como las de lunargenta- bostecé de nuevo situando el arco y el carcaj cerca mio a mi izquierda para tenerlos controlados y desatandome el cinto depositandolo junto con las otras dos cosas, casi instantáneamente me hundí en mis pensamientos con una ligera sonrisa y cerré los ojos- buenas noches- susurré cuando lo hice todavía algo preocupado por el temor de que aquella gente fueran bandidos o alguna criatura entrara en mitad de la noche, lo único que me consolaba o mas bien me tranquilizaba era la idea de que hacia ya algún tiempo que había comenzado a llover y si ninguna criatura había entrado hasta ahora, no tendrían motivos para entrar en mitad de la noche aunque nunca era plenamente consciente de que no se debía subestimar el instinto animal

Wind se avergonzó un poco cuando Kouta se percató del sueño que tenía pues creía que lo estaba escondiendo bastante bien aunque la realidad era bien distinta. La elfa continuó observando al humano mientras éste terminaba de comer –Supongo que tienes razón- Dijo con cierta resignación al darse cuenta de que sueño hacía que sus parpadeos fueran mucho más lentos, como si los parpados no quisieran volver a abrirse.

-Al parecer estamos los dos en situación similar- Dijo la joven mientras miraba el fuego abstraída en sus propias ideas pues, aquella pregunta la había dejado bastante pensativa. No sabía nada de los ancianos, ni siquiera tenía claro la ruta que siguieron para llegar al Lago de la Luna por lo que la elfa, a fin de cuentas estaba dando palos de ciego y eso hacía que sintiera un sentimiento de impotencia lo suficientemente grande como para que las ganas de llorar le invadieran aunque nunca llegara a hacerlo “No he de ser pesimista” Se repetía una y otra vez cuando los pensamientos negativos se agolpaban en su cabeza.

A la joven casi se le había olvidado su desnudez, pues estar envuelta en aquella capa al lado de la hoguera no hacía que extrañara demasiado su vestido ya que estaba realmente cómoda –Oh, es cierto, espero que haya alguna aldea cerca, no me gustaría ir así hasta llegar a alguna ciudad- Dijo a sabiendas de que en algún momento deberían encontrarse algún pueblo si seguían el camino mientras miraba al humano son una sonrisa. Wind se rio suavemente al ver al hombre bostezar de nuevo pero como si se lo hubiera contagiado, a los pocos segundos ella bostezó de igual manera.
La elfa observó a Kouta levantarse, haciendo que esta se sintiera más pequeña de lo que ya era pero no duró mucho pues sin dejar de seguirle con la mirada, le observó acuclillarse justo delante haciendo que se sonrojara de un modo muy ligero.

-¡Oh! ¿Estás seguro? Podrías coger un resfriado- dijo la joven preocupada de que Kouta se enfermara por su culpa aunque cierto era que no tenía ningunas ganas de desenredarse de aquella capa pues estaba realmente calentita. – ¡Eh!- exclamó Wind cuando Kouta le revolvió el pelo mientras ponía una mueca de enfado pero aquella expresión no le duró demasiado pues las palabras que el joven dijo hizo que sonriera de un modo sincero – Yo también me alegro- Contestó con tono alegre.
No pudo evitar reír al ver al cazador sonrojarse y tartamudear –Tienes razón, deberíamos dormir un poco- Comentó dándole la razón al joven que parecía tener tanto sueño como ella.

Wind se quedó mirando a Kouta unos segundos mientras este se alejaba para recostarse en una pared; ella no tenía esas intenciones, prefería dormir en el mismo sitio donde estaba para que no le llegara el frio de la cueva por ningún sitio.
La elfa se tumbó en el suelo, haciéndose un pequeño ovillo mientras cerraba los ojos a punto de dormirse. Escuchó a Kouta y le contestó de la misma manera –Buenas noches Kouta, que… descanses- dijo mientras un bostezo interrumpía la frase.

La elfa se quedó dormida en pocos segundos pero como si alguien le acaba de gritar al oído, se despertó sobresaltada, completamente aterrada. Sin moverse de donde estaba levantó la cabeza poco a poco para darse cuenta de que allí no había nadie “¿Pero qué…?” Pensó justo antes de escuchar un trueno que parecía estar justo encima de ellos. Ese sonido hizo que diera un pequeño bote pues aunque no le daban miedo, estar en un bosque con aquellos estruendos tampoco le hacía especial ilusión.

La joven observó a Kouta el cual parecía dormido así que con cuidado, se levantó del suelo y se acercó a él. Se quedó mirándolo de cerca, agachada, intentando comprobar si estaba despierto o dormido y cuando decidió que estaba dormido se sentó a su lado del mismo modo modo que él estaba, se colocó la capa volviendo a enrollarse en ella todo lo que pudo y se recostó contra el brazo del cazador como si de una almohada se tratase. "Mucho mejor" Pensó mientras una sonrisa aparecía en su cara.
Al poco rato la joven estaba profundamente dormida y esta vez parecía, que esos estruendos no podrían volver a despertarla.

No conseguía conciliar el sueño cuando sentí unos pasos- ¿tan rápido?- fue mi primer pensamiento pero aquel ritmo me era familiar- ¿wind?- dudé un poco pero decidí fiarme de mi instinto y mantenerme con los ojos cerrados intenté aparentar que seguía durmiendo- ¿que esta haciendo a donde va?, ¿algún tipo de ritual nocturno de su raza?- reflexioné que esa podría ser una razón pero al parecer sus pasos la llevaros hasta mi, situándose enfrente y acercándose a mi lentamente- ¿se ha parado?, ¿que esta...?- sentí ahora la respiración de la muchacha en mi rostro, sabia que estaba a punto de ponerme rojo así que me obligué a calmarme y permanecer en aquella posición sin mover ni un musculo, aparentando estar dormido a la espera de la acción de la muchacha- aguanta.... aguanta...- me repetía mentalmente pues a cada segundo que pasaba, a cada segundo que sentía su aliento sobre mi me era mas difícil mantener la compostura, intenté ralentizar los latidos de mi corazón tanto como podía para mantener una respiración constante como si estuviera durmiendo

Finalmente la elfa se apartó de mi- gracias a dios, ¿que estaba pensando?- me pregunté porque había actuado así- sera que....- negué mentalmente obligándome a despejar esas ideas- no es posible- reafirme- pero entonces...- mi respuesta llego antes de lo que pensaba pues la joven se acurrucó a mi lado y sentí como apoyo su cabeza sobre mi hombro-ya veo.... solo no quiere dormir sola como pensé- reflexioné unos segundos sobre que hacer pues aunque ciertamente era agradable sentirla tan cerca, sabia que no podría dormir si no se alejaba un poco pues era plenamente consciente que por razones que desconocía no podía dormir con personas tan cerca y mucho menos con personas del sexo opuesto- menuda estupidez- pensé pero sabia que no había nada que hacer. Disfruté unos minutos aquella situación en la que me sentía extremadamente cómodo y suspiré odiando tener que acabar con aquello

Moví el brazo en el que wind estaba apoyada con sutileza y cuando abrió hable- ¿se esta cómodo?, no soy una cama- le susurré con tono de broma acompañado de una sonrisa, mi tono era lo suficientemente fuerte como para traspasar el sonido producido por algunos de los truenos que se escuchaban fuera pero tan débil que solo podríamos escucharlo nosotros de estar con mas gente que no era el caso. La ayudé a tumbarse en el suelo pues si se acababa de despertar de lo que menos ganas tendría seria moverse- siento despertarte- mantuve la sonrisa- pero me cuesta dormir con alguien cerca...- se podía ver que aunque sonreía había cierto dolor en las palabras pues odiaba esa parte de mi- es una mala costumbre pero me cuesta evitarla- odiaba aquello pero no podía hacer mucho mas- descansa- fingí una sonrisa- menuda estupidez.... como lo odio- me cabreé conmigo mismo por no poder evitar esa parte de mi

Levanté mi cuerpo con suavidad y andé un par de pasos para acercarme mas a la hoguera llevando conmigo todas mis pertenencias y me tumbé sin mas en el suelo situando mis manos en la parte trasera de mi cabeza contemplando el techo de la cueva- imbécil...- me volví a culpar pues tenerla cerca era extrañamente cómodo y odiaba tener que haberme separado y mas por algo como aquello, los siguientes minutos seguí en aquella posición básicamente insultándome y maldiciendo mi forma de actuar y mi forma de ser

Wind apenas llegó a despertarse cuando notó que su compañero se movía – ¿mmm…?- Intentó refunfuñar o decir algo con coherencia, pero no era capaz, aún seguía considerablemente dormida. –Lo siento…- Dijo con los ojos entreabiertos mientras levantaba la mirada hacia Kouta. No sabía muy bien que estaba pasando pero tampoco es que tuviera muchas ganas de razonarlo por lo que decidió que una simple disculpa por usarle como almohada era suficiente.
Volvió a cerrar los ojos como por intento y notó como el humano la ayudaba a recostarse en el suelo y cuando habló no pudo sino sentirme mal por haberle incomodado –Perdona, no lo sabía- Dijo mientras abría los ojos de nuevo para mirar a Kouta al rostro. –Igualmente…- Dijo ligeramente triste al pensar en que le había molestado o enojado por aquello.

La joven por su parte odiaba dormir sola, siempre tenía algo que le hacía compañía en su misma cama, ya fueran peluches a los que poder abrazarse o a su cuidador Turion, el cual al llegar a cierta edad empezó a dejar de dormir con ella haciendo que ésta cambiara al humano por los peluches.
Cuando vio al humano levantarse no pudo evitar estirar un brazo haciendo un amago de agarrarle para que no se fuera, pero sabía que aquello habría sido egoísta y tampoco quería eso. Antes de llegar a agarrarle, retiró la mano y volvió a meterla entre la capa esperando que Kouta no hubiera visto ese gesto. “Al parecer no voy a dormir mucho” Pensó resignada pues incluso en el bosque siempre acababa abrazada a sus pertenencias haciendo que estas suplieran la necesidad de la compañía o de seguridad al menos.

Observó como Kouta se alejaba para tumbarse algo más cercano a la hoguera pero no podía hacer nada más que resignarse “Cada cual tiene sus propios problemas” Pues ella misma tenía su problema con la compañía “Que le vamos a hacer…” volvió a cerrar los ojos e intentó volver a dormir.
Al cabo de un rato, se dio cuenta de que no podía conciliar el sueño y necesitaba descansar por lo que decidió ir a por sus cosas intentando imitar lo que hacía cuando estaba en los arboles durmiendo. Se levantó despacio intentando no hacer ruido para no molestar a Kouta y cogió todas sus cosas entre los brazos “Pesa” pero aun así, volvió a donde estaba antes tumbada y se recostó en la pared como había hecho con anterioridad abrazando todas sus pertenencias igual que hacía cuando dormía en las ramas. Cerró los ojos e intentó volver a dormir de nuevo.

Tras unos cuantos minutos más se dio cuenta que así tampoco podía, sus cosas estaban frías y sin el vestido que solía resguardarla de aquello, tenía aquel frío en contacto directo con la piel. Empezaba a sentirse increíblemente estúpida, como si fuera una niña pequeña que ha perdido su juguete favorito así que, dejó sus cosas a un lado con cuidado y se volvió a recostar en el suelo haciendo caso omiso de lo que en realidad quería “No puedo estar así para siempre” Pensó con convencimiento mientras se hacía un ovillo.

A poco rato por fin parecía haberse dormido, probablemente el cansancio pesara mucho más que sus caprichos de niña mimada pero desde luego, no estaba teniendo un descanso demasiado agradable. Su rostro adoptó una expresión de tristeza, se abrazaba a sí misma como si tuviera frío y de repente, las lágrimas empezaron a brotar de su rostro sin control.
Las pesadillas habían vuelto y eso era algo que Wind no podía solucionar.

Los minutos pasaban y no conseguía conciliar el sueño o mejor dicho no podía dejar de darle vueltas a la cabeza, cambiando de postura cada poco tiempo pues realmente no conseguía encontrar la adecuada para conciliar el sueño,abrí los ojos que rápidamente se centraron en la única luz de toda la cueva. Bufí con fuerza ante la impotencia que sentía pues realmente mi cuerpo me exigía un descanso pero mi cabeza no me lo daba-maldita sea- susurre acostado de medio lado y me llevé la mano derecha al bolsillo donde guardaba aquella foto, con cuidado la saqué y desdoblé contemplado a mi mascota que mas que eso le consideraba como un viejo amigo

No acostumbraba a hacer aquello pero bien cierto era que algunas de las noches en las que por varias razones no podía dormir mirar aquel dibujo siempre me reconfortaba, sin duda alguna esa era una de aquellas largas noches en las que no conciliaba el sueño por mucho que lo intentara- lo siento...- susurré clavando mi mirada en aquel papel ahora desplegado, el sentimiento de culpa por haberlo separado de mí me golpeaba con fuerza pues era una de las pocas cosas de las cuales me arrepentía- o la unica- sentí un sentimiento amargo recorrer todo mi cuerpo- lo siento tanto...- trague saliva intentando no llorar aunque no puse demasiado esfuerzo en aquello ya que era la razón por la que había desplegado aquella foto, para desahogarme- te hecho de menos pequeño- varios recuerdos se amontonaron en mi mente como si tan solo hubieran sido hace unos días- ojala estuvieras aquí.......- pegué la imagen a mi cuerpo simulando que era mi lobo y apretándola con fuerza como si deseándolo con tanta intensidad apareciera o mejor dicho saliera de la misma imagen pero obviamente no sucedió

Me mantuve apretando el papel unos largos minutos recordando los mejores momentos junto a él y las lagrimas de tristeza y soledad pronto se convirtieron en lagrimas provocadas por la alegría de rememorar aquel pasado tan inspirador, siempre me sucedía lo mismo al mirar aquella foto y era plenamente consciente, primero lo echaba de menos y después pensaba en aquellos felices recuerdos que renovaban mis fuerzas y mis energías, proporcionándome esa tranquilidad que casi nadie podía darme y que tanto anhelaba- gracias amigo, siempre cuidas de mi- le sonreí a la imagen como si de verdad fuera él aunque era consciente de que no- buenas noches sombra- susurré guardando aquella imagen con cuidado y bastante mas calmado cerré los ojos

Casi había iniciado el sueño o lo había iniciado hace poco tiempo cuando un suave sonido me desveló,moví mi cuerpo con agilidad y sigilo levantándome con rapidez- no puede ser- llevé mi mano al arco mientras cargaba una flecha y con la mirada buscaba el origen de aquel sonido que segundos mas rápido volvió a aparecer pero parecía provenir de wind- ¿wind?-pensé sorprendido pues parecía estar dormida, aun así con un rápido vistazo me aseguré de que no había nadie mas allí. Noté ahora como mi corazón de había acelerado por mis movimientos, intente respirar controladamente para calmarme y una vez lo hice mantuve mi mirada sobre la elfa que cada X tiempo decía o susurraba algo incomprensible-¿pesadillas?- fue lo primero que se me vino a la mente pero sin estar todavía seguro me acerqué a donde se encontraba ella situándome justo a su lado- wind- le susurre lo mas bajo que pude pues si estaba durmiendo no quería despertarla y pareció ser así pues no respondió

Fue en ese entonces cuando me percaté de que estaba temblando, posiblemente por el frió- ¿estará enferma?- todavía sin ver su rostro para asegurarme decidí acercarme hasta su cara pues quería tocarle la frente para saber si había enfermado, si lo había hecho la cosa se pondría peligrosa, dios sabia a cuanto estaba el pueblo mas cercano y en que dirección. Recé para mis adentros que no fuera el caso, cuando finalmente me puse a la altura de su cara apartándole parte de su pelo para verle la cara y tocarle la frente sentí un duro pinchazo en el corazón que me corto la respiración momentáneamente y me heló la sangre- ¿lagrimas?- intento ser un pensamiento pero no pude evitar susurrarlo parándome entre cada silaba-¿porque?¿por la pesadillas?¿era por eso que no quería dormir sola?- sentí como mi respiración volvía pero esta vez mis pensamientos me habían hecho un nudo en la garganta.No supe que hacer durante unos segundos en los que la observé murmurar algunas cosas que no comprendía y parecía no parar de llorar, no había duda era cosa de sus sueños o mejor dicho de sus pesadillas

-Estúpido, estúpido,estúpido- me reproché haber sido tan egoísta pero la respuesta me llegó enseguida, sabia lo que tenia que hacer y ni si quiera lo dudé, ella lo estaba pasando mal y pensaba hacer todo lo que estuviera en mis manos para que no sufriera mas.Pasé por encima suya hasta colocarme a su espalda, me acomodé un poco en el suelo intentando no hacer demasiado ruido para no despertarla y dudé una fracción de segundo si abrazarla por detrás o no hasta que finalmente decidí depositar con suavidad mi mano izquierda sobre su costado como si se tratase de un medio abrazo sin pretender despertarla -No te preocupes wind, estoy aquí, contigo- le susurré calmado pues a mi parecer seguía dormida y no sabia si mis palabras le iban a llegar,aunque solo fuera en sueños, pero confiaba en que así fuera y pudiera por lo menos descansar mas que yo  pues tenia muy claro que yo no iba a poder dormir en aquellas condiciones pero después de verla llorar aquello era lo que menos me preocupaba

-Por suerte el calor del fuego llega hasta aquí- pensé pues aunque no daba tanto calor como mi antiguo lugar, se seguía notando el  agradable calor que desprendía la hoguera y que era suficiente para no tener frió, recé para que el fuego durara el máximo tiempo posible

A pesar de los malos sueños Wind estaba completamente dormida aunque sin llegar a ser un sueño demasiado profundo pues aquellas pesadillas la tenían dormitando incómodamente por lo que por muy dormida que estuviera, desde luego no estaba descansando lo más mínimo.
La joven a pesar de su ligero sueño, no parecía darse cuenta de lo que sucedía a su alrededor ya que cuando Kouta se acercó a ella, no se percató en lo absoluto. No fue hasta que el joven le pasó el brazo por encima que se desveló ligeramente haciéndola revolverse un poco.

La elfa escuchó al humano mientras estaba aun en el mundo de los sueños, aquello hizo que dejara de temblar y que las lagrimas cesaran de repente, como si se hubiera cerrado una compuerta. Abrió un poco los ojos con cierta dificultad debido a las pestañas que estaban enredadas entre ellas como si no quisieran que la joven despertase. Cuando por fin pudo entreabrirlos, pestañeó un par de veces y vio el brazo del cazador encima suyo. Wind no razonó lo que estaba pasando, casi parecía que estaba sonámbula en vez de despierta y como si no hubiera pasado nada, volvió a cerrar los ojos para acto seguido, darse la vuelta quedando de frente a Kouta. Abrió los ojos de nuevo apenas para ver el rostro al joven y con un par de movimientos perezosos, se desabrochó la capa y la colocó de tal manera que llegara a taparlos mas o menos a los dos.
Después de aquello, Wind puso la mano en la mejilla del cazador haciéndole un par de caricias con los dedos mientras cerraba los ojos otra vez, como si todo aquello no tuviera importancia y con un –Buenas noches pequeño- En voz baja mientras esbozaba una pequeña sonrisa se quedó profundamente dormida en apenas unos segundos, como si no se hubiera despertado en ningún momento y eso fuera solo parte de su propio sueño.

Wind parecía haber dejado las pesadillas atrás por fin, su expresión ahora estaba serena y su respiración era suave y profunda, daba la sensación de aquellos malos sueños no hubieran existido nunca. Las lágrimas se secaron a los pocos segundos debido al calor que fuego aun proporcionaba a la cueva y el frío parecía no existir para ella pues aunque no estaba tan tapada como antes, ahora ya no se abrazaba a sí misma ni temblaba, de hecho, casi parecía estar más templada que antes. La lluvia seguía sonando fuera de la cueva y los truenos ya no eran tan estruendosos por lo que parecía que la tormenta estaba desapareciendo por fin, tal vez por la mañana con un poco de suerte hubiera desaparecido del todo.


El sol despertó a Wind, era demasiado brillante como si la tormenta de anoche no hubiera existido. La elfa abrió los ojos despacio, para encontrarse con el rostro de su compañero estaba completamente sorprendida "¿Cuando...?" Se incorporó en el sitio haciendo que la capa resbalara hasta sus piernas mientras se frotaba los ojos, la verdad es que había dormido francamente bien y se encontraba completamente renovada de energía. Se estiró un poco y se percató de que el fuego estaba completamente extinto "Por eso sentía frío en la espalda..." Despues de aquello y aun sentada, observó al cazador que parecía dormido y con una voz que casi parecía un susurro dijo -Gracias- Mientras le sonreía.

Llevaba algunos minutos en aquella posición junto a wind haciendo esfuerzos por intentar dormir, todos ellos en vano aun a sabiendas de que apenas conseguiría dormir un par de horas esa noche decidí permanecer a su lado por lo menos durante un tiempo hasta que se tranquilizase.Fue en ese momento en el que sentí la mano de wind sobre mi mejilla y escuché su suave voz hablarme no pude evitar sonreír al sentir una gran sensación de calidez en mi interior, algo que hacia demasiado tiempo que no sentía y que desde luego echaba muchísimo de menos- me alegro de haberte conocido enana- mantuve la sonrisa aun con los ojos cerrados e intenté dormir un poco

A pesar de que ya sentía bastante cercana a wind en mi mente seguía existiendo esa barrera que me impedía conciliar el sueño cuando estaba junto a alguien, por esa razón no pasarón ni dos horas hasta que me desvelé.Mi mano ya no estaba sobre su cuerpo y no estaba de cara ella, al parecer durante aquellas dos horas me había dado la vuelta quedando de espaldas a wind y me había salido ligeramente de la protección de la capa- eso explica porque siento  frió en los brazos- bostecé soñoliento y con cuidado me salí por completo de la capa dejándola con suavidad sobre wind tapando su cuerpo por donde menos protegido estaba sobretodo subiéndosela hasta la altura del cuello- tranquila es mucho mas mona- sonreí para mis adentros quedándome absorto unos segundos observando su rostro, agité mi cabeza- sera mejor que avive un poco mas el fuego- sentía ligeramente los brazos fríos por lo que eché algunas pequeñas ramas mas a la hoguera que prácticamente se estaba acabando y me calenté los brazos- mucho mejor- susurré cuando volví a recuperar mi calor corporal

Cada cierto tiempo echaba alguna mirada rápida hacia wind para asegurarme de que seguía dormida y no la había despertado, por suerte la pequeña elfa parecía ser difícil de desvelar una vez dormía profundamente,también, con una frecuencia parecida, mi mirada observaba la entrada a la cueva con precaución pues lo que menos me apetecía era que en mitad de la noche nos asaltaran y ni si quiera nos diéramos cuenta.Consciente de que no tenia intención o mejor dicho mi cabeza no tenia intención de dejarme dormir aquella noche, me recosté junto a ella de nuevo una vez cogí suficiente calor de la hoguera.Me tumbé tapándome con cuidado con lo que sobraba de mi capa- para que luego digan que las capas no sirven- me reí yo solo en mi cabeza y me quedé mirando la entrada a nuestro refugio, de nuevo de espaldas a wind, observando como con el paso de la noche los truenos iban apaciguándose hasta desaparecer

El paso de las horas se me hizo bastante largo aunque había desarrollado ciertas maneras de matar ese tipo de aburrimiento como imaginar que me encontraba en otro lugar o pensar mentalmente lo que sucedería siendo otra persona, a menudo un extraño  luchador del que nadie sabia nada y cuyo pasado era una incógnita el cual básicamente se dedicaba a recolectar información para su señor como si una especie de espía se tratase pero siempre manteniendo sus propios ideales.Especialmente esta forma de matar el tiempo me encantaba pues adoraba las historias que yo mismo me creaba en mi cabeza como que el extraño se unía a un grupo conocido como montaraces,todos ellos, al igual que él, siervos de otros señores y como de vez en cuando tenian que llegar a trabajar juntos, codo con codo para solucionar grandes o pequeños problemas siempre con su astucia y experiencia previa en el combate

Aunque mis ojos prestaban atención a la entrada, mi cabeza estaba absorta en las historias que me había montado hasta que un movimiento me alertó y volví en mi, parecía ser wind que ya despertaba-vaya forma de vigilar- me reproché aunque no demasiado pues montar guardia era realmente aburrido, la joven habló y decidí moverme con suavidad como si me acabara de despertar, no quería preocuparla aunque mi rostro se notaba que no había dormido demasiado bien pero no era para nada preocupante- buenos días- bostecé sin poder evitarlo  tras eso le sonreí- preparare el fuego dame un momento- me levanté del lugar y estiré un poco como solía hacer cada mañana fue en ese entonces cuando mi vista recorrió fugazmente el cuerpo de wind que no estaba cubierto por la capa, extrañamente no me ruboricé demasiado aunque cada vez que la veía con tan poca ropa algo en mi interior me dificultaba la respiración aunque intentaba aparentar que no.Tras eso me situé frente a las cenizas de la hoguera aparte algunas de ellas y situé la poca madera que había sobrado y comencé a encender el fuego

-Por lo menos hoy no llueve, podremos salir en cuanto comamos algo- mi expresión facial denotaba concentración en encender aquel fuego pues me resultó un poco mas difícil que el día anterior pero finalmente lo conseguí, observe que era lo que estaba haciendo wind

Wind no pudo evitar reír suavemente al ver al cazador bostezar –Buenos días, al parecer no has descansado tan bien como yo- Comentó mientras le veía levantarse. La elfa se quedó en suelo, ensimismada, como si su cerebro aun no quisiera despertar del todo y después de unos segundos de estar ensimismada mirando la entrada de la cueva, se levantó del suelo igual que había hecho Kouta y recogió la capa con cuidado, la sacudió pero justo antes de volver a ponérsela, recordó que no era suya y que probablemente el humano la querría de vuelta por lo que estiró la mano sujetando aun la capa ofreciéndosela de nuevo a Kouta –Toma, creo que ya la he acaparado suficiente- Dijo con tono alegre, como si hubiera olvidado por completo que estaba apenas tapada por un par de telas.

Después de aquello, la elfa echó un rápido vistazo a sus cosas de un modo rutinario para ver si lo tenía todo y una vez comprobado aquello cogió un par de manzanas del morral. -¿Quieres?- Preguntó ofreciendo una a su amigo –Prometo que son mejores que el pan duro- Comentó en tono de burla mientras se reía ya que del jabalí, poco quedaba aprovechable y no tenía demasiadas ganas de salir a cazar en ese momento. –Aunque si quieres, podemos salir a dar caza algún otro ladronzuelo- Dijo mientras continuaba con el tono de broma, haciendo referencia al jabalí que cazaron el día anterior.

La joven se acercó al fuego recién encendido y se sentó delante mientras disfrutaba del momento de tranquilidad aunque aquello le duró más bien poco pues de repente recordó que ese día debería hacerse con algo de ropa de nuevo pues tampoco podía seguir para siempre danzando de esa guisa por el bosque. Reflexionó unos segundos sobre aquella idea hasta que la única conclusión a la que llegó es que, debería haber algún pueblo cerca de allí ya que era un bosque bastante concurrido y debería haber alguna aldea cercana donde poder conseguir algunas prendas. –Debería haber alguna aldea no muy lejos donde poder conseguir algo de ropa- Explicó en voz alta cuando decidió que aquella era la mejor idea que podía pensar. –El problema es como podré entrar a un pueblo de esta guisa- Debía resignarse a que no tenía muchas opciones a parte de entrar intentando pasar desapercibida de algún modo pues no podía mandar al joven a comprar ropas de mujer.
-Aunque con un poco de suerte, podríamos encontrarnos con algunos comerciantes por el camino, eso sería mucho más sencillo- Dijo con un pequeño brillo de esperanza en su mirada, como si en lo más profundo de su mente esa fuera la idea más factible. La joven dirigió la mirada a Kouta para saber cuál era su opinión en aquello -¿Tu qué opinas? ¿Se te ocurre algo mejor?- Pues la verdad era que si el joven tenía una idea mejor, desde luego no iba a dejar de escucharla, en ese momento todas las ideas eran bien recibidas.

Esperando a que Kouta hablara recordó de repente las huellas de caballos que vieron ayer pues, si había caballos por allí probablemente habría una aldea o un pueblo o algo cerca o al menos, en eso confiaba. –Tal vez las huellas de ayer, nos guíen hasta algún pueblo pero dudo que continúen estando después de la tormenta de esta noche.- Reflexionó en voz alta, como si hablara para ella misma.

Después de terminarse la manzana, se levantó del suelo limpiándose el polvo y fue a por sus cosas para colocárselas. A la joven prácticamente se le habían olvidado las heridas que tenía, por lo que al apoyar la primera correa sobre su piel, su expresión cambió dejando claro que aquello le había pillado por sorpresa y todavía le escocía, por lo que se puso las cosas justo hacia el lado contrario de cómo lo llevaba el día anterior intentando que de aquella manera el dolor fuera menor y gracias a los cielos, así fue. Se terminó de colocar todos los bultos y se dispuso a salir de la cueva. -¿Nos vamos?- Preguntó a Kouta con una sonrisa.

Acepté la capa y me la puse sintiendo el calor de la elfa rodeándome algo que me reconfortó hasta tal punto que la acerqué a mi tanto como pude con mis brazos como si estuviera abrazándola- es cálida- pensé con una sonrisa en mi rostro pues se sentía realmente agradable

-Si, gracias, no subestimes la caducidad del pan, tarda mucho menos en ponerse malo, dios sabe cuantas veces me ha salvado el alimentarme de ese asqueroso trozo de piedra- hice referencia a su dureza tras unos días hecho mientras reía y le dí un ligero mordisco a la manzana pero no pude evitar suspirar desilusionado- lastima que no podamos aprovechar mas del jabalí, la carne estaba realmente buena- deseaba seguir comiendo carne no solo ese día sino todos los días de mi vida, pero era un lujo que tenia claro que no me podía permitir, esa era una de las razones por las que odiaba tener tan poco dinero- deja deja, no te preocupes me conformare con esto- hablé con una sonrisa cuando la elfa me incito a cazar de nuevo, realmente no creía tener la resistencia necesaria para cazar a otro animal, al menos no después de haber dormido tan poco

Las dudas y sugerencias de la elfa no me sorprendieron pues yo había pensado exactamente lo mismo, seria difícil encontrar y entrar a la ciudad sin que todo el mundo la mirase- y a mi que me gusta pasar desapercibido- suspire ante su pregunta y negué con la cabeza- bien es cierto que he pensado alguna cosa- hablé como si tuviera la solución- pero dudo bastante que funcionase, aunque bueno depende de tu suerte, que esperemos haya mejorado hoy- esbocé una amplia sonrisa recordando los sucesos del día anterior- la idea era que con suerte hubiera algún grupo de danza... o algún festival y colarte como si fueras una de sus bailarinas, desde luego no se resistirían a tal be...- me pare en seco un tanto rojo pues era realmente hermosa desde mi punto de vista- b-bueno a ti- acabé diciendo con cierto tono tímido

Esperé unos segundos por si se me ocurría algún plan pero no fue el caso, la elfa habló sobre las huellas y negué con la vista- y aunque estuvieran, seria peligroso seguirlas, no sabemos que clase de personas son y no quiero arriesgarme a que te pase algo- solté sin pensar- quiero decir a ambos, claro-intenté arreglarlo pero obviamente no funcionó- confio en encontrar un pueblo o algo, no te preocupes, alguna solucion encontraremos- afirme para darle animos

Tras comer algo decidimos marcharnos así que cogí todas mis pertenencias asegurándome de no dejar nada y apagué el fuego con algo de agua, había sido mas rápido que wind que al parecer tenia ciertos problemas- probablemente por las rozaduras-pensé mientras con un palo hacia una pequeña señal sobre las cenizas -ni que fuera a servir de algo- sabia que no pero mis esperanzas superaban a la realidad deje el palo cuando wind me habló y me giré apreciando su sonrisa- después de usted, su majestad- me incline como los caballeros de la corte indicando con la mano derecha que iniciara ella el viaje- nos vemos viejo amigo- me volteé un segundo cuando wind comenzó a andar y tras aquel comentario la seguí con bastantes ganas por llegar fuera del bosque

-¿Todavía te duelen las rozaduras?- le pregunté cuando salimos de aquel lugar y dí una gran bocanada de aire limpio

Wind escuchó atentamente la idea del humano, no era una mala solución pues las bailarinas podían parecer todo lo desinhibidas que quisieran sin que resultara algo especialmente escandaloso, de hecho, era algo más que habitual verlas portando trajes más que sugerentes, tal vez para atraer más público. – ¡Es una gran idea!- Exclamó la joven con una sonrisa y un ligero rubor por el amago de comentario de Kouta el cual, prefirió hacer como si no lo escuchara.

La elfa intentó refunfuñar ante aquel comentario sobre las huellas -Pe-pero…- aunque en realidad, la joven sabía que el cazador tenía razón, de hecho, ella misma pensó ayer que aquellas personas podrían ser bandidos, por lo que se calló mientras ponía una expresión de tristeza “Soy estúpida” Sabía que intentar quejarse de aquella idea sería más bien inútil, pues en realidad era plenamente consciente de que las huellas probablemente no les llevarían a nada bueno y no quería meter a Kouta en más problemas de los que ya lo había hecho. –Tienes razón si fueran malas personas, desde luego estaríamos en desventaja- Comentó mientras miraba su propio cuerpo semidesnudo.

Wind sonrió e hizo una pequeña reverencia, como hacían las damas –En marcha- Comentó divertida mientras emprendía el paso para salir de la cueva. La luz del sol brillaba mucho más fuerte de lo que había podido apreciar antes, y el aire fresco hizo que respirara profundamente un par de veces, disfrutando del aire puro.
Antes de que echara a andar la pregunta de Kouta hizo que se los músculos se le tensaran un poco –N-No, todo está bien. La crema de ayer ha ayudado mucho- Comentó haciendo que el pequeño tartamudeo del principio, delatara que no estaba tan bien como decía estar pero desde luego, no pensaba preocupar a su amigo más de lo necesario pues no le resultaba ningún impedimento para su travesía.

Después la elfa empezó a andar en línea recta entre los árboles, haciendo un esfuerzo por recordar donde estaba el camino principal. “Es más difícil de lo que pensaba” Pues, aunque tenía una ligera idea, desde luego no era sencillo de recordar, los arboles eran demasiado parecidos entre ellos.
Al cabo de unos minutos pareció orientarse un poco mejor y con seguridad miró a Kouta para avisarle –Creo que ya sé dónde estamos- Wind tenía una sonrisa en el rostro, pero la verdad era que aquel comentario podría delatarla haciendo que el joven se enterara de que no sabía cómo llegar al camino principal demasiado bien aunque prefirió no darle importancia y concentrarse en el resto del camino.

Al cabo de unos minutos caminando más o menos en silencio, la elfa reflexionó sobre la idea de su compañero y de repente, cayó en la cuenta de algo haciendo que su expresión pasara a ser de sorpresa – ¡No puedo hacer de bailarina! ¡Yo no sé bailar como una bailarina ambulante!- Exclamó mientras miraba a Kouta preocupada por aquella idea –Pero esa era la mejor idea- Se reprochó a si misma mientras pensaba en que de qué le valía saber bailar bailes de salón si no podía aplicar aquellos malditos conocimientos nunca.

Al cabo de un rato, llegaron al camino y para la sorpresa de la joven, había unas marcas en el suelo parecían caballos y carros así que, con una alegría impresionante como si hubiera encontrado un tesoro, se paró en seco y miró a su amigo con una enorme sonrisa en la cara –Hay huellas, tal vez sean comerciantes- Estaba pletórica ante aquella idea y sin poder evitarlo, dio un efusivo abrazo a Kouta como si fuera lo más natural del mundo, para soltarlo apenas unos instantes después y empezar a examinar la dirección de las huellas. Tras unos pocos segundos se dio cuenta “Esto es genial” –Van el nuestra misma dirección- Comentó optimista mientras continuaba mirando las marcas en barro sin poder evitar sonreír, sin pensar en el resto de posibilidades de aquellas huellas.

Los potentes rayos de sol atacaron mis ojos sin compasión cuando salí de la cueva así que inmediatamente situé una de mis manos sobre ellos evitando que la luz me dejara ciego hasta que me acostumbré- parece que hace un buen dia- fue mas un susurro que otra cosa pues estaba centrado en observar mi entorno, el bosque parecía estar mucho mas vivo después de una noche de tormenta, no pude evitar sonreír al contemplar aquel paisaje, adoraba el esplendor de la naturaleza y en mas de una ocasión en mis viajes en solitario me subía a lo alto de un árbol a contemplar los paisajes con los que me deleitaba la naturaleza

-Esperemos que sea así- le respondí a la elfa cuando me comento sobre sus rozaduras- de lo contrario tendríamos problemas si son bandidos... o peor aun, esclavistas- suspiré pero no quería preocupar de mas a mi compañera, después de todo solo eran suposiciones y no me gustaba basar mis acciones en cosas que no se podían demostrar aunque algunas veces no me quedaba otra- mas vale ser precavido que luego arrepentirse- repetí en mi mente con una sonrisa recordando el origen de aquellas palabras.Seguí caminando prestando atención a mi alrededor cuando las palabras de la elfa me hicieron prestarle atención a ella- ¿como?, ¿me llevabas a ciegas por el bosque?- fingí estar ofendido con la voz pero si se volteaba se podía apreciar una gran sonrisa en mi rostro, claramente estaba bromeando con mi amiga aunque era cierto que me alegraba saber que por fin sabíamos donde estábamos

Intentaba dibujar un plano mental del bosque por lo menos de las zonas mas señaladas por si me perdía, prestando mayor atención en detalles como arboles rotos o rocas con formas o tamaños un tanto extravagantes, lo suficiente como para saber que si veía una de esas señales por lo menos supiera donde estaba y tuviera la certeza de no estar andando en circulos que podría suceder perfectamente.De nuevo la exclamación de wind me hizo sobresaltarme un poco- bueno, bueno, solo tiene que aparentar serlo, seguramente ellos te enseñen al menos lo básicocomo para que se nieguen cuando te vean..- la elfa era realmente hermosa, quizás fuera una particularidad de su raza pues las poquísimas elfas que había visto a lo largo de mi vida eran todas hermosas- ¿sera cosa de genes? o de magia...- un escalofrió me recorrió todo el cuerpo al pensar en la magia y decidí no pensar mas en aquello- de todas formas solo era una idea, ya pensaremos otra, no te preocupes- le dije intentando animarla

Nuestros pasos nos dirigieron hasta un camino- al fin- hablé al verlo- ya era hora- me sentía animado de ver que por fin avanzábamos pero fue wind quien me alertó de unas huellas en el camino, para cuando intenté hablar se abalanzó sobre mi abrazándome sin capacidad de reacción, me pillo tan de sorpresa que lo único que pude hacer fue quedarme quieto hasta que se separó y se acerco a las huellas. Tosí un par de veces mientras wind miraba aquellas huellas- ¿esta chica piensa alguna vez lo que hace?, supongo que no- me reí ligeramente y me situé junto a wind observando las huellas, prestando atención en los pequeños detalles que nos podrían dar mayor información-podrían ser esclavistas- de nuevo mi desconfianza ganaba, sospechaba de todo cuanto me rodeaba quizás por eso había optado por tener una vida tan solitaria, pero el optimismo de wind me cegó y asentí con la cabeza- con un poco de suerte los encontraremos y nos ayudaran- me levanté del sitio- andando- le revolví el pelo cuando pase por su lado pues aun estaba agachada esperando algún tipo de reacción o queja por su parte que tanto adoraba

-Dime wind, ¿porque decidiste partir sola?, ¿no tenias a nadie con quien irte?- pregunté mientras seguía el camino esta vez sin prestar tanta atención a lo que rodeaba pues el optimismo de la elfa me había cegado-me intriga saber mas acerca de tu pasado, ¿que puedes contarme?- le pregunté unos minutos mas tarde pues el camino pintaba largo y queria entretenerme

Wind no pudo evitar ruborizarse ligeramente mientras hacía un amago de girar la cabeza para mirar a su compañero –S-Si sabía por dónde te llevaba- Dijo con voz baja, denotando la vergüenza que sentí por haber sido pillada –Bueno… más o menos- añadió con sinceridad mientras aumentaba su rubor pues, aunque lo que le había dicho no era mentira, tampoco era una verdad completa. Acto seguido giró la cabeza –Pero ahora ya si se dónde estamos- comentó con una sonrisa mientras veía que su compañero estaba sonriendo ampliamente lo cual hizo que la joven no pudiera evitar poner una expresión de fingido enfado mientras intentaba refunfuñar. Después de aquello volvió a poner la vista al frente para continuar intentando descifrar donde estaba exactamente el camino pues tampoco estaba tan segura como para confiarse.

Escuchó ligeramente esperanzada aquella idea –Es cierto, con un poco de suerte tal vez me enseñen algo básico- Se aferró a aquello como si fuera algo completamente factible y eso fuera lo más normal que pudiera ocurrir –Sería divertido aprender a bailar como una artista de verdad- Comentó divertida pues, en realidad sí que era algo que sonaba divertido probablemente mucho más que los aburridos bailes de salón que tanto odiaba.  -¿Tú sabes bailar Kouta?- Preguntó curiosa la elfa pues, la verdad no se imaginaba a aquel cazador bailando y en su mente la escena era francamente cómica.

-¿Verdad que sí? Seguro que tendrán ropas para venderme o tal vez nos guíen hasta un pueblo…- Comentó la joven ilusionada – Sería genial que fuera algo de eso- Añadió Wind sonriendo antes de levantarse del suelo.
La elfa no pudo evitar enfurruñarse cuando el humano le revolvió el pelo -¡Oye!- Exclamó la joven mientras se incorporaba. Se atusó el pelo con la mano unas cuantas veces para intentar peinárselo, pues, por mucho que su amigo le revolviera el pelo, la verdad era que difícilmente podría enredárselo más de lo que ya lo estaba. Mientras intentaba recolocarse la melena de algún modo no pudo evitar sacarle la lengua a modo de queja. Cogió el lazo que tenía en su bolsita y se anudó el cabello de tal manera que le molestara lo menos posible y ya de paso, que no se le enredara más.

La expresión de la elfa cambió de repente sin poder evitarlo al recordad el inicio de su viaje. –No iba sola, partí con un grupo de comerciantes que eran… viejos amigos- comentó con tristeza –Apenas entramos en el bosque, desaparecieron sin más cuando me alejé un poco a ver si era un buen lugar donde descansar- añadió continuando con la explicación –Después de aquello no fui capaz de volver a encontrarles, era como si… hubieran ocultado sus huellas- Aquello aún la desconcertaba, seguía sin entender la actuación de aquellos comerciantes pues, si no querían que les acompañase podían habérselo dicho desde el principio ¿No?
-Pero en cualquier caso el viaje en sí mismo si lo estoy haciendo sola… La única persona que podía haberme acompañado decidió que yo me estaba preocupando demasiado y que estaba loca así que, decidí partir en solitario- Comentó intentando quitarle importancia mientras se encogía de hombros.

De repente se dio cuenta de que igual se había tornado demasiado seria, así que para quitarle hierro al asunto, sonrió ampliamente mirando al humano y preguntó -¿De mi pasado? Puedo contarte lo que quieras, solo pregunta y te lo contaré- Su pasado no era algo que le incomodara especialmente, siempre se había considerado afortunada y estaba feliz de la vida que había llevado por lo que no le importaba lo más mínimo contar tanto como quisieran saber.

-¿Y tú? ¿Por qué partiste solo en tu viaje?- Preguntó la elfa curiosa.

Negué con la cabeza ante la pregunta de la elfa- no ese tipo de baile- hablé- aunque es cierto que hace algún tiempo aprendí a bailar, en contra de mi voluntad- hice una pausa para sonreír- como imaginaras- aclaré- digamos que.... se bailar algo un poco mas  ¿serio?, ¿elegante?, no sabria decirte pero mas aburrido desde luego- asentí con la cabeza y una ligera sonrisa pues el adjetivo de aburrido era para mi la mejor forma de describir los pasos de baile que había aprendido

Noté las palabras tristes de wind al hablar sobre el viaje e inconscientemente le pregunté por pura curiosidad sin ser realmente consciente de que podría molestarle-¿quieres decir que te abandonaron?- tensé mis músculos durante unos segundos al pensar en aquella escena pero luego me relajé aunque no podía evitar mantener cerrado el puño por la impotencia, por suerte se encontraba bajo la capa, al menos así no preocuparía a wind aunque mi tono era ligeramente enfadado- como pueden abandonar a la gente, escoria....- fue el primer pensamiento, me repugnaba la gente que hacia eso al igual que la gente que te trataban de amigos y luego te traicionaban por la espalda algo bastante normal en los tiempos que corrían. Escuché de nuevo las suaves palabras de la elfa y suspiré al darme cuenta de algo, al parecer teníamos historias algo similares, ella iba a buscar a sus parientes y yo a los asesinos de los míos, ambos habíamos empezado a viajar solos, en su caso, al parecer, aquella persona la había tachado de loca y la había dejado sola y en mi caso fui yo el que había decidido quedarme solo. Teníamos unas historias diferentes pero con ciertas similitudes, quizás fuera cosa del destino

Centré mi mirada en la elfa y decidí preguntarle- ¿quien era esa persona?su novio, tal vez, aunque no tiene pinta de haber tenido uno-la miré de arriba a abajo inconscientemente recordando que apenas tenia ropa-perdón- saqué la lengua rascándome la cabeza- no me acostumbro- reí falsamente para quitar cualquier tipo de mal royo existente

Seguía a su lado prestando mas atención al horizonte deseoso de encontrar a alguien o mas bien algo que nos indicara que seguíamos por el buen camino- o por lo menos que estemos en uno- aunque eso estaba claro, aquella ruta tendría que llevar a algún lado pues el carruaje había pasado por allí.Su pregunta me despisto por un momento- ¿perdona?- volví a repetir por si no había entendido bien su pregunta y cuando me lo repitió un escalofrió me recorrió el cuerpo viniendo a mi aquellas dolorosas imágenes

-Digamos que cuando se trata de venganza personal, es mejor no estar acompañadosobretodo cuando puede salir herido o incluso morir- le dije con una voz un tanto temblorosa por aquellos recuerdos- como sea he ido encontrando a gente durante el viaje, gente buena y gente no tan buena- bromeé- por suerte no me he metido en problemas...- pare un segundo de hablar recordando vulwulfar- bueno, mejor dicho no me he metido en ninguno del que no haya salido- bromee de nuevo esta vez con una amplia sonrisa pues aquella pelea en el bar me había traído algunos buenos momentos. Seguí observando el camino hasta que finalmente localicé algo que llevaba tiempo buscando, con rapidez me acerqué a el pequeño poste de madera que había en uno de los lados del camino``posada el viajero errante`` leí el nombre y asentí con la cabeza satisfecho- al fin, no es una ciudad pero por lo menos sabemos que vamos en una buena dirección- miré a la elfa- quizás el carruaje este allí y pueda llevarnos hasta la ciudad mas cercana- le di ánimos pues su optimismo me seguía cegando- o quizas ellos mismo tengan algo que darte, en cualquier caso sigamos- reafirmé e inicie de nuevo la marcha

Al escuchar la pregunta de su amigo, dio un pequeño suspiro sin poder evitarlo –Espero que así fuera, de ese modo al menos sabría que están bien y que no tuvieron ningún problema- La joven, no podía evitar preocuparse por aquellos comerciantes pues, aunque si bien era  cierto que no la habían llevado con ellos  cuando desaparecieron, tampoco les deseaba aun final trágico o doloroso –La pareja que llevaba en carro habían dejado dos hijos en su ciudad natal, no me gustaría que estuvieran en problemas- Añadió Wind realmente preocupada por aquellos niños que apenas tenían edad para defenderse del mundo. Después de aquello, miró a Kouta el cual, parecía ligeramente enfadado –Seguro que tenían sus razones- Comentó la elfa con una sonrisa fingida intentando hacer ver que aquello no le dolió para que su compañero no se preocupara.

Wind reflexionó unos momentos, no sabía cómo decir exactamente quién era Turion pues era muchas cosas para la joven, así que decidió darle la respuesta más exacta que pudo –Es un buen amigo el cual me cuidó durante mucho tiempo durante las travesías de mis abuelos y además me enseñó alquimia-  Explicó mientras miraba al cielo pensativa para acabar con una enorme sonrisa mientras miraba a Kouta orgullosa de su respuesta.

Al ver a su compañero mirarla así se ruborizó pero cuando se disculpó se vio en la obligación de admitir que se había dado cuenta de aquello –N-No te preocupes, sé que es raro así que no tienes por qué disculparte- Dijo la joven mientras bajaba la mirada con la esperanza de que, de aquella manera, si volvía hacerlo pudiera hacer como que no se había dado cuenta.

Cuando la elfa preguntó sobre su viaje en solitario vio como al humano no le hacía especial ilusión contestar a eso, repitió su pregunta con una voz más baja que antes como si ahora no quiera conocer la respuesta. Wind escuchó a Kouta que parecía estar triste o enfadado, no lo tenía muy claro y antes de que pudiera si quiera razonar lo que iba a decir, salió de su boca una pregunta -¿Entonces no quisiste que te acompañaran?- Justo después de su última palabra una disculpa quiso salir de su boca a toda prisa como si hubiera hecho la peor de las preguntas. –Lo siento si te ha molestado mi pregunta, a veces me paso de curiosa- Dijo la joven a modo de excusa –Si alguna vez no quieres contestar, solo tienes que decírmelo, no te preocupes- dijo la joven con una pequeña sonrisa mientras sacaba la lengua intentando que su amigo no se sintiera realmente obligado a contestarla.

Wind observó sin comprender muy bien como de repente Kouta aceleraba el paso “¿Qué pasa?” Cuando se dio cuenta del pequeño poste que estaba a un lateral, una enrome sonrisa iluminó su rostro –Tienes razón, si hay una taberna habrá gente o al menos ropa que pueda usar- Comentó emocionada “Espero” Añadió en su mente como si de pronto de diera cuenta de su optimismo pero realmente no pensaba en dar cabida a las malas ideas y prefirió centrarse en lo positivo de la situación.

La joven siguió con una sonrisa al cazador y se puso de nuevo a su lado pensando en lo fantástico que sería que la suerte les hubiera sonreído de aquella manera tan inesperada.
Continuaron andando un rato más hasta que a lo lejos vio lo que parecía una casa –Mira, allí- Dijo la joven emocionada mientas señalaba con un dedo en dirección al edificio

Negué con la cabeza- no es que fuera eso...-recapacité unos segundos-bueno, supongo que si fue algo así- dije suspirando- es mas complicado de lo que en realidad parece- me rasqué la cabeza pensativo- díselo....- un pensamiento fugaz me vino a la mente y tras eso la miré- no te preocupes, viene bien hablar de ello de vez en cuando- le sonreí pero duro poco pues continué hablando y se notaba algo de dolor en las palabras- digamos que al ser una venganza personal, no quise que salieran perjudicadas mas personas cercanas, ya sabes.... había perdido a mi madre....- fui bajando el tono pues no me apetecía mucho recordar como la vi por ultima vez- pero se que hice mal, viajar solo al principio puede parecer buena idea pero se hace difícil montar guardias y todo eso cuando solo eres una persona- asentí y comencé a bajar el tono de voz casi como si fuera un susurro pero que wind podía escuchar- lo que hice es una de las pocas cosas de las que me arrepiento...

Al horizonte apareció aquel lugar alegrándome la vista, todos mis sentidos obviaron el resto de cosas y se centraron en aquel lugar que conforme mas nos acercábamos fui viendo que se trataba de una casa bastante amplia en medio de una gran pradera justo en mitad del bosque.Era de madera vieja, se notaba que el paso de los años había desgastado parte de aquel lugar pero todavía se mantenía en pie y aunque el cartel medio colgando ``viajero errante`` encima de la puerta indicaba que estaba en malas condiciones no parecía ningún problema pues no le faltaba ni tejado ni paredes a aquel lugar. Apenas estábamos a unos 400 metros cuando justo al lado de la casa divisé lo que parecía otro cobertizo un poco mas alejado de la casa- el establo- afirmé mis sospechas cuando observé un carruaje allí apostado junto a 4 caballos atados y con suficiente comida y agua para abastecerse

-Ese debe ser el carro- si mi intuición no fallaba efectivamente ese debía ser- al fin, sera mejor que entremos- hablé y cuando llegamos a la puerta de aquel lugar me asomé por la ventana viendo algo de luz dentro pero imposible de distinguir pues los cristales parecían difuminar el interior. Contemplé una vez mas aquel lugar que por alguna razón, seguramente por el optimismo de wind o quizás por encontrar signos de civilización, me inspiraba confianza- allá vamos- asentí a wind con una sonrisa quitándome la capa y poniéndosela en al espalda- ya queda poco- le di esperanzas con una amplia sonrisa y entré empujando la puerta hacia dentro

Un rápido vistazo me indico que había 3 personas en aquel lugar, la primera de ellas a nuestra izquierda tras la barra dándonos la espalda y estirándose hacia arriba para intentar agarrar lo que parecía una botella de alcohol propia de aquellos lugares, la barra continuaba hasta casi la esquina del local dejando un pequeño hueco donde había 3 barriles en forma de asiento utilizados probablemente para los bardos o juglares que deseaban tocar o narrar alguna cosa.Mi mirada se centró ahora en aquel hombre sentado que fijándome mas detalladamente me di cuenta de que era un hombre mayor de unos 70 años o así, situado frente a la chimenea observándola como si se tratase del mismo fuego de su vida que poco a poco se apagaba, sujetaba en la mano un vaso al cual le dio un sorbo sin ni si quiera girarse cuando nosotros entramos, parecía totalmente centrado en aquel fuego. Seguí recorriendo la ultima parte de la habitación en la que había mesas y taburetes donde se suponía la gente se sentaría para comer, sin embargo tan solo había una persona allí leyendo como si de un erudito se tratase pues no era algo corriente ver a la gente leer al menos no fuera de las grandes ciudades, con su rostro oculto bajo un sombrero vaquero alzo ligeramente la vista cuando entramos y se pudo apreciar una sonrisa

-Parece que tienes nueva clientela Bogdan- habló con una voz profunda, acto seguido volvió a su lectura
-B-buenos días- vacilé por un segundo algo sorprendido mientras me mantenía allí inmóvil
-Hola joven- pareció reconocer mi edad solo por mi voz- nada de capuchas y nada de armas- Habló con una sonrisa el de detrás de la barra del bar ahora identificado como bogdan- podeis dejarlas ahi- señalo un cubo donde había varias armas ya
-si, claro- confiado miré a la elfa y asentí dejando mis armas en aquel barril, acto seguido caminé hasta la barra y me senté
-Vaya una elfa, eso si que es raro y mas por estos lares- habló con cierto tono provocativo el hombre del sombrero que al girarme mantenía su mirada puesta en el libro- que se ha creído ese...- apenas lo había pensado cuando el tabernero le corto
-Ya sabes mis reglas Trancos,nada de peleas, si no te gusta puedes irte- señaló la puerta con una ligera sonrisa
-¿Peleas?, solo hacia un apunte, nada mas- hablo dejando el tema de lado
- Y bien, cierto es que es raro ver elfos por aquí- centro su vista en wind- ¿que os trae por aquí a ambos?, deseáis tomar algo, nuestros precios son los mejores del mercado, incluso os sirvo la primera ronda gratis- yo por mi parte acepté algo de beber pero que no contuviese alcohol, después de lo poco que había dormido lo que menos necesitaba era aquella bebida