Santo Grial-Isla-(QUEST/Master)

Caminé largo rato y nada llamaba mi atención como para estar tan a la defensiva como había ingresado. Más adelante el camino se detendría y me obligaría a subir por una especie de escalera caracol bastante percudidas por el tiempo, unas especies de enredaderas la cubrían parcialmente, como muchas opciones no tenía decidí subir. Al final había una enorme puerta de madera, entré y todo lo que pude ver fue una gran mesa de piedra en el centro con velas y otras cosas sobre ella. Al acercarme a investigar la puerta se cerró detrás de mí. "Acá las puertas se mandan solas.." pensé recordando que la de la entrada al templo también parecía autónoma.

Me acerqué a la mesa y presté atención a los objetos sobre ellas. Había muchas velas desparramadas pero tres frascos, un reloj de arena y una nota eran el detalle. Leí la nota.

- Tomar un líquido extraño, en un templo rodeado de magia oscura... Esto es una broma - dije en voz alta. Levanté la vista para mirar si había alguien a mi alrededor pero nada, es más, me pareció notar cierto movimiento en las paredes, y así era, estas comenzaban a acercarse al centro, miré a la mesa y noté que la arena había comenzado a caer. Corrí las velas de la mesa y las amontoné en una esquina, corrí el reloj y los frascos y me subí a la mesa, me senté sobre ella medio arrodillada, aun totalmente encima mío no podrían aplastar la mesa esa allí.

Inspeccioné ahora más tranquila cada frasco y los miré con cautela, los olfatee de nuevo.. uno dulce, uno algo ácido o amargo y el tercero sin aroma alguno, no sabía porque pero preferí el amargo, toqué el liquido con la punta de la lengua, no tenía sabor. Esperé un momento y tomé un sorbo de la de aroma amargo. Esperaría, a ver qué sucedería pero no la tomaría del todo, no por ahora al menos.

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Offrol: ¿Aroma amargo? xD Ser amargo es una característica de sabor xDD

El joven se adentro rápidamente a lo desconocido, para terminar dando vueltas en una escalera en espiral la cual le pareció no tener fin por un momento, el lugar era evidentemente extraño, todo estaba lleno de energía negativa aunque aquello no alertaba mucho al ladrón, pues se mantenía tranquilo en todo momento, pues su mente estaba enfocada en una sola cosa, encontrar el grial.

Cuando el ladrón llego a la puerta que le esperaba al final de las escaleras, este la abrió para encontrarse con una peculiar escena, tres personas atadas, una mesa con una daga y un pergamino, ademas de una gran ballesta que tenia virotes apuntando en dirección de los tres seres que parecían bastante magullados. El pergamino entregaba una descripción de aquellos que estaban atados en el lugar y sobre la condición que debía cumplirse para continuar en el lugar, aunque esta era bastante fácil de cumplir para el.

El ladrón termino de leer el pergamino, y repentinamente soltó una pequeña carcajada


El hombre viejo y la mujer temblaban de miedo luego de escuchar aquellas frías palabras de parte del hombre frente a ellos, sus llantos no eran nada para el, en cambio, la pequeña, que parecía estar inmutable, intentaba hacerse la valerosa pero no podía ocultar que sus manos tiemblen.

El reloj de arena había comenzado su cometido, y con ello, el techo comenzaba a bajar lentamente, al ver esto, el hombre viejo y la mujer comenzaban a llorar implorando su salvación, pero la niña no, solo dejaba sus manos temblar y mostrar unos recientes ojos llorosos; Karel, al darse cuenta de esto, la miro y le dijo con un tono de suma frialdad.


El techo bajaba y con ellos la desesperación de los atados aumentaba, aunque Karel se mantenía tranquilo ante la situación, pues podía cortar las cuerdas cuando quisiera; por el momento, el solo jugaría un rato con aquellos tres, recordando sus viejos tiempos como el asesino que era. Por esto, los gritos no se hicieron esperar, al igual que los insultos ante aquel que era el único que podía salvar a uno de ellos, aunque en medio de todos los gritos, sollozos e insultos hubo algo que el ladrón escucho con bastante claridad


Aquello fue suficiente para que el juego de Karel se detuviera y cortara las dos cuerdas necesarias para detener aquel techo que cada vez bajaba con mayor velocidad, los virotes de la ballesta salieron disparados en dirección a sus victimas, llevándose la vida del que era un violador y la asesina. Cuando todo estuvo hecho y el techo no se movió mas, Karel camino en dirección a la pequeña que seguía algo temblorosa.


La pequeña al escuchar aquello solo permaneció en silencio, con ojos llorosos y con manos temblorosas, ademas de gran vergüenza por haber rogado a un ser "inferior" que le salvara la vida.

Lys bebió el primer sorbo a la bebida amarga, pero nada ocurrió, la pared continuaba avanzando. ¿La mesa de piedra podría soportar la trampa mortal de la pared? El reloj ya iba por la mitad y la trampa casi por llegar a la mesa.

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Elise se enfrentó a su doble, quien realizaba cada movimiento que ella; si producía una herida a su rival, ésta le hacía exactamente la misma a ella. Ya había caído la mitad de la arena.

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Mientras Karel actuaba como un asesino frio, esperó demasiado tiempo, y cuando cortó las cuerdas, fue al mismo tiempo que el techo llegaba casi llegaba a su altura, sin embargo una de sus víctimas tardó en morir y debió de arrojarse al suelo por la trampa que pareció que no se detendría nunca.
Ahora el tamaño del cuarto llegaba a la altura de sus rodillas. En cuanto volviera a ver a sus víctimas, éstas ya no estarían, solo una nube de humo en su lugar.

Sin embargo no había puerta que Karel viera para salir de allí, de la oscuridad total que había quedado el lugar. Debería esperar a que Elise y Lys culminaran sus pruebas, si es que lo lograban, de lo contrario, esa habitación se volvería su tumba.

Esperé un largo rato antes de continuar, la situación no me gustaba nada, mucho menos que me obliguen a tomar una decisión que nunca tomaría. luego de una momento, con el reloj a punto de terminar y las paredes a punto de llegar tomé el resto del líquido. Probé primeramente un poco pero necesitaba esperar el tipo de reacción que tal sustancia ejercería sobre mí antes de continuar, pues sería a mi parecer la acción más prudente, al notar que nada extraño sucedía, tomé el restante de un  sorbo y esperé sentada para ver que sucedía.

Al parecer tomé la opción correcta, pues las paredes se detuvieron y si bien la puerta por la que había ingresado permaneció cerrada, otra abertura se abrió del otro lado de la habitación. Me bajé de la mesa y sacudí mi vestido. Me dirigí hacia la puerta y salí a una especie de pasillo rocoso, de apariencia más rústica que el resto de lugar, alumbrado por un antorcha a lo lejos que parecía indicar la salida. Caminé unos pasos en esa dirección cuando otros sonidos llegaron a mis oídos, el choque de acero contra acero de una pared cercana a la que yo había aparecido momentos antes y una especie de llamado de auxilio, desde un poco más adelante y en la pared de enfrente. La luz era insuficiente por lo que no podía ver si había puertas como en la mía, sin embargo, acariciando con mis manos la roca podía notar una fina hendidura que supuse seria el marco de una especie de puerta.

Al parecer al joven ladrón se le había ido el tiempo en su extraña prueba, donde mostró parte de su viejo yo, aunque aquello tal vez haya sido culpa de las energías negativas del lugar... solo tal vez. Al cortar las cuerdas de los virotes una de las victimas demoro en morir, lo que provoco que el techo bajara mas de lo previsto, aunque claro, aquello no mato al ladrón, solo le causo una gran molestia pues quedo atrapado en medio del oscuro lugar donde las victimas habían desaparecido apenas los dos que debieron haber muerto lo hicieron.


La oscuridad era total, no se podía observar nada con claridad, ni una sola salida, aunque a pesar de aquello el ladrón solo se quedo quieto, esperando a que alguna de las elfas terminara con su tarea y encontrara el grial pues aquella podría ser la única forma que Karel tendría para escapar de aquel problema en el que se encontraba.


Off rol: Lamento la tardanza pero estoy algo enfermo

Lys salió a una habitación de piedra, rectangular, y al frente de ella un pedestal donde se encontraba una hermosa copa.

Elise, decidió ultimar a su rival, algo que podría haberla matado a ella misma, pues nada indicaba que fuera a morir, podría haber acabado tomando la decisión de no hacer nada, de demostrar que valoraba su propia vida, pues su rival hizo todo movimiento que ella y aunque no hiciera nada, su doble haría lo mismo.

Karel concluyó primero su prueba, pero debió esperar a que las elfas acabaran, y fue allí cuando Elise y él vieron la salida, la luz al final del camino, para reencontrarse todos.

El pedestal con el Grial estaba en el medio, pero a ambos lados habían dos mesas de piedra con cadenas en cada esquina, y una escalinata que subía para tomar la copa.

El lugar se sentía caluroso, demasiado para los tres. ¿Qué estaría haciendo el monje?

Había un texto grabado en el mismo pedestal de mármol rezaba claramente tallado:

Las puertas por donde habían ingresado los viajeros después de la primera prueba, se sellaron con una pared corrediza.

¿Sería voluntaria la entrega a la maldición de parte de dos de ellos? ¿Deberían luchar entre sí? ¿Alma vengativa, despiadada, cegada de ambición?



Off rol: el próximo posteo sería injusto, porque obviamente sería quien decida atar a los otros dos, por lo tanto propongo hacer el rol en directo en el chatbox. Enviadme mensaje privado con la hora que estarían disponibles el día mañana, como máximo lo haríamos el sábado. En caso de ser aceptada esta propuesta, estas son las normas.

*Se hará el post en el chat usando el comando " /me " para las acciones y dentro del mismo utilizando " - " para diálogos.
*Será uno por vez respetando los turnos.

TURNOS:

-Lys-
-Elise-
-Karel-

*No deben poner más de dos post juntos
*Yo masterearé el rol en el chat, que será copiado y posteado con el resultado final en la Quest.

*Se hará el post en el chat usando el comando " /me " para las acciones y dentro del mismo utilizando " - " para diálogos. *Será uno por vez respetando los turnos. TURNOS: -Lys- -Elise- -Karel- *No deben poner más de dos post juntos *Yo masterearé el rol en el chat, que será copiado y posteado con el resultado final en la Quest. No hacer post muy largos.

@ Nana : El pedestal con el Grial estaba en el medio, pero a ambos lados habían dos mesas de piedra con cadenas en cada esquina, y una escalinata que subía para tomar la copa. El lugar se sentía caluroso, demasiado para los tres. ¿Qué estaría haciendo el monje? Había un texto grabado en el mismo pedestal de mármol rezaba claramente tallado: "Quien tome el Santo Grial primero, debe atar a los dos viajeros sobrevivientes a la primera prueba para poder salir de esta habitación. Los dos que queden, serán malditos" Las puertas por donde habían ingresado los viajeros después de la primera prueba, se sellaron con una pared corrediza. ¿Sería voluntaria la entrega a la maldición de parte de dos de ellos? ¿Deberían luchar entre sí? ¿Alma vengativa, despiadada, cegada de ambición?

Master2 : Lys, Elise, Karel se miraron entre sí.

* Lys ..."malditos? pensé... miré al resto y parecían tan desconcertados como yo... nadie se entregaría voltariamente.. al menos eso creía.. pero atar a los demás contra su voluntad tampoco era de mi preferencia. Hacía calor, empeorando la mala e incomoda situación que de por si se generaba. No los conocía lo suficiente para saber que harían. Maldije no haber hablado con ellos como nos propuso el monje

* Elise Lawrence miraba con algo de preocupación la situación, la verdad es que no quería pelear por aquello, aunque aquello incluyese el resto de mi vida... - Hazlo. - Dije en un susurro aceptando el ser amarrada.

Ambas elfas preocupadas.

* Karel Frainz sacrificarse o no sacrificarse, ese era el "dilema" que planteaba la mente del ladrón, aunque en verdad no era problema alguno para el, después de todo le gustaban los desafíos, y una maldición de dudosa permanencia sería bastante interesante por lo que arrojo una moneda al aire -Mmm... sello... bien, me atare- dijo con decisión
Karel tenía la mesa enfrente.

* Lys tenía más ganas de golpear al monje por todo esto que tomar la copa que tanto buscamos desde un comienzo. Miré a Elise.. ¿Se estaba ofreciendo? ¿Se arriesgaba de ese modo? A decir verdad no esperaba la misma reacción de Karel, no con todo lo que había escuchado de él. Toqué la empuñadura de mi espada, no quería forzar a nada a nadie pero no me dejaría atar tampoco. Fruncí el ceño. No quería salir airosa de ninguna situación si esto significaba perjudicar al resto. De repente, él también se ofreció. –No – dije inmediatamente – nadie va a atar a nadie… Ningún cartel me va a convencer de traicionar a nadie.

Lys y Elise, ambas elfas, lucharían entre si?

Master2 : Lys y Elise, ambas elfas, lucharían entre si?

* Elise Lawrence Lys se negaba a la situación, yo solo le sonreí con algo de pesar - Hazlo nena, no puede ser tan malo. - Repetí acercándome a la mesa de piedra, tenía miedo pero... Aquello era por una buena causa.

Master2 : Uno debería tomar para poder salir de allí, de lo contrario, esa habitación de piedra y mármol sería sus tumbas.

Master2 : Unas cadenas surgieron de la nada, que cobraban vida, y atinaban a moverse en dirección a los futuros malditos.

* Karel Frainz -eh? que pasa Lys? yo me ofrezco, perdí la apuesta contra mi mismo, además, cosas como estas hacen la vida mas interesante jeje- Dijo el ladrón con problemas de juego. Karel se hacerlo a la mesa de piedra, listo para la ser atado y maldecido

Master2 : Las cadenas ataron a Karel tirándolo contra la mesa de una manera brusca, tanto que se golpeó la cabeza, de pronto sus ojos se volvieron catarosos.

Master2 : Karel podía sentir que en su mente todo daba vueltas. Las cadenas lo ataron de pies y manos a cada extremo de la mesa.

* Lys Miré alrededor, buscando alguna posible salida pero no encontraba nada. – ¿Aceptan una maldición así como así? – pregunté mirándolos incrédula, pero algo más llamó mi atención, un sonido metálico me obligó a mirar hacia atrás y pude ver unas cadenas moverse en dirección a nosotros. Saqué mi espada, de poco serviría, pero yo no me iba a entregar tan fácilmente ni permitiría que ellos lo hicieran tampoco. Recordé a Sydara y su maldición y no quería lo mismo para ellos. Karel se sentó y el atarlo lo golpeó de repente. Me sentía fatal, miré alrededor y tomé la maldita copa de un movimiento rápido, antes de que Elise pasara por lo mismo. “Si al monje no lo mata la enfermedad, lo mataré yo por hacernos esto..” pensé furiosa.

Master2 : Un frio helado recorrería el cuerpo de Lys. Una voz retumbó "Dos malditos, uno se lleva el Santo Grial"

* Elise Lawrence A Karel las cadenas lo tomaron y pronto Lys tomo de la copa, yo solo me acerque a Karel tratando de ayudarlo, pero era algo imposible aquello... Una voz resonó y yo solo baje mi mirada con algo de temor... ¿Que pasaría ahora? ¿Dónde estaba el monje?

Master2 : Las cadenas se alargaron de pronto y se dirigieron a Elise, le aferraron lla muñeca y tironearon de ella en dirección a la mesa

Master2 : Karel podía sentir el dolor, extrañas voces, mucho frio. Lys sentiría que a raíz de la copa, un frio gélido la congelaba por dentro. La única manera rápida que había era que una de las dos se sacrificara con la maldición.

* Karel Frainz "woah, mierda, mi cabeza" pensó con dolor el ladrón, aunque el reciente dolor era lo de menos pues en pocos segundos su mente comenzó a dar vueltas y como las cadenas se acomodaban para atarlo de forma perfecta en los extremos de la mesa. Elise se acerco al joven para ver como se encontraba -descuida, estoy bien- dijo con algo de calma. pronto extrañas voces comenzaron a resonar y con ellas un extraño y congelarte frió que inundaba su cuerpo.
Master2 : El primer maldito podía sentir que su cuerpo empezaba a temblar de forma que no podía controlar. El tiempo iba en contra.

* Lys Miré en mi mano la copa y apreté fuerte los dientes. – Maldición – dije en voz baja, mientras un escalofrío me recorría el cuerpo, miré en dirección a las cadenas y corrí hacia Elise, apreté la copa contra su pecho con una mano mientras con la otra agarraba su mano y la obligaba a tomarla. La miré con gesto de tristeza… Era más fuerte que yo, si no quedaba otro camino, no permitiría que la niña saliera de allí maldita. Solté la copa para que terminara por tomarla ella y me quedé de pie, esperando a que viniera por mí, para salvarla a ella antes de que fuera demasiado tarde.

Elise Lawrence : me una de las cadenas me tomo por mi mano, vi como Lys intentaba de todas maneras el que yo no me viera arrastrada por estas y acabara como Karel - No te preocupes, estaré bien... - Le susurre por lo bajo, para luego soltarla, caí a la mesa siendo amarrada por las cadenas.

Master2 : Las letras grabadas del pedestal brillaron y frente a Lys, por donde salió de la prueba de los venenos, se formó una puerta de piedra, que se abrió y surgió una luz blanca, demasiado brillante para que pudiera ver del otro lado

Master2 : Dos malditos, y ya estaba la copa en mano de Lys, quien ahora tenía el camino para salir de allí. Los cuerpos de ambos malditos temblaban con furia, ambos perdidos en una oscuridad donde solo habían gritos y ecos, además de un intenso dolor en sus entrañas.

Master2 : La voz del monje se oyó del otro lado, pidiendo auxilio. "-Socorro regresad, es la muerte, el mismo infierno"!-"Cuando Lys saliera vería agonizando al muchacho religioso. Estaba donde habían ingresado. Suplicó "-Por favor, dejame beber un trago y podremos salir todos"-

Master2 : El cuerpo del monje se veía mas deteriorado que horas antes. La voz del monje seguía llamando a sus viajeros.

Master2 : Karel y Elise sentirían que todo comenzaba a oscurecerse, y una voz resonó en sus oídos "Dos vidas por un mundo, sin embargo no será la muerte quien os lleve, merecen ser recompensados por su sacrificio y voluntariedad"

* Lys salí y pude ver al monje el cual aparentemente agonizaba. Fruncí el ceño nuevamente pues mis costumbres como siempre tendían a traicionarme, aunque momentos antes tenía ganas de golpearlo no podía simplemente verlo sufrir. Miré hacia atrás a los otros dos, no podía hacer anda por ellos, corrí hacia el monje y tomando un poco de agua de la fuente que vimos al entrar, me arrodille junto a él y lo ayudé a beberla

Master2 : El monje bebió, pero dijo-tiene que ser del cáliz, la misma copa... entrégamela-

* Elise Lawrence frio, eso era lo que sentía en esos momentos. Era algo insoportable y agradecía en silencio que haya sido solo unos momentos, primero una nube oscura se formo, pero luego fue remplazado por mucha luz... Una luz cegadora. Me dolía todo, mi cuerpo lo sentía totalmente débil en ese momento. ¿Que pasaría ahora ya que nos habíamos entregado a la maldición? ¿Cual seria la maldición?...

Master2 : La voz "-Elise Lawrence, y Karel Freinz, si bien desafían la muerte con vuestro sacrificio, no os daré muerte, pero sufriréis"

Master2 : -"Llevaréis la marca en vuestros pechos, una cicatriz que dolerá como si os clavasen una espada cada vez que sintáis los sentimientos oscuros. No puedo permitiros que vuestras almas se corrompan"

Master2 : La voz resonó en sus mentes, y sintieron un dolor agudo, una marca de fuego se grabó en el pecho de cada uno.

Master2 : -Solo entrégame el cáliz- pidió el monje en el suelo, apenas podía sostenerse.

* Karel Frainz Dentro de la densa nube, la oscuridad y el frió eran totales, y a causa de ello, los sentidos del ladrón parecían mermar cada vez mas, hasta que una extraña voz dio el aviso de que aunque desafío a la muerte, su vida estaría perdonada a causa de su sacrificio y que la maldición que llevarían, seria una marca en el pecho, la cual daría un intenso dolor cada vez que los sentimientos oscuros invadan su alma. Lo siguiente que los sentidos del ladrón alertaron, fueron el dolor agudo que provoco la marca de fuego en el pecho "joder, esto es una mierda... no podre robar mas..." fue el único pensamiento que paso por la mente de Karel

Lys Le di la copa pero no la solté del todo, no podía dejar de ver hacia adentro preocupándome por los otros dos. – Que termine ya – apuré al monje – Sálvalos – “O aunque te cures te mataré yo” pensé furiosa. Saqué esta vez mi daga pero la mantuve alejada, no estaba segura de cómo reaccionar pero estaba muy preocupada por ellos y la simple idea de una traición por parte del monje me intranquilizaba.

Master2 : El tiempo no les favorecía, el monje cada vez estaba mas debil. Lys debia apresurarse en darle el grial

* Elise Lawrence un dolor en mi pecho me hizo soltar un pequeño gemidito de dolor ante eso... La voz que resonaba en mi cabeza nos explico la situación, mi mente solo recordó el vengar a mis "padres" al parecer... Ya no podía cumplir aquello.

Master2 : El monje tomó la copa y bebió un sorbo de la sustancia. Pareció cobrar fuerzas de inmediato, se levantó tirando la capucha al suelo. Sus ojos brillaron. El agua de la fuente se revolvió furiosa y todo comenzó a temblar

Master2: -"Al fin, es mía, para el señor oscuro!"fue lo último que oyeron.

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Master2 : Esa voz retumbo en los tres viajeros, y no supieron mas nada, despertaron 3 días después en el hospital de Lunargenta.

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Recompensas: Una espada+ 20 de experiencia+5 experiencia extra. por resoluciones.
Karel y Elise: Maldición del Cáliz.